ACTAS XI JORNADAS
DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN
ARQUEOLÓGICA,
TARRAGONA, 9-12 DE MAYO DE 2018
EDITORES,
COMITÉ EDITORIAL JIA TARRAGONA 2018:
ANA BUCCHI MORALES
NOEMÍ ESCAYOLA GONZÁLEZ
KAREN FORTUNY MENDO
Fº JAVIER GARCÍA-VADILLO
JAVIER LUENGO GUTIÉRREZ
PABLO VARONA RUBIO
I nst it ut Cat a là d’Arque ologia Clà ssic a
TRAMA5
TREBALLS D’ARQUEOLOGIA
DE LA MEDITERRÀNIA ANTIGA
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES
EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA,
TARRAGONA, 9-12 DE MAYO DE 2018
ACTAS XI JORNADAS
DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN
ARQUEOLÓGICA,
TARRAGONA, 9-12 DE MAYO DE 2018
Editores, Comité Editorial JIA Tarragona 2018:
Ana Bucchi Morales
Noemí Escayola González
Karen Fortuny Mendo
F º Javier García-Vadillo
Javier Luengo Gutiérrez
Pablo Varona Rubio
TRAMA5
TREBALLS D’ARQUEOLOGIA
DE LA MEDITERRÀNIA ANTIGA
I nst it ut Cat a là d’Arque ologia Clà ssic a
Tarragona 2018
Edició de les actes de les XI Jornadas de Jóvenes en Investigación Arqueológica (JIA), que van tenir lloc, a Tarragona,
del 9 al 12 de maig de 2018.
Aquesta obra ha estat possible gràcies al Programa d’Integració de Centres CERCA (SUMA 2016), en què participen
l’Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC), l’Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES)
i l’Institut Català de Recerca del Patrimoni Cultural (ICRPC).
Aquesta obra ha passat revisió d’experts.
Comitè editorial
Juan Manuel Abascal (Universitat d’Alacant), José María Álvarez Martínez (Museo Nacional de Arte Romano, Mèrida), Carmen Aranegui (Universitat de València), Achim Arbeiter (Universitat Georg-August de Göttingen, Alemanya),
Jean-Charles Balty (Universitat de París-Sorbona [París IV], França), Francesco D’Andria (Universitat del Salento,
Itàlia), Pierre Gros (Universitat de Provença, França), Ella Hermon (Université Laval, Quebec, Canadà), Rosa PlanaMallart (Universitat Paul-Valéry Montpeller 3, França), Lucrezia Ungaro (Sovraintendenza Capitolina, Direzione
Musei, Itàlia) i Susan Walker (Ashmolean Museum, Oxford, Regne Unit).
© d’aquesta edició, Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC)
Plaça d’en Rovellat, s/n, 43003 Tarragona
Telèfon 977 24 91 33 - fax 977 22 44 01
info@icac.cat - www.icac.cat
Durant els nou primers mesos de publicació, qualsevol forma de reproducció, distribució, comunicació pública o
transformació d’aquesta obra només es pot fer tenint l’autorització dels seus titulars, amb les excepcions previstes
per la llei. Adreceu-vos a CEDRO (Centre Espanyol de Drets Reprogràfics, www.cedro.org) si heu de fotocopiar o
escanejar fragments d’aquesta obra.
A partir del desè mes de publicació, aquest llibre està subjecte –llevat que s’indiqui el contrari en el text, en les
fotografies o en altres il·lustracions– a una llicència Reconeixement-No comercial-Sense obra derivada 3.0 de Creative Commons (el text complet de la qual es pot consultar a http://creativecommons.org/licences/by-nc-nd/3.0/es/deed.
ca). Així doncs, s’autoritza el públic en general a reproduir, distribuir i comunicar l’obra sempre que se’n reconegui
l’autoria i les entitats que la publiquen i no se’n faci un ús comercial, ni lucratiu, ni cap obra derivada.
© del text, els autors
© de les fotografies i il·lustracions, els autors, llevat que s’indiqui el contrari
Primera edició: desembre de 2018
Coordinació editorial: Publicacions de l’ICAC
Correcció: Ramon Vidal Muntané
Imatge de la coberta: Francisco Javier García-Vadillo
Disseny de la col·lecció i de la coberta: Indústries Gràfiques Gabriel Gibert
Maquetació i impressió: Indústries Gràfiques Gabriel Gibert
ISBN: 978-84-946298-8-4
A la nostra companya, Rosa M. Mercado Guirado,
jove investigadora, arqueòloga compromesa
i lluitadora innata. Sit tibi terra levis.
A nuestra compañera, Rosa M. Mercado Guirado,
joven investigadora, arqueóloga comprometida
y luchadora innata. Sit tibi terra levis.
SUMARI
Pròleg. Treballs presentats en el marc de les XI Jornades de Joves en Investigació
Arqueològica. Tarragona, 9-12 de maig de 2018 / Prólogo. Trabajos presentados
en el marco de las XI Jornadas de Jóvenes en Investigación Arqueológica.
Tarragona, 9-12 de mayo de 2018 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
SECCIÓN 01. PRODUCCIONS, CONSUM I DINÀMIQUES SOCIOCULTURALS:
LA CERÀMICA DES DE LA PREHISTÒRIA FINS AL MÓN CONTEMPORANI
A LA PENÍNSULA IBÈRICA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
Introducció a la sessió: La ceràmica des de la prehistòria fins al món
contemporani a la península Ibèrica. Jaume Puigredon Boixadera, José Luis
Martínez-Boix . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17
Avance del estudio de los materiales orientalizantes de Los Almadenes (Hellín,
Albacete) - Campaña de 2016. Pascual Perdiguero Asensi, Sara Fernández
Molina . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19
Aproximación a un conjunto inédito de cerámica a mano decorada de Peña
Negra (Crevillent, Alicante). Irene Vinader Antón . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
Metodologia per a l’anàlisi iconogràfica de la ceràmica ibèrica pintada amb
figuració «Elx-Archena». José Luis Martínez-Boix . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 29
Noves tendències i canvis socioeconòmics en el servei de taula (segles i aC - i dC)
al NE peninsular: anàlisi d’uns conjunts apareguts a Empúries. Jaume Puigredon
Boixadera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33
Els contextos republicans de la ciutat romana de Pollentia (Alcúdia, Mallorca).
Antoni Pons Rosselló . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37
La terra sigillata altoimperial del yacimiento de La Magdalena (Alcalá de Henares,
Madrid): análisis comparativo de dos niveles estratigráficos. Fernando Mora
Rodríguez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41
El Forn de Cal Salisi (Verdú): resultats preliminars de l’estudi ceràmic. Júlia Coso
Álvarez, Judith Peix Visiedo, Ramón Cardona Colell, Josep M. Salisi Clos . . . . . . . . . 45
L’ús de la microscòpia electrònica de rastreig (MER) en l’estudi dels vidrats de les
ceràmiques d’època moderna. El cas de Barcelona i Talavera de la Reina als segles
XVII i XVIII: les diferències entre la ceràmica de luxe i la ceràmica comuna. Judith
Peix Visiedo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49
SECCIÓN 02. DIME DÓNDE VIVES Y TE DIRÉ QUIÉN ERES. ÁMBITOS
DOMÉSTICOS COMO ESPACIOS DE CONTACTO Y TRANSFORMACIÓN . . . . . 55
Introducción a la sesión: Dime dónde vives y te diré quién eres. Ámbitos
domésticos como espacios de contacto y transformación. José María Moreno
Narganes, Tamara Peñalver Carrascosa, Hacomar Ruiz González, Nagores Sánchez
García, Maria Torras Freixa, Octavio Torres Gomariz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 57
La arquitectura doméstica como testigo de los procesos de interacción sociocultural:
el caso de la Domus 1 de Lesera (Forcall, Castellón). Tamara Peñalver Carrascosa . 59
La domus urbana: la arquitectura doméstica romana y la relación con su entorno
urbano. El ejemplo de Pollentia (Alcudia, Mallorca). Hacomar Ruiz González . . . . 63
El espacio doméstico como representación social: los almorávides y almohades en
al-Ándalus (siglos XII-XIII). José María Moreno Narganes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67
To be round, or to be rectangular, that is the question: una aproximación
transtemporal y transcultural a la cuestión de la elección de la planta en la
arquitectura doméstica. Thomas Tews . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 71
SECCIÓN 03. MEMORIA EN PIEDRA. LA EPIGRAFÍA COMO HERRAMIENTA
DE ESTUDIO DE LAS SOCIEDADES ANTIGUAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
75
Introducción a la sesión «Memoria en piedra. La epigrafía como herramienta de
estudio de las sociedades antiguas». Pablo Varona Rubio, Helena Lorenzo Ferragut,
Teresa Buey Utrilla, Sandra Cano Aguilera, Francisco García Sáez . . . . . . . . . . . . . . . . 77
El culto metróaco en la Hispania romana a través de la epigrafía: aspectos
socioculturales, cronológicos y geográficos. Xavier Bayer Rodríguez. . . . . . . . . . . . . 79
Ellas también murieron. La presencia femenina en la epigrafía funeraria del
noroeste de la península Ibérica. María José Martínez González . . . . . . . . . . . . . . . . 83
Aproximación al estudio de la migración y los movimientos sociales a través de
la epigrafía funeraria de la Legio VII Gemina durante el Alto Imperio. Judith
Iglesias Gómez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 87
SECCIÓN 04. ARQUEOLOGÍA DEL PODER. JERARQUÍAS, SOMETIMIENTO Y
RESISTENCIAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 91
Arqueología del poder. Jerarquías, sometimiento y resistencias. Laura Martín
Ramos, Moisés Alonso Valladares, María del Carmen Jiménez Roldan, Juan
Manuel Ríos Jiménez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
Introducció i assimilació dels primers objectes de ferro a Catalunya (s. VIII-VI aC).
Gerard Fernàndez Molina . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 95
Las desigualdades sociales en el mundo funerario romano y tardoantiguo: las
inhumaciones anómalas. Amaia Solaegui de Loizaga . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 99
En busca de los poderes en la Alhama de Granada medieval. Laura Martín Ramos. 103
Estudio de caso sobre la arqueología de la represión: los grafitos históricos en
contextos carcelarios. Nicolás Pastor Alameda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 107
SECCIÓN 05. ARQUEOLOGÍA DE LA MUERTE: PROBLEMÁTICAS DE
ESTUDIO Y NUEVAS TENDENCIAS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 111
Problemáticas de estudio y nuevas tendencias en el estudio del registro funerario.
Sonia Carbonell Pastor, Amaia Solaegui de Loizaga, Clara Serna Alberola, Ester
Moya Soriano. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 113
Introducción a la arquitectura funeraria menorquina del I milenio a. C. Sonia
Carbonell Pastor. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 115
Analizando los Anuarios Arqueológicos. ¿Son viables para un análisis del mundo
funerario tardoantiguo y medieval en Andalucía Oriental?. Amaia Solaegui
de Loizaga, Laura Martín Ramos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 119
Del objeto al cuerpo: nuevas perspectivas sobre la arqueología funeraria de época
visigoda. Irina Rubio Cano, María Benavides Barco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 123
Consideraciones sobre la destrucción ritual de falcatas en la sociedad ibérica.
Guillermo Palomero López . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 127
Características de la momificación en los individuos hallados en la tumba
AT-28-, perteneciente al visir Amen-Hotep Huy en Tebas (Luxor, Orilla
Occidental). Alberto Abello Moreno-Cid . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 131
Protocolo LafUAM (© 2003): apuntes para el estudio preliminar de fosas
comunes. Marina González, José Hernanz, Clara Serna . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 135
Topografía dental 3D y dieta durante la Edad del Bronce. Ester Moya Soriano . . . 139
SECCIÓN 06. CONSERVACIÓN Y RESTAURACIÓN DE MATERIAL
ARQUEOLÓGICO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 143
Introducción a la sesión «Conservación y restauración de material arqueológico».
Elena Moreno-Ribas, Blanca Sicilia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 145
Restauración de vértebras de rinoceronte del yacimiento plioceno del Camp
dels Ninots (Caldes de Malavella, Girona). Blanca Sicilia, Lucía López-Polín,
Bruno Gómez de Soler, Gerard Campeny Vall-llosera. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 147
Una falcata de la necrópolis vettona de La Osera (Ávila). Caracterización,
estado de conservación y propuesta de intervención. Bárbara Martín . . . . . . . . . . . 151
De la excavación al museo: restauración de un horno o tannur andalusí
procedente del acueducto romano de los Calicantos (Gestalgar, Valencia).
Sara Bordonado, Trinidad Pasíes, Victor M. Algarra. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 155
Para qué y cómo intervenimos: la musealización como variable transversal en
las intervenciones de conservación-restauración del patrimonio arqueológico.
Águeda Sáenz-Martínez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 159
Proyecto de puesta en valor, conservación y gestión del conjunto arqueológico
de Monte do Carrio. Lucía Anta Porto, Lucía Concepción Lago, Irene Fernández
Diéguez, Silvia Illanes Losada, Alba Losada García . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 163
Estudio comparativo entre la reproducción digital y tradicional a partir de restos
óseos. Núria Llagostera Espelt . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 167
La restauración de fósiles en Pinilla del Valle: el tratamiento en laboratorio tras la
intervención en campo. Lucía Hernández-Vivanco, Marina Vegara-Riquelme . . . . . . 171
SECCIÓN 07. SACANDO O BARCO DAS PEDRAS. NUEVAS APROXIMACIONES
ARQUEOLÓGICAS A LA RELACIÓN ENTRE LA HUMANIDAD Y EL AGUA . . . 175
Introducción a la sesión «Sacando o barco das pedras. Nuevas aproximaciones
arqueológicas a la relación entre la humanidad y el agua». Laura Martín Ramos,
Samuel Nión Álvarez, Helena López Gómez, Julián Bustelo Abuín . . . . . . . . . . . . . . . 177
Minería antigua en el noroeste de Galicia: gestión hidráulica y tipos de
explotaciones. Samuel Nión Álvarez. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 179
El medio acuático en la propaganda de Augusto. Helena López Gómez, Samuel
Nión Álvarez. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 183
Gestión de las aguas mineromedicinales: el Ḥammām de Alhama de Granada.
Laura Martín Ramos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 187
SECCIÓN 08. LA INTERDISCIPLINARIEDAD ARQUEOLÓGICA: DISCIPLINAS Y
TÉCNICAS CIENTÍFICAS AFINES AL ESTUDIO ARQUEOLÓGICO PARA LA
INTERPRETACIÓN HUMANÍSTICA DEL REGISTRO MATERIAL . . . . . . . . . . . . 191
Introducción a la sesión «La interdisciplinariedad arqueológica: disciplinas
y técnicas científicas afines al estudio arqueológico para la interpretación
humanística del registro material». Julia Montes-Landa, Águeda Sáenz-Martínez . . 193
Estudi de les estructures de combustió protohistòriques mitjançant FTIR. Carme
Saorin. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 195
SECCIÓN 09. ARQUEOLOGÍA VIRTUAL Y HUMANIDADES DIGITALES.
NUEVAS APLICACIONES Y PERSPECTIVAS DE FUTURO EN RELACIÓN
CON LAS TECNOLOGÍAS INNOVADORAS Y EL PATRIMONIO
ARQUEOLÓGICO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 199
Introducción a la sesión «Arqueología virtual y humanidades digitales. Nuevas
aplicaciones y perspectivas de futuro en relación con las tecnologías innovadoras
y el patrimonio arqueológico». Sergio Isabel Ludeña, Javier Luengo, Ángela
Crespo Fraguas, Miguel Ángel Díaz Moreno, María Quejigo García . . . . . . . . . . . . . . 201
El castrum visigot de Puig Rom (Roses). Problemes i solucions per a la
documentació fotogramètrica d’un jaciment. Pere Manel Martín Serrano . . . . . . . . 203
Estudio lumínico en la arquitectura doméstica fenicia. Javier Luengo, Francisco
José García Fernández . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 209
Proposta de restitució 3D de la casa 20 del jaciment ibèric El Cogulló (Sallent,
Bages, Catalunya). Maria Franco Luna . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 213
Nuevas didácticas del patrimonio: una aproximación virtual al circo romano de
Tarragona. Iván Fernández Pino, Karen Fortuny Mendo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 217
Documentación y recreación virtual de la arquitectura de El Cuervo de
Sevilla y su entorno durante el siglo xx. Herramienta de estudio y difusión.
Javier Luengo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 221
SECCIÓN 10. «TODO ESTO ANTES ERA CAMPO». ARQUEOLOGÍA RURAL,
COMUNIDADES LOCALES Y SOCIALIZACIÓN DEL BIEN COMÚN . . . . . . . . . . 225
Estudi espacial del poblament al curs inferior del riu Corb. Montse Baiges
Minguella, Rosa Mercado Guirado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 227
Arqueologia rural no Alto Alentejo: o caso da ermida de São Mamede
(Portalegre). Gabriel Venturini de Souza, Helena Soares, Susana Pacheco . . . . . . . . 233
Arqueología del Paisaje en el Valle del Aragón Subordán (Pirineo aragonés).
Primeros resultados y perspectivas de un proyecto de larga duración. Jorge
Canosa-Betés, Enrique Moral de Eusebio, David Vacas Madrid, Mikel Herrán
Subiñas, Mayte Martínez Medina, Ernesto Azada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 237
SECCIÓN 11. ARQUEOLOGÍA, PASADO Y OCIO CONTEMPORÁNEO:
¿CÓMO NOS RECREAMOS? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 241
Introducción a la sesión «Arqueología, pasado y ocio contemporáneo:
¿cómo nos recreamos?». Laia Gallego Vila, Josu Santamarina Otaola, Judith
Romero Martínez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 243
Ibercalafell: grup de recreació d’època ibèrica. Maria Franco Luna . . . . . . . . . . . . . 247
Pólvora y uniformes: algunas reflexiones sobre el recreacionismo de la Guerra
Civil española. Josu Santamarina Otaola, Xabier Herrero Acosta . . . . . . . . . . . . . . . . 251
Entre el rigor i l’entreteniment: divulgant l’arqueologia amb un escape room.
Laura Pinto Font, Jezabel Pizarro Barberá . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 255
SECCIÓN 12. COMUNIDADE E PATRIMONIO: UNHA NOVA MANIFESTACIÓN
DAS SOCIEDADES EN CAMBIO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 257
Una nueva política europea sobre el patrimonio: desarrollo sostenible y la
gobernanza participativa. Robert Gomes Santana, Álvaro Franco Montesdeoca . . . . . 259
A Fábrica encerrou, e agora? O caso da antiga Fábrica Robinson e a
patrimonialização de uma unidade corticeira em Portugal. Susana Pacheco . . . . . 263
Pallabarro: importancia y pervivencias de una técnica prehistórica en el siglo XXI.
Martín Cuenca . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 267
SECCIÓN 13. VARIA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 273
Evidenciar la producción láctea animal a través de la microestructura ósea: una
aproximación a las prácticas ganaderas prehistóricas. Joaquim Ripoll Miralda . . . 275
A serra e a ermida de São Mamede (Portalegre): o aproveitamento da paisagem por
uma comunidade religiosa. Helena Soares, Gabriel Venturini de Souza, Susana
Pacheco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 281
Arqueologia en àrees de conflicte: últims treballs realitzats al Sàhara Occidental.
Helena Ventura Almeda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 285
L’art d’estil cretenc al Pròxim Orient. Francesc Xavier Garcia Ramis . . . . . . . . . . . . 289
Las Cartas de Montano. Nuevas aportaciones desde la arqueología. Laura Galán
Palomares, Rosa M. Mercado Guirado, Karen Fortuny Mendo . . . . . . . . . . . . . . . . . . 293
A capela de São Pedro de Alegrete (Portalegre, Portugal): um caso de (falta de)
preservação do património religioso. Gabriel Venturini de Souza, Helena Soares,
Susana Pacheco . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 295
Actualizando antiguas intervenciones. Divergencias metodológicas y otras
problemáticas. Leyre Arroniz Pamplona, Laura M. Sirvent Cañada, Héctor J.
Fonseca de la Torre, Lorena Meana Medio, Daniel Pérez Legido, Xavier Bayer
Rodríguez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 299
Centre i perifèria al Regne Selèucida: Selèucia del Tigris. Nil Bosch Navarro . . . . . 303
Arqueometría en la arqueología americana: teoría y práctica. Jorge Martínez
Sales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 305
Tecnología lítica en el Solutrense. Características propias de la zona
mediterránea peninsular. Noelia Sánchez Martínez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 309
¿Trabajas en una arqueología digna? Modelos y perspectivas a debate.
Amaia Begoña Solaegui de Loizaga, Laura Martín Ramos, Águeda Sáenz-Martínez,
Ronmel A. Seminario Gálvez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 313
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
13
PRÒLEG. TREBALLS PRESENTATS EN EL MARC DE LES
XI JORNADES DE JOVES EN INVESTIGACIÓ ARQUEOLÒGICA.
TARRAGONA, 9-12 DE MAIG DE 2018
La corresponsabilitat és sens dubte l’ingredient fonamental que ha fet que l’activitat d’un grup
heterogeni de persones culmini amb la celebració
d’un congrés amb 23 sessions i 174 ponències i la
publicació de les seves actes.
Aquest volum conté 72 treballs publicats després d’un procés de revisió cega dels manuscrits
presentats en el marc de les XI Jornades de Joves
en Investigació Arqueològica, celebrades a Tarragona del 9 al 12 de maig de 2018.
L’obra recull el sentit del compromís compartit
per assolir un objectiu la definició del qual es regeix al voltant de normes i garanties. El sentit de
corresponsabilitat adquirit i compartit és el motor, la norma no escrita i l’element aglutinant que
han permès arribar als diferents punts que han
marcat l’èxit de la celebració de les JIA Tarragona
2018. Aquesta organització, constituïda en origen
com un agregat heterogeni de persones amb idees, ha passat a estar integrada per companys que
han reunit més de 200 col·legues de professió a les
jornades. Sens dubte, el 2018 serà l’any de les JIA,
encara que el treball va començar anys abans.
Són molts els col·laboradors que van iniciar el
llarg procés de la celebració de les JIA a Tarragona. També són moltes les persones que han participat en aquesta publicació –revisors, autors i coordinadors–, a les quals no podem deixar d’agrair
la seva feina.
Amb els millors desitjos.
Comitè Editorial de les JIA Tarragona 2018
Editors:
ANA BUCCHI MORALES
NOEMÍ ESCAYOLA GONZÁLEZ
KAREN FORTUNY MENDO
FCO. JAVIER GARCÍA-VADILLO
JAVIER LUENGO GUTIÉRREZ
PABLO VARONA RUBIO
PRÓLOGO. TRABAJOS PRESENTADOS EN EL MARCO
DE LAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN
ARQUEOLÓGICA. TARRAGONA, 9-12 DE MAYO DE 2018
La corresponsabilidad es sin duda el ingrediente fundamental que ha hecho que la actividad
de un grupo heterogéneo de personas culmine
con la celebración de un congreso con 23 sesiones
y 174 ponencias y la publicación de sus actas.
Este volumen contiene 72 trabajos publicados
tras un proceso de revisión ciega de los manuscritos presentados en el marco de las XI Jornadas de
Jóvenes en Investigación Arqueológica, celebradas en Tarragona del 9 al 12 de mayo de 2018.
La obra recoge el sentido del compromiso compartido para lograr un objetivo cuya definición se
rige en torno a normas y garantías. El sentido de
corresponsabilidad adquirido y compartido es el
motor, la norma no escrita y el elemento aglutinante que han permitido alcanzar los diferentes
puntos que han marcado el éxito de la celebración
de las JIA Tarragona 2018. Esta organización,
constituida en origen como un agregado heterogéneo de personas con ideas, ha pasado a estar
conformada por compañeros que han reunido a
más de 200 colegas de profesión en las jornadas.
Sin duda, 2018 será el año de las JIA, aunque el
trabajo comenzó años antes.
Son muchos los colaboradores que iniciaron
el largo proceso de la celebración de las JIA en
Tarragona. También son muchas las personas que
han participado en esta publicación –revisores,
autores y coordinadores–, a los cuales no podemos dejar de agradecer su trabajo.
Con los mejores deseos.
Comité Editorial JIA Tarragona 2018
Editores:
ANA BUCCHI MORALES
NOEMÍ ESCAYOLA GONZÁLEZ
KAREN FORTUNY MENDO
FCO. JAVIER GARCÍA-VADILLO
JAVIER LUENGO GUTIÉRREZ
PABLO VARONA RUBIO
SECCIÓN 01. PRODUCCIONS, CONSUM I DINÀMIQUES
SOCIOCULTURALS: LA CERÀMICA DES DE LA PREHISTÒRIA
FINS AL MÓN CONTEMPORANI A LA PENÍNSULA IBÈRICA
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
17
INTRODUCCIÓ A LA SESSIÓ: LA CERÀMICA DES DE
LA PREHISTÒRIA FINS AL MÓN CONTEMPORANI
A LA PENÍNSULA IBÈRICA
JAUME PUIGREDON BOIXADERA1, JOSÉ LUIS MARTÍNEZ-BOIX2
Adaptant-se als avenços de l’arqueologia, la
ceràmica continua oferint múltiples possibilitats
a l’hora d’acostar-nos a l’estudi de la Història, i
constitueix una de les primeres fonts quan ens endinsem en l’estudi de societats passades.
Ens aproxima a una realitat llunyana i al mateix temps actual, perquè tot i que vivim en la societat dels plàstics, la ceràmica segueix mostrant
un paper destacat en les societats actuals i és molt
present en la nostra activitat diària, al mateix
temps que ha estat i segueix sent una font d’estudi
per als arqueòlegs del passat i del segle XXI.
Des de les primeres produccions neolítiques
fins a la vaixella d’un aixovar contemporani, la
ceràmica parla dels costums més arrelats a les
societats, i la seua presència o absència pot indicar diferències de classe o consideració social.
Les nostres formes d’alimentar-nos, de comerciar, d’estalviar o fins i tot de pensar han deixat una
petjada aprehensible a les produccions ceràmiques, donat que són aquests els materials que ens
acompanyen a l’hora de produir-se totes elles.
1. Universitat de Girona - ceramica.jia2018@gmail.com
2. Universitat d’Alacant
En el marc de les Jornades de Joves Investigadors celebrades a la Universitat Rovira i Virgili
de Tarragona, el dia 10 de maig, vam gaudir d’un
interessant intercanvi i posada en comú de coneixements d’una disciplina que podem enfocar des
de perspectives, òptiques i metodologies diverses
a l’hora de treballar.
Disciplina no exempta de problemàtiques comunes a altres camps de la disciplina arqueològica
que vam poder compartir, intercanviant inquietuds
i solucions davant uns problemes comuns a tots.
Per aquests motius, els coordinadors volem
agrair a ponents i assistents la seua participació en
aquesta sessió i els debats que hi sorgiren, així com
agrair també el paper del comitè organitzador de
les XI JIA Tarragona 2018. Els apreciem especialment el fet d’haver-nos donat la possibilitat de crear
un espai de debat. Amb la nostra petita contribució
i el present recull d’articles, pretenem demostrar
que els estudis ceràmics en arqueologia són més
vius que mai, i abasten totes les èpoques històriques des de diferents anàlisis i punts de vista.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
19
AVANCE DEL ESTUDIO DE LOS MATERIALES
ORIENTALIZANTES DE LOS ALMADENES
(HELLÍN, ALBACETE) - CAMPAÑA DE 20161
PASCUAL PERDIGUERO ASENSI2, SARA FERNÁNDEZ MOLINA3
1. Contextualización y precedentes
Los trabajos recientes en el yacimiento de Los
Almadenes realizados por el Museo Comarcal de
Hellín y la Universidad de Alicante aportan nuevos datos sobre el periodo protohistórico en Hellín (Sala y López 2000; Cañavate et al. 2017). Se
trata de un enclave esencial para entender las dinámicas sociales y económicas de la cuenca alta
del Segura, funcionando como centro gestor de la
actividad económica y comercial en el territorio
más próximo en época orientalizante. Los Almadenes se ubica en la ribera derecha del cañón ho-
mónimo, muy cerca del límite con la provincia de
Murcia (fig. 1). El espacio geográfico se vertebra
en torno al curso del río Mundo que discurre por
un tramo encajonado hasta desembocar en el río
Segura, a unos 3 km del yacimiento.
En 2016 se planteó una intervención para localizar el acceso al yacimiento. La puerta oriental
se sitúa en el tercio septentrional de la vertiente
este, donde el escarpe rocoso que rodea el cerro
se interrumpe formando un vano de unos 3,5 m.
Flanqueándolo, aparecen los restos de dos muros
paralelos que arrancan desde la muralla formando
un pasillo de entrada en forma de embudo (fig. 2).
FIGURA 1. Localización del yacimiento (fuente: proyecto Almadenes).
1. Proyecto Los accesos a la fortificación del poblado protohistórico de Los Almadenes (Hellín, Albacete). SBPLY/
16/180801/00001. Financiado por la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de Castilla-La Mancha, dirigido por Feliciana Sala Sellés y Javier López Precioso.
2. Investigador predoctoral de la Universitat d’Alacant - pascuperdiguero@gmail.com
3. Arqueóloga licenciada por la Universitat d’Alacant
20
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Planta final de la puerta oriental sobre la planimetría del yacimiento (fuente: proyecto Almadenes).
Sabemos, por la excavación del Edificio 1, que
el poblado tiene una sola fase de ocupación con
varios momentos constructivos, con una cronología de finales del siglo VII hasta mediados del VI
a. C. (Cañavate et al., 2017, 107), cuando un final
súbito del poblado sella el momento final de ocupación, creando un laboratorio ideal para el estudio de materiales.
2. La cultura material
Puesto que el conjunto cerámico recuperado
in situ en el Edificio 1 ya se conoce (Sala y López
2000; Cañavate et al. 2017), aquí presentamos las
novedades obtenidas en la excavación de la puerta
oriental.
Ánforas
Son el grupo más representado del conjunto material y pertenecen a las imitaciones occidentales de ánforas fenicias R-1 de Vuillemot
o T-10.1.2.1 (Ramón 1995). De perfil ovoide y
hombro carenado (fig. 3), están realizadas mayoritariamente en dos pastas distintas. Morfológicamente, se distinguen perfiles de labio alto y
estrecho, de perfil lenticular, y de sección más
o menos triangular o ligeramente redondeada.
Con una cronología entre el 675/650-575/550
a. C. (Ramón 1995, 231), estos envases tienen
una amplia difusión por el occidente mediterráneo.
Por lo que a los centros de fabricación se refiere, tradicionalmente se sitúan en Andalucía, si
bien se detectan centros productores a lo largo
de la costa mediterránea (Alicante o Ibiza, por
ejemplo). En este sentido, el horno de Pinos
Puente (Granada) (Contreras, Carrión y Jabaloy
1983) del último tercio del siglo VII a. C., o las
producciones de Peña Negra (Crevillente), hacia la mitad del siglo VI, confirman que algunos
centros considerados «indígenas» también producen estos envases. La presencia de T-10.1.2.1
en el interior del valle del Segura podría estar
marcando una incorporación progresiva de los
territorios de interior en las redes de comercio
vinculadas a la costa.
AVANCE DEL ESTUDIO DE LOS MATERIALES ORIENTALIZANTES DE LOS ALMADENES (HELLÍN, ALBACETE) - CAMPAÑA DE 2016
21
FIGURA 3. Selección de materiales de 2016 comparados con formas completas de 1993/95.
Cerámica común y pintada
El repertorio a torno se compone de diferentes
formas de almacenaje y vajilla de mesa. Destacan
las urnas de perfil en S, con varios ejemplares pintados y sin pintar iguales a los recuperados en las
campañas de 1993/95 (fig. 3). Sus paralelos más
cercanos están en Peña Negra (González 1983,
170), La Fonteta (Guardamar) (González 2014,
659) o en las botellas 1C de l’Alt de Benimaquía
(Denia), halladas en ambientes fechados entre el
600 y el 580 a. C. (Guérin 1994).
La urna pintada con baquetones en el cuello (5015/23) sería un subtipo de las urnas con
perfil en S. Esta forma es común en el sureste
en la segunda mitad del siglo VI a. C., y aparece
en yacimientos costeros como La Fonteta (Rouillard, Gailledrat y Sala 2007, 318; González 2014,
602), o en contextos de interior como Peña Negra
(González 1983), El Puig d’Alcoi (Grau y Segura 2013, 74) o el Castellar de Librilla (Ros 1989,
266-267).
Como novedad, señalamos el hallazgo de un
borde de cuenco-trípode (5034/1) fechable en
contextos occidentales entre los siglos VII-VI a. C. y
asociado a las ánforas T-10.1.2.1 y a las prácticas
de consumo de vino. Arteaga y Serna (1975, 231)
localizan un borde similar en la fase II-B (575-550
a. C.) de Saladares (Orihuela). Los paralelos más
cercanos están en las fases III (650-600 a. C.) y
Vb de La Fonteta (525-500 a. C.) (Rouillard, Gailledrat y Sala 2007, 251, 301), abarcando toda la
horquilla temporal que proponemos para Los Almadenes, donde llegaría por capilaridad desde la
costa.
La cerámica gris está representada sobre todo
por platos bruñidos (5000/9, 5015/20, 21 y 5018/1)
(fig. 4), hechos con pastas de núcleo castaño de
cocción oxidante que terminó con una potente
reducción que dejó las superficies de color gris
y acabado bruñido. Los platos 5000/9 y 5015/20
aparecen en la fase Va de La Fonteta (550-525
a. C.) (Rouillard, Gailledrat y Sala 2007, 287) y, en
momentos similares, en Peña Negra y Saladares.
Consideración aparte merece el plato con carena
en la mitad superior (5018/1) que recuerda a los
cuencos carenados a mano presentes en muchos
yacimientos del Bronce Final. La existencia de
22
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. Selección de materiales.
esta forma realizada a torno y en cocción reductora podría señalar una evolución de la tradición
alfarera indígena que está asimilando técnicas
propias de la alfarería oriental.
Cerámica a mano
La vajilla a mano se divide en dos grupos: producciones toscas, con arcillas poco decantadas y
abundantes desgrasantes, y producciones más cuidadas, representadas por piezas bruñidas que recuerdan a tipos del Bronce Final pleno y reciente
del sureste. La forma más frecuente es la botella
de perfil en S (5015/24, 29, 30, 34 y 35), realizadas en una fábrica cuidada con engobes arcillosos
o pintadas al exterior, novedad muy interesante.
Pese a recordar a las ollas B3 de La Fonteta (González 2014, 49) o la forma III.F.6 de Librilla, dado
el tratamiento cuidado y el perfil más estrangulado, las hemos llamado «botellas» por su clara diferencia funcional. De almacenaje tenemos 5015/32,
una gran orza, ya documentada en el Edificio 1 en
1993/95, que se corresponde con las ollas de pare-
des rectas A1 (González 2014, 24) o tipo 4.3 (Rouillard, Gailledrat y Sala 2007, 216-217) de La Fonteta. Cabe destacar un pequeño cuenco carenado
con mamelones, base de omphalos y un bruñido
de gran calidad (5015/27), una forma recurrente
en muchos yacimientos entre mediados del VIII y
primera mitad del siglo VI a. C.
3. Discusión
Nos encontramos ante un lote de material,
muy similar al del Edificio 1, que confirma el horizonte del VI a. C., con un 85 % de las formas identificables producidas a torno y apenas un 15 % de
materiales a mano. La gran presencia de ánforas
(38 % del total) reitera el papel de centro redistribuidor de productos al exceder de las necesidades
de abastecimiento del poblado. Como novedad, el
ajuar a mano nos aporta la nueva forma de «botella» y el cuenco carenado, que se suman a las
grandes orzas de almacenaje y las ollas para usos
culinarios que ya se conocían.
AVANCE DEL ESTUDIO DE LOS MATERIALES ORIENTALIZANTES DE LOS ALMADENES (HELLÍN, ALBACETE) - CAMPAÑA DE 2016
4. Bibliografía
ARTEAGA, O.; SERNA, M. R. 1975: «Los Saladares-71»,
Noticiario Arqueológico Hispánico, 3, 7-140.
CAÑAVATE, V.; SALA, F.; LÓPEZ, J.; NOVAL, R. 2017:
«Los Almadenes y la Cuenca del Río Mundo,
un modelo de Paisaje Cultural para la protohistoria albacetense (Hellín, Albacete)», en: El
Oriente de Occidente: Fenicios y púnicos en el
área ibérica, 105-128.
CONTRERAS, F.; CARRIÓN, F.; JABALOY, E. 1983: «Un
horno del alfarero protohistórico en el Cerro
de los Infantes (Pinos Puente–Granada)», en:
XVI Congreso Nacional de Arqueología (Cartagena 1982), 533-539.
GONZÁLEZ PRATS, A. 1983: «Estudio arqueológico
del poblamiento antiguo de la Sierra de Crevillente», Anejos I de Lucentum, Universidad de
Alicante.
– 2014: La Fonteta-2. Estudio de los materiales arqueológicos hallados en la colonia fenicia de la
actual desembocadura del río Segura (Guardamar, Alicante), Alicante.
GRAU, I.; SEGURA, J. M. 2013: El oppidum ibérico
de El Puig d’Alcoi: asentamiento y paisaje en las
montañas de la Contestania, Ayto. de Alcoi.
23
GUÉRIN, P. 1994: «A typology of the pottery found at
Alt de Benimaquía (600-580 b.C.)» <https://www.
researchgate.net/publication/323345013_A_typology_of_the_pottery_found_at_Alt_de_Benimaquia_600-_580_bC> [Consulta: 10 mayo
2018].
RAMÓN TORRES, J. 1995: «Las ánforas fenicio-púnicas. Mediterráneo central y occidental», Instrumenta, 2.
ROS SALA, M. M. 1989: Dinámica urbanística y cultura material del Hierro Antiguo en el Valle del
Guadalentín, Colegio Oficial de Arquitectos de
Murcia, Universidad de Murcia.
ROUILLARD, P.; GAILLEDRAT, É.; SALA, F. 2007:
L’établissement protohistorique de La Fonteta,
fin VIIIe-fin VIe siècle av. J.-C. Fouiles de la Rábita
de Guardamar, 2, Casa de Velázquez, Madrid.
SALA, F.; LÓPEZ PRECIOSO, J. 2000: «Los Almadenes
(Hellín, Albacete). Un poblado orientalizante
en la desembocadura del río Mundo», en: IV
Congreso Internacional de Estudios Fenicios y
Púnicos, 4, 1885-1894.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
25
APROXIMACIÓN A UN CONJUNTO INÉDITO DE CERÁMICA A
MANO DECORADA DE PEÑA NEGRA (CREVILLENT, ALICANTE)
IRENE VINADER ANTÓN1
1. Introducción
Se presentan los avances respecto al estudio de
un conjunto de cerámica a mano decorada del yacimiento de Peña Negra (Crevillent, Alicante)2 (fig.
1), excavado y publicado desde la década de los
70 del siglo XX (González Prats 1979, 1982, 1985,
1986, 1999, 2002). Se trata de producciones finas
con tratamiento bruñido y decoración sobre sus
superficies exterior y/o interior, características que
la diferencian de la cerámica a mano grosera, pertenecientes al horizonte Peña Negra I, vinculado al
Bronce Final (ss. IX-VIII a. C.) (Jover, Lorrio y Díaz
2016). La producción, así como los motivos decorativos que se desarrollan sobre los vasos, han sido
trabajados en profundidad en las diversas publicaciones a las que remitimos en este mismo párrafo.
El material de estudio que se presenta a continuación es resultado de la campaña de 1987,
inédita, llevada a cabo por González Prats en el
Sector II, Cortes F y G, una caracterizada por la
presencia de una escombrera metalúrgica, que
había sido documentada en las campañas precedentes (González Prats 1992).
FIGURA 1. Ubicación
del yacimiento (Peña
Negra) y su necrópolis
asociada (Les Moreres)
en relación con el
núcleo urbano de
Crevillent. Fuente: IGN.
Elaboración propia.
1. Universidad de Alicante - irene.v1995@gmail.com
2. Este trabajo se ha realizado en el marco del proyecto del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad
HAR2017-87495-P, «Fenicios e indígenas en el Sureste de la Península ibérica: Bronce final y Hierro Antiguo entre el Vinalopó y el Segura». Agradezco a los Dres. Alberto J. Lorrio Alvarado y Alfredo González Prats el haberme facilitado el acceso
a las piezas.
26
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
2. El conjunto cerámico: aproximación a las
técnicas decorativas
Sobre los vasos cerámicos de la campaña de
1987, observamos la presencia de diferentes técnicas decorativas. De una muestra total de 241 fragmentos, de los que se estima un número mínimo
de 218 recipientes –siendo este el valor utilizado
para el cálculo porcentual–, un 98,1 % presentan
incisiones simples de sección en V, que pueden estar asociadas o no a otras técnicas: en un 5,6 %
aparecen acompañadas de impresiones realizadas
con un instrumento acabado en punta roma, en
un 5,1 % las acompañan restos de pigmento rojizo, en un 0,4 % la técnica complementaria es la
excisión, y los fragmentos únicamente incisos representan un 87 %.
Además, el conjunto presenta dos técnicas que
no aparecen asociadas a ninguna otra: acanalado
(0,9 %) y retícula bruñida (0,9 %),
La técnica más empleada es la incisión realizada con un punzón aguzado (fig. 2), que da como
resultado el desarrollo de una serie de temas decorativos caracterizados por el fino trazado de las
líneas. Ocasionalmente, junto con estas incisiones
encontramos impresiones circulares completando
los temas (fig. 2b-c), que ofrecen una gran variedad de composiciones. Son numerosos los casos
en los que, además, se mantiene la pasta blanca
que rellenaría estos motivos, conservados restos
de ella en el 91,6 % de los fragmentos incisos/impresos, sin que podamos descartar que estuviera
presente en la totalidad de los casos. Dicha pasta
se ha identificado con yeso,3 elemento que aflora
de manera natural en el yacimiento. Como ya señaló González Prats (1990, 72), podría tratarse de
una técnica pseudopictórica que busca dar la sensación de decoración pintada. En algunos casos, la
composición se completa con pintura monocroma
rojiza que recorre algunas de las franjas lisas entre
incisiones o destaca partes de la decoración4 (fig.
2c). La pintura habría sido aplicada tras la cocción,
siendo la única de las técnicas presentadas que se
desarrollaría en dicha fase del proceso productivo,
por lo que su conservación es bastante delicada.
Dicho pigmento también ha sido analizado, y ha
permitido identificar su composición a partir de
óxidos de hierro (Vinader, en prensa).
Las técnicas de excisión (fig. 2d) y acanalado
(fig. 2e) fueron menos utilizadas en las producciones cerámicas, y los ejemplos en los que las encontramos son muy escasos. Mención aparte me-
FIGURA 2. Detalle de incrustación de pasta blanca en incisiones (a) e impresiones (b), decoración pintada (c),
triángulo exciso (d), acanalado (e) y retícula bruñida (f).
3. Vinader e. p. Los análisis han sido realizados en los Servicios Técnicos de Investigación de la Universidad de Alicante por I. Martínez Mira, O. Cornejo Navarro y E. Vilaplana Ortego, del Departamento de Química Inorgánica, a quienes
agradecemos la información sobre los mismos. Los análisis cuentan con la financiación procedente de las «Ayudas por
productividad investigadora para grupos de investigación de la Universidad de Alicante», otorgadas por el Vicerrectorado de
Investigación y Transferencia de Conocimiento al Grupo de Investigación de Prehistoria y Protohistoria, según los términos
recogidos en la convocatoria del Programa Propio para el Fomento de la I+D+i en la Universidad de Alicante.
4. A pesar de no ser el caso de este estudio por la restricción del material, existen pruebas de bicromía en algunas de las
cerámicas del horizonte Peña Negra I, que alterna la pintura rojiza con otra de tonos amarillos (González Prats 1983, 71).
APROXIMACIÓN A UN CONJUNTO INÉDITO DE CERÁMICA A MANO DECORADA DE PEÑA NEGRA (CREVILLENT, ALICANTE)
27
FIGURA 3. Izquierda: Tabla de motivos decorativos incisos en la cerámica bruñida de Peña Negra (González
Prats 1983, fig. 18). Derecha: Motivos geométricos presentes en la cerámica con decoración geométrica del
Carambolo (Casado 2015, figs. 156, 167 y 169) con representación en nuestro registro.
rece el fragmento cerámico decorado mediante
retícula bruñida (fig. 2f), técnica consistente en el
empleo del bruñido para generar trazos entrecruzados geométricos, logrando un efecto de bicromatismo entre el brillo metálico de los trazos y el
fondo cerámico mate (Torres 2002). Dada su mínima representación en el registro de Peña Negra,
junto a que este tipo de técnica se documenta fundamentalmente en el suroeste peninsular, parece
sugerir que se trate de una cerámica procedente
de dicha región.
3. Las composiciones decorativas
Todas las decoraciones que se encuentran representadas sobre los vasos cerámicos responden
a la repetición, intercalado y combinación de tres
elementos esenciales que representan una forma
geométrica concreta, hasta formar las composiciones completas: la línea simple, el círculo y el triángulo, de los cuales podemos presuponer que, individualmente, contarán con un significado propio.
Muchos de los motivos que encontramos sobre
el conjunto se corresponden con los ya estudiados
por González Prats (1983, 74-75) para la cerámica
a mano bruñida y decorada de otras campañas en
el yacimiento (fig. 3a): motivos geométricos linea-
les, cuadrados inscritos, cuadriculados o reticulados, zigzags simples o múltiples, y triángulos con
trazos oblicuos inscritos; además de los motivos
impresos circulares.
Sin embargo, también se ha reparado en motivos decorativos no recogidos con anterioridad (fig.
3b), como líneas en M con espacios tramados, motivos cuadrados formando aspas y motivos geométricos de posible interpretación vegetal, de acuerdo
con lo sugerido para otros conjuntos cerámicos,
como la cerámica con decoración geométrica tartésica del Carambolo (Sevilla) (Casado 2015).
La organización de la decoración se lleva a
cabo en relación con bandas delimitadas, generalmente, por repetición de líneas horizontales en
paralelo, por lo que cabría decir que tiene cierto
sentido temático. A las formas más habituales, pequeños cuencos y cazuelas, se añade la representación de decoración sobre grandes ollas, platos
y cuencos de tamaño mediano (González Prats
1983, 74-75).
4. Consideraciones finales
Según los parámetros tenidos en cuenta en relación con la calidad de la producción cerámica, el
amplio repertorio formal, el cuidado en sus trata-
28
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
mientos superficiales y la cantidad y variedad de
decoración que presentan en cuanto a técnicas y
motivos, no cabe duda de que se trata de una vajilla limitada en su uso a determinado grupo social
o situación, debido a la inversión en trabajo y materiales que supone su fabricación. Sin embargo,
mientras que en otros contextos del sureste peninsular queda patente la importancia como objetos
de prestigio de estas cerámicas decoradas al hallarse mayoritariamente en contextos funerarios,
como ocurre en la zona de Almería (Lorrio 2008),
en Peña Negra solo aparecen en el poblado, y están
ausentes por completo en su necrópolis asociada.
Por tanto, al carecer de un contexto que facilite la extracción de información, es necesario
hacer un estudio de los fragmentos desde diversas perspectivas. Además, al tratarse de una tradición productiva que se repite tanto en cuanto
a formas cerámicas como a patrones decorativos
en diferentes regiones del sur peninsular, su conocimiento es vital a la hora de realizar posteriores
comparaciones e interpretaciones acerca de los
usos dados a la cerámica, los intercambios o el
movimiento de gentes e ideas.
5. Bibliografía
CASADO ARIZA, M. 2015: La cerámica con decoración
geométrica del Carambolo, Editorial Universidad de Sevilla, Sevilla.
González Prats, A. 1979: Excavaciones en el yacimiento protohistórico de La Peña Negra, Crevillente (Alicante) (1.ª y 2.ª campañas), Ministerio de Cultura, Madrid.
– 1982: «La Peña Negra IV. Excavaciones en el
Sector VII de la ciudad orientalizante, 198081», Noticiario Arqueológico Hispano, 13, Ministerio de Cultura, Madrid.
– 1983: Estudio arqueológico del poblamiento antiguo de la sierra de Crevillente (Alicante), Anejo I
de la revista Lucentum, Universidad de Alicante, Alicante.
– 1985: «La Peña Negra, II-III. Campañas de 1978
y 1979», Noticiario Arqueológico Hispano, 21,
Ministerio de Cultura, Madrid.
– 1986: «La Peña Negra V. Excavaciones en el poblado ibérico del Bronce Antiguo y en el recinto fortificado ibérico», Noticiario Arqueológico
Hispano, 27, Ministerio de Cultura, Madrid.
GONZÁLEZ PRATS, A. 1990: Nueva luz sobre la protohistoria del Sudeste, Universidad de AlicanteCaja de Ahorros Provincial de Alicante, Alicante.
GONZÁLEZ PRATS, A. 1992: «Una vivienda metalúrgica en La Peña Negra (Crevillente-Alicante).
Aportación al conocimiento del Bronce Atlántico en la península Ibérica», Trabajos de Prehistoria, 49, 243-257.
GONZÁLEZ PRATS, A. 1993: «Quince años de excavaciones en la ciudad protohistórica de Herna
(La Peña Negra, Crevillente, Alicante)», Saguntum: Papeles del Laboratorio de Arqueología de
Valencia, 26, Valencia, 181-188.
GONZÁLEZ PRATS, A. 1999: «La Peña Negra, VII. Excavaciones de 1986 en el Sector VII de la ciudad orientalizante», Memorias Arqueológicas y
Paleontológicas de la Comunidad Valenciana, 0,
Generalitat Valenciana.
GONZÁLEZ PRATS, A. 2002: La necrópolis de cremación de Les Moreres (Crevillente, Alicante, España) (ss. IX-VII a. C.), Anejo III Seminario Internacional sobre Temas Fenicios, Alicante.
JOVER MAESTRE, F. J.; LORRIO ALVARADO, A. J.; DÍAZ
TENA, M.ª A. 2016: «El Bronce Final en el Levante de la península Ibérica: bases arqueológicas y periodización», Complutum, 27 (1),
Madrid, 81-108.
LORRIO ALVARADO, A. J. 2008: Qurénima. El Bronce
Final del Sureste de la península Ibérica, Real
Academia de la Historia, Madrid.
TORRES ORTIZ, M. 2002: Tartessos, Real Academia
de la Historia, Madrid.
Vinader Antón, I. [en prensa]: «Análisis mediante µfrx de cerámicas decoradas de Peña Negra
(Crevillent, Alicante)», en: Actas VIII Jornadas
de Investigación de la Facultad de Filosofía y
Letras.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
29
METODOLOGIA PER A L’ANÀLISI ICONOGRÀFICA
DE LA CERÀMICA IBÈRICA PINTADA AMB FIGURACIÓ
«ELX-ARCHENA»
JOSÉ LUIS MARTÍNEZ-BOIX1
Reestudiar produccions ceràmiques de les
quals hem perdut el context arqueològic pot suposar un gran problema a l’hora d’extraure’n més
informació que ens ajude a construir el discurs
històric. Per això, proposem ací l’ús dels mètodes
iconogràfics per tal d’obtenir noves aportacions
històriques a partir del material ceràmic decorat
amb figuració d’estil Elx-Archena. Per fer això seguirem una línia metodològica clàssica dins dels
estudis iconogràfics, recorrent als tractats d’Erwin Panofsky, on se’ns indica com cal realitzar
una anàlisi iconogràfica (Panofsky, 1972).
Per a Panofsky, la iconografia és «una branca de
la Història de l’Art que s’encarrega del contingut
temàtic o significat de les obres d’art, per tal com
és aquesta una cosa diferent de la seua forma» (Panofsky 1972, 13). Vegem com es parteix d’una principal diferenciació entre una «forma» i un «contingut». Segons aquest pensador, totes les qualitats
simptomàtiques de la determinada forma de viure
i veure el món que una cultura posseeix estan expressades implícitament en cadascun dels productes generats per aquesta: és el «significat intrínsec»
o «contingut» de les imatges (Panofsky 1972, 15).
Per tant, la iconografia recuperada del passat
és portadora de forma inherent del codi social
d’aquella cultura que la generà. Aquest contingut
es fa palés a través d’elements relacionats amb
la «forma». Contingut i forma apareixen sota un
principi unificador que sustenta la manifestació
empírica, així com el seu significat intel·ligible, i
determina quina forma adopta el fet visible.
Cada societat deixa la seua empremta cultural a les imatges que genera, i, a la inversa, cada
fragment o acció aïllada provinent d’una cultura
pot ser interpretada a la llum d’aquestes qualitats
i donar-nos informació sobre la societat que l’ha
concebut. Així doncs, Panofsky idea una metodologia iconogràfica que parteix d’una diferenciació
entre tres nivells de contingut temàtic:
1 Universitat d’Alacant - jluismartinezboix@gmail.com
El primer és el «contingut temàtic natural o
primari». És aquell de què podem percebre formes pures: configuracions, línies, colors, masses i
volums, i que es vincula amb representacions (un
ésser humà, un animal, un instrument). S’hi inclouen les qualitats expressives del fet que representa: l’acció violenta, el gest de dolor, un ambient
natural. Tot aquest món és anomenat «significats
primaris», i també «motius artístics». L’enumeració positiva d’aquests motius és una descripció
preiconogràfica de l’obra (Panofsky 1972, 15).
No es garanteix exactitud en el reconeixement
de tots els motius, ja que pot haver-n’hi que no
s’identifiquen per la manca d’experiència prèvia
en la contemplació de formes. Es suggereix ampliar el camp de l’experiència cercant els motius
als llibres especialitzats i contactant amb experts
(Panofsky 1972, 19). Tanmateix, és impossible
fer una correcta descripció sense fer-la des d’un
context històric, ja que allò que s’identifica amb
els motius no és sinó la manera en què objectes i
accions s’expressen per les formes, les quals són
canviants al llarg del temps. Així, l’experiència
pràctica no és garant d’encert si no se sotmet a la
«història de l’estil», una comparativa històrica de
la representació (Panofsky 1972, 20). Després de
reconéixer un element, queda aïllat si no es posa
en relació amb altres observacions anàlogues totalment o parcialment, tenint el conjunt una correspondència i un sentit. Aquest és un aspecte que
pot aplicar-se com a control per a les noves interpretacions; per tant, si una observació aïllada no
admet ser interpretada d’acord amb la coherència
de la sèrie amb què es pretén relacionar, i es prova
que no hi ha error, caldrà reformular la finalitat
de l’associació per tal d’incloure-la o crear-ne una
de nova.
El segon és el «contingut convencional» o «secundari». És la identificació i relació dels motius
amb temes i conceptes, conformant imatges, les
30
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
quals componen històries i al·legories. Identificar-les és la tasca tradicional de la iconografia, que
es vincula amb el «contingut», mentre que l’anterior nivell es correspon amb la «forma». Una anàlisi iconogràfica estricta comptarà amb la correcta
identificació de les imatges i la relació d’aquestes
amb els temes representats (Panofsky 1972, 16).
Aquesta tasca requereix familiaritat amb «temes»
i «conceptes» específics de la cronologia que s’estudia. Fonts literàries, textos sagrats o fins i tot la
tradició oral són formes habituals a l’hora d’identificar aquests temes en les imatges. Per al període
ibèric, com que es manca de fonts directes que
parlen de l’imaginari dels autors dels vasos, s’ha
d’aplicar un enfocament històric, cercant temes
en tota referència religiosa, mitològica o literària
amb què les poblacions d’aquest període convisqueren. Tanmateix, no es garanteix l’exactitud de
l’anàlisi iconogràfica només per aplicar unes comparacions amb alguns temes transmesos per les
fonts, sinó que, de la mateixa manera que investiguem la història de l’estil, cal conéixer de quina
forma i sota quines condicions específiques certs
temes o conceptes s’expressaren, és a dir, conéixer
la història dels tipus (Panofsky 1972, 21-22).
L’últim nivell és el «significat intrínsec» o «contingut», el qual expressa l’actitud bàsica d’una cultura manifestada a la imatge de manera conscient
o inconscient, ja que fins el menor canvi compositiu pot estar expressant un canvi de mentalitat
per part de l’autor. Aquesta anàlisi, més profunda,
es relaciona amb la iconologia i requereix anar
un pas més enllà en la investigació iconogràfica.
L’explicació cercarà una raó subjacent a l’elecció
d’eixos motius per formar unes imatges determinades que al seu torn donen significat fins i tot
a les disposicions formals i els procediments tècnics emprats. Cal una facultat diagnòstica àmplia,
sintètica, que ajude a interpretar la imatge, facultat que Panofsky anomena «intuïció sintètica». És
una forma d’aprehendre el contingut que, si no es
corregeix, donarà com a resultat una visió subjectiva i irracional d’allò que s’ha interpretat, condicionada per la psicologia i la Weltanschauung o
«concepció del món» de l’intèrpret.
La intuïció sintètica cal que es controle mitjançant un coneixement i anàlisi de les tendències generals i essencials de les societats del passat,
expressades per temes i conceptes específics. Això
constituiria el que podríem definir com una història dels símptomes culturals o «símbols culturals», que no són sinó la plasmació de les societats
en una quantitat incomptable de mostres (García
Amilburu 1998). Per a això, s’haurà de comprovar el que es creu que és el significat intrínsec de
l’obra amb el significat de totes aquelles fonts, del
tipus que siga, relacionades històricament amb
l’obra: tendències polítiques, poètiques, literàries,
filosòfiques, religioses i socials del que establim
com a autor de la imatge. És al camp del significat intrínsec on les disciplines humanístiques es
conjuguen, trobant un pla comú on col·laboren
per aplegar a les conclusions més pròximes a la
veritat.
Una vegada analitzat el pla iconogràfic amb
les eines descrites, cal contextualitzar històricament les observacions realitzades per completar
la interpretació. Per al cas de la ceràmica ibèrica
d’estil Elx-Archena poden revisar-se les publicacions més recents dels jaciments on es troba aquest
estil de decoració ceràmica per completar el context arqueològic on apareixen aquestes icones
(Tortosa 2004, 2006; Pérez Blasco 2014); a partir
de l’ambient material on apareix, majorment del
segle I aC, es relacionarà amb el moment històric que les fonts descriuen per a eixe moment a
Hispània i es conjugaran les anàlisis pictòriques
amb aquest conjunt per obtenir una interpretació
sintètica. També pot oferir-nos molta informació veure si existeix un registre iconogràfic previ
per als motius identificats o fins a quin punt són
expressions genuïnes d’un moment. Finalment,
trobar paral·lels i referències iconogràfiques que
representen els mateixos temes en altres suports
o ubicacions pot suggerir una sèrie d’inferències
que amplien la interpretació, i que constitueixen
un millor apropament a la realitat històrica.
Així, l’aplicació d’una metodologia iconogràfica a l’estudi de les decoracions ibèriques d’estil
Elx-Archena pot ajudar a reinterpretar el seu significat a tots els nivells, suggerint hipòtesis que
vinculen les imatges ibèriques d’aquest estil amb
la presència de la població itàlica que s’instal·la
al sud-est peninsular i du a terme el procés de
la romanització, fundant els municipis i les colònies que constituiran la Hispània romana. És,
per tant, una manera de reestudi de materials
procedents d’excavacions antigues, però també
una forma d’aportar nou coneixement a la disciplina històrica sense la necessitat de noves
excavacions. Per tant, l’estudi iconogràfic té un
gran potencial si s’aplica dins d’una metodologia científica que aprofite tota la capacitat de les
ciències humanes, més com a síntesi que com a
anàlisi, per apropar-nos a la veritat tant com siga
possible.
Bibliografia
GARCÍA AMILBURU, M. 1998: «La cultura como universo simbólico en la antropología de E. Cassirer», Pensamiento: Revista de investigación e
información filosófica, 54 (209), 221-244.
METODOLOGIA PER A L’ANÀLISI ICONOGRÀFICA DE LA CERÀMICA IBÈRICA PINTADA AMB FIGURACIÓ «ELX-ARCHENA»
PANOFSKY, E. 1972: Estudios sobre iconología,
Alianza Editorial, Madrid.
PÉREZ BLASCO, M. 2014: «Cerámicas ibéricas figuradas (siglos V-I a. C.). Iconografía e iconología»,
tesi doctoral inèdita, Universitat d’Alacant.
TORTOSA ROCAMORA, T. 2004: «Tipología e iconografía de la cerámica ibérica figurada del enclave
31
de La Alcudia (Elche, Alicante)», en: TORTOSA
ROCAMORA, T. (coord.), El yacimiento de La Alcudia: pasado y presente de un enclave ibérico,
Anejos de AEspA, XXX, CSIC, Madrid, 71-222.
– 2006: Los estilos y grupos pictóricos de la cerámica ibérica figurada en la Contestania, Instituto
de Arqueología de Mérida, Mèrida.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
33
NOVES TENDÈNCIES I CANVIS SOCIOECONÒMICS EN EL
SERVEI DE TAULA (SEGLES I AC - I DC) AL NE PENINSULAR:
ANÀLISI D’UNS CONJUNTS APAREGUTS A EMPÚRIES
JAUME PUIGREDON BOIXADERA1
1. Introducció
L’estudi d’aquest treball comprèn un indret difícilment comprensible, si no fos per les circumstàncies polítiques i socials arran dels fets del 218
aC i el 195 aC, amb el desembarcament dels Escipions i de Cató a Empúries.
La presència de l’exèrcit romà va esdevenir
constant i permanent amb la instal·lació de campaments, com en el cas d’Empúries, que es van
convertir en plataformes de recepció i avituallament de tropes per a la conquesta d’Hispània
(Castanyer, Santos i Tremoleda 2016, 107-127).
Aquest fenomen va generar una potencial clientela, variant les dinàmiques i tendències comercials del Mediterrani, un fet que s’accentuà després de la victòria romana del 133 aC, cosa que
comportà la reorganització i reordenació del territori i la implantació de ciuitates en aquest indret
a partir del segle I aC.
FIGURA 1. Mapa d’ocupació en època
romana del NE català (Tremoleda 2017).
1. Universitat de Girona - jpuigredon@hotmail.com
34
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Pel que fa a Empúries, els seus orígens es remunten a l’antiga Emporion, un dels ports més importants del seu temps, a causa de la seva excepcional
situació i amistat amb Roma. Tot això el va convertir en un punt important del comerç mediterrani,
on arribaven productes d’arreu del món conegut.
2. El servei de taula
La vaixella de taula o el servei de taula és un
món molt complex i canviant en funció de les demandes i els gustos del consumidor de cada època. El món grec, i més tard el món romà, van produir ceràmiques d’altíssima qualitat destinades
al servei de taula i a abastir les demandes d’un
mercat en creixement constant (Roca y Fernández 2005, 82-137).
Al llarg dels segles apareixen diferents tipus
de produccions, estandarditzades, recollint l’herència cultural i tècnica. Sempre amb la mateixa funcionalitat i on l’únic que canviaven eren les
formes i/o decoracions, fruit de les innovacions
tècniques i les noves tendències en el gust (Fernández, Morillo y Zarzalejos 2015).
Tot això va provocar una constant aparició i
desaparició d’espais productors que a poc a poc
es desplacen d’orient a occident de la Mediterrània. La primera fou la ceràmica àtica, produïda a
la plana d’Atenes, que va ser hegemònica fins al
segle III aC, quan serà substituïda per les produccions de tradició etrusca fetes a Etrúria, Nàpols i
tardanament a Sicília.
A mitjans del segle I aC, a causa d’una nova manera de coure els productes i fruit de l’error, apareix una nova tendència trencant la tradició del
vernís negre. Les produccions de vernís vermell, la
terra sigillata, ràpidament es farà un lloc al mercat
i anirà desplaçant la resta de productes i es mantindrà des de l’i aC fins al vii dC (Montesinos 2004).
No era res més que la imitació popular i econòmica del que realment eren símbols de prestigi,
la vaixella de plata, que esdevingué un símbol de
romanitat i civilització que va depassar les mateixes fronteres de l’Imperi romà.
La seva època d’esplendor fou durant el govern
d’August i va ser produïda en diferents tallers de
la península Itàlica, la Gàl·lia, Hispània i també
el nord d’Àfrica, des d’on es va distribuir arreu de
l’Imperi romà.
Cal fer ressaltar l’important paper itàlic, entre
els quals destaquen Arezzo i la seva sucursal a Lió
com a xarnera amb el món gal. Seguit dels tallers
gals d’imitació itàlica, Bram i Narbona, i més tard
La Graufesenque, Montans i posteriorment Lezoux
prenent-ne el relleu (Bémont i Jacob 1968, 137).
Sobre les produccions hispanes, cal destacar
els tallers vinculats al món militar de Lleó i Herrera de Pisuerga. Pel que fa als tallers hispànics,
tenim Tricio i Villares de Andújar i un conjunt de
petits tallers arreu del territori, com Ermedàs o el
Burgo de Osma.
A les darreries del segle I dC s’observa un canvi en les dinàmiques comercials, els productes
nord-africans, com la sigillata africana produïda
a l’Africa proconsular i a Mauritània, que acabarà
desplaçant el vernís vermell.
3. Els conjunts de taula d’Empúries
Amb l’objectiu de resseguir aquests canvis en
el període entre el segle I aC i I dC, s’han seleccionat tres conjunts. A partir dels serveis de taula,
observarem les dinàmiques socioeconòmiques i
els canvis en el mercat des del segle I aC fins a
finals del segle I dC.
El primer conjunt aparegut a l’espai suburbà de
la Neàpolis d’Empúries es tracta d’un edifici situat als peus del camí, que funcionaria com un petit
magatzem per a l’abastiment de la ciutat. El segon
i el tercer conjunt corresponen a dos espais de la
ciutat romana: els espais del fòrum i l’insula 30.
3.1. L’àrea suburbana. El sector 200
L’estudi dels materials d’aquest edifici s’ha fet
a partir de l’anàlisi de quatre UEs, que corresponen a: una gran anivellació per a la construcció de
l’edifici (216 i 217), una segona anivellació (214)
contemporània a l’anterior i el nivell d’abandonament d’aquesta infraestructura (213) (Puigredon
2017, 57).
Es desprèn del seu estudi que va ser un centre
d’una vida relativament curta, des del darrer quart
del segle I aC fins a mitjans de la segona meitat del
segle I dC. Un conjunt amb una important presència de material itàlic, amb formes com les Consp.
17, 182 i més, com les 20, 32.3, 33.2 i 36. Quant al
material sud-gàl·lic, s’han documentat presigillata
sud-gàl·lica i el repertori de La Graufesenque de
plats de Drag. 15, 17 i 18,3 i copes com les 27, 29
i 30. I sobretot en la darrera fase de l’edifici, cal
remarcar la presència de Drag. 24/25 i la 37.
2. En aquesta forma, corresponent a la figura 13 de la làmina, s’hi ha documentat un segell de l’artesà aretí de Sextus
Annius actiu entre el 20 aC i el 10 dC.
3. En aquesta forma, corresponent a la figura 16 de la làmina, s’hi ha documentat un segell de l’artesà de La Graufesenque Scottim, que està datat el 30 dC.
NOVES TENDÈNCIES I CANVIS SOCIOECONÒMICS EN EL SERVEI DE TAULA (SEGLES I AC - I DC) AL NE PENINSULAR: ANÀLISI D’UNS CONJUNTS APAREGUTS A EMPÚRIES
35
FIGURA 2. Gràfiques del tipus sigillata del
conjunt i la seva funcionalitat.
FIGURA 3. Relació
de material
ceràmic trobat.
36
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Aquest repertori de formes sembla confirmar
que aquest establiment va estar actiu durant el
govern d’August i va tenir una important activitat
en època de Tiberi, i el seu abandó a principis del
regnat de Neró, quan la Neàpolis s’abandona.
més endavant les produccions de La Graufesenque, dominaran el mercat emporità, fet que provocarà la inexistència de material hispànic, i com
els productes africans van entrant, els quals no
aconseguiran imposar el seu domini fins al segle
II dC.
3.2. Ciutat romana. El fòrum
Aquest segon conjunt s’emmarca dins l’estudi
fet de les darreres excavacions en l’última dècada del segle XX. Es tracta d’un conjunt d’època de
Neró (54-68 dC), corresponent a una seqüència
del cardo B, just a l’angle exterior de la cúria i la
basílica, i a les reformes de l’ala nord del criptopòrtic i la repavimentació del porticat oest (Aquilué et al. 2005).
Hi observem la total absència de sigillata hispànica i africana, i la incipient presència d’africana de cuina. També tenim un important volum
de material residual i un predomini absolut dels
productes de La Graufesenque.
Les formes que hi trobem sobretot són: Drag.
24/25, 15/17, 18 i, en menor nombre d’individus i
fragments, Drag. 27, 29, 30 i 33, a més de Ritt. 8b
i 5c. Per tant, es tractaria d’un conjunt molt similar al de Port-la-Nautique (Fiches, Guy i Poncini
1978, 185-219).
3.3. Ciutat romana. L’insula 30
El darrer conjunt de les termes públiques l’hem
d’associar a les reformes d’època flàvia (60-70 dC)
sota els nivells d’una gran sala de recepció o basilica thermarum, vestidor i gimnàs sota cobert al
qual s’accedia creuant el vestíbul principal (Castanyer, Santos i Tremoleda 2014).
De la seva anàlisi, podem veure novament un
important volum de material residual, sobretot
sigillata itàlica, l’absència de material hispànic i
més presència de material africà. Per tant, tenim
un important volum de materials sud-gàl·lics: copes Drag. 24/25 i 27, plats de 15/17 i 18, a més d’un
important nombre d’individus de Drag. 29 i un de
Drag. 36.
4. Conclusions
Totes aquestes evidències mostren una important activitat del jaciment, sobretot entre els
segles II-I aC, amb una important relació amb el
món itàlic a causa de la important presència de
sigillata itàlica, fins que serà substituïda per altres
productes de nous centres.
Podem veure com de mica en mica els productes de la Gàl·lia, en primer lloc Bram i Narbona i
5. Bibliografia
AQUILUÉ, X.; CASTANYER, P.; SANTOS, M.; TREMOLEDA,
J. 2005: «Presencia de producciones sigillatas
sudgálicas en las excavaciones realizadas en el
foro de la ciudad romana de Empúries (L’Escala, Alt Empordà)», a: NIETO, X. (ed.), La difusió de la Terra Sigillata Sud-gàl·lica al nord
d’Hispania, Monografies MAC-Barcelona, 6,
199-239.
BÉMONT, C.; JACOB, J. 1968: «La Terre sigillée galloromaine: lieux de production du Haut Empire: implantations, produits, relations», Documents d’Archéologie Française, 6.
CASTANYER, P.; SANTOS, M.; TREMOLEDA, J. 2014:
«Contextos ceràmics altimperials del Municipium Emporiae», a: ROCA, M. et al. (ed.), Contextos ceràmics d’època altoimperial en el Mediterrani occidental, Monografia, Universitat
de Barcelona, Barcelona, 9-71.
– 2016: «Una nueva fortificación de época republicana en Empúries. Una base militar para
conquistar Hispania», a: BENDALA, M. (ed.), Escipiones, Roma conquista Hispania, Madrid,
107-127.
FERNÁNDEZ OCHOA, C.; MORILLO, A.; ZARZALEJOS, M.
2015: Manual de cerámica romana II: Cerámicas romanas de época altoimperial en Hispania. Importación y producción, Alcalá de Henares.
FICHES, J.; GUY, M.; PONCINI, L. 1978: «Un lot de
vases sigillés des premières années du règne de
Néron dans l’un des ports de Narbonne», Archaeonautica, 2, 185-219.
MONTESINOS MARTÍNEZ, J. 2004: Terra Sigillata: Antigüedades romanas. I, Madrid.
PUIGREDON, J. 2017: Terra sigillata itàlica i sud-gàllica. L’exemple d’un conjunt ceràmic d’Empúries, treball final de grau de la Universitat de
Girona, Girona.
ROCA ROUMENS, M.; FERNÁNDEZ GARCIA, M. 2005:
Introducción al estudio de la cerámica romana:
una breve guía de referencia, Màlaga.
TREMOLEDA, J. 2017: «L’època romana. Conquesta,
romanització i explotació del territori (segles
II aC - V dC)», a: El territori de Besalú abans del
comtat, Quaderns de les Assemblees d’Estudis,
2, 71-94.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
37
ELS CONTEXTOS REPUBLICANS DE LA CIUTAT ROMANA
DE POLLENTIA (ALCÚDIA, MALLORCA)
ANTONI PONS ROSSELLÓ1
1. Introducció
L’objectiu d’aquesta comunicació és fer una
revisió de tres contextos republicans publicats de
Pollentia. Segons les fonts literàries (Str. III, 5, 2), la
ciutat es va fundar el 123 aC després de la conquesta romana pel cònsol Quint Cecili Metel. L’arqueo-
logia, però, no ha proporcionat evidències d’ocupació romana anteriors a l’I aC (Orfila 2005, 130).
Els contextos que exposarem en aquesta comunicació s’han publicat parcialment. S’ha donat una
gran importància a l’estudi dels vernissos negres,
deixant de banda l’estudi de la resta de material
ceràmic, i per això les cronologies no s’han pogut
fixar adequadament. Per això, esperem poder estudiar-los i donar-los a conèixer íntegrament en
un futur proper.
FIGURA 2. Secció del carrer Porticat. Extret de:
Arribas, Tarradell i Woods 1973, 109. Edició pròpia.
2. El sondeig al carrer Porticat del barri
residencial de Sa Portella
FIGURA 1. Carrer Porticat en l’àrea de Sa Portella.
Extret de: Vallori 2012, 141. Edició pròpia.
1. Investigador independent - aponsrossello@gmail.com
S’hi van documentar tres nivells (figures 1 i
2). El més antic és el VI. Els qui el van estudiar
van proposar que es tractava d’un estrat preromà
(Arribas, Tarradell i Woods 1973, 104; Sanmartí
et al. 1996, 67; Orfila 2005, 137). Això es deu al
fet que s’hi van identificar restes muràries d’una
cabana indígena, de manera que van considerar
que correspondria a un abandonament i enderroc
del II aC. Tot i això, tampoc s’hauria de descartar
que es tractés d’un enderroc produït en el moment
38
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
de la urbanització romana d’aquest espai, prèvia
a l’anivellament del terreny (nivell V) per a la successiva edificació dels primers edificis. L’assignació d’una cronologia a aquest nivell és difícil, ja
que només es van estudiar els vernissos negres i
no el context complet. Destaca la producció de la
Campaniana A (58,93 %) sobre les produccions de
la B (39,39 %).2 No s’hi han identificat individus ni
de la C ni imitacions de vernissos negres en pasta
grisa (Sanmartí et al. 1996, 67). La seva cronologia no es pot precisar millor perquè no es van publicar la resta de materials del context.
El nivell V es va identificar com el primer nivell romà, segons els arqueòlegs que el van excavar, corresponent a l’anivellació del terreny. És on
retallen les rases de fonamentació dels primers
edificis de la zona. Pel que fa a la composició del
context ceràmic, destaquen les produccions de la
Campaniana B (58,33 %) sobre la A (30,88 %), i
hi apareixen també individus de la Campaniana
C (5,39 %) i les imitacions en pasta grisa (5,4 %)
(Sanmartí et al. 1996, 67), motiu pel qual ja ens situem en el segon quart de l’I aC (Principal i Ribera
2013, 120). Pel que fa a les Campanianes B i C, en
la publicació no es fa referència a les formes. Respecte a les imitacions en pasta grisa, destaquen
les formes Lamboglia (L)5-7, L1 i L10 (Sanmar-
tí et al. 1996, 68). Amb aquests materials també
hi van apareixen vasos de parets fines, ceràmica
comuna de cuina itàlica, llumetes delfiniformes,
vasos megàrics, àmfores Dressel 1A i una moneda de Cesse (Arribas, Tarradell i Woods 1973, 104;
Mattingly 1983, 260).
El nivell IV correspon a un nivell d’abandonament sobre el paviment. Pel que fa al material ceràmic, en relació amb els vernissos negres,
les produccions de la Campaniana B (60,76 %)
són majoritàries sobre la A (27,84 %). També hi
apareixen Campanianes C (3,16 %) i imitacions
en pasta grisa (8,23 %) (Sanmartí et al. 1996, 68).
Aquest estrat l’hem de situar ja en la segona mitat
del segle I aC, pel fet que en els nivells superiors
ja hi apareixen les primeres terra sigillata itàliques
(Arribas, Tarradell i Woods 1973, 105; Sanmartí et
al. 1996, 69), que comencen a fabricar-se entre el
50-40 aC i el 30 aC (Roca 2005, 84).
A sobre hi ha el nivell III, d’època d’August. Es
tracta d’un nivell d’abandonament que segella els
estrats republicans que hem explicat. En aquest
encara hi podem veure una gran quantitat del
material típic de l’època republicana. El que confirma que es tracta d’un context del període del
Principat són les terra sigillata itàliques, les llumetes de volutes (Morillo y Rodríguez 2008, 410) i
FIGURA 3. Contextos republicans de l’àrea del fòrum: l’Habitació Z i el pou D-18. Extret de: Munar, Cau i
Chávez 2016, 14. Edició pròpia.
2. Aquests percentatges i la resta de presents en el text són els que apareixen en les publicacions.
ELS CONTEXTOS REPUBLICANS DE LA CIUTAT ROMANA DE POLLENTIA (ALCÚDIA, MALLORCA)
les àmfores Dressel 7 (Arribas, Tarradell i Woods
1973, 105). També hi aparegué un denari datable
entre el 15 aC i el 10 dC (Sanmartí et al. 1996, 69).
3. L’àrea del fòrum: l’Habitació Z de l’insula
de tabernes
L’Habitació Z, situada a l’oest d’aquest edifici, ofereix una seqüència estratigràfica de tres
contextos republicans segellats per un paviment
d’època d’August (figura 3).
El nivell més antic correspon a l’anivellació del
terreny prèvia a la construcció de l’edifici. Hi trobem una gran quantitat de material indígena. No
s’hi ha documentat ceràmica de vernís negre, però
sí vasos de parets fines, per la qual cosa podem
suposar que sí que apareixeran aquestes produccions. Un altre indicador del fet que es tracta d’un
estrat romà és la presència de ceràmica comuna
de cuina de procedència itàlica. També s’hi ha
identificat ceràmica comuna i àmfores punicoebusitanes (Mancilla 2004, 101).
El següent nivell correspon a la preparació del
paviment de l’Habitació Z, associat als murs. En
aquest estrat sí que hi apareixen vernissos negres,
tot i que la ceràmica indígena segueix essent la
predominant. També hi apareix ceràmica comuna itàlica, parets fines i ceràmica punicoebusitana. Una altra vegada els vernissos negres són les
úniques produccions estudiades d’aquest context;
destaca la A (88,8 %) sobre la B (11,1 %) (Mancilla
2004, 142). Els vasos de parets fines corresponen
a la forma Mayet 2. Pel que fa a les àmfores, es
van identificar sis individus de Dressel 1B encaixats dins la preparació del paviment, per la qual
cosa s’ha arribat a la conclusió que aquesta habitació hauria pogut funcionar com a taberna (Orfila 2000, 95; Mancilla 2004, 142). Pel que fa a la
cronologia, correspon a la primera mitat de l’I aC,
ja que no tenim elements que ens puguin datar-lo
en el segon quart de l’I aC (com serien les Campanianes C o les imitacions en pasta gris). El que ens
indica que es tracta d’un context de l’I aC és que
les Campanianes A són de la variant tardana.
El darrer nivell republicà correspon a l’abandonament d’aquest espai, previ a la reforma
d’època d’August. Correspon a la segona mitat de
l’I aC, perquè en les capes superiors s’hi van identificar tres fragments de terra sigillata itàlica. Pel
que fa als vernissos negres, les produccions de la
A i la B són similars (49,1 % i 50 %). El 0,9 % restant correspon a imitacions en pasta grisa. Dins
la B, destaca un individu de L7 de la producció
etrusca, molt freqüent a partir de mitjans de segle I aC (Principal i Ribera 2013, 63). Les formes
de les parets fines corresponen a Mayet 2, Mayet
39
1 i Mayet 3b, també típica de mitjans de l’I aC
(López 1989, 110; López 2008, 132), i la llumeta
Ricci G, de la mateixa cronologia (Mancilla 2004,
144).
4. L’àrea del fòrum: el pou D-18
Es tracta del rebliment (abandonament) del
pou situat en l’Habitació C, a l’est de l’insula de tabernes. L’estructura ve segellada per un paviment
d’opus signinum datat en la segona mitat de l’I aC,
ja que hi apareix la forma Conspectus 1.1 de les
terra sigillata itàliques (Equip Excavació Pollentia
1993, 227).
D’aquest context destaca la gran quantitat de
vernissos negres. Les produccions de la B (62,73 %)
són més abundants que les de la A (33,63 %). El
3,63 % restant són les Campanianes C i imitacions
en pasta grisa. Dins les parets fines, hi trobem la
forma Mayet 3a (Equip Excavació Pollentia 1993,
232), típica de mitjans de segle I aC. També hi apareixen ceràmiques comunes i àmfores itàliques i
púniques de diverses procedències. Destaca una
llumeta Ricci G, que ens situa en la segona mitat
de l’I aC (Equip Excavació Pollentia 1993, 240).
5. Bibliografia
ARRIBAS, A.; TARRADELL, M.; WOODS, D. E. 1973:
«Pollentia: I, Excavaciones en Sa Portella, Alcúdia (Mallorca)», Excavaciones Arqueológicas
en España, 75.
EQUIP D’EXCAVACIÓ DE POLLENTIA 1993: «Un conjunt
de materials d’època tardorepublicana de la
ciutat romana de Pollentia (Alcúdia, Mallorca)», Pyrenae, 24, 227-267.
LÓPEZ, A. 1989: Las cerámicas romanas de paredes
finas en Cataluña, Barcelona.
– 2008: «Las cerámicas de paredes finas en la fachada mediterránea de la Península Ibérica y
las Islas Baleares» a: Casasola, D.; Ribera, A.;
Lacomba (coord.), Cerámicas hispanorromanas: un estado de la cuestión, Cadis: 343-383.
MAENA, M. J.; PIÑERO, F. 1998: Estrabón. Geografía.
Libros III-IV, Madrid.
MANCILLA, M. I. 2004: «La vajilla de Barniz Negro
de Pollentia: la Habitación Z», Arqueología y
Territorio, 1, 135-153.
MATTINGLY, H. 1983: «Roman Pollentia: Coinage
and History», a: ARRIBAS, A.; TARRADELL, M.;
WOODS, D. E (ed.), Pollentia: 3, Estudio de los
materiales, 1, Sa Portella, excavaciones 19571963, Palma, 245-301.
MORILLO, A.; RODRÍGUEZ, G. 2008: «Lucernas hispanorromanas», a: BERNAL, D.; RIBERA, A. (co-
40
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
ord.), Cerámicas hispanorromanas: un estado
de la cuestión, Cadis, 407-428.
MUNAR, S.; CAU, M. A.; CHÁVEZ, M. E. 2016: «Las
excavaciones en el Edificio A, Macellum en el
Foro de Pollentia. Campaña de 2016», a: CAU,
M. A; CHÁVEZ, M. E. (coord.), Excavaciones arqueológicas en Pollentia (Alcúdia, Mallorca):
Campaña de 2016, Alcúdia, 13-118.
ORFILA, M. 2000: El fòrum de Pollentia: memòria de
les excavacions realitzades entre els anys 1996 i
1999, Alcúdia.
– 2005: «La vajilla de barniz negro y la ciudad romana de Pollentia (Alcúdia, Mallorca)», Verdolay, 9, 127-140.
PRINCIPAL, J.; RIBERA, A. 2013: «El material más
apreciado por los arqueólogos. La cerámica
fina. La cerámica de barniz negro», a: RIBERA,
A. (coord.), Manual de cerámica romana. Del
mundo helenístico al Imperio Romano, Madrid,
43-146.
ROCA, M. 2005: «Terra sigillata itálica», a: ROCA,
M.; FERNÁNDEZ, M. I. (coord.), Introducción al
estudio de la cerámica romana. Una breve guía
de referencia, Màlaga, 82-113.
SANMARTÍ, J.; PRINCIPAL, J.; TRIAS, M. G.; ORFILA, M.
1996: Les ceràmiques de vernís negre de Pollentia, Barcelona.
VALLORI, B. 2012: «Urbanisme i Arquitectura pública a la ciutat romana de Pollentia (Alcúdia,
Mallorca). Segles II a. C. - III d. C.», tesi doctoral
de la Universitat de Barcelona, Barcelona.
VEGAS, M. 1973: Cerámica común romana en el Mediterráneo Occidental, Barcelona.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
41
LA TERRA SIGILLATA ALTOIMPERIAL DEL YACIMIENTO DE
LA MAGDALENA (ALCALÁ DE HENARES, MADRID): ANÁLISIS
COMPARATIVO DE DOS NIVELES ESTRATIGRÁFICOS
FERNANDO MORA RODRÍGUEZ1
1. Introducción
El yacimiento de La Magdalena (Alcalá de Henares, Madrid) tiene una cronología muy amplia
que va desde el período calcolítico hasta época actual, y en él se han encontrado sendas necrópolis
de la prehistoria reciente (calcolítica-campaniforme y Edad del Bronce); un área industrial romana
altoimperial, a la que pertenece la estructura que
nos ocupa, junto con un área funeraria asociada;
una necrópolis de inhumación romana bajoimperial y tardorromana, junto con un área habitacional, que pervive hasta época tardoantigua, a la
que se asocia una nueva área funeraria asociada a
un grupo familiar; y por último un área estructural de épocas moderna y contemporánea (Heras,
Bastida y Corrales 2013, 385).
En este trabajo se exponen los resultados del
análisis tipológico y estadístico de la TSH, hallada
en dos niveles de cronología altoimperial concretos. Ambos forman parte de un basurero generado
por la desecación de un arroyo natural presente
en la zona y empleado para canalizar sus aguas,
en relación con las actividades industriales que se
llevaban a cabo.
El primero de los niveles (5412), el más superficial, tiene una cronología de 60-90 d. C., y presenta, aparte del material altoimperial, otros materiales esporádicos, revueltos y dispersos, más
tardíos. De entre estos, destaca una moneda de
Claudio II el Gótico.
El segundo de ellos (5415), más temprano, tiene una cronología de 30-70 d. C., y la fecha ante
quem la aporta una moneda de Tiberio hallada en
el mismo.
Al observar la TSH de ambos niveles, se aprecia que tanto pastas como decoraciones coinciden
con los característicos de los centros alfareros
1. Universidad Complutense de Madrid - fermora@ucm.es
tritienses y el de Uxama. En el caso de los primeros, se conoce que talleres como el de Tritium
Magallum tuvieron una difusión de sus productos
muy amplia, que comprendía toda la península
Ibérica, llegando hasta la Mauritania Tingitana
(Romero 2015, 166). En cambio el taller de Uxama funcionaba como un centro secundario y su
producción tenía una menor difusión, extendiéndose por la cabecera y la cuenca media del Duero, el valle del Jalón y, ya en menor medida, la
zona oriental de la Meseta Sur. En la provincia de
Madrid se han encontrado producciones de este
taller en el yacimiento romano de Villamanta y
en la ciudad de Complutum, estrechamente relacionada con el yacimiento de La Magdalena (Romero 2015, 186).
En cuanto a la cronología, no se aprecia una
variabilidad clara y ambas vajillas son bastante
homogéneas, albergando formas cuyo periodo
de fabricación enmarca y supera las cronologías
aportadas para cada uno de los mismos, como es
el caso de las formas lisas 15/17 y 27, entre otras,
cuya producción se extiende hasta el siglo III d. C.
(Romero 2015, 170). Exceptuando la forma 29,
que dejó de producirse a finales de siglo I d. C.
en favor de la producción de la TSH 37 (Romero
2015, 173).
2. Nivel 5412
Este es el nivel superficial de los dos en estudio. Cuenta con un total de 467 fragmentos, donde un 49 % son cuencos, un 19 % platos, un 9 %
vasos, un 2 % jarras y un 2 % tapaderas. Como
se puede observar, se cuenta, prácticamente, con
la vajilla completa de terra sigillata hispánica, y
forman parte del mismo las formas más típicas.
42
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Carrer Porticat en
l’àrea de Sa Portella. Extret
de: Vallori 2012, 141. Edició
pròpia.
Los cuencos son los mejor representados del
conjunto, con un 49 % de la muestra, siendo la
TSH 37 (35 %) la forma con mayor presencia.
Los platos, por otra parte, suponen un 19 % de
la muestra, siendo la forma mejor representada la
TSH 15/17 (13 %).
Por último, los vasos suponen un 8 %, pero es el
grupo con mayor variedad tipológica de la muestra,
y la forma mejor representada es la TSH 27 (3 %).
Destaca la presencia de la única 24/25 de ambos niveles y de una Hisp. 81, una forma proveniente de los talleres de La Graufesenque, no muy
común en su variante hispánica, ya que únicamente se han encontrado ejemplos en Tricio y Numancia (Romero 1983, 120).
3. Nivel 5415
FIGURA 2. Secció del carrer Porticat. Extret de:
Arribas, Tarradell i Woods 1973, 109. Edició pròpia.
El nivel 5415, el más temprano de los dos en
estudio, cuenta con un total de 1.200 fragmentos;
un 27 % de los mismos son cuencos, un 9 % platos, un 9 % vasos, un 1 % jarras y un 1 % tapaderas. Al igual que en el caso del nivel anterior,
volvemos a contar con la vajilla completa de TSH,
que presenta las formas más comunes.
Los cuencos son los mejor representados con
un 27 %, y nuevamente la TSH 37 (16 %) es la
forma mejor representada.
FIGURA 3. Contextos
republicans de l’àrea del
fòrum: l’Habitació Z i el pou
D-18. Extret de: Munar, Cau
i Chávez 2016, 14. Edició
pròpia.
LA TERRA SIGILLATA ALTOIMPERIAL DEL YACIMIENTO DE LA MAGDALENA (ALCALÁ DE HENARES, MADRID): ANÁLISIS COMPARATIVO DE DOS NIVELES ESTRATIGRÁFICOS
En segundo lugar, los platos representan un
9 % de la muestra, y la forma mejor representada
es la TSH 4 (4 %).
Por último, el grupo de los vasos representa un
9 % de la muestra, con la TSH 27 (5 %) como la
forma mejor representada.
Cabe destacar que el porcentaje de platos y de
vasos es coincidente, pero el grupo de vasos tiene
una mayor variedad tipológica.
43
configurarían la vajilla de terra sigillata hispánica
altoimperial, y que estaría en uso durante ese período de tiempo en el yacimiento de La Magdalena, lo que nos aporta datos para conocer mejor
la vida de los trabajadores del centro productor y
sus relaciones comerciales con la ciudad de Complutum.
5. Bibliografía
4. Conclusiones
Tras haber analizado ambos niveles, tanto tipológica como estadísticamente, hemos observado diversas características comunes entre ambos:
El mayor porcentaje pertenece en ambos casos
a la forma TSH 37, muy generalizada.
El porcentaje más representado a nivel formal,
con diferencia, es el de los cuencos, lo que nos
da idea del tipo de uso dado, en muchas ocasiones relacionados con la dieta que podrían seguir,
orientada más hacia los líq uidos, gachas, etc.
Platos y vasos están menos representados, pero
se puede observar una mayor variedad tipológica,
y el porcentaje de vasos se mantiene en ambos niveles.
Como hemos podido observar, en ambos niveles nos encontramos las formas más típicas que
HERAS, C. M.; BASTIDA, A.; CORRALES, R. 2013: «El
yacimiento de “La Magdalena II”: un centro
alfarero romano del siglo I de nuestra era en
Alcalá de Henares (Madrid)», en: BERNAL, D.;
JUAN, L. C.; DÍAZ, J. J.; SÁEZ, A. M. (eds.), Monografías ex officina hispana I: Hornos, talleres y
focos de producción alfarera en Hispania, I, Universidad de Cádiz, Cádiz, 385-397.
ROMERO CARNICERO, M.ª V. 1983: «Aspectos formales de la sigillata hispánica», BSAA, 49, Universidad de Valladolid, Valladolid, 105-134.
– 2015: «La terra sigillata hispánica: producciones
del área septentrional», en: FERNÁNDEZ OCHOA,
C.; MORILLO, A.; ZARZALEJOS, M. (eds.), Manual
de cerámica romana II: Cerámicas romanas de
época altoimperial en Hispania. Importación
y producción, Colegio de Arqueólogos de Madrid, Madrid, 149-229.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
45
EL FORN DE CAL SALISI (VERDÚ): RESULTATS PRELIMINARS
DE L’ESTUDI CERÀMIC
JÚLIA COSO ÁLVAREZ1, JUDITH PEIX VISIEDO1,
RAMÓN CARDONA COLELL2, JOSEP M. SALISI CLOS3
1. Introducció
El present estudi ha tingut com a objectiu
l’anàlisi del conjunt de materials recuperats en
el denominat Forn de Cal Salisi, de possible cronologia medieval. L’excavació del forn va permetre la documentació de diversos nivells i la
recuperació de materials ceràmics, alguns dels
quals presentaven una tipologia aparentment
no documentada fins al moment a Catalunya.
Aquests han estat estudiats per tal de poder deduir la funcionalitat tant dels materials com del
forn, especialment dels que hem denominat “suports”.
2. La vila de Verdú: un centre ceramista excepcional
El forn de Cal Salisi se situa a la vila de Verdú
(Urgell, Catalunya). Va ser identificat al pati d’una
de les cases del poble, situada al carrer de Santa
Magdalena, dintre de l’antiga muralla medieval,
zona denominada Vila Closa.
La vila de Verdú és coneguda per la seva tradició terrissaire i per la producció de la ceràmica
negra verdunina. Els forns documentats a la vila
presenten una tipologia moruna, nom que deixa
entreveure un origen àrab, però també estarien
influenciats pels antics forns ibèrics i romans de
flama directa i dues cambres (Sempere 1992).
FIGURA 1. Situació de la vila de Verdú, a Tàrrega (Catalunya). Al mapa, situació del forn al carrer de Santa
Magdalena.
1. ARQUB/GRACPE. Universitat de Barcelona. Departament de Prehistòria i Arqueologia - jcosoalv@gmail.com
2. Centre d’Estudis Lacetans
3. Universitat Autònoma de Barcelona
46
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
La primera constància escrita sobre l’existència
de terrissaires a Verdú data del segle XV, i fa referència a la família Guasch, un membre de la qual
consta el 1486 com a figul –terrisser–, el qual tenia
l’obrador extramuralles (Boleda i Cardona 2014).
Tanmateix, la primera menció sobre la presència
d’un forn ceràmic a la vila procedeix del Llibre de
les Estimes del 1549, en el qual se citen els primers
forns, tots fora de muralles (Salisi, inèdit). D’altra
banda, se sap que a principis del segle XVIII els ceramistes de Verdú estarien associats a una confraria, ja que es van registrar diversos sectors de
terra on els cantirers extraurien l’argila en comú
(Albareda 1984, 12). Durant aquest segle es va
viure un període d’esplendor respecte a l’ofici de
la terrisseria, i s’han arribat a documentar fins a
trenta terrissers a la vila (Boleda i Cardona 2014).
3. El forn
La primera dada sobre l’existència del forn es
remunta a la Guerra Civil, quan Ramon Salisi i
Cos i Lluís Salisi i Sambola, propietaris de la casa
on es troba el forn, van decidir construir un refugi
per protegir-se dels bombardejos franquistes del
1938. Fins al 1977 no es va tornar a tenir constància del forn, moment en què es van fer obres al
pati de la casa i es va retrobar. Part de la volta de
l’olla i de la volta del coll del forn es van destruir
per anivellar el sòl del pati, de manera que ha quedat sepultat fins a l’actualitat (Salisi, inèdit).
El 2016 es va iniciar el procés d’excavació i recuperació del forn. Es va seguir una metodologia
estratigràfica que permetia atribuir els materials
als diferents nivells registrats. Es va concloure
que es tractava d’un forn de tipologia moruna de
ceràmica negra, que presentava una orientació
de sud a nord en sentit paral·lel a la muralla, a la
qual s’adossava. Es van identificar tres nivells estratigràfics: el nivell superior presentava restes de
runa i fragments de totxana; el segon nivell presentava terra compactada, grava i fragments de
tova; i, finalment, el nivell inferior estava format
per runa i ceràmica trossejada i es trobava tocant
a la roca mare. Es va recuperar ceràmica als tres
nivells, però sobretot al nivell arran de sòl (Salisi,
inèdit).
4. Resultats
S’han inventariat un total de 402 individus recuperats al nivell inferior del forn, entre els quals
s’han pogut diferenciar 288 informes i 114 formes. La majoria de ceràmica recuperada, 388 individus, correspondrien a la coneguda ceràmica
negra. D’altra banda, 14 individus correspondrien
a ceràmica vidrada. Si centrem l’estudi en la ceràmica negra, destacaria la tipologia que correspon
als sellons –d’una nansa a la part superior i casquet esfèric, amb un broc petit i un de gran– i els
cànters –de dues nanses i de mida més gran, amb
un broc petit i vora a la part superior.
Finalment, cal destacar la producció dels considerats com a suports de forn en el present estudi. Respecte a aquests, s’han pogut identificar dos
subtipus diferents: piramidals i massissos (tipus
A) i cilíndrics i buits per dins (tipus B). Ambdues
tipologies són peces de cocció reductora i realitzades a torn, malgrat presentar alçades i diàmetres
lleugerament diferents.
5. Discussió dels resultats
L’encara primerenc estudi tipològic ha permès
deduir que es tractaria d’un forn funcional que es-
FIGURA 2. Procés d’excavació del forn. Esquerra: identificació de la volta del forn i parts que es van trobar
fragmentades. Centre: el forn un cop feta l’excavació de tots els nivells i la corresponent documentació.
Dreta: estratigrafia en què apareixen els tres nivells documentats. El nivell inferior correspon a l’estrat amb
més restes ceràmiques aparegudes, i sobre les quals s’ha focalitzat el present estudi.
EL FORN DE CAL SALISI (VERDÚ): RESULTATS PRELIMINARS DE L’ESTUDI CERÀMIC
47
FIGURA 3. Fotografies
d’algunes de les peces
estudiades. 1: selló. 2:
fragments de broc. 3:
fragments de nansa de
cànter. 4: fragments de
nansa de selló. 5: suport
de forn a tipus A. 6:
suport de forn tipus B.
FIGURA 4. Exemple de
materials estudiats al
treball. Corresponen
a bases de cànters i
sellons, a nanses de
cànters, a nanses de
sellons, a brocs i vores, i
als suports de tipologia
A i de tipologia B.
taria produint la tradicional ceràmica negra verdunina: cànters i sellons per a l’emmagatzematge
i el consum d’aigua, destinats al consum local.
S’ha pogut associar la tipologia de les peces a produccions del segle XV-XVII; tot i això, considerem
que es tractaria de material que reompliria el forn
un cop amortitzat. Per contra, l’escassa ceràmica vidrada correspondria a importacions d’altres
regions properes, possiblement Lleida o València.
Respecte als suports de forn, se’n desconeix la
funcionalitat, però s’han pogut extreure unes primeres hipòtesis relacionades amb el context arqueològic, l’estudi tipològic i la cerca de paral·lels.
Podria tractar-se d’objectes relacionats amb la
cocció: són ítems amb un aspecte groller sense
decoració, que estarien pensats per suportar altes
temperatures i per subjectar i separar les ceràmiques durant la cocció.
Fins al moment no s’han trobat paral·lels a
l’àrea catalana que corresponguin a aquest tipus
de peces, tot i que sí que se n’han trobat en altres regions de les àrees peninsular i europea. Un
dels exemples prové del Museo de la Cerámica del
País Vasco, en el qual s’han identificat les anomenades tacas, estanteries per col·locar-hi ceràmica
durant la cocció, que s’aguantarien amb els bodo-
48
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
ques, uns cilindres que s’assimilarien als suports
presentats (Ibabe 2002), i que s’utilitzarien encara
avui en dia. Un segon paral·lel es troba a la zona
andalusa, a l’excavació d’època moderna del Jardín de Cano (Cadis), on s’han documentat els anomenats birlos, uns suports cilíndrics que servirien
per apilar ceràmica al forn (López i Ruiz 2012).
Finalment, caldria destacar l’existència dels denominats kiln props o kiln supports, documentats
al forn medieval d’Audlen –Chestine, Anglaterra–
(Graham i Dunning 1960), i a les excavacions
de Colstoun –East Lothian– (Brooks 1978; Hall
2004), que correspondrien a bases cilíndriques
per coure la ceràmica.
Finalment, si ens centrem en la cronologia d’ús
i amortització del forn, cal tenir en compte que no
apareix citat en el Llibre de les Estimes ni en documents posteriors. En conseqüència, es pot deduir
que podria ser anterior al 1549, i durant el segle
XVI-XVII ja estaria inactiu. A més a més, es tracta
d’un dels dos únics forns documentats dins la Vila
Closa, construïda a partir del segle XIII. A partir del
segle XV es troben tots els forns registrats a l’àrea
del Raval, ja que l’augment de la població, així
com el risc i les molèsties que causaven els forns,
propiciaren que s’instal·lessin lluny del recinte emmurallat. Es podria pensar que al segle XV el forn
ja devia estar en desús, i establiríem així una presumpta cronologia d’ús entre els segles XIII i XV.
6. Conclusions
La producció de ceràmica negra a la vila de
Verdú és un fet que no només es documenta arxivísticament, sinó també a partir de l’arqueologia,
com ha quedat palès en el present treball. En
aquest aspecte, cal destacar la presència dels suports de forn com una tipologia ara per ara no
documentada a l’àrea catalana, fet que obre noves
qüestions sobre com van arribar a formar part de
l’utillatge d’un ceramista de Verdú.
D’altra banda, una de les incògnites que es podran resoldre a mesura que continuïn els estudis
és en quin moment exacte va deixar de funcionar
el forn. Tot i això, la troballa de ceràmica blava i
verda d’època moderna ens permet establir una
datació post quem que coincideix amb el segle
XVII. D’aquesta manera, l’estudi comparatiu amb
altres forns i materials ceràmics medievals i moderns de l’àrea catalana, així com l’ampliació del
camp d’estudi a altres àrees de Verdú, permetran obtenir noves dades de rellevància, tenint en
compte que s’ha d’entendre aquesta vila com un
centre productor de certa complexitat, on la ceràmica negra verdunina va marcar unes dinàmiques
comercials i econòmiques a la regió.
7. Bibliografia
ALBAREDA I ESTADELLA, M.ª C. 1984: «Notes històriques sobre la terrissa i els terrissaires verdunins», tesi dirigida per Joan Moncada i Planas,
Universitat de Barcelona, Facultat de Belles
Arts.
BOLEDA, R.; CARDONA, R. 2014: La ceràmica negra
de Verdú. Cantirers i terrissaires, Sant Martí de
Maldà, Grup de Recerques de les Terres de Ponent, col·lecció Cum Laude.
BROOKS, C. M. 1978: «Medieval pottery from the
kiln site at Colstoun, E. Lothian», Proceedings
of the Society of Antiquaries of Scotland, 110,
364-403.
GRAHAM, W.; DUNNING, G. C. 1960: «A medieval pottery kiln at Audlem, Chesehear», Journal of the
Society for Medieval Archaeology, 116.
HALL, D. W. 2004: «Excavations and the pottery
production center of Colstoun, East Lothian
1939, 1069, 1971, 1977, and 1999/2000», Medieval Ceramics, 28, 54-59.
IBABE, E. 2002: «Zeramika Herrikoia Gipuzkoan»,
Bertan, 19, Departamento de Cultura, Euskera,
Juventud y Deportes, ed.
LÓPEZ, E.; RUIZ, J. A. 2012: «El alfar de época moderna del Jardín de Cano (El Puerto de Santa
María) y las producciones cerámicas de la Bahía de Cádiz entre los siglos XVII y XVIII», Revista
de Historia de El Puerto, 48, 9-67.
SALISI, J. M. [s. d.]: «L’antic forn de Cal Salisi: destacada aportació a la història i al coneixement
de la ceràmica negra de Verdú» [inèdit].
SEMPERE, E. 1992: «Catalogación de los hornos de
España y Portugal», a: Tecnología de la cocción
cerámica desde la antigüedad a nuestros días,
226.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
49
L’ÚS DE LA MICROSCÒPIA ELECTRÒNICA DE RASTREIG
(MER) EN L’ESTUDI DELS VIDRATS DE LES CERÀMIQUES
D’ÈPOCA MODERNA. EL CAS DE BARCELONA I TALAVERA
DE LA REINA ALS SEGLES XVII I XVIII: LES DIFERÈNCIES
ENTRE LA CERÀMICA DE LUXE I LA CERÀMICA COMUNA
JUDITH PEIX VISIEDO1,2
1. Introducció
2. Els centres productors
L’estudi sobre la producció dels vidrats en època moderna permet incidir en aspectes històrics,
socials, culturals i econòmics. La producció d’un
determinat vidrat pot parlar no només de tradicions i tècniques, sinó també de finalitats: no seria
el mateix produir una ceràmica destinada a un
comerç no local que encarada a una activitat quotidiana, ja que els materials i les maneres de fer
serien totalment diferents.
En aquest aspecte, el present treball ha tingut
l’objectiu d’analitzar les tendències en la tècnica
de produir vidrats de dues produccions diferents:
la ceràmica majòlica policroma i la ceràmica comuna policroma. De la primera destaca la qualitat i la seva comercialització no només per la
Península sinó també a les Amèriques: era una
ceràmica amb unes pastes clares i uns vidrats en
què predominaven els tons blancs, blaus, taronges o grocs. La segona era una ceràmica destinada a la quotidianitat, amb unes tonalitats més
fosques.
L’aplicació de tècniques arqueomètriques hauria de permetre identificar dues produccions que
visualment es distingeixen, i entendre el com de
la seva producció. El material estudiat s’inclou
dintre del projecte TECNOLONIAL (HAR201675312-P), dirigit pel Dr. Jaume Buxeda i Garrigós,
de la Universitat de Barcelona. L’objectiu del projecte és aprofundir en aspectes relacionats amb
l’aculturació i les relacions que es generarien en
els processos colonitzadors, centrant l’interès en
la ceràmica produïda en època moderna entre els
segles XV i XVIII.
L’època moderna va ser el punt de partida de
viatges globals que en part són la causa del fet que
avui en dia estiguem interconnectats. Durant els
segles XV-XVIII van circular idees, persones, mercaderies, productes de luxe i ceràmica. Diverses
ciutats de la Península van esdevenir centres de
producció, entre les quals va destacar Sevilla –en
el marc de la Casa de Contratación (Sánchez Cortegana 1994)–, Talavera de la Reina, el País Basc
o Barcelona.
Aquests centres han estat estudiats en el marc
del projecte, focalitzant el present estudi en Talavera de la Reina i Barcelona. La primera va centrar
les seves produccions en una ceràmica de luxe: les
peces eren utilitzades per la monarquia hispànica i van ser distribuïdes per Europa i Amèrica, i
va esdevenir una de les ciutats productores més
importants (Martínez 1969). Barcelona també va
actuar com a centre productor en un moment en
què experimentava una transformació, convertida ja en un espai de comercialització i distribució
de productes estrangers (García i Espuche 1998),
centrant la seva atenció cap al Mediterrani i vers
les produccions locals.
Durant els últims anys s’ha dut a terme una
caracterització arqueomètrica de les ceràmiques
d’aquests centres: química –mitjançant difracció
de raigs X (DRX)–, mineralògica –mitjançant fluorescència de raigs X (FRX)– i estudiant la tècnica de producció dels vidrats, a partir de la microscòpia electrònica de rastreig (MER), tècnica
sobre la qual s’ha centrat el treball, amb l’objectiu d’identificar químicament els òxids metàl·lics
1. 1 ARQUB/GRACPE - jpeix@ub.edu
2. Universitat de Barcelona. Departament de Prehistòria i Arqueologia
50
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
causants de les diferents tonalitats de les decoracions dels vidrats, entenent, per tant, com es van
produir.
3. Resultats
Fins a l’actualitat hi ha una base de dades
d’un total de 98 mostres de Talavera de la Reina
analitzades per DRX i FRX i 36 per MER, i un total de 433 individus de Barcelona analitzats per
DRX i FRX (Buxeda et al. 2011) i 8 per MER. El
present estudi s’ha focalitzat sobre un total de 4
mostres de Talavera de la Reina corresponents
a ceràmica majòlica policroma, i un total de 4
mostres de Barcelona, de ceràmica comuna po-
licroma amb unes datacions compreses entre els
segles XVII i XVIII, que han estat analitzades per
MER.3 Totes les peces procedien de jaciments
arqueològics –excavacions de l’Alcazaba i l’Alberca (Talavera de la Reina), i excavacions a la
plaça Vila de Madrid, Sant Gil i la plaça Pau Vila
(Barcelona). La MER ha permès observar les peces a un gran nombre d’augments i identificar la
composició química dels vidrats i els pigments
que es van utilitzar per obtenir el color de les
decoracions.
Els colors que es van identificar macroscòpicament van ser el negre, el marró, el verd, el
taronja, el groc i el blau. La MER va permetre
identificar els òxids metàl·lics que havien generat els colors. El color negre es va identificar en
FIGURA 1. Color groc i negre. A l’esquerra, fotografies de les peces. La TAL094 correspon a una majòlica de
Talavera, mentre que la BCN283 correspon a una comuna de Barcelona. Al centre, imatges obtingudes per
MER corresponents al detector d’electrons retrodifosos. En el cas del groc es poden observar els cristalls
de Sb a la part superior del vidrat en el cas de la majòlica. Per contra, en la ceràmica comuna el pigment
es troba diluït en el vidrat. En el cas del negre no hi ha presència de cristalls, sinó que el Mn es troba diluït
en el vidrat en les dues produccions. A la dreta, espectre obtingut per MER amb l’element químic causant
de la tonalitat, en què la intensitat del pic és proporcional al nombre atòmic. En el cas del color groc es pot
identificar el pic de Sb a Talavera de la Reina (ceràmica majòlica); en el cas de Barcelona (ceràmica comuna),
Fe; i en el cas del negre, el de Mn.
3. Es va utilitzar un microscopi JEOL JSM-840 acoblat a un aparell de microanàlisi de fluorescència de raigs X (FRX)
per dispersió d’energies (EDX) INCA Analyzer Oxford. El voltatge d’acceleració emprat va ser de 20 kV, la intensitat en el
feix, d’1 nA, i el temps de comptatge en la microanàlisi, de 100 s.
L’ÚS DE LA MICROSCÒPIA ELECTRÒNICA DE RASTREIG (MER) EN L’ESTUDI DELS VIDRATS DE LES CERÀMIQUES D’ÈPOCA MODERNA...
ambdues produccions. En el cas de la ceràmica
majòlica policroma de Talavera de la Reina, es
va determinar que l’òxid de manganès (MnO) havia estat usat com a pigment per obtenir aquesta tonalitat. Les mostres presentaven uns valors
de manganès (Mn) al voltant de l’1,83 %, davant
d’un 22,56 % de plom (Pb) i un 26,86 % de silici
(Si). Aquest fet es repetia a la ceràmica comuna
de Barcelona. El Mn es presentava diluït i no era
apreciable a les imatges del detector d’electrons
retrodifosos, mentre que altres colors com el
groc sí.
En relació amb aquest color, es va identificar
tant a la ceràmica majòlica com a la comuna. En
el cas de la ceràmica majòlica, el color groc s’havia aconseguit a partir d’un antimoniat de plom
(Pb2Sb2O7), que presentava uns valors al voltant
del 14,69 % de Sb i el 30,99 % de Pb. Per contra, el
vidrat groc de la ceràmica comuna de Barcelona
s’havia fet amb ferro (Fe) a totes les peces analitzades, diluït en el vidrat sense formar cristalls. El
color verd també va ser identificat només en la ceràmica comuna de Barcelona, i s’havia aconseguit
a partir d’òxid de Fe (FeO) amb coure (Cu), amb
un valor del 3-4 % de Cu, diluït amb el vidrat i sen-
51
se formar cristalls. El color marró, només present
a la ceràmica comuna, presentava Fe diluït en el
vidrat.
Els dos últims colors identificats van ser el taronja i el blau, només presents a la ceràmica majòlica. El color taronja s’havia fet a partir de Sb
amb Fe i Mn, amb valors de Sb del 30 %, de Mn en
un 3 % i un 25 % de Pb. Per tant, a la base del color groc s’hi afegiria Mn i Fe per enfosquir aquesta
tonalitat. Com en el cas del groc, i per la presència
de Sb, es van poder visualitzar cristalls brillants.
Finalment, el color blau s’havia realitzat amb una
base d’òxid de cobalt (CoO), diluït en el vidrat. El
percentatge de Co era molt baix, cosa que fa pensar que amb poca quantitat es podia aconseguir
aquesta tonalitat.
4. Discussió dels resultats
La MER ha permès distingir dues tècniques
diferents d’aplicació del vidrat, corroborant allò
que macroscòpicament s’havia identificat. La
ceràmica majòlica de Talavera de la Reina es
tractava d’un grup amb matrius calcàries que
FIGURA 2. Color marró i verd. A l’esquerra, fotografies de les peces, corresponent a ceràmica comuna de
Barcelona. Al centre, imatges obtingudes per MER corresponents al detector d’electrons retrodifosos. En el
cas del marró no hi ha presència de cristalls, sinó que el Fe es troba diluït en el vidrat. En el cas del coure
tampoc formava cristalls. A la dreta, espectre obtingut per MER amb l’element químic causant de la tonalitat.
En el cas del marró s’hi pot identificar el pic de Fe, i en el cas del verd, el pic de Cu.
52
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 3. Color blau i taronja. Al centre, imatges obtingudes per MER corresponents al detector d’electrons
retrodifosos. En el cas del blau no hi ha presència de cristalls, sinó que el Co es troba diluït en el vidrat. En
el cas del taronja es poden apreciar els cristalls a la part superior del vidrat. A la dreta, espectre obtingut per
MER amb l’element químic causant de la tonalitat. En el cas del taronja s’hi aprecien els pics de Sb, Mn i Fe,
i en el cas del blau, els pics de Co.
aportaven una tonalitat clara a les peces, sobre
les quals s’aplicaven una sèrie de pigments amb
un gran cost econòmic (Co, Sb i Mn). Els vidrats
presentaven un gran nombre d’inclusions, sobretot de feldespat i quars, i bombolles. Tot això
indicaria que la voluntat era opacificar el vidrat
al màxim possible, i aconseguir unes superfícies
clares.
Per contra, la ceràmica comuna de Barcelona no presentava uns vidrats blancs i opacs sinó
amb tonalitats fosques, a excepció d’algunes zones grogues i verdes. Les pastes eren de tonalitat
marró i no blanques, i s’utilitzava una engalba
blanca entre la matriu de la peça i el vidrat en
aquelles zones en què es volia aconseguir una
tonalitat clara en el vidrat. Aquests eren més
nets, no presentaven quasi inclusions i estaven
realitzats principalment amb Fe, i Fe amb Cu a
les zones verdes; es tractava d’uns vidrats molt
econòmics.
Centrant-nos en l’engalba, va ser imperceptible
visualment per MER, i la seva composició química era la mateixa que la de la matriu de la peça.
De les quatre ceràmiques estudiades, només una
presentava l’engalba en la totalitat de la peça; les
altres tres només a les zones en què coincidia amb
el vidrat més clar. Es tracta de la peça BCN237,
corresponent al grup químic B2d, mentre que les
altres corresponien al grup C2; eren, per tant, dos
tallers diferents. Podríem ser davant de dues tècniques de producció de vidrats que ens parlarien
de dos tallers diferents, corroborant així les dades
químiques.
5. Conclusions
S’han pogut diferenciar visualment i químicament dues tècniques: la ceràmica majòlica,
utilitzant uns vidrats amb un gran nombre d’inclusions i pigments de gran cost, i la ceràmica
comuna, amb menys inclusions i pigments més
econòmics, substituint aquells òxids amb un
gran cost pel Fe. La ceràmica majòlica, per tant,
seria molt més cara de produir que la comuna de
Barcelona.
Aquest fet es pot relacionar amb la funcionalitat de les peces: d’una banda, la ceràmica majòlica
estava pensada per al comerç de luxe, destinat a
les altes esferes de la societat, i per tant no seria
d’estranyar l’ús de pigments cars. En canvi, Barcelona produiria una ceràmica destinada a l’ús
quotidià i no a les classes altes ni a un comerç no
local, i per tant la substitució dels pigments cars
pel Fe permetia aconseguir uns resultats òptims
amb uns costos més reduïts.
L’ÚS DE LA MICROSCÒPIA ELECTRÒNICA DE RASTREIG (MER) EN L’ESTUDI DELS VIDRATS DE LES CERÀMIQUES D’ÈPOCA MODERNA...
53
FIGURA 4. Engalbes identificades a la ceràmica comuna de Barcelona. A l’esquerra, fotografies de les seccions
polides, preparades per visualitzar a MER, que corresponen a dos grups químics diferents. La peça BCN237
correspon al grup químic B2d i presenta l’engalba en la totalitat de la peça. Com s’aprecia a les imatges del
centre per lupa binocular, l’engalba coincideix amb el vidrat a les zones amb tonalitats més clares, però en
zones amb vidrat més fosc s’hi incorporaria una engalba més fosca. La peça BCN283 correspon al grup
químic C2; com s’aprecia a les imatges per lupa binocular del centre de la imatge, l’engalba només correspon
a les zones amb vidrat de color clar. A la dreta de la imatge, fotografia per MER en què es va intentar
identificar visualment l’engalba, amb el seu corresponent espectre, que presentava la mateixa composició
química que la matriu de la peça.
6. Bibliografia
BUXEDA I GARRIGÓS, J.; IÑAÑEZ, J. G.; MADRID I FERNÁNDEZ, M.; BELTRÁN DE HEREDIA BERCERO, J.
2011: «La ceràmica de Barcelona. Organització i producció entre els segles XIII i XVIII a través de la seva caracterització arqueomètrica»,
QUARHIS. Quaderns d’Arqueologia i Història
de la Ciutat, 7, 192-207.
GARCÍA ESPUCHE, A. 1998: Un siglo decisivo: Barcelona y Cataluña, 1550-1640. Madrid, Alianza.
MARTÍNEZ CAVIRÓ, B. 1969: Cerámica de Talavera,
Instituto Diego Velázquez del CSIC, Madrid.
SÁNCHEZ CORTEGANA, J. M. 1994: El oficio de ollero
en Sevilla en el siglo XVI, Diputación Provincial
de Sevilla, Sevilla.
SECCIÓN 02. DIME DÓNDE VIVES Y TE DIRÉ QUIÉN ERES.
ÁMBITOS DOMÉSTICOS COMO ESPACIOS DE CONTACTO Y
TRANSFORMACIÓN
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
57
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN: DIME DÓNDE VIVES Y TE DIRÉ
QUIÉN ERES. ÁMBITOS DOMÉSTICOS COMO ESPACIOS DE
CONTACTO Y TRANSFORMACIÓN
JOSÉ MARÍA MORENO NARGANES1, TAMARA PEÑALVER CARRASCOSA2,
HACOMAR RUIZ GONZÁLEZ3, NAGORES SÁNCHEZ GARCÍA4,
MARIA TORRAS FREIXA4, OCTAVIO TORRES GOMARIZ5
El estudio del ámbito doméstico y de su registro arqueológico es un elemento clave a la hora de
abordar el amplio abanico de identidades asociadas al mismo, ya sean individuos, familia o grupo
humano. Se trata de un espacio que nos muestra
aspectos cotidianos de las sociedades del pasado
que van desde elementos más concretos, como la
ritualidad o la comensalidad, hasta análisis más
amplios, como las transformaciones y los cambios sociales o las actividades socioeconómicas
adscritas a estos espacios.
Recogiendo las ideas planteadas en otros años
y tras la experiencia obtenida en anteriores Jornadas de Jóvenes en Investigación Arqueológica,
nuestro objetivo como organizadores de sesión
era generar un espacio donde, mediante la diversidad de posturas, tanto teóricas como prácticas,
se apostara por buscar una visión general de los
espacios domésticos mediante un debate transcultural, interdisciplinar y diacrónico. La meta que
perseguíamos era que los ponentes plantearan el
estado actual de sus investigaciones, abordando
la arquitectura doméstica desde las perspectivas
más teóricas y conceptuales hasta el análisis material propiamente dicho, ya fuera este arquitectónico, constructivo, espacial o meramente decorativo.
Asimismo, planteamos un debate generado
a partir de la pluralidad conceptual de términos
como familia, casa o barrio, abordados tanto desde la óptica del investigador como de la propia comunidad a la que se adscriben dichos conceptos.
Esta discusión es relevante a la hora de entender
las transformaciones de estos espacios y las con-
secuencias socioeconómicas y mentales que se derivan. A menudo, estos procesos han sido abordados por la historiografía desde posiciones teóricas
muy concretas.
Por consiguiente, entendíamos que, desde un
enfoque más amplio, el debate posterior entre
participantes y oyentes debía ser más plural y permitir no solo plantear la heterogeneidad de las dinámicas socioculturales que se asocian a este tipo
de ámbitos, sino también extraer conclusiones
sobre los fenómenos de emulación, sincretismo
o resiliencia ligados a los procesos migratorios y
a las interacciones sociales y culturales entre las
diferentes comunidades humanas.
Debemos agradecer a los participantes de esta
sesión la presentación de modelos dispares pero
con un eje común clave, que no era otro que el
espacio doméstico. Estos ejemplos se inscribieron en un amplio marco temporal, ofreciendo
una visión transcultural de un mismo concepto.
Los temas expuestos fueron abordados desde el
mundo íbero al Al-Andalus, hasta presentaciones
circunscritas a la América precolombina (desde el
valle de Tucumán (Argentina) a la ciudad de Teotihuacan), o incluso al desarrollo de la arquitectura
doméstica circular desde una óptica muy amplia
a nivel geográfico, cronológico y cultural.
En conclusión, consideramos que los objetivos iniciales que motivaron la creación de esta
sesión fueron cumplidos con creces. De un lado,
se posicionó como marco de exposición para que
investigadores de diferentes universidades y con
estudios diversos pudieran presentar el estado actual de sus trabajos. Del otro, y no menos impor-
1. Dept. Prehistoria, Arqueología, Historia Antigua y Fil. Griega y Latina. Universidad de Alicante
2. Grup de Recerca en Arqueologia del Mediterrani (GRAM). Universitat de València
3. Equipo de investigación «Fenicios, púnicos y romanos en el Mediterráneo y el África Atlántica». Universidad de La
Laguna
4. Universitat de Barcelona
5. IUI en Arqueología y Patrimonio Histórico (INAPH). Universidad de Alicante
58
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
tante, fue posible alcanzar la participación tanto
de ponentes como de asistentes en una discusión
final que buscó abordar los diferentes conceptos
inherentes a la arquitectura doméstica. Asimismo, se cuestionaron algunas de las tendencias interpretativas relacionadas con estos espacios, ya
desfasadas o en visos de cambiar, como la idea de
la homogeneización arquitectónica en el mundo
romano, la existencia de un modelo mediterráneo de vivienda con patio que perviviría y continuaría en el mundo andalusí o la percepción de
que toda actividad económica desarrollada en
el ámbito doméstico sea interpretada como de
mantenimiento.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
59
LA ARQUITECTURA DOMÉSTICA COMO TESTIGO DE LOS
PROCESOS DE INTERACCIÓN SOCIOCULTURAL: EL CASO
DE LA DOMUS 1 DE LESERA (FORCALL, CASTELLÓN)
TAMARA PEÑALVER CARRASCOSA1,2
Uno de los casos paradigmáticos de las transformaciones derivadas de la interacción entre
romanos y poblaciones indígenas del territorio
valenciano es la Domus 1 de Lesera. La ciudad romana de Lesera, asentada sobre un oppidum ibérico, se encuentra ubicada en el yacimiento de La
Moleta dels Frares (Forcall, Castellón), en el extremo NO del territorio valenciano. Comunicada
con la vía Augusta, es la única aglomeración urbana de época romana conocida en tierras valencianas, al N de Saguntum. Se trata de una pequeña
ciudad, tanto por extensión como por monumentalidad, que debió de ser un importante nudo de
comunicaciones entre la costa y el valle medio del
Ebro. Seguramente obtuvo el estatuto jurídico de
municipio en la segunda mitad del reinado de Augusto, lo que implicó una intensa actividad edilicia y de monumentalización, que perdurará hasta
el siglo II d. C., cuando comenzaron los primeros
signos de abandono (Arasa 2009, 82-108; Arasa y
Ribera 2014, 86-88).
El espacio doméstico en cuestión está ubicado en una terraza rectangular de 120 m2, sobre la
que se construyeron sucesivamente tres casas, a
lo largo del periodo mínimo de 150 años (fig. 1).
La primera casa, edificada en las últimas décadas
del siglo I a. C., es un ambiente doméstico con paredes de piedras trabadas con barro, pavimentos
de tierra batida y una cubierta que no era de tejas.
Contaba con un porche en su parte delantera, y
FIGURA 1. Evolución planimétrica del espacio doméstico de Lesera (a partir de Arasa 2009, 63, fig. 45; 66,
fig. 50; 68, fig. 52).
1. Universitat de València - Tamara.Penalver@uv.es
2. El presente trabajo se inscribe dentro del programa de Formación de Profesorado Universitario (FPU) del Ministerio
de Educación, Cultura y Deporte (convocatoria 18/11/2013).
60
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
su planta estaba dividida en dos partes desiguales
por un muro con función estructural. Bajo el porche, en su lado S, se encontraron los restos de un
pequeño horno doméstico, mientras que en dos
de las habitaciones delanteras se encontraron hogares formados, al uso ibérico, por una plataforma de tierra cocida (Arasa 2009, 64-65; Arasa y
Ribera 2014, 96).
Esta casa se quemó a principios del siglo I d. C.
Los escasos fragmentos de material mueble recuperados son mayoritariamente de tradición ibérica, con algunas importaciones fechadas entre los
reinados de Augusto y Tiberio, lo que confirma el
carácter ibérico de la vivienda.
Sobre esta casa se construye la segunda y peor
conservada, datada entre las primeras décadas y
el último tercio del siglo I d. C. Se reorganizó la
planta abriendo un corredor de 2 m de anchura
y más de 5,60 m de longitud en su lado S. Posiblemente la fachada avanzó sobre la columnata
del porche, ganando superficie en la parte delantera. Se mantiene el empleo de materiales y técnicas constructivas de tipo ibérico (Arasa y Ribera
2014, 96).
En el último tercio del siglo I d. C. se edificó la
tercera y última casa. Es la mejor conservada y
la primera en que pueden distinguirse elementos
propios de la arquitectura romana, que permiten
asimilarla a una modesta domus. Sus cimientos se
asentaron sobre los restos de la anterior, manteniendo la morfología rectangular y la distribución
interna pero con algunas innovaciones, como una
cubierta de tegulae y pinturas murales. La puerta
de entrada da paso a un corredor al que se abre
una gran sala rectangular que, con sus 49,50 m2,
es la habitación más grande y lujosa de la casa.
Además, es la única estancia decorada con pintu-
ra mural y molduras de estuco, mientras que en
las otras solo se han encontrado restos de encalado, propios de las áreas funcionales (Arasa 2009,
68-71; Arasa y Ribera, 2014, 96-97) (Fig. 2.).
Esta domus es un ejemplar muy valioso dentro de nuestro estudio, ya que nos permite observar cómo en una casa modesta se ha realizado
una inversión económica y espacial considerable
en una sola estancia de representación (2), lo que
destaca la voluntad de propaganda y reafirmación de estatus propias de la esfera privada romana (Uribe 2009, 153-154). En efecto, su posición
dentro de la vivienda, siendo el espacio más accesible desde la entrada, su amplio umbral (2 m de
luz), sus dimensiones y su morfología rectangular abierta por su lado breve, la identifican como
una estancia de representación. Sus dimensiones (49,50 m2) superan las medidas indicadas
por Dunbabin (1991, 123-124) para los ejemplos
pompeyanos, con una media de 6 x 4 m, y se encuentran más cercanas al tamaño medio de un
triclinium indicado por Meyer (1999, 114), entre
40-60 m2. Dentro de las ciudades romanas encontradas en territorio valenciano, esta sala excede
las dimensiones de otras domus con un aparato
ornamental y planimétrico más suntuoso, como
la estancia 7 de la Domus dels Peixos (Saguntum)
(Antoni 2010, 77-85) o el triclinium de la Domus
5F d’Ilici (Ramos Fernández 1991, 76-77). Al final
del corredor se encuentra una cocina-despensa
(3), con un hogar rectangular de ladrillos cocidos,
adosado al muro N de la estancia (Arasa 2009,
68-73). Encontramos paralelos a este hogar en la
taberna 10 de la Domus I de Bilbilis y en la Casa
de los Morillos de Iuliobriga (Uribe 2008, 602).
Este tipo de hogar se correspondería con el tipo
1, definido por Foss (1994, 78-80) para las domus
FIGURA 2. Fragmentos de pintura mural y estuco de la Domus 1 (Lesera) (Arasa 2009, 72, fig. 56).
LA ARQUITECTURA DOMÉSTICA COMO TESTIGO DE LOS PROCESOS DE INTERACCIÓN SOCIOCULTURAL: EL CASO DE LA DOMUS 1 DE LESERA (FORCALL, CASTELLÓN)
FIGURA 3. Domus 1 (Lesera) (a partir de Arasa 2009,
68, fig. 52).
pompeyanas como el tipo de hogar más común.
Se trata de estructuras planas de mampostería,
coronadas con una capa de baldosas de morfología variada. El acceso a la vivienda, directamente
en eje axial con este espacio, no impediría que los
invitados pudieran ver el interior de este ambiente de servicio. Todas estas características tienen
una implicación social, pues no nos encontramos frente a una casa propia de la élite, donde
el cuidado por la separación de espacios sería
más obvio (Fig. 3). Los espacios 4 y 5 podrían
ser cubicula, ya que sus reducidas dimensiones,
su morfología cuadrangular y su inaccesibilidad
convierten a estas estancias en espacios ideales
para el descanso.
Aunque la imagen generalizada de la casa romana gira en torno a atrios, peristilos y patios
porticados, los espacios domésticos más humildes
se articularán mediante corredores, apartamentos, locales, trastiendas y entresuelos (Fernández
2002, 697). Encontramos ejemplos de pasillos con
función distribuidora en la Casa de la Escalera y
la Casa 18 (Emporiae). Uno de los paralelos más
claros es la Casa 35 de Emporiae, organizada en
torno a un pasillo que conducía a las salas del
fondo de la parcela, de carácter polifuncional,
mientras que las más cercanas al acceso desarro-
61
llaban funciones de representación (Uribe 2008,
269-286).
Por tanto, la definimos como domus de corredor, ya que este hace las veces de espacio redistribuidor, dando acceso a dos conjuntos netamente
diferenciados: la sala de representación, como
área pública (communia cum extraneis), que acogería toda clase de ceremonias de recepción y de
convivium, y un conjunto de espacios funcionales
y privados (propia loca patribus familiarum). De
todos modos, la distribución planimétrica de la
casa de Lesera podría responder más a una continuidad de las estructuras preexistentes correspondientes a la casa de la segunda fase ibérica, ya
que los muros mantienen la orientación.
Los patrones inconscientes de la actividad doméstica pueden ser reveladores del bagaje cultural de una persona y su sentido de identidad; por
esto los espacios domésticos pueden aportarnos
información sobre la pertenencia social, cultural
o étnica de sus habitantes y, a su vez, permitirnos
conocer procesos históricos y culturales más amplios, como la interacción entre el mundo romano
y el indígena en un contexto provincial como Hispania (Nevett 2010, 4-8).
La importancia de este caso de estudio no solo
reside en la posibilidad de observar las huellas de
la interacción entre dos culturas, con elementos
que expresan continuidad e innovaciones, sino el
poder hacerlo en un estrato social modesto, tradicionalmente olvidado por la historiografía. Las
peculiaridades de esta domus nos permiten realizar una interpretación social que definiría a los
propietarios como una familia modesta, dadas las
dimensiones de la casa, pero con aspiraciones de
ascensión en la escala social a nivel local (Arasa
2009, 72-73; Arasa y Ribera 2014, 97-98).
Nos encontramos frente a una vivienda romana que mantuvo prácticamente inalterada su planimetría desde época ibérica, aunque realizó un
esfuerzo espacial y económico en un espacio de
representación. Esta decisión constructiva es un
signo indiscutible de la voluntad de los habitantes
de la vivienda de autorrepresentarse emulando las
soluciones constructivas y decorativas del nuevo
orden romano. Sin embargo, el resultado es una
muestra híbrida que combina una planta de herencia ibérica, con la introducción de factores de
autorrepresentación como las pinturas murales, e
innovaciones que afectan a las técnicas constructivas como la introducción de tegulae.
Esto nos puede llevar a reflexionar, brevemente,
sobre el debate en torno a términos como romanización, hibridación, mimesis, resiliencia. En el pasado los académicos vieron la relación de Roma
con otras culturas desde una perspectiva colonialista. Sin embargo, la reciente adopción de ideas
62
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
poscoloniales subraya el hecho de que Roma misma incluyó un gran número de grupos italianos,
con su propia cultura y lenguaje, y estos, unidos
con las culturas de fuera de Italia, formaron un
Imperio con múltiples capas, con influencias que
pasaban en todas direcciones. Asimismo, la identidad ibérica también es el resultado de una serie
de influencias exógenas, fenicias y griegas, por lo
que concluimos que es imposible generalizar sobre cómo estas relaciones funcionaron, y que es
necesario estudiar áreas específicas y culturas de
manera individual. La idea es que, fruto de este
contacto, más que una obliteración o transformación de las costumbres anteriores, se producen
fenómenos híbridos, que tendrán características
de las culturas con las que está interactuando (Nevett 2010, 70). Lo importante de la Domus 1 de Lesera es que nos permite observar esta interacción
en un espacio doméstico más humilde.
Bibliografía
ANTONI, C. 2010: «La casa dels peixos. Una domus
romana en la trama urbana de Sagunt (València)», en: ALAPONT, Ll.; MARTÍ, J., III Jornades
d’Arqueologia de València i Castelló, Valencia,
77-85.
ARASA, F. 2009: La ciutat romana de Lesera, Ajuntament de Forcall.
ARASA, F.; RIBERA, A. 2014: «Noves inscripcions romanes de Valentia», Sylloge Epigraphica Barcinonensis, 12, 29-36.
DUNBABIN, K. 1991: «Triclinium and Stibadium»,
en: SLATER, W. (ed.), Dining in a Classical Context, Michigan Press, Michigan, 121-148.
FERNÁNDEZ, P. A. 2002: «La casa de atrio en la España romana», en: HERNÁNDEZ, L.; SAGREDO, L.;
SOLANA, J. M. (eds.), Actas del I Congreso Internacional de Historia Antigua. La península ibérica hace 2000 años, Universidad de Valladolid,
Valladolid, 681-697.
FOSS, P. 1994: «Kitchens and dining rooms at
Pompeii: the spatial and social relationship of
cooking to eating in the roman household», tesis doctoral de la University of Michigan.
MEYER, K. E. 1999: «Axial peristyle houses in the
western empire», Journal of Roman Archaeology, 12, 101-121.
NEVETT, L. 2010: Domestic space in Classical Antiquity, Cambridge University Press, Cambridge.
RAMOS FERNÁNDEZ R. 1991: «La casa urbana hispanorromana en Illici», en: La casa urbana
hispanorromana. Ponencias y comunicaciones, Institución Fernando el Católico, Zaragoza, 69-78.
URIBE, P. 2008: «La edilicia doméstica urbana romana en el cuadrante Nordeste de la Península
Ibérica (ss. I a. C. - III d. C.)», tesis doctoral de
la Universidad de Zaragoza.
– 2009: «Triclinia y salones triclinares en las viviendas romanas urbanas del cuadrante nordeste
de la península ibérica (s. I a. C.- III d. C.)», Archivo Español de Arqueología, 82, 153-189.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
63
LA DOMUS URBANA: LA ARQUITECTURA DOMÉSTICA
ROMANA Y LA RELACIÓN CON SU ENTORNO URBANO.
EL EJEMPLO DE POLLENTIA (ALCUDIA, MALLORCA)
HACOMAR RUIZ GONZÁLEZ1
1. Introducción
La arqueología clásica siempre ha planteado la
importancia de entender la arquitectura urbana
en su contexto, que no es otro que la propia ciudad. No obstante, en muchos casos estas intenciones no han ido más allá de un mero formalismo,
dado que continúan existiendo trabajos, aún mayoritarios, que siguen dando especial importancia
a la descripción arquitectónica o artística de cada
casa, sin englobarlas dentro de un marco más amplio, no tanto geográfico como sí socioespacial.
El objetivo de este texto es señalar algunos de
los factores que influyeron en la elección de determinadas áreas urbanas para el asentamiento de
estructuras domésticas y ligar esto con los espacios que fueron utilizados por las clases populares, dado que las grandes domus que han sido generalmente estudiadas parecían reservadas para
las élites de la sociedad romana.
2. Factores de elección
Tradicionalmente, los arqueólogos hemos hablado de cuatro factores claves en la elección de
áreas urbanas para el asentamiento de los edificios. Estos son los factores correspondientes a la
altura, al control visual, al valor político y al factor
propagandístico. Para el caso de los dos primeros,
ambos relacionados, se basa en la idea de que un
lugar elevado proporciona tanto un control visual
de la ciudad como una mayor perceptibilidad del
edificio desde diferentes puntos de la urbe. En lo
que atañe a los otros dos factores, se vinculan con
la ubicación cerca de lugares con un especial carácter político o propagandístico, tales como el
foro, el centro de la ciudad o lugares míticos como
el auguraculum, o espacios relacionados con el origen de la urbe (Fernández Vega 2003, 23-27).
1. Universidad de La Laguna - haruizgon@gmail.com
A estos factores hay que aunar la importancia
que tiene la disposición de estas domus en lugares
estratégicos del entramado urbano, especialmente ligados con el cardus y el decumanus, u otras
calles de especial tránsito, debido sobre todo a la
presencia de tabernae en dichos espacios residenciales.
3. Otros factores
Si bien estos factores son claves en la elección
de áreas de mayor o menor índole, existen otros
agentes que influyen de forma decisiva en la elección y que desde la arqueología debemos comenzar a tener en cuenta.
El primero de ellos sería la contaminación
acústica. Ya se quejaban del ruido autores clásicos
como Marcial o Juvenal. El propio Séneca señalaba que «entre los ruidos que suenan en derredor
mío […] el de los carros […], el de mi inquilino
carpintero, el de mi vecino aserrador, el que ensaya su trompetilla y flautas, que no canta, sino que
grita» (Sen, ep. VI, 56), lo que nos da la idea de las
dificultades de conciliar el sueño en una ciudad
como Roma, y posiblemente en todas las grandes
urbes, teniendo en cuenta especialmente que gran
parte de las actividades de carga y descarga se
realizaban de manera nocturna. Esto nos invita
a pensar que aquellas áreas de la urbe cercanas
a espacios como el puerto, macellum, insulae de
tabernae…, serían lugares afectados de manera
expresa por la contaminación acústica.
Otro factor importante, como ya planteaba
Vitruvio, es el relacionado con la iluminación y
aireación de las domus, problema solventado generalmente con los patios, atrios o peristilos, que
representan una solución al hermetismo general
de la arquitectura doméstica romana. No obstante, un aspecto a tener en cuenta es el relativo a
64
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
los malos olores generados tanto por la propia vivienda como por su contexto urbano, los cuales se
convierten en un factor importante en la elección
de espacios. Debemos entender que, en lo que se
refiere a la domus, todo aquello relacionado con
la evacuación de residuos y malos olores estaba
en manos de esclavos, pero ¿dónde son arrojados
estos residuos una vez evacuados? ¿Existe un alcantarillado capaz de absorberlos? Se convierten
estas en cuestiones relevantes a la hora de entender qué zonas de la ciudad son más salubres que
otras y por tanto más propicias para vivir.
4. El caso de Pollentia
La ciudad romana de Pollentia (Mallorca, Alcudia) fue el enclave más importante de las islas
Baleares en época romana. Ha sido fruto de diversas campañas arqueológicas casi ininterrumpidas
desde la década de los años 20 del pasado siglo, en
las cuales se localizaron desde un primer momento espacios arquitectónicos interpretados como
viviendas. En la actualidad están al descubierto
una serie de estructuras domésticas interpretadas
como propias de la clase alta de la ciudad y enmarcadas en el área de Sa Portella (Fig 1).
No obstante, en las campañas de los años 20 y
30 del siglo XX se localizaron una serie de espacios
que volvieron a ser sepultados, dado que en aquel
momento las intervenciones se hacían en terrenos
agrícolas privados que se cedían para la excavación, a condición de volver a ser cubiertos para su
posterior cultivo. Este factor fue decisivo, dado que
estas estructuras no han vuelto a ser localizadas.
Estos espacios fueron llamados Casa del Pretorio y Casa del Colonizador, interpretados como
grandes domus ligadas a la élite política y económica de la ciudad, dada la gran riqueza decorativa encontrada y la existencia, en el caso del
primer espacio, de unas termas privadas (Vallori,
Orfila y Cau 2011, 289-298). Ambos espacios se
encontrarían enmarcados en la zona más alta de
la ciudad y, por tanto, responderían a los factores
antes expuestos de la altura y el control visual de
la ciudad.
No pasa lo mismo con las domus localizadas
en Sa Portella ni tampoco con la Casa de Polymnia, localizadas al norte de la ciudad, y que por
las dimensiones y los hallazgos materiales también son interpretadas como espacios ligados a la
clase alta. Sin embargo, no cumplen ninguno de
los factores tradicionales antes planteados, dado
que no se encuentran en una posición elevada, ni
tampoco cerca de espacios importantes, desde un
punto de vista político, como el foro de la ciudad.
Si bien no parece que su demarcación dentro del
FIGURA 1. Planta del área residencial de Sa Portella.
FIGURA 2. Vista de las excavaciones realizadas en la
Casa de Polymnia (1977-1980).
entramado urbano se ajuste a los patrones anteriormente citados, sí se puede definir como una
zona aislada de las zonas más ruidosas de la ciudad y, por ende, con una escasa contaminación
acústica (Fig 2).
LA DOMUS URBANA: LA ARQUITECTURA DOMÉSTICA ROMANA Y LA RELACIÓN CON SU ENTORNO URBANO .EL EJEMPLO DE POLLENTIA (ALCUDIA, MALLORCA)
Otro espacio interesante es la insula de tabernae situada en el centro de la ciudad y que
podemos considerar como otro de los espacios
residenciales de Pollentia. En efecto, un modelo de hábitat muy común dentro del urbanismo
romano es que los arrendatarios de las tiendas
vivieran en estas, ya sea en altillos, almacenes o
en las propias tabernae (Molina 2013, 128-129).
No obstante, es interesante señalar que esta insula cumple todos los factores tradicionales citados al principio: se encuentra en una zona medianamente elevada, cerca del foro y de espacios
como el capitolio, el auguraculum o los templos
principales de la ciudad, que le confieren un valor propagandístico importante. Sin embargo, al
estar en el centro político y económico de la ciudad, cerca de edificios como el macellum, y del
tránsito continuo de personas y mercancías, la
contaminación acústica en esta zona de la ciudad
debía de ser muy elevada.
5. Conclusión
Planteamos para la ciudad de Pollentia la existencia de tres áreas residenciales, que no barrios,
dado que este concepto arrastra una serie de ideas
que a día de hoy no podemos ajustar a la realidad
de los restos arqueológicos que conservamos. No
obstante, y mediante el estudio del registro arqueológico, planteamos que se trata de tres zonas
con diferencias sociales y económicas, y que cada
una de estas responde a unas necesidades y condiciones determinadas.
Como ya hemos analizado para el caso de Pollentia, los factores tradicionales relacionados con
la elección de una ubicación parecen perder relevancia en contraposición a aspectos como la contaminación acústica. Cabe preguntarnos, dado
que aún queda por profundizar en estos estudios,
la relevancia que pueden tener otros aspectos
como la salubridad o el entramado urbano y plantearnos si es posible o no plantear la existencia de
patrones o elementos comunes urbanísticos en la
arquitectura doméstica romana de Hispania.
65
Agradecimientos
Para finalizar, damos las gracias a todo el equipo que forma parte de las excavaciones de la ciudad romana de Pollentia, y en especial a sus directores, M.ª Esther Chávez Álvarez y Miguel Ángel
Cau Ontiveros.
6. Bibliografía
ARRIBAS, A.; TARRADELL, M.; WOODS, D. 1973: Pollentia I: Excavaciones en Sa Portella. Alcudia (Mallorca), Madrid.
– 1978: Pollentia II: Excavaciones en Sa Portella.
Alcudia (Mallorca), Madrid.
CAU, M. A.; CHÁVEZ, M. E. 2003: «El fenómeno urbano en Mallorca en época romana: Los ejemplos de Pollentia y Palma», Mayurqa, Revista
del Departament de Ciències Històriques i Teoria
de les Arts, 29, 29-49.
ELLIS, S. P. 1994: «Lighting in late roman houses»,
Theoretical Roman Archaeology and Architecture, 64-71.
FERNÁNDEZ VEGA, P. A. 2003: La casa romana, Madrid.
MOLINA VIDAL, J. 2013: «Utilitas frente a venustas:
viviendas populares de la antigua Roma», en:
GRAU, I.; GUTIÉRREZ, S. (eds.), De la estructura
doméstica al espacio social. Lecturas arqueológicas del uso social del espacio, Alicante, 127140.
ROMANÍ SALA, N.; ACERO PÉREZ, J. 2014: «La red de
saneamiento de las ciudades hispanorromanas
en época bajoimperial y tardoantigua: transformación y abandono», en: XVIII CIAC: Centro y periferia en el mundo clásico, 1801-1805.
SÉNECA. 1986: Epístolas morales a Lucilio, Madrid.
VALLORI, M.; ORFILA, M.; CAU, M. 2011: «Las excavaciones de Gabriel Llabrés, Rafael Isasi y
Juan Llabrés en la ciudad romana de Pollentia
(1923-1946)», Archivo Español de Arqueología,
84, 285-304.
VITRUVIO. 2008: Los diez libros de arquitectura, Madrid.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
67
EL ESPACIO DOMÉSTICO COMO REPRESENTACIÓN SOCIAL:
LOS ALMORÁVIDES Y ALMOHADES EN AL-ÁNDALUS
(SIGLOS XII-XIII)
JOSÉ MARÍA MORENO NARGANES1
Al-Ándalus, como concepto vinculado a una
estructura política autónoma, se gesta con la proclamación del emirato independiente (siglo VIII),
estableciéndose un estado central que se irá desarrollando hasta alcanzar su mayor extensión con
el califato. El siglo X supone la culminación de un
proyecto político que se formaliza en la proclamación del califato de Córdoba.
Al mismo tiempo, se desarrolla un proceso que
homogeniza materialmente al-Ándalus, identificado por la extensión de un mismo tipo de espacio
doméstico. Esta formación política se descompone en el siglo XI (periodo Taifa), y se transforma
profundamente desde finales de este siglo y el
siguiente (siglos XI-XII) por la llegada de dos dinastías políticas (almorávides y almohades) que
dominarán sucesivamente el escenario político
andalusí hasta el siglo XIII.
La propuesta de este estudio parte de establecer como unidad de observación básica la unidad
doméstica (UD), a través de un análisis que supere la mera comprensión arquitectural, intentando
dar un sentido social y económico a estos espacios (Allison 1999, 9-10). En el sentido del cambio
histórico, se pretende cuantificar e identificar los
indicadores de las transformaciones acontecidas
al espacio doméstico en relación con los cambios
políticos de cada momento, poniendo en cuestión
las problemáticas que estas interpretaciones generan.
1. Proceso de formación de este espacio
doméstico «andalusí»
En el Tolmo de Minateda (Albacete), Peñaflor
(Jaén), Bayyana (Almería) y Saqunda (Córdoba)
se reconocen los patrones formativos de un urbanismo nuevo que responde a un cambio cultural
vinculado a la islamización social.
La casa se convierte así en un indicador del
ritmo de islamización, estableciéndose un nuevo
patrón doméstico en torno a un patio, la «casa de
patio», que remite morfológicamente al modelo
centralizado que se denominó «the Arab House»
(Fentress 2000, 21) y que cabría considerar la unidad doméstica propia de la formación social islámica (Acién 1998, 967).
La introducción y progresiva generalización de
este nuevo modelo doméstico de origen mediterráneo, ajeno a la tradición romana, desemboca
en una homogeneización morfológica y funcional
de las estructuras domésticas, que puede ser interpretada como la materialización de la islamización social completa (Cressier y Gutiérrez 2009,
151). En el siglo X tenemos las características generales: la distribución en torno al patio de crujías
independientes, el zaguán en recodo y la definición de ambientes especializados.
Este tipo de casa se consolida como reflejo de
un proyecto político que difunde un nuevo concepto de sociedad. Así lo demuestran los estudios
en la Comunidad de Madrid, donde la implantación del estado omeya supuso en menos de un
siglo una concentración demográfica en torno a
enclaves (pequeñas medinas o fortificaciones)
que reconfiguró el territorio (Vigil-Escalera 2012,
179).
Para los siglos X-XI no podemos identificar una
ruptura, ya que se produce una continuidad sobre la base del mismo modelo político y los nuevos gobernantes cimientan su legitimidad en su
continuidad como representantes del califato ya
desaparecido. Esta sociedad, en lo político, lo religioso y lo social, sufre un cambio trascendental a
finales del siglo XI y durante el siglo XII-XIII, cuando, por primera vez desde la creación del emirato
independiente, la península Ibérica estará bajo
el control de dinastías políticas provenientes del
Magreb.
1. Investigador predoctoral PDI Universidad de Alicante - jmmoreno@ua.es
68
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
2. La casa: ¿un indicador del cambio?
El establecimiento de las dinastías magrebíes
que ostentan el poder político a partir del siglo
XI genera una serie de transformaciones políticas,
económicas, sociales y religiosas. De esta manera,
se debe cuestionar en qué sentido las circunstancias históricas influyen en el espacio doméstico.
Un análisis superficial de las planimetrías arquitecturales no denota cambios en apariencia
profundos. El modelo casa-patio sigue vigente, y
las transformaciones están basadas en unas cuestiones superficiales que no alteran el tipo doméstico inicial, como son el desarrollo de los andenes,
los pórticos, etc.
La arqueología ha puesto en evidencia, por el
número de casos identificados, que durante los
siglos XII-XIII se generaliza el modelo con patio
central para al-Ándalus. De esta forma, las diferencias entre medio urbano y rural terminan por
difuminarse, alcanzando tal homogeneización
que resulta muy difícil reconocer el carácter urbano o rural de las unidades domésticas de esta
cronología (siglos XII-XIII).
El caso de las unidades domésticas de Siyâsa/
Cieza en Murcia, donde se documenta un alto grado de especialización funcional, demuestra este
proceso social y urbano. La imposibilidad inicial de inferir importantes diferencias con otras
viviendas urbanas de época almohade, como las
de Mértola (Portugal), Saltés (Huelva) o la propia
Murcia, demuestra la extensión de este modelo.
3. La problemática del modelo evolutivo
Los análisis actuales siguen estudiando el espacio doméstico partiendo únicamente de sus rasgos morfológicos, fomentando un modelo estático
iniciado desde finales del siglo VIII y que perdura
hasta el siglo XV sin profundas transformaciones.
La casa, como manifestación material fundamental de la unidad doméstica, ha eclipsado el análisis de las actividades domésticas o las prácticas
sociales (Allison 1999, 4).
En este mismo sentido, debemos poner en
cuestión que las descripciones puramente morfológicas (la forma de una casa) se presentan como
modelos sociales (tribal, árabe, etc.). Así, se pone
en evidencia toda proyección social sobre la materialidad de las sociedades estudiadas (Gutiérrez
2012), como demuestran las interpretaciones sobre el modelo familiar, la influencia del islam, los
roles de género, etc.
Los estudios tradicionales, centrados únicamente en las plantas de las casas o en el ajuar
cerámico asociado, han tergiversado la influen-
cia de las diferentes dinastías políticas en el espacio doméstico. En efecto, a pesar de los cambios
sucesivos y la inestabilidad de estos estados que
pretenden ser hegemónicos, el espacio doméstico sigue otras evoluciones que o bien se mantienen al margen o bien son aprehendidas a través
de otro tipo de indicadores. Así, tendríamos que
marcar escalas interpretativas que rompiesen con
el modelo de casa emiral / casa califal / casa taifa /
casa almorávide-almohade, no por una inadecuación de mezclar términos que hacen referencia a
un periodo político con otros que responden a un
tiempo social, sino porque aún no se ha establecido una linealidad clara entre estos conceptos.
En relación con la estructura social, la homogeneización del espacio doméstico sin matices
aboga por la inexistencia de las clases sociales radicales y las diferencias horizontales en el seno de
al-Ándalus. Este hecho provoca la imposibilidad
de caracterizar el rol de cada unidad doméstica y
la diferencia de su papel en la sociedad.
4. La aplicación de la metodología
Household
Este método teórico intenta identificar modelos domésticos que rompan con la estaticidad establecida hasta al momento para la arquitectura
de la casa, a la vez que pretende reflexionar sobre
su arquitectura en relación con los cambios cronológicos y sociales que reflejan diferencias en el
organigrama interno de la unidad doméstica o, al
menos, en la apreciación de matices de carácter
social o económico.
De esta manera, esta línea de investigación entiende el espacio doméstico desde una perspectiva
centrada en la práctica, es decir, sus actividades
(Vaquer 2007).
Siguiendo este criterio, debemos tener presente la diversidad de al-Ándalus a la hora de cuestionar los patrones formales hegemónicos. Estos
modelos generales han sido construidos por análisis domésticos basados en la arquitectura, y en
las fuentes documentales de naturaleza sesgada
(mayoritariamente urbanos y socialmente islamizados) y no representativas de la sociedad en su
conjunto.
Según lo planteado, el estudio radica en hacer
un análisis de una serie de casos y de las actividades domésticas que se generan en su seno con el
fin de caracterizar el modelo o modelos domésticos a partir de su materialidad mediante el análisis formal y funcional de las actividades productivas. Tanto desde una perspectiva regional, para
conocer la homogeneidad y representatividad de
los modelos domésticos, como temporal, inten-
EL ESPACIO DOMÉSTICO COMO REPRESENTACIÓN SOCIAL: LOS ALMORÁVIDES Y ALMOHADES EN AL-ÁNDALUS (SIGLOS XII-XIII)
tando comprender las transformaciones cronológicas durante los siglos XII-XIII.
La cuestión parte de discutir las dimensiones
sociales (jerarquización de espacios, diferenciación urbano-rural, organización familiar, ritualidad, etc.) otorgadas al espacio doméstico material, a fin de conocer las diferentes maneras de
construir, concebir y habitar la casa. Así, la metodología aplicada en esta investigación propone
definir las actividades que se generan en cada UD
y en cada relación de estas en los conjuntos de
UD, intentando determinar qué papel tenía cada
espacio en relación con los demás en la economía, y establecer su grupo social, sus actividades
y su relación con los determinados poderes temporales.
5. Conclusiones
Estos planteamientos se basan en una perspectiva crítica con la unicidad del modelo doméstico
y los modelos sociales aplicados a este, relativizando las teorías generales vinculadas a las clases
sociales, los roles de género, las actividades económicas domésticas, etc.
El espacio doméstico demuestra la difícil relación entre la formación social y la formación
política a nivel arqueológico, donde debemos establecer cuáles serían los indicadores materiales
vinculados a una ideología política concreta para
poder identificar la influencia de estos poderes políticos en los legados generacionales de cada sociedad (Bourdieu 1977, 89).
Se propone, además, a través de este estudio,
romper con las «identidades» culturales asignadas a las UD (casa árabe/bereber, casa emiral, califal, etc.), evidenciando la necesidad de otra terminología no cargada de sentido político.
69
6. Bibliografía
ACIÉN ALMANSA, M. 1998: «Sobre el papel de la ideología en la caracterización de las formaciones
sociales: la formación social islámica», Hispania, Revista española de historia, 58 (200), 915968.
ALLISON, P. M. 1999: «Introduction», en: ALLISON,
P. M. (ed.), The Archaeology of Household Activities, Routledge, Londres, 1-18.
BOURDIEU, P. 1977: Outline of a Theory of Practice,
Cambridge University Press, Cambridge.
CRESSIER, P.; GUTIÉRREZ LLORET, S. 2009: «Archéologie de l’Islam européen: sept siècles de présence arabo-berbère», en: DEMAOULE, J. P.
(ed.), L’Europe: un continent redécouvert par
l’archéologie, París, 149-157.
FENTRESS, E. 2000: «Social relations and domestic
space in the Maghreb», en: Castrum 6. Maisons
et espaces domestiques dans le monde méditerranéen au Moyen Âge, CEFR-105/6 y CCV 72,
Roma-Madrid, 15-26.
GUTIÉRREZ LLORET, S. 2012: «Gramática de la casa:
perspectivas de análisis arqueológico de los espacios domésticos medievales en la península
Ibérica (siglos VII-XIII)», Arqueología de la Arquitectura, 9, 139-164.
VAQUER, J. 2007: «De vuelta a la casa. Algunas consideraciones sobre el espacio doméstico desde
la arqueología de la práctica», en: NIELSEN, A.;
RIVOLTA, M. C.; SELDES, V.; VÁZQUEZ, M. M.; MERCOLLI, P. (eds.), Procesos sociales prehispánicos
en el sur andino. La vivienda, la comunidad y el
territorio, Córdoba, Argentina, 11-37.
VIGIL-ESCALERA GUIRADO, A. 2012: «Apuntes sobre
la arquitectura de los hogares y hornos domésticos altomedievales del centro de la península
ibérica (siglos V-VIII d.C.)», Arqueología de la Arquitectura, 9, 165-180.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
71
TO BE ROUND, OR TO BE RECTANGULAR, THAT IS
THE QUESTION: UNA APROXIMACIÓN TRANSTEMPORAL
Y TRANSCULTURAL A LA CUESTIÓN DE LA ELECCIÓN
DE LA PLANTA EN LA ARQUITECTURA DOMÉSTICA
THOMAS TEWS1
1. Introducción
Este artículo quiere presentar una perspectiva
antropológica transversal sobre la cuestión de la
elección de la planta en la arquitectura doméstica,
más allá de una cronología y un contexto cultural
específicos. El objetivo es reflexionar de modo general sobre los motivos que llevan a construir los
espacios domésticos utilizando la planta redonda
o la planta rectangular, tanto en el pasado como
en el presente. El estudio se enfoca desde la perspectiva de la arqueología, así como de la etnografía y de la arquitectura, con ejemplos concretos
de distintas épocas y distintas áreas geográficas,
para concretar los diversos factores y motivos que
pueden influir en la elección o transformación de
la forma de la planta.
2. Redondo o rectangular
En el Próximo Oriente, la arquitectura doméstica más antigua, del Epipaleolítico, consistía
en viviendas redondas u ovales que, a partir del
PPNA (Pre-Pottery Neolithic A), y sobre todo en el
PPNB (Pre-Pottery Neolithic B), fueron sustituidas por estructuras rectangulares, que continuaron siendo predominantes durante varios miles
de años. Sin embargo, a partir de mediados del
VII milenio a. C. reaparecen en el Levante septentrional estructuras de planta circular, que luego
se tornaron predominantes. Hasta hace poco todavía se construían casas circulares en el campo
del norte de Siria (Akkermans 2010; Molist et al.
1992-1993, 50).
El ejemplo del Próximo Oriente muestra que
no tiene por qué haber una evolución de sentido
único, es decir, de casas redondas a casas rectan-
1. Goethe-Universität Frankfurt - tews@em.uni-frankfurt.de
gulares, como si fuera una ley natural, sino que
la evolución contraria también es posible. Esta
observación pone en duda el concepto evolucionista que considera las construcciones de planta
rectangular más evolucionadas que las de planta
redonda.
Una ventaja de las casas de planta rectangular
es que, en principio, pueden ser ampliadas a cualquier longitud, ya que la única limitación es su
anchura, que no debe ser demasiado grande para
poder soportar un tejado, mientras que el diámetro de las casas circulares está limitado por la
construcción del techo (Bradley 2012, 28-29). Por
ejemplo, las casas rectangulares de los iroqueses
en América del Norte pueden llegar a longitudes
impresionantes, como es el caso de una casa rectangular con las esquinas redondeadas, del siglo
XIV, que fue excavada en Howlett Hill, en Nueva
York, y presenta una anchura de 7 m y una longitud de 102 m (Tuck 1967).
En el pueblo dani de Papúa se utilizan casas
circulares como viviendas, diferenciadas para
hombres y mujeres, y casas rectangulares más
grandes para actividades comunitarias (Salazar et
al. 2015, 155). Parece que las casas rectangulares,
cuyo tamaño está menos limitado que el de las
casas redondas, son más aptas para ciertas funciones.
El predominio de la planta rectangular en la
arquitectura occidental contemporánea llevó a
Philip Steadman a escribir un artículo sobre la
cuestión, «¿Por qué son la mayoría de los edificios
rectangulares?». En este artículo propone que la
planta circular es característica de casas independientes con un único espacio, como iglús, yurtas
mongolas y tipis, mientras que la planta rectangular aparece cuando el edificio se distribuye en
varias habitaciones (Steadman 2006).
72
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
A una conclusión parecida llegan John Whiting
y Barbara Ayres en su investigación etnográfica
sobre las inferencias de la planta de las viviendas
en varias sociedades en todo el mundo. Su estudio muestra que casas de planta rectilínea tienen
más probabilidades de tener varios compartimentos que casas de planta curvilínea, que los autores
explican por la mayor facilidad para dividir o ampliar un edificio rectangular antes que un edificio
curvado (Whiting y Ayres, 1968, 121-123).
El arqueólogo experimental Peter J. Reynolds
realizó varias reconstrucciones de casas de planta
circular de la Edad del Hierro en Gran Bretaña.
Sus conclusiones las publicó en un libro sobre arqueología experimental, traducido al catalán: «De
fet, una casa circular es pot construir amb materials lleugers i, amb tot, pot assolir una fortalesa
notable. […] Bàsicament la casa circular presenta
l’estructura perfecta ja que ofereix la resistència
mínima en termes aerodinàmics. Aquest factor
contribueix de manera significativa a la seva durada de vida» (Reynolds 1988, 28).
En el primer cuarto del siglo pasado, Wilber J.
Fraser publicó dos artículos sobre las ventajas de
la planta circular en la construcción de graneros o
establos. En estos artículos, el autor considera la
construcción circular como la más fuerte para resistir la presión del viento. Además, Fraser llama
la atención sobre el argumento económico de que,
con la misma área, la planta circular requiere menos material para la construcción de las paredes
y por lo tanto implica menos costes que la planta
rectangular (Fraser 1910; 1918).
En 1977, el ingeniero civil portugués Henrique
Araújo Jorge publicó una propuesta para fomentar la autoconstrucción: «O edifício que proponho
para moradia unifamiliar tem uma área circular
[…]. Escolhe-se a área circular porque tem uma
área máxima coberta em relação a qualquer outra forma com um mesmo perímetro e portanto a
área circular tem um mínimo de paredes exteriores em relação a outros edifícios da mesma área e
com a mesma altura. […] São casas circulares que
vou propôr como solução mais económica para
habitação unifamiliar para a autoconstrução»
(Jorge 1977, 2-9).
En 2012 se construyó un edificio de planta
circular con apartamentos y oficinas en Bergisch
Gladbach, en Alemania (fig. 1). El arquitecto de la
obra, Gerald Wehner, enumera como ventajas de
la forma redonda el buen aislamiento sonoro –ya
que la forma redonda ofrece menos superficie de
ataque a las ondas sonoras–, la estabilidad de la
construcción, el ahorro de materiales constructivos y, posteriormente, la economía de gastos de calefacción debido a la reducción de la superficie externa manteniendo la misma área (Wehner 2012).
FIGURA 1. Edificio residencial y de oficinas de
planta circular en Bergisch Gladbach, Alemania,
construido en 2012, según los planos del arquitecto
Gerald Wehner. Fotografía cedida por Gerald
Wehner.
En un campamento de refugiados procedentes
del Sahara Occidental, en la provincia argelina de
Tinduf, construyeron una vivienda innovadora con
botellas de plástico rellenas de arena, para mejorar las condiciones de vida. La vivienda tiene una
planta circular para evitar que se formen dunas a
su alrededor en las tormentas de arena –como sucede con las de planta cuadrada– y para reducir el
impacto de los rayos solares (Mediavilla 2017).
Otra ventaja de la planta circular la apuntó el
arquitecto afgano Shams Yazdani en su tesis doctoral, al tratar sobre las posibilidades de aumentar la durabilidad de construcciones de tierra en
áreas sujetas a terremotos de Afganistán. Basándose en pruebas experimentales con maquetas,
demostró que los edificios de planta circular son
más resistentes a los terremotos que los edificios
de planta cuadrada (Yazdani 1985).
3. Conclusiones
Teniendo en cuenta que la planta redonda también ofrece ventajas en comparación con la planta
rectangular, que incluso hoy en día valen la pena
ser consideradas, desde mi punto de vista, se debería descartar el prejuicio evolucionista que considera las construcciones de planta redonda simples
o «primitivas» y las construcciones de planta rectangular más evolucionadas. La cuestión del por
qué una sociedad elige la planta redonda o la rectangular, o ambas, es una pregunta compleja y difícil de responder. Este artículo intenta mostrar algunos motivos que pueden dar lugar a la elección
de la planta, redonda o rectangular, de un edificio.
TO BE ROUND, OR TO BE RECTANGULAR, THAT IS THE QUESTION: UNA APROXIMACIÓN TRANSTEMPORAL Y TRANSCULTURAL A LA CUESTIÓN DE LA ELECCIÓN...
Agradecimientos
Agradezco a María D. Teijeiro la corrección de
mi manuscrito en castellano y a Gerald Wehner la
cesión de la fotografía.
4. Bibliografía
AKKERMANS, P. M. M. G. 2010: «Late Neolithic architectural renewal: the emergence of round
houses in the northern Levant, c. 6500-6000
BC», en: BOLGER, D.; MAGUIRE, L. C. (eds.), The
development of pre-state communities in the
ancient Near East: studies in honour of Edgar
Peltenburg, Themes from the ancient Near East
BANEA publication series, 2, Oxbow Books,
Oxford, 22-28.
BRADLEY, R. 2012: The idea of order: the circular archetype in prehistoric Europe, Oxford University Press, Oxford.
FRASER, W. J. 1910: «Economy of the round dairy
barn», University of Illinois Agricultural Experiment Station Bulletin, 143, 1-44.
– 1918: «The round barn», University of Illinois
Agricultural Experiment Station Bulletin, 230,
1-52.
JORGE, H. A. 1977: Uma habitação circular, documento policopiado.
MEDIAVILLA COSTA, P. 2017: «El ingeniero “loco”
del desierto», <https://elpais.com/internacional/
2017/03/27/actualidad/1490605573_412967.
html>. [Consulta: 25 mayo 2018].
73
MOLIST, M.; ANFRUNS, J.; CATALÀ, M.; HELMER, D.;
FAURA, J. M.; MATEU, J.; PALOMO, A.; SAFIA, M.;
WILLCOX, G. 1992-1993: «Tall Halula (Síria):
un poblat dels primers agricultors i ramaders
del VII mil·lenni a la vall de l’Eufrates», Tribuna
d’Arqueologia, Barcelona, 49-61.
REYNOLDS, P. J. 1988: Arqueologia experimental:
una perspectiva de futur, traducción de M. Pilar
Espadaler, Eumo, Vic.
SALAZAR, J.; DOMINGO, I.; AZKÁRRAGA, J. M.; BONET,
H. (coords.) 2015: Mundos tribales: una visión
etnoarqueológica, Museo Arqueológico Regional de Madrid, Alcalá de Henares.
STEADMAN, P. 2006: «Why are most buildings rectangular?», Architectural Research Quarterly,
10 (2), 119-130.
TUCK, J. A. 1967: «The Howlett Hill Site: an early
Iroquois village in central New York», en:
TOOKER, E. (ed.), Iroquois culture, history, and
prehistory: proceedings of the 1965 Conference
on Iroquois Research, The University of the
State of New York, Albany, 75-79.
WEHNER, G. 2012: Wohn- und Bürohaus, Bergisch
Gladbach, 2012, <http://www.wehner-architektur.com/rundhaus-5.html>. [Consulta: 29
mayo 2008]
WHITING, J. W.; AYRES, B. 1968: «Inferences from
the shape of dwellings», en: CHANG, K. C. (ed.),
Settlement archaeology, National Press Books,
Palo Alto, 117-133.
YAZDANI, H. S. 1985: Erhöhung der Lebensdauer von
Lehmbauten in erdbebengefährdeten Gebieten Afghanistans, Gesamthochschule Kassel, Kassel.
SECCIÓN 03. MEMORIA EN PIEDRA. LA EPIGRAFÍA COMO
HERRAMIENTA DE ESTUDIO DE LAS SOCIEDADES ANTIGUAS
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
77
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN «MEMORIA EN PIEDRA.
LA EPIGRAFÍA COMO HERRAMIENTA DE ESTUDIO
DE LAS SOCIEDADES ANTIGUAS»
PABLO VARONA RUBIO1, HELENA LORENZO FERRAGUT2, TERESA BUEY UTRILLA3,
SANDRA CANO AGUILERA3, FRANCISCO GARCÍA SÁEZ4
1. Introducción
Una de las principales limitaciones que tiene
el uso de la historiografía tradicional y las fuentes
antiguas para reconstruir una imagen fidedigna
de las diferentes sociedades antiguas es la escasa
variedad de puntos de vista que nos transmiten.
A parte de las desgraciadamente escasas muestras de correspondencia o documentos del ámbito privado que han sobrevivido hasta hoy, como
las tablillas de Vindolanda (Bowman 1998; Birley
2000; 2005) o los papiros de Oxirrinco (Bowman
et al. 2007), los perfiles biográficos de los autores
cuyas obras han llegado hasta nuestros días son
relativamente similares: hombres, de cultura grecolatina (sea por origen o aculturación) y de un
estrato social medio-elevado. Este hecho provoca
que, con espíritu crítico y constructivo, la objetividad de sus relatos deba ser contrastada.
Carecemos de versiones alternativas o complementarias que permitan contrastarlos con puntos
de vista divergentes y verificar la ausencia de juicios de valor subjetivos, sea por parte de sus autores originales o las sucesivas manos que copiaron o reescribieron los textos hasta la actualidad.
Por lo tanto, no conocemos de primera mano las
voces de todos aquellos individuos que pertenecieron a grupos sociales no representados por el
corpus de autores antiguos, o no las conocemos
sin un riesgo de distorsión (Lardinois y McClure
2001). Por ejemplo, solo conocemos una porción
de las escritoras de la Antigüedad (Plant 2004),
pero se ha conservado un número aún menor de
fragmentos de sus obras, lo que nos impide comprender las sociedades antiguas directamente
desde la perspectiva de las mujeres. ¿Mantendríamos la imagen tradicional del rol de la mujer en
la Antigüedad si tuviéramos a nuestro alcance sus
relatos? ¿O cómo cambiaría nuestra percepción
de la romanización de Hispania si la conserváramos narrada desde la óptica íbera?
Es en este punto en el que es necesario valorar
el papel de la epigrafía para verificar o corregir
nuestra concepción de las sociedades antiguas,
entendiéndola como el estudio de los textos del
ámbito público o privado transmitidos a través de
soportes duraderos. Los materiales pétreos son los
más comunes, pero también se encuentran numerosos ejemplos en metales (placas de bronce, defixiones en plomo, joyería en metales preciosos), cerámica (grafitos de propiedad, anotaciones, etc.) u
otros materiales duros. Esta disciplina, dada su
naturaleza, permite complementar las ópticas que
nos transmiten las fuentes antiguas, pues posee
un número de emisores mucho más amplio que la
historiografía por varias razones: la ubicuidad de
su uso, sobre todo en la sociedad romana; la accesibilidad de su producción, que democratizaba su
uso; y la mejor preservación de sus soportes, que
permite una transmisión menos sujeta a la voluntad expresa de preservar un documento a lo largo
de los siglos.
Esta sesión reunió aquellas comunicaciones relacionadas con el estudio de la epigrafía en general con espíritu inclusivo y voluntad de contrastar,
profundizando en el papel de la epigrafía como
herramienta de estudio de las sociedades clásicas.
Así pues, en el panel de la sesión se incluyeron
seis ponencias y un póster de temáticas diversas.
El peso de la sesión recayó en los estudios de epigrafía funeraria, sin duda una de las tipologías
más abundantes y ubicuas de la epigrafía clásica
en la península Ibérica, pero cada comunicación
supo explotar el corpus desde ópticas diferentes y
1. Institut Català d’Arqueologia Clàssica - memoriaenpiedra@gmail.com
2. Centro CIL II, Universidad de Alcalá de Henares
3. Universitat Rovira i Virgili
4. Universidad Autónoma de Madrid
78
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
complementarias como la perspectiva de género,
los movimientos migratorios o la historia militar,
así como estudios de conjunto, cuantitativos y arqueométricos, aplicados al registro epigráfico. Del
mismo modo, también hubo interesantes comunicaciones centradas en la epigrafía sacra y sus derivados socioculturales y la escritura ibérica sobre
cerámica. En conjunto, las intervenciones hicieron posible una revisión de las diversas metodologías de análisis del vasto catálogo de inscripciones
de época antigua que los investigadores jóvenes
de la actualidad tenemos a nuestro alcance, así
como permitieron una reflexión final dialogada
y consensuada sobre el papel que debe ocupar la
epigrafía en la necesaria reescritura del discurso
académico sobre la recepción contemporánea de
la cultura y la sociedad clásicas.
2. Bibliografía
BIRLEY, R. 2000: Civilians on Rome’s northern frontier: Families, friends and foes, Roman Army
Museum Publications, Greenhead (Northumberland).
– 2005: Vindolanda, extraordinary records of daily
life on the northern frontier, Roman Army Museum Publications, Greenhead (Northumberland).
BOWMAN, A. K. 1998: Life and letters on the Roman
frontier: Vindolanda and its people, Routledge,
Nueva York.
BOWMAN, A. K.; COLES, R. A.; GONIS, N.; OBBINK, D.;
PARSONS, P. J. 2007: Oxyrhynchus: a city and its
texts, Egypt Exploration Society, Londres.
LARDINOIS, A.; MCCLURE, L. 2001: Women’s voices in
Greek literature and society, Princeton University Press, Princeton (Nueva Jersey).
PLANT, I. M. 2004: Women writers of ancient Greece
and Rome: an anthology, University of Oklahoma Press, Norman (Oklahoma).
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
79
EL CULTO METRÓACO EN LA HISPANIA ROMANA
A TRAVÉS DE LA EPIGRAFÍA: ASPECTOS SOCIOCULTURALES,
CRONOLÓGICOS Y GEOGRÁFICOS
XAVIER BAYER RODRÍGUEZ1
Resumen
El presente artículo recoge el tema presentado en la conferencia con el mismo nombre que se
realizó en la sesión «Memoria en piedra. La epigrafía como herramienta de estudio de las sociedades antiguas» en las XI Jornadas de Jóvenes en
Investigación Arqueológica, celebradas entre el 9
y el 12 de mayo de 2018. En esta comunicación
presentamos el estudio de la epigrafía hallada en
diversos contextos y perteneciente al culto metróaco (o culto a Cibeles y Attis). Gracias a ella
podemos ofrecer una visión más precisa de estos
cultos, ya que podemos apreciar algunos aspectos
sociales y organizativos del culto sumamente interesantes.
Palabras clave: Cibeles, Attis, Cultos Mistéricos, Hispania, Epigrafía
Estos cultos mistéricos tenían varios aspectos
en común:2 generalmente son de origen oriental;3
la práctica de rituales de iniciación; y tienen cierto carácter soteriológico, motivado porque los
dioses protagonistas han conocido la muerte o
han sido humanos durante un tiempo.4
Nuestro principal objetivo es presentar los aspectos sociales y organizativos del culto observables en la documentación epigráfica mencionada
anteriormente: ver en qué sectores de la sociedad
tenía mayor influencia (libertos, esclavos, ciudadanos romanos…); el nivel económico de sus devotos; quiénes eran los sacerdotes y auxiliares de
culto. Otro objetivo ha sido determinar el origen
de sus fieles, observando si estos eran mayoritariamente indígenas o bien extranjeros. Por último, nos hemos interrogado por las diferencias de
género, ya que la historiografía tradicionalmente
ha vinculado estos cultos a las mujeres.
1. Introducción
El culto metróaco, o culto a Cibeles y Attis, es
parte de los cultos mistéricos u orientales que se
extendieron por todo el Imperio romano con una
extraordinaria rapidez y tuvieron un enorme auge
en el panorama religioso romano, especialmente
entre los siglos I-II y IV d. C. Mediante el estudio de
estos cultos podemos ver la profunda transformación que se estaba experimentando desde época
helenística en los sentimientos religiosos, y uno
de los símbolos de la decadencia que estaba experimentando la religión tradicional romana. Los
habitantes de las zonas romanizadas buscaban
una nueva relación del individuo con la divinidad.
2. Material de estudio: la epigrafía
metróaca en Hispania
En cuanto al material de estudio utilizado para
el presente trabajo, nos hemos centrado en la epigrafía perteneciente al culto metróaco hallada en
los territorios de Hispania. Para ello se recurrió
a catálogos y estudios preexistentes, como el de
García y Bellido (1967), la primera que recoge los
restos existentes en la península Ibérica pertenecientes a los cultos mistéricos, o el indispensable
catálogo que nos ofrece Vermaseren en su Corpus
Cultus Cybelae Attidisque.5 Además de estos catálogos de piezas, también se recurrió a búsquedas
1. Universidad Complutense de Madrid - xbayer@ucm.es
2. Estos aspectos generales de las religiones orientales mistéricas se ven expuestos y explicados de manera más amplia
en la obra de Burkert (2005, 31-51).
3. En el caso de la Magna Mater, podríamos remontar su origen a la región central de Anatolia, y a períodos prehistóricos, siguiendo las ideas de Roller (1999, 27-39) y González (1995, 109).
4. Caso de Attis, Osiris o Adonis, entre otros.
5. Aunque el que más nos interesa es el volumen V, donde se recogen los restos de Hispania, en Vermaseren (1986).
80
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
en las diferentes bases de datos sobre epigrafía
romana, disponibles online, y a otros catálogos no
dedicados específicamente a los cultos mistéricos
o al culto metróaco.6
Tras esta investigación se han obtenido un
total de 28 epígrafes repartidos por la península
Ibérica, escogidas no solo por su inscripción, sino
también por su decoración, que, en algunos casos,
ha señalado unas conexiones con el culto inapreciables en el texto.
De estas 28 inscripciones, la inmensa mayoría
(26) son inscripciones cultuales/votivas. También
disponemos de una inscripción claramente funeraria decorada con dos figuras de Attis acompañando el texto, junto con otras representaciones
asociadas al mundo funerario. Por último, tenemos una tabella defixionis, que viene a incluirse
en la escasa documentación mágica que tenemos,
ya que, junto con otras 6 tabellae defixiones halladas en Mainz, Alemania (Blänsdorf 2005; 2010),
son los únicos restos de magia asociados a estas
divinidades.
3. Expansión cronológica y geográfica
En cuanto a las cronologías de las inscripciones, la mayoría datan de entre finales del siglo I y
el III d. C., si bien tres inscripciones podrían ser
atribuibles a principios del I d. C. También hay
otra inscripción fuera de este grupo, ya que está
datada en el siglo IV d. C., en época oficialmente
cristiana, y que podría tratarse de una inscripción
de época del emperador Juliano (Hoyo 1998, 374).
Así pues, el período de mayor difusión del culto a Cibeles y Attis por Hispania se encuadra entre finales del siglo I o inicios del II y finales del
III d. C., aunque encontramos restos atribuibles a
otros períodos, como el siglo IV e incluso principios del V d. C. Esto viene a corroborar las fechas
que tradicionalmente se han establecido para la
difusión de las religiones orientales en Hispania,7
y se corresponde con su expansión en el resto de
provincias del Imperio.
Por lo que respecta a la dispersión geográfica
de la epigrafía metróaca por la Península, observamos que la mayoría se concentran en la provincia
de Lusitania, con un total de 12 inscripciones de
las 28 estudiadas: 6 en el conventus Emeritensis, 4
en el conventus Pacensis y 2 más en el conventus
Scallabitanus. La siguiente provincia con más restos es la Hispania Citerior, con 11 inscripciones: 4
en el conventus Bracaraugustanus, 3 en el conventus Carthaginiensis, 2 en el conventus Cluniensis,
1 en el conventus Caesaraugustanus y 1 en el conventus Lucensis. Por último, tendríamos la Bética,
con 5 inscripciones: 3 en el conventus Cordubensis, 1 en el conventus Astigitanus y otra más en el
conventus Hispalensis.
Hay una mayor concentración de restos epigráficos en el sur y en la parte oeste de la Península, y
algunas ciudades gozan de un mayor volumen de
hallazgos, como Córdoba o Mérida.
4. Aspectos sociales y organizativos del culto a través de la epigrafía
4.1. Los devotos
En cuanto al análisis de los aspectos sociales
que podemos estudiar a través de la epigrafía que
hemos recogido, nos hemos centrado en aspectos
como el género de los dedicantes, su condición
social y si eran devotos o miembros de la jerarquía religiosa del culto, así como su posible origen, aunque son aspectos muy difíciles de tratar
en algunos casos.
En cuanto a los devotos, la mayor parte de los
nombres que nos aparecen en epigrafía son masculinos, doblando casi el número de dedicantes
femeninas –19 dedicantes masculinos frente a 10
femeninas, y 2 cuya mala conservación impide catalogarlos. En cuanto a la consideración de estos
dedicantes como ciudadanos romanos o no, se ha
realizado en función de las inscripciones en las
que nos aparecen con tria nomina –que son un total de 10, frente a 2 posibles libertos y otras 7 menciones que no podemos atribuir a uno u otro lado.
En cuanto a la procedencia de los creyentes, es
un asunto difícil de clasificar, ya que los nombres
que podríamos considerar de procedencia indígena (debido a su nomen) también están presentes
en la epigrafía de otras zonas del Imperio, como
Badius u Oculatus. Los nombres de las mujeres
parecen estar más latinizados, ya que solo encontramos en una inscripción dos posibles nombres
femeninos indígenas (Neria Helpis y Coemae).
4.2. Los sacerdotes
En cuanto a los sacerdotes que podemos encontrarnos en las fuentes epigráficas analizadas,
encontramos varias referencias a ellos, lo que nos
6. Con todo ello se procedió a la elaboración de un corpus epigráfico, lo cual fue una de las bases de la elaboración de
un trabajo de fin de máster llevado a cabo en la Universidad de Cantabria, con el nombre de El culto a Cibeles y Attis en la
Hispania romana: restos arqueológicos y epigráficos y disponible en su repositorio online.
7. Como las que da Munilla (1979-1980, 279).
EL CULTO METRÓACO EN LA HISPANIA ROMANA A TRAVÉS DE LA EPIGRAFÍA: ASPECTOS SOCIOCULTURALES, CRONOLÓGICOS Y GEOGRÁFICOS
indica la existencia de una comunidad religiosa
activa en la Península (Heras 2011, 112).
Encontramos una mención a una cernophora:
Flavia Tyche, quien probablemente sería de origen griego o liberta, en función de su onomástica.
Además de esta, no encontramos ninguna otra referencia a una encargada de culto.
El título que más nos aparece para referirse a
los encargados de culto es sacerdos, que podría
estar refiriéndose a los galli, los sacerdotes de Cibeles más conocidos, pero no tenemos ninguna
mención directa a este título. Sin embargo, sí que
tenemos una mención a un archigallus: Publicius
Mysticus. Como vemos, su nombre, al igual que el
de la cernophora, señala un posible origen griego
o liberto.
Resultan interesantes también ciertos personajes que se moverían entre ambos grupos, devotos
y sacerdotes. Sería el caso de Publicius Valerius
Fortunatus Thalamas, y el que probablemente se
trate de su hijo: Publicius Fortunatus Talamas.
Este cognomen que presentan ambos es un título que ya podría indicarnos cierta relación con el
culto a Cibeles, ya que podría tratarse de una referencia al tálamo, o al título de thalamepolos, un
título que recibían algunos encargados del culto,
los sacerdotes de la cámara nupcial (Alvar 2001,
207, nota al pie). Así, podría ser que ambos personajes hubieran desempeñado ese cargo, y no se
tratara únicamente de un cognomen, sino de un
título.
5. Conclusiones
En las provincias hispanorromanas existieron
varias comunidades que rendían culto a Cibeles
y a Attis. Estas comunidades dispondrían de una
jerarquía de culto ciertamente establecida, o al
menos eso podemos deducir de la documentación
estudiada, gracias a la cual tenemos constancia
de varios sacerdotes y sacerdotisas del culto metróaco.
Sin embargo, también observamos la presencia de amplias áreas donde hay una ausencia total
de restos relacionados con Cibeles y Attis, como
en la región del Cantábrico (actuales territorios de
Asturias, Cantabria y País Vasco), o en la Meseta
Sur, en concreto en la actual zona de Castilla-La
Mancha. La falta de testimonios no debe ser tomada como una prueba de la ausencia de estos
cultos en dichas áreas, pues podría aparecer documentación en futuros hallazgos.
En cuanto a los dedicantes, parece que este
culto gozaba de una mayor devoción entre los
81
hombres, aunque no es posible asegurarlo. Sin
embargo, viendo que la mayor parte de los devotos son ciudadanos romanos, podríamos decir
que, más que dividirse sus creyentes en función
del género, intervendría más la posición social o
los orígenes de estos.
Bibliografía
ALVAR EZQUERRA, J. 2001: Los misterios: religiones
«orientales» en el Imperio Romano, Crítica,
Barcelona.
BLANCO FREIJEIRO, A. 1968: «Documentos metróacos de Hispania», AEA, 41, 91-100.
BLÄNSDORF, J. 2005: «Cybèle et Attis dans les tablettes de defixio inédite de Mayence», Comptesrendus des séances de l’Académie des Inscriptions et Belles-Lettres, 149 (2), 669-692.
– 2010: «The defixiones from the Sanctuary of Isis
and Mater Magna in Mainz», en: GORDON, R. L.,
MARCO SIMÓN, F. (eds.), Magical Practice in the
Latin West: papers from the international conference held at the University of Zaragoza, 30 sept.
- 1 oct. 2005, Brill, Leiden, 141-190.
BURKERT, W. 2005: Cultos mistéricos antiguos,
Trotta, Madrid.
GARCÍA Y BELLIDO, A. 1967: Les religions orientales
dans l’Espagne romaine, E. J. Brill, Leiden.
GONZÁLEZ SERRANO, P. 1995: «La génesis de los dioses frigios: Cibeles y Atis», Ilu. Revista de Ciencias de las Religiones, 0, 105-116.
HERAS MORA, F. J. 2011: Un edificio singular de la
Mérida tardorromana: un posible centro de culto metróaco y rituales taurobólicos, Ataecina,
Instituto de Arqueología, Mérida.
HOYO, J. del 1998: «Nuevo documento metróaco
hallado en la provincia de Segovia», Gerión,
16, 345-382.
MARCO SIMÓN, F. 2004: «Magia y cultos orientales:
acerca de una defixio de Alcácer do Sal (Setúbal) con mención de Atis», MHNH¸ 4, 79-94.
MUNILLA, G. 1979-1980: «Una estatua representando a la diosa Cibeles, hallada en la villa romana de Els Antigons, Reus», Pyrenae, 15-16,
277-286.
ROLLER, L. E. 1999: In Search of God the Mother:
the Cult of Anatolian Cybele, University of California Press, Berkeley.
VÁZQUEZ, A. M.ª; MUÑOZ, J.; POYATO, C. 1995: «Serpientes y Attis en una lápida sepulcral extremeña», BAEAA, 35, 245-250.
VERMASEREN, M. J. 1986: Corpus Cultus Cybelae Attidisque. Vol. V: Aegyptus, Africa, Hispania, Gallia Et Britannia, E. J. Brill, Leiden, 58-79.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
83
ELLAS TAMBIÉN MURIERON. LA PRESENCIA FEMENINA
EN LA EPIGRAFÍA FUNERARIA DEL NOROESTE
DE LA PENÍNSULA IBÉRICA
MARÍA JOSÉ MARTÍNEZ GONZÁLEZ1
Resumen
El estudio de la sociedad romana a través de
los monumentos epigráficos, presentes a lo largo y ancho del Imperio romano ha sido abordado desde diversos puntos de vista: demográfico,
social, cultural, lingüístico, jurídico, entre otros,
convirtiéndose en un instrumento fundamental
para la interpretación de dicho conocimiento.
En la historia clásica, el mundo femenino ha
sido examinado desde diversas fuentes de tipo historiográfico y no tanto desde una perspectiva arqueológico-funeraria; es en este punto donde reside lo novedoso de este enfoque. El presente trabajo
se centra en el cuadrante noroccidental de la península Ibérica, donde se han analizado más de 624
lápidas, con las que se pretende acometer el estudio
de la epigrafía funeraria, haciendo especial énfasis
en un sector social en particular: las mujeres.
1. Introducción
La llegada de la población latina al noroeste
peninsular motivó la transformación de las pautas de actuación y comportamiento de la población allí asentada, debido a la introducción de las
nuevas corrientes de pensamiento colectivo.
Estos cambios afectaron a las estructuras de
base indígena, modificando así su esquema político-administrativo, su sistema de organización
social y sus formas culturales.
Tales transformaciones fueron asumidas paulatinamente por una población de la que desconocemos muchas de sus prácticas, y también afectaron a los nuevos pobladores.
Antes de la llegada de los romanos, los restos
funerarios que conocemos son escasos y, aunque
existe cierta monumentalización de estos espacios, responden a un individuo del que poco o
nada sabemos. Con Roma ya en el noroeste, se
fueron introduciendo costumbres tales como la
monumentalización de la muerte en contextos
indígenas, ya que para los romanos los monumentos funerarios son elementos de autorrepresentación social y prestigio orientados a la exaltación tanto del difunto como a la de su familia
(Vaquerizo 2001, 132). Al mismo tiempo, estos
monumentos invitan a las personas que pasen por
el lugar a recordar valores fundamentales como
la virtus, la pietas e incluso el honos del difunto.
Lo que contribuye de manera decisiva a la perpetuación social de su memoria. Así, las lápidas son
un ejemplo claro de esa integración cultural que
existió entre los recién llegados y los pobladores
del noroeste.
Mediante el estudio de diferentes estelas, aras
y placas funerarias hemos obtenido información
de varios tipos: simbólica, cultural, demográfica,
jurídica, lingüística, artística y social, y toda esta
información es una vía para el conocimiento de
la sociedad que habitaba este territorio en época romana. Asimismo, conviene puntualizar que
los epitafios latinos no representan a la totalidad
de la población que existía en el territorio, por lo
que todos los datos aportados a lo largo de este
estudio hacen referencia a un porcentaje muy pequeño de la sociedad de este momento. Esto probablemente se debió, por un lado, a una cuestión
de tipo económico: su elevado coste no podía ser
asumido por todas las economías. Por otro lado,
la no obligatoriedad de su construcción hacía posible prescindir de él.
2. Contexto cronológico y espacial
En cuanto al ámbito espacial en el que se inserta, nuestro estudio se refiere al noroeste de la
península Ibérica, que engloba los territorios de
1. GEAAT, Universidad de Vigo - majmartinezglez@gmail.com
84
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Mapa del noroeste peninsular.
las actuales comunidades autónomas de Galicia, Asturias y parte de Cantabria, así como las
provincias de Zamora y León y buena parte de la
región norte de Portugal –Viana do Castelo, Vila
Real, Bragança, Braga y Oporto.
Nos hemos ceñido a una delimitación geográfica actual, ya que nos movemos en un marco cronológico muy amplio, puesto que los materiales
analizados, hasta el momento, datan de entre los
siglos I y V, por lo que, junto con las numerosas
reformas administrativas realizadas por Roma
en este espacio, nos ha sido imposible considerar
una delimitación antigua del mismo.
El análisis de los datos arqueológicos confirma
que estos monumentos empezaron a construirse
a partir del siglo I, coetáneos a la expansión del
proceso de romanización, y su fabricación fue
continua en el tiempo, siendo el siglo II el momento de máxima difusión de esta práctica, con
su posterior declive en los siglos III y IV. Fueron
reutilizados posteriormente como materiales de
construcción, por lo que, aunque con un fin distinto al inicial, los monumentos han continuado
usándose hasta la actualidad.
La epigrafía y la literatura han sido dos de las
fuentes más importantes para el estudio de la
mujer en la Antigüedad. Es a través de estas que
sabemos que nunca tuvieron la totalidad de los
derechos ciudadanos otorgados a los varones, ni
podían disfrutar de la mayoría de los privilegios
sociales o políticos de sus congéneres. En la realidad romana el género masculino era el dominante, el rol a perpetuar y transmitir a las generaciones futuras.
La mujer libre romana estaba sometida primero a su padre y con el tiempo a su marido, y carecía de derechos políticos.
Una de las expectativas a cumplir por las féminas era convertirse en la matrona romana, prototipo de mujer aristócrata romana cuya imagen
era la de madre ejemplar, la decencia, la castidad
y la mesura.
Del conjunto de piezas estudiadas hasta el
momento, se han descartado aquellas en las que
no aparece la mención al difunto. Así, de los 622
monumentos recopilados, un total de 390 corresponde a hombres, 208 a mujeres y tan solo 24
representan a aquellos epitafios múltiples donde
aparecen hombres y mujeres. Al igual que ocurre
en otras partes del Imperio y de Hispania, en el
noroeste las mujeres están menos representada
que el hombre. ¿A qué podría deberse? Con respecto a esto hay dos hipótesis que podrían dar la
clave de esta disparidad.
En primer lugar, una mayor supervivencia de
las mujeres en el matrimonio, lo que implicaría
una existencia mayor de viudas que de viudos. En
época romana, esto no supondría una mayor esperanza de vida de las mujeres, ya que existe una
gran diferencia de edad con la que llegan hombres
y mujeres al matrimonio.
Para que se cumpliera esta hipótesis deberíamos encontrarnos con una proporción importante de epitafios dedicados por mujeres a sus maridos fallecidos.
Como se observa en la siguiente gráfica, son
los maridos los que más monumentos dedican a
sus esposas, con 48, seguidos de ellas, con 32; después nos encontraríamos con las que los padres
dedican a sus hijos varones, 31, y los hermanos es
el otro de los grupos al que más monumentos se
estarían dedicando.
Esta primera hipótesis, a la luz de los datos
aportados para nuestro caso de estudio, parece
descartarse. Los casos en los que se menciona la
identidad del dedicante no parecen señalar una
mayor supervivencia de las mujeres con respecto
a sus maridos.
Otra de las hipótesis que barajamos es la
inexistencia de desproporción demográfica signi-
FIGURA 2. Epitafios dedicados.
ELLAS TAMBIÉN MURIERON. LA PRESENCIA FEMENINA EN LA EPIGRAFÍA FUNERARIA DEL NOROESTE DE LA PENÍNSULA IBÉRICA
ficativa, siendo la causa principal de la falta de representatividad funeraria la fuerte diferenciación
social que existía entre hombres y mujeres.
La duda se plantea en torno a la existencia de
una real desproporción de hombres y mujeres,
con un número menor de las segundas, o bien en
el reflejo del papel subordinado de las mujeres en
la sociedad romana.
Desde el punto de vista demográfico resulta
difícil mantener la existencia de un desequilibrio
muy fuerte entre los sexos. No cabe duda de que
en determinadas zonas el número de hombres fue
mucho mayor, especialmente en aquellas relacionadas con la presencia del ejército. En el resto,
resulta difícil que las prácticas como el infanticidio, la peor alimentación o trato en la infancia, o
la exposición o venta de las hijas afectara hasta
proporciones tan desmesuradas. Una incidencia
mayor tendrían las muertes derivadas del primer
parto en una edad prematura.
A este respecto sería interesante tener en cuenta una serie de datos estadísticos, que en demografía se denomina sex ratio (número de hombres
por cada 100 mujeres).
Naturalmente, las muestras epigráficas latinas
tienen el problema de representatividad que ya
hemos comentado, pero todo desequilibrio fuerte sobre esta proporción nos estaría indicando la
doble dirección: un problema demográfico o un
problema sociológico.
La desproporción entre hombres y mujeres
constituye una constante en todas las colecciones
epigráficas del Imperio romano. El estudio comparativo debe hacerse con los epígrafes funerarios
exclusivamente, ya que las inscripciones honoríficas o religiosas dan muestras mucho más sesgadas acerca de la preponderancia social masculina.
Al mismo tiempo, y valiéndonos de los trabajos
realizados en el centro de la Península por investigadores como Abascal (1994) o Gozalbes (2001),
la sex ratio es la siguiente: el noroeste presenta
una sex ratio más alta que las que encontramos en
el sur de la Península, como es el caso de Córdoba
o Gades, que quiere decir esto que la desproporción entre mujeres y hombres era mucho mayor
en nuestra área de estudio que en las ciudades del
sur de la Península.
Si analizamos la sex ratio de cada uno de los
conventus del noroeste, obtenemos la siguiente
gráfica. En ella se puede observar una mayor desproporción en los conventus Asturum y Lucensis
que en el Bracaraugustanus. Esta mayor desproporción de hombres frente a mujeres se debe a
la presencia del ejército y a la intensa labor extractiva que tuvo lugar en el NO durante la época
romana, ambas actividades desempeñadas por
miembros del sexo masculino.
85
FIGURA 3. Sex ratio en la península Ibérica (Gozalbes
2001, 105).
3. Conclusiones
En conclusión, la introducción de prácticas
funerarias latinas y su visualización son el mejor
ejemplo del sincretismo que se desarrolló con la
llegada romana al NO.
Derivado de esto, se puede inferir la presencia
o ausencia de la representación femenina en la
epigrafía funeraria, y tomando como referencia
a las hipótesis barajadas, determinamos que no
podemos hablar de una mayor supervivencia de
mujeres frente a los hombres, ya que el número de
dedicantes es en su mayoría masculino. Y son los
maridos el grupo más representativo.
A partir de la conclusión anterior, también interpretamos que existe una marcada diferenciación social, derivada del poder económico que ostenta el hombre con respecto a su esposa.
Teniendo en cuenta las sex ratio analizadas, podemos determinar, por un lado, que en el NO existe una menor consideración por la mujer respecto
a otras zonas de Hispania, con valores similares
a las zonas de sex ratio más altas del Imperio. Y
por el otro, que existió un factor demográfico resultante de una mayor presencia masculina derivada del asentamiento del ejército y de las tareas
extractivas.
4. Bibliografía
ABASCAL, J. M. 1994: Los nombres personales en las
inscripciones latinas de Hispania, Murcia.
GARCÍA, S. M.ª 1993: «La romanización de la provincia de la Gallaecia: aspectos sociales», en:
86
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Actas del XXII Congreso Nacional de Arqueología, vol. I, Vigo, 197-200.
GOZALBES, E. 2001: «La proporción de las mujeres
en la epigrafía funeraria romana del interior
de Hispania», Espacio, Tiempo y Forma, Serie
II, H.ª Antigua, 14, 95-114.
PEREIRA, G. 1991: Corpus de Inscripcións Romanas
de Galicia. Tomo 1: Provincia de A Coruña, Consello da Cultura Galega, Santiago de Compostela.
REDENTOR, A. 2002: «Epigrafia romana da região
de Bragança», Trabalhos de Arqueologia, 24,
Lisboa.
– 2011: A cultura epigráfica no conventus Bracaraugustano (pars Occidentalis): percursos pela
sociedade brácara da época romana, vol. II, Facultade de Letras de Coimbra, Coimbra.
RODRÍGUEZ, L. 2004: Gallaecia: romanización y ordenación del territorio, Dykinson, Madrid.
VAQUERIZO, D. 2001: «Formas arquitectónicas funerarias de carácter monumental en Colonia
Patricia Corduba», AEspA, 74, 131-160.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
87
APROXIMACIÓN AL ESTUDIO DE LA MIGRACIÓN Y LOS
MOVIMIENTOS SOCIALES A TRAVÉS DE LA EPIGRAFÍA
FUNERARIA DE LA LEGIO VII GEMINA DURANTE
EL ALTO IMPERIO
JUDITH IGLESIAS GÓMEZ1
Resumen
La presente comunicación pretende ser una
aproximación al estudio de la migración y de los
movimientos sociales dentro del ejército romano durante el Alto Imperio a través del estudio
de las lápidas funerarias de la Legio VII Gemina y sus tropas auxiliares. El objetivo principal
es dar a conocer la existencia de movimientos
sociales en el noroeste de Hispania favorecidos
por la vinculación al ejército romano a través del
estudio epigráfico de los diferentes integrantes
del ejército de dicha zona. Es observable que el
ejército se componía de individuos procedentes
de diversos grupos fuertemente diferenciados,
pero cuya adhesión militar les permitía ascender
socialmente.
1. De indígenas a soldados: la presencia
astur en el ejército romano
La romanización del noroeste de la península Ibérica supondría un cambio en la realidad vivida en Hispania hasta dicho momento. El final
de las guerras astur-cántabras en el año 19 a. C.
vino acompañado de un reajuste de las unidades
militares del ejército romano que habían participado en la conquista de dicho territorio. Esto
supondría un cambio en los modelos de vida de
la población indígena del lugar. A pesar de que en
un primer momento muestran una fuerte oposición a la presencia romana en el territorio, poco a
poco los astures verán en el ejercicio militar una
realidad que favorece bastante su situación y que
les permite conseguir la posibilidad de una promoción social y la adquisición de privilegios que
1. Universidad de León - jigleg00@estudiantes.unileon.es
elevarían su modo de vida. Sin embargo, esta realidad debe dividirse en dos periodos:
2. Periodo de Augusto y la dinastía julioclaudia (19/20 a. C - 68 d. C.)
La participación de astures en las unidades de
tropas romanas se realizará mediante levas constantes y continuadas, que en un primer momento
serían de carácter forzoso pero que, poco a poco,
pasarán a ser voluntarias. Estos reclutamientos
tenían un doble objetivo: por un lado, el engrosamiento de los destacamentos de tropas auxiliares,
y por otro, el reemplazamiento de los soldados
que se hubiesen licenciado o hubiesen fallecido en
combate. De este modo, muchos indígenas pasarán a formar parte de los destacamentos militares
dependientes de la Legio VI Victrix y la X Gemina,
como son el Ala I de los Gigurros o el Ala Parthorum (Santos Yanguas 1988).
En un primer momento se produce una fuerte emigración de las gentes del NO hispano hacia
otros lugares del Imperio. Ello se debe a que, tras
la pax romana, la presencia de fuertes y amplios
contingentes militares en la Península era algo
innecesario, y la existencia de contingentes militares establecidos como elementos represivos fue
cada vez menor. Los siguientes años a la pacificación del NO vendrán marcados por la necesidad de abastecer de personal a los destacamentos militares establecidos a lo largo del limes, de
tal forma que los nuevos elementos de población
romanizada, entre los que destacan los astures,
serán los individuos que se empleen como tropas
auxiliares de dichos ejércitos, acudiendo a lugares como Germania, Britania o Dacia, entre otros
88
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Reproducción
de la estela de Pintaius.
Museo San Isidoro,
León. Foto: Judith
Iglesias Gómez.
(Santos Yanguas 2003). Destinos que, cabe destacar, se convertirán en su posterior hogar.
Lápida de Pintaio:
Pintaius Pedicili / f(ilius) Astur Trans/montanus
castel(lo) / Intercatia signifer / c(o)ho(ortis) V
Asturum / anno(rum) XXX stip(endiorum) VII
/ h(eres) ex t(estamento) f(aciendum) c(uravit)
«Pintaio, hijo de Pedicilo, astur transmontano
del fuerte de Intercatia. Signifer de la cohorte
V de los astures; de 30 años, con 7 años de servicio. Su heredero se encargó de hacerlo según
el testamento.»
Este legionario ostentaba un cargo de suboficial que cumplía con las funciones de portaestandarte. Provenía del territorio de los astures transmontanos, Asturias. Su reclutamiento parece que
sucedió bajo el mandato de los emperadores de
la dinastía julio-claudia (Santos Yanguas 2003).
La inscripción fue encontrada en Bonna (actual
Bonn) (Somoza 1908).
3. Periodo de los flavios (69-96 d. C.) y los
antoninos (96-192 d. C.)
Cabe destacar que la coyuntura durante este
periodo de tiempo supuso un antes y un después
en la presencia social del ejército romano. Tras la
promulgación del ius latii de Vespasiano, el número de personas con estatus privilegiado o ciudadanía aumentaría considerablemente, lo que haría
más factible un acceso al ejército. Sin embargo,
para entender esta realidad, es necesario remontarse un año atrás, a tiempos de Galba, durante la
APROXIMACIÓN AL ESTUDIO DE LA MIGRACIÓN Y LOS MOVIMIENTOS SOCIALES A TRAVÉS DE LA EPIGRAFÍA FUNERARIA DE LA LEGIO VII GEMINA DURANTE EL ALTO IMPERIO
crisis política, momento en el que se establecerá
la creación de la Legio VII, que permitirá el reclutamiento militar de la población indígena que
infringía la condición de ser ciudadano romano, y
que será subsanada mediante el otorgamiento de
la condición de ciudadanía a los nuevos soldados,
entre cuyos beneficiarios se encontrarían algunos
individuos astures.
No obstante, con el comienzo de la dinastía flavia se dará lugar a un segundo proceso de desmilitarización de la península Ibérica, a consecuencia
del cual la única presencia militar romana en la
Península será la de la Legio VII Gemina, que se
volverá permanente. Existe una vinculación directa de las tropas auxiliares a la Legio VII, como es
el caso del Ala II Flavia Hispanorum, entre otras.
Este asentamiento estable provocó que algunos individuos de la zona fueran reclutados (aunque en menor medida) como soldados destinados
a formar parte de esas tropas. Sin embargo, una
vez cumplido su servicio militar, acabarían echando raíces en el suelo astur, y por lo tanto estaríamos ante una realidad de inmigración de los soldados ya enrolados dentro de la legión, así como
aquellos vinculados a algún conventus hispano, y
que tarde o temprano acabarían vinculados al territorio (Palao Vicente 1998).
Lápida de Lucrecio Próculo:
D(is) M(anibus) / Lvcretio Pr/ocvlo armorvm cvs(todi) / an(norum) XXXV et Val(eriae)
/ Amm(a)e vxs(ori) an(norum) / XXV Lvcretio
Pro(culo) / [fil]io / eorvm / an(norum) / […] posvit / socerpater / avvs / Val(erius) / Marcellinvs.
«Valerio Marcelino, su padre, suegro y abuelo
respectivo, dedicó este monumento a los dioses Manes en memoria de Lucrecio Próculo,
su hijo, custodio de armas, de 35 años, Valeria
Amma, de 25 años, esposa de este, y al hijo de
ambos, Lucrecio Próculo, de […] años» (Palao
Vicente 1998).
Lucrecio Próculo era soldado de la LVII Gemina, en la que estaba encargado de la custodia
de las armas. Fue su suegro, Valerio Marcelino,
quien dedicó la inscripción, en torno a la segunda
mitad del siglo II, por lo que parece probable que
fuese originario de dicha población o de sus alrededores (Santos Yanguas 2010).
Lápida de Lucio Corona Severo:
I(ovi) O(ptimo) M(aximo)/ Lucius / Corona S/everus m/iles Leg(ionis) VII / Gem(in)ae
c(enturia) Ve/tti(i) et Octa/via Procula / v(otum)
s(olverunt) l(ibentes) m(erito)
«Lucio Corona Severo, soldado de la Legión
Séptima Gémina. Centuria de Vettius (primer
89
centurión) y Octavia Prócula. Libremente y
con agrado cumplieron su promesa» (Santos
Yanguas 2010).
Antes de referirnos a Lucio, es reseñable explicar quién era Vettius. Este era el jefe de una de
las centurias de la Legio VII Gemina, a la que pertenecía el soldado de esta lápida de Ujo (Mieres,
Asturias), de origen astur (Santos Yanguas 2010).
Es reseñable que el gentilicio Vettius, a pesar de
ser de origen itálico, es un nombre bastante frecuente en las inscripciones hispanas: otro ejemplo
en el ámbito legionario es Titus Vettius Rufus, centurión de la Legio XIII Gemina. El Vettius que nos
concierne fue tribuno de la Legio VII en torno al
siglo II (Palao Vicente 2006).
4. Conclusiones
La vinculación de la población indígena queda
vigente en el registro funerario, y se puede clasificar en dos etapas:
a) Un primer momento bajo la dinastía julioclaudia en el que la romanización de la población
fue un elemento clave. En él se refleja cómo las
adhesiones militares por parte del populus astur
se usarán como método de promoción social y
vinculación a los nuevos modos de vida traídos
por Roma. La emigración de estos grupos sociales
quedará vigente a través del registro funerario encontrado en diversas partes del Imperio.
b) La segunda etapa viene protagonizada por
los herederos de los antiguos astures enrolados
en el ejército en el periodo anterior, así como los
individuos que, unidos al ejército, consiguieron el
estatus de ciudadanos romanos.
Es el caso del establecimiento permanente de
la Legio VII en el NO de la península Ibérica y de
las tropas dependientes de esta. Es un claro reflejo
del proceso de inmigración en el que los soldados
pertenecientes a distintas provincias romanas, así
como algunos provenientes del conventus Asturicense, quedarán vinculados al territorio que se convertirá en su hogar, en un primer momento como
imposición por orden de Galba, pero posteriormente por vinculaciones probablemente sociales,
así como por un sentimiento de adhesión al lugar.
5. Bibliografía
PALAO VICENTE, J. 1998: «Los veterani de la Legio
VII Gemina», Hispania Antiqua, XXII, 174-201.
– 2006: Legio VII Gemina (pia) felix. Estudio de
una legión romana, Universidad de Salamanca,
Salamanca.
90
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
ROLDÁN, J. 1983: «La conquista del norte de Hispania y la participación de los astures en el ejército imperial romano», Lancia, 1, 119-138.
SANTOS YANGUAS, J. 1988: El ejército y la romanización de Galicia, Universidad de Oviedo, Gijón.
– 2003: «Soldados astures en las legiones romanas», Espacio, Tiempo y Forma. Serie II, Historia Antigua, XVI, 141-161.
– 2006: «La crisis del año 68-69 y la reorganización definitiva del ejército romano de ocupa-
ción en territorio de los astures», Aquila Legiones, VII, 109-118.
– 2010: «Oficiales astures en las legiones romanas», Espacio, Tiempo y Forma. Serie II, Historia Antigua, XXIII, 341-368.
SOMOZA, J. 1908: Gijón en la historia general de Asturias, s. n., Oviedo.
SECCIÓN 04. ARQUEOLOGÍA DEL PODER. JERARQUÍAS,
SOMETIMIENTO Y RESISTENCIAS
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
93
ARQUEOLOGÍA DEL PODER. JERARQUÍAS, SOMETIMIENTO
Y RESISTENCIAS
LAURA MARTÍN RAMOS1, MOISÉS ALONSO VALLADARES2,
MARÍA DEL CARMEN JIMÉNEZ ROLDAN3, JUAN MANUEL RÍOS JIMÉNEZ4
Bajo el paraguas de la sesión «Arqueología del
poder. Jerarquías, sometimiento y resistencias» se
agruparon en las JIA celebradas en Tarragona una
serie de ideas que englobaban el poder como elemento de unión.
La naturaleza del poder parece ser abstracta,
residir en la mente del ser humano a través de
ideas, representaciones o simbologías. Sin embargo, esa incursión en la psique humana no podría
realizarse sin un evidente aparato material y, por
tanto, algo rastreable desde la Arqueología en los
diferentes modos en los que se manifiesta.
La propuesta de esta sesión nació con la pretensión de incidir en la importancia del hallazgo
de espacios de encuentro entre un amplio número
de profesionales dedicados a distintas ramas de la
Arqueología. Uno de sus objetivos: abrir la mente
y expandir los diferentes horizontes temporales y
metodológicos. Otro de ellos: ser un lugar donde
se discutiese la relación entre el poder y la sociedad en las diferentes culturas del pasado.
Se proponía así una sesión, necesariamente
transversal, en la que las intervenciones reflexionasen en torno a puntos comunes que se pudiesen
definir alrededor de las distintas manifestaciones
en las que se ha materializado el poder a lo largo
de la Historia.
Señalamos básicamente dos temas a discutir:
Arqueología del poder y las jerarquías y Arqueología de la resistencia. Partíamos de una serie de
planteamientos: ¿Es la Arqueología del poder la
de sus más grandes representaciones? ¿O es la de
las pequeñas acciones del día a día que se oponen
a la línea general? ¿Dónde se encuentran y qué
puntos comparten? Con estos se fomentaba a los
participantes a dar un salto desde el parco ámbito
de lo político, para explorar otros espacios. Nos
referíamos a cualquier manifestación de control
sobre otra u otras personas, a la segregación y la
exclusión social, a la dominación de las mujeres,
a las prohibiciones y los paradigmas de superioridad religiosa. También nos referíamos a las manifestaciones de autogestión, a las respuestas al
poder central o, más aún, a los lugares de contacto entre ambos, a los puntos de encuentro entre
quien somete y el sometido.
Con un espíritu de debate e interés por ver
nuevos puntos de vista como bandera, tuvo lugar
una sesión de una temática un tanto trasversal y
atemporal. Así, se ofrecía la posibilidad del intercambio de perspectivas e ideas, que permitía la
reflexión y la discusión histórica con una amplia
panorámica.
Fruto de esta llamada realizada por la organización de la sesión fueron las ocho comunicaciones que terminaron conformándola. Los objetivos
y los resultados de esta llamada quedaron bien
reflejados en la celebración el jueves 10 de mayo
de 2018.
Las dos primeras comunicaciones dieron buena cuenta de las posibilidades del análisis del poder en época prerromana a través de la materialidad. Inició la jornada la intervención de Gerard
Fernàndez, con su trabajo sobre las primeras llegadas de objetos de hierro en Cataluña. Seguidamente Oriol Cuscó discutió sobre una constatación en el entramado constructivo de la Layetania
ibérica: aquellas fortificaciones más complejas se
encontraban en los asentamientos más importantes a nivel político, social y económico.
1. Grupo de Investigación THARG (HUM 162). Universidad de Granada - lramos@ugr.es
2. Departamento de Historia Medieval y Ciencias y Técnicas Historiográficas, Universidad de Granada - moaloval@
gmail.com
3. Departamento de Historia Medieval y Ciencias y Técnicas Historiográficas, Universidad de Granada - mcjroldan@
ugr.es
4. Departamento de Historia Medieval y Ciencias y Técnicas Historiográficas, Universidad de Granada - arqueologia@
jmriosjimenezarqueologia.com
94
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
El trabajo de Amaia Solaegui se centró en las
inhumaciones anómalas, que se diferencian de
aquellos lugares de enterramiento, costumbres y
prácticas rituales más comunes. Enterramientos
no convencionales que traspasan la frontera de lo
establecido por una determinada cultura. En este
caso, la sociedad romana.
A continuación, Laura Martín ofreció su participación con un trabajo sobre la búsqueda de los
poderes en la Tierra de Alhama de Granada, centrando sus intereses en algunos iconos estructurales de la medina y otras estructuras diseminadas
por el territorio: las torres.
Los espacios de interés de la comunicación de
Carlos Díaz y Alberto Puig saltaron el charco para
poner de manifiesto la imposición de unas personas sobre otras. De unas culturas, en concreto la
castellana, sobre la cultura que habitaba lo que
más tarde fue el norte de Nueva España.
La sexta intervención fue la de Nicolás Pastor
Alameda. En ella explicó el uso de la metodolo-
gía utilizada para el análisis de grafitis. El uso de
estas novedosas técnicas dentro de la disciplina
arqueológica sirve de gran valor a la hora de comprender la represión y el control político de espacios destinados a la privación de libertad física
durante la Guerra Civil.
Las dos últimas comunicaciones tuvieron una
íntima relación con las tesis de Foucault. En la penúltima, Josu Santamaría mostró la cara amable
del poder de finales del siglo XIX. Cómo la imposición de unas normas culturales, de comportamiento, de ser, fueron impuestas por esa sociedad
novecentista/decimonónica a veces bajo el engañoso y amable rostro de la caridad.
La última intervención, realizada por Laia Gallego, discute sobre el interesante mundo de las heterotopías: la ambigüedad del uso de los espacios,
algo se crea con un fin y luego es reutilizado para
otro. Sin duda, el utilizar espacios con otro fin del
que fueron diseñados por la norma, por lo establecido, es una clara señal de resistencia al poder.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
95
INTRODUCCIÓ I ASSIMILACIÓ DELS PRIMERS OBJECTES
DE FERRO A CATALUNYA (S. VIII-VI AC)
GERARD FERNÀNDEZ MOLINA1
1. Introducció
Una de les principals problemàtiques sorgides
en cronologies de la primera edat del ferro gira
entorn de l’origen i l’assimilació dels primers objectes de ferro al nord-est de la península Ibèrica.
La seva adscripció cultural, així com la caracterització de les seves pautes de consum, han estat,
per a l’Arqueologia, una de les qüestions cabdals
a resoldre en el transcurs de les darreres dècades,
i configura encara avui en dia una problemàtica
inherent a aquest període històric.
A diferència d’altres sectors de la Península,
com és el cas de les costes meridionals i atlàntiques, on sembla que els contactes amb diversos
agents mediterranis haurien introduït les primeres manufactures en ferro, a Catalunya la filiació
cultural del fenomen es mostra incerta. L’arribada
d’aquest metall es debat entre la idea d’influències
culturals i moviments poblacionals procedents de
l’altra banda dels Pirineus (Bosch Gimpera 1932;
Tarradell 1962; Pons i Brun 1984), els contactes
precolonials fenicis, constatats tant al golf de Lleó
com al curs baix del riu Ebre (Maluquer de Motes 1969; Ruiz Zapatero 1985), i la hipòtesi d’un
contacte primigeni de tipus grecoetrusc (Janin i
Chardenon, 1998).
La transició del bronze final-primer ferro al
nord-est peninsular ve marcada per una confluència de factors, entre els quals l’aparició de
tendències culturals i grups humans de tradicions incineradores procedents del sud-est francès,
al mateix temps que les primeres evidències de
contactes comercials mediterranis. Aquestes novetats, conjuntament amb la dinàmica interna
del substrat cultural local, mostren en el registre
arqueològic un procés de regionalització sobre el
qual té lloc l’assimilació dels primers objectes de
ferro. L’estudi d’aquestes manufactures a escala
regional permet caracteritzar les dinàmiques comercials esdevingudes a Catalunya durant la pri-
mera edat de ferro, però a la vegada es presenta
com un element clau per comprendre els canvis
produïts en les estructures polítiques d’aquestes
comunitats.
Els primers objectes de ferro es troben majoritàriament amortitzats en contextos funeraris reservats a les elits emergents, i per tant reflecteixen
l’evolució de les mutacions polítiques dels diferents grups que configuren el substrat cultural del
nord-est de la península Ibèrica entre els segles
VIII i la primera meitat del segle VI aC.
Les presents línies pretenen, doncs, reflexionar
sobre el procés d’introducció, consum i amortització dels primers objectes de ferro a Catalunya
i, al mateix temps, caracteritzar la relació existent
entre el desenvolupament del teixit comercial i
l’evolució del poder en un moment on s’assisteix
a la gestació de les elits locals.
2. Metodologia
El present article analitza i compara, des d’una
perspectiva tipològica, una mostra de la població
total d’objectes de ferro compresos entre aquestes
centúries, i els diferents territoris que componen
el substrat cultural (fig. 1). L’anàlisi estadística es
veu condicionada pel repartiment desigual de les
dades en les diferents fàcies culturals, així com
pel context de localització de les peces, majoritàriament funerari, fet que pot alterar els tipus d’objectes representats.
3. Resultats
L’assimilació dels primers objectes de ferro a
Catalunya a escala funcional ja ha estat caracteritzada per diversos autors (Rovira i Hortalà
1998; Fernàndez Molina 2017). Sembla seguir
un mateix patró, representat, tot i que amb certs
1. Université Paul Valéry - Montpellier 3 - gefmolina@gmail.com
96
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Mapa topogràfic de Catalunya on es
mostren les principals regions culturals de la
primera edat del ferro, disposades en funció de la
dispersió territorial dels ferros més antics trobats
fins avui dia. En blau: les terres del curs inferior
de l’Ebre-Ilercavònia. En verd: la regió del SegreCinca / Ilergècia. En porpra: el Camp de TarragonaPenedès / Cessetània. En taronja: regió de la Costa
Central-Depressió Prelitoral / Laietània. En vermell:
territori de les comarques gironines-Empordà /
Indigècia. Font: autor.
matisos, per l’esquema clàssic sobre el desenvolupament de la tecnologia del ferro descrit per
Snodgrass (1980), denominat bronze shortage
theory.
En totes les regions culturals es percep un
comportament similar, en què en una primera
etapa transitòria entre el bronze final i la primera edat del ferro predominarien els objectes
lligats a l’àmbit de la vestimenta i l’ornamentació, acompanyats pels objectes de funcionalitat
múltiple i d’ús personal, com els ganivets. En el
transcurs del segle VII aC haurien aparegut elements propis de l’esfera del banquet, com és el
cas dels asts i els garfis, que reflectirien una mateixa dinàmica que afectaria la franja costanera
de la mediterrània nord-occidental, en la qual
les elits tractarien d’emular els costums de l’aristocràcia grega, reforçant el seu rol diferenciat.
Finalment, en una fase més tardana, vers la primera meitat del segle VI aC, aquesta tendència
hauria pres un rumb diferent, marcat per l’aparició, d’una banda, d’elements propis del món
bèl·lic, representatius de l’emergència d’un nou
concepte de les elits, i de l’altra, tot i que en menor mesura, de les eines.
Contràriament a l’anàlisi funcional, l’anàlisi
tipològica dels primers objectes de ferro ha procurat uns resultats heterogenis que s’adapten o
se circumscriuen a les dinàmiques particulars de
les diferents àrees culturals de Catalunya, i que
s’ajustarien en principi a la proposta d’un model
multifocal d’introducció dels primers objectes de
ferro al nord-est de la Península, descrit per Carme Rovira (1998).
Pel que fa a la vestimenta, s’observen pautes
de consum diferenciades en funció de les regions
culturals. Les fíbules serpentiformes, pròpies de
la segona meitat del segle VII aC, i les fíbules de
ressort bilateral, de manera més tardana (segle VI
aC), apareixen més representades a la meitat nord
de Catalunya (fig. 2), i presenten paral·lels tipològics indiscutibles amb el sud-est francès (Pons i
Brun 1984).
Així mateix, la similitud tipològica existent entre els ganivets de ferro catalans i els de les fàcies
Grand Bassin I del golf de Lleó, així com amb algun prototipus de la Itàlia septentrional, mostren
també la clara influència transpirinenca (Rovira
i Hortalà 1998), que relaciona de nou la meitat
septentrional de Catalunya, com a mínim, amb el
sud-est francès (fig. 2).
Per la seva banda, les armes semblen estar associades a la construcció d’un nou concepte de
l’elit, lligat a l’aparició de la figura del guerrer. En
aquest àmbit cal assenyalar que la concentració
més elevada d’armes es troba a la meitat nord de
Catalunya (fig. 3), mentre que en territoris com el
Segre-Cinca, amb fortaleses punyents com la de
Vilars d’Arbeca, la presència d’aquests elements és
irrisòria. Així mateix, la baixa representativitat de
les armes a les Terres de l’Ebre durant el primer
ferro contrasta amb el seu pes durant l’ibèric antic, sobretot pel que fa a les necròpolis de Mianes,
Mas de Mussols i l’Oriola. Aquest fenomen podria
reflectir una evolució arrítmica de les necessitats
de les elits emergents.
4. Conclusions
Durant la transició del bronze final vers la
primera edat del ferro hauria existit una xarxa
de contactes o de circulació de materials entre el
nord-est de Catalunya i el sud-est francès. L’evidència de paral·lels tipològics amb la Itàlia septentrional fa pensar en un contacte segurament
indirecte entre aquests dos territoris, en què les
societats de les costes del golf de Lleó haurien
pogut jugar un paper intermediari (Graells i Fabregat 2014). Aquest plantejament relativitzaria el
pes de les propostes partidàries de l’esfera fenícia,
i en limitaria l’àmbit de més impacte a les àrees
del vessant sud del riu Llobregat, on el seu pes
sembla indiscutible, sobretot al curs inferior de
l’Ebre a finals del segle VIII aC.
INTRODUCCIÓ I ASSIMILACIÓ DELS PRIMERS OBJECTES DE FERRO A CATALUNYA (S. VIII-VI AC)
97
FIGURA 2. Histograma
on es mostra el
nombre total de fíbules
serpentiformes, fíbules
de ressort bilateral i
ganivets, expressats
en nombre mínim
d’individus, en funció de
les àrees culturals de la
primera edat del ferro.
Font: autor.
FIGURA 3. Histograma
on es representa el
nombre total de puntes
de llança, virolles
i altres elements
armamentístics en
funció de les unitats que
configuren el substrat
territorial. Font: autor.
Els resultats obtinguts permeten esbossar una
assimilació dels materials fèrrics heterogènia, lligada a les particularitats i les necessitats dels diferents grups humans que configuren el substrat
cultural, però també a la intermediació i l’impacte desigual dels diferents agents comercials que
van intervenir en la seva transformació. L’establiment d’aquestes xarxes d’intercanvi podria
respondre a la demanda canviant generada per
les mateixes societats locals. Les pautes de consum mostren com existeix una demanda, si bé no
gaire diferent pel que fa a categories funcionals,
heterogènia en relació amb les tipologies i que, a
més, evolucionaria a ritmes diferents. Per aquest
motiu, no seria estrany pensar que el motor de
canvi d’aquestes societats siguin les mateixes
mutacions internes, que definiran com es desenvolupa aquest teixit comercial, independentment
de l’agent interventor.
5. Bibliografia
BOSCH GIMPERA, P. 1932: Etnología de la Península
Ibérica, Alpha, Barcelona.
FERNÀNDEZ MOLINA, G. 2017: «Introducció i assimilació dels primers objectes de ferro a Catalunya (s. VIII-VI aC). Patrons de consum i inici
de les activitats siderúrgiques», treball de fi de
grau, Universitat de Barcelona, Barcelona.
98
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
GRAELLS I FABREGAT, R. 2014: «Problemas de la
cultura material. Las fíbulas itálicas de la Primera Edad del Hierro en el Golfo de León Occidental», Madrider Mitteilungen, 48, Madrid,
212- 315.
JANIN, T.; CHARDENON, N. 1998: «Les premiers objets en fer en Languedoc Occidental et en
Roussillon (VIIIe s. av. n. è.): types, chronologie
et origine», a: FEUGERE, M.; SERNEELS, V. (ed.),
Monographies Instrumentum, 4, Mergoil, Montagnac, 56-64.
MALUQUER DE MOTES, J. 1969: «Los fenicios en Cataluña», a: V Symposium Internacional de Prehistoria Peninsular, Ayuntamiento de Jerez de la
Frontera 1968, Barcelona, 241-250.
PONS I BRUN, E. 1984: «L’Empordà, de l’Edat del
Bronze a l’Edat del Ferro: 1100-600 a.C.», Sè-
rie Monogràfica, IV, Centre d’Investigacions
Arqueològiques de Girona, Girona.
ROVIRA I HORTALÀ, C. 1998: «Les premiers objets
de fer en Catalogne (VIIe-VIe s. av. n. ère)», a:
FEUGERE, M.; SERNEELS, V. (ed.), Monographies
Instrumentum, 4, Mergoil, Montagnac, 45-55.
RUIZ ZAPATERO, G. 1985: Los campos de urnas del
NE de la Península Ibérica, tesi doctoral de la
Universidad Complutense de Madrid, vol. II,
846-860.
SNODGRASS, A. 1980: «Iron and Early Metallurgy in
the Mediterranean», a: WERTIME, T. A.; MULHY,
J. D. (ed.), The Coming of the age of iron, Yale
University Press, 335-374.
TARRADELL, M. 1962: Les arrels de Catalunya, Vicens Vives, Barcelona.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
99
LAS DESIGUALDADES SOCIALES EN EL MUNDO FUNERARIO
ROMANO Y TARDOANTIGUO: LAS INHUMACIONES ANÓMALAS
AMAIA SOLAEGUI DE LOIZAGA1
1. Introducción
El presente artículo pretende comprender las
desigualdades sociales reflejadas en el mundo
funerario romano y tardoantiguo a través de las
llamadas inhumaciones anómalas, o muertes singulares, halladas en los últimos años en los yacimientos hispanos. Y a través de estas evidencias
materiales, conocer los casos más significativos
e intentar dar una posible interpretación de cada
uno de ellos con el objetivo de percibir la naturaleza de los mismos.
2. La muerte en el mundo hispano
El fallecimiento de un individuo era un pasaje muy difícil que afectaba a toda la comunidad. La sociedad romana reflejaba este acontecimiento mediante la elaboración de un conjunto
de ceremonias fúnebres cuyo principal objetivo
era otorgar a los difuntos la paz y dignidad que
merecían (Orfila 2006, 56-57). El otorgarle esa
dignidad implicaba un lugar, la sepultura, donde descansaba la figura del alma. Se sancionaba
mediante multas la violencia y el deterioro de la
tumba, y era algo muy temido para ellos (Vaquerizo 2007, 139).
Para los romanos, las ceremonias fúnebres (funus) eran muy importantes y variaban en función
del rango económico y social de la persona; conocemos de este modo el funus translaticium, el funus militare, el funus publicum y el funus imperator (Arce 1988). En algunas ocasiones las familias
contrataban los servicios de los libitanari, empresas dedicadas a organizar las pompas fúnebres.
Los servicios contratados podían ser para realizar
un funeral suntuoso y público o modesto y privado, dependiendo de la situación económica de los
familiares (Orfila 2006, 59-60).
1. Universidad de Granada - absolaegui@hotmail.com
Para aquellas personas que no podían hacerse
cargo de los gastos del funeral y su posterior mantenimiento, se crearon los colegios funerarios,
que garantizaban la compra del terreno, la construcción y los cuidados de la sepultura durante
varios años (López 2010b, 20). Estos individuos se
asociaban al colegio mediante el pago de una tasa
de inscripción y el regalo de un ánfora de vino de
cierta calidad (López 2010a, 55).
A fines del siglo IV d. C. se produjo el triunfo
del cristianismo gracias a la situación de grave
crisis social y desesperanza de la población durante el bajoimperio, difundiéndose con gran
rapidez entre las clases sociales inferiores y en
especial entre las mujeres (Fernández 2016, 96,
V2). Esta nueva religión aportó grandes cambios
ideológicos, como la consideración de la muerte física como una etapa hacia la resurrección,
que garantiza la salvación del alma después de
la muerte, entendiendo el cadáver como un elemento próximo y positivo. Los enterramientos, a
partir de estos momentos, se van a caracterizar
por el uso exclusivo de la inhumación, la reutilización de las sepulturas y la prohibición de
las exhibiciones teatrales de las plañideras romanas.
3. Inhumaciones anómalas
Las inhumaciones anómalas o muertes singulares «son aquellos enterramientos no convencionales con relación a la cultura, la población o la
época a la que pertenece, entre otras muchas, del
tipo de sepultura, la posición del difunto, orientación o características estructurales de la misma,
la colocación del cadáver o las prácticas rituales
asociadas a la forma intencionada de su deposición» (Vaquerizo 2014, 221). Este tipo de práctica
se asocia a individuos que han sido víctimas de
100
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
batallas, ejecuciones judiciales, masacres, asesinatos, plagas, sacrificios y suicidios (Ripoll y Molist 2014, 25).
abortos, y eran consideradas como portadoras de
la cólera divina. Por lo que su muerte es vista con
cierto recelo, solo mitigable por la elaboración de
un conjunto de prácticas rituales específicas (Fernández 2016, 144, V2)
4. Casos
4.2 Periodo tardoantiguo
4.1 Periodo imperial
Valentia
En la necrópolis romana de la calle Quart de
Valencia (siglos I-III d. C.) se han documentado
un total de 11 inhumaciones anómalas, ya que
aparecen en decúbito prono. Dentro de este grupo destacan los casos de enfermedades infecciosas:
– Posible caso de lepra en un individuo masculino adulto joven de entre 25 y 35 años, que presenta lesiones como periostitis tibial y ensanchamiento del agujero nutricio (Polo y García 2002,
142).
– Posible caso de tuberculosis vertebral en un
individuo masculino adulto joven de entre 21 y 29
años, que presenta lesiones que afectan a la cavidad purulenta fistulizada entre la L5 y la S1; probablemente se trate del mal de Pott (Polo y García
2002, 143)
Este tipo de enterramientos está asociado posiblemente con las personas más desfavorecidas
como pueden ser los pobres, los enfermos y los
desarraigados (Villalaín et al. 2004, 303)
Augusta Emerita
Primer puticuli2 documentado en el sector suroriental de Augusta Emerita, concretamente en
el solar correspondiente al cuartel de Artillería.
Este puticuli o pudridero (siglos I-II d. C.) es una
gran fosa común rellenada con basura en cuyo
interior se documentaron un total de 64 inhumaciones, siendo la gran mayoría mujeres y niños.
Las posturas que presentan son sumamente inusuales y con orientaciones muy heterogéneas,
lo que hace pensar que algunas fueron arrojadas
directamente a la fosa mientras que otras fueron
cuidadosamente colocadas. Este tratamiento diferencial viene dado por la presencia de ajuar,
como la aparición de restos de hueso de animales articulados en los pies (Márquez y Pérez
2005).
La presencia mayoritaria de mujeres en este
tipo de enterramientos se ha identificado con
temas relacionados con la concepción de seres
deformes, el adulterio, el envenenamiento y los
Zona del Vallés (Cataluña)
Primeros casos de estudio sobre la reutilización de los silos o pozos como lugares de enterramiento. Estos asentamientos estaban compuestos
por 9 estructuras, en cuyo interior se localizaron
un total de 57 individuos de diferentes edades y
sexos. Las posturas que presentaban eran muy
peculiares y forzadas, producto del lanzamiento indiscriminado de los cuerpos al interior del
silo, sin ningún tipo de cuidado. Dentro de estos
descubrimientos el más importante es el de Can
Gambús-1, por tratarse del primero en ser localizado en la zona. Este yacimiento cuenta con un
total de 11 estructuras, en cuyo interior se encontraron 15 individuos acompañados por numerosos animales.
Lo más probable es que nos encontremos ante
esclavos y siervos que trabajaban en las fincas rústicas y explotaciones rurales en Hispania. El estar
enterrados junto con los animales se cree que es
debido a que no eran considerados personas. Otra
lectura es que estos individuos, al no recibir un
enterramiento, no pertenecían a ninguna comunidad del asentamiento (Roig 2009).
5. Conclusiones
El mundo funerario romano y tardoantiguo
es muy heterogéneo en lo referente al mundo funerario. Gracias a los últimos descubrimientos
en materia de inhumaciones anómalas hemos
podido conocer que los sectores de la sociedad
más desfavorecidos son los pobres, los enfermos y las mujeres. Lo que subyace en este tipo
de prácticas es el miedo que sentían los romanos a estos muertos «amenazantes» que podían
volver a la tierra, bajo el nombre de lemures o
larvae, para vengarse por la marginalidad sufrida, por las circunstancias de su muerte o por su
carácter prematuro (Vaquerizo 2011, 95; López
2010b, 18). Durante la Tardoantigüedad el miedo a los muertos desaparece, y los únicos casos
documentados son de individuos no considerados como ciudadanos libres.
2. Cementerio público creado en época de augustea que cuenta con numerosas fosas comunes en forma de pozos donde
son arrojados los cuerpos de indigentes y esclavos.
LAS DESIGUALDADES SOCIALES EN EL MUNDO FUNERARIO ROMANO Y TARDOANTIGUO: LAS INHUMACIONES ANÓMALAS
6. Bibliografía
ARCE, J. 1988: Funus Imperatorum: los funerales
de los emperadores romanos, Alianza Editorial,
Madrid.
FERNÁNDEZ, L. 2016: Espacios y usos funerarios en
Onoba y su área de influencia entre los siglos II
a. C. - VII d. C, tesis doctoral, Universidad de
Huelva.
LÓPEZ, A. 2010a: Hic siti sunt. Ampurias funeraria:
rituales y cambios sociales desde el siglo VIII a. C.
hasta la antigüedad tardía, tesis doctoral, Universidad Nacional de Educación a Distancia.
– 2010b: Arqueología del mundo funerario en la
Península Ibérica (siglos V-X), Ediciones de la
Ergástula, Madrid.
MÁRQUEZ, J.; PÉREZ, C. 2005: «El primer puticuli documentado en Augusta Emerita: contextualización topográfica y cronológica», Mérida, Excavaciones Arqueológicas (2002), 8, Mérida, 533-545.
ORFILA, M. 2006: «Los lugares de enterramiento en
Granada desde sus inicios hasta la época islámica» en: LÓPEZ-GUADALUPE, J. J. (ed.), Memoria de
Granada. Estudios en torno al cementerio, Emucesa (Empresa Municipal de Cementerio y Servicios Funerarios de Granada S.A.), Granada.
POLO, M; GARCÍA, E. 2002: «Ritual, violencia y enfermedad. Los enterramientos en decúbito
prono de la necrópolis fundacional de Valentia», Saguntum, 34, Valencia, 137-148.
101
RIPOLL, G.; MOLIST, N. 2014: «Cura mortuorum en
el nordeste de la Península Ibérica, siglos IV al
XII d. C.», Territorio, Sociedad y Poder, 9, Universidad de Oviedo, 5-66.
ROIG, J. 2009: «Asentamientos rurales y poblados
tardoantiguos y altomedievales en Cataluña (s.
VI al X)», en: QUIRÓS, J. A. (ed.), The archaeology
of early medieval villages in Europe, Universidad del País Vasco.
VAQUERIZO, D. 2007: «La muerte en la Hispania
romana. Ideología y prácticas», en: BARCA-DURAN, F. J; JIMÉNEZ ÁVILA, J. (eds.), Enfermedades,
muerte y cultura en las sociedades del pasado:
Importancia de la contextualización en los estudios patológicos, I Encuentro Hispano-luso de
Paleopatología - Congreso Nacional de Paleopatología 2005, Cáceres, 135-158.
– 2014: «Mortes singulares y miedo a los muertos
en el mundo romano: reflexiones, indicios, escatología», en: NEIRA JIMÉNEZ, M. L. (ed.), Religiosidad, rituales y prácticas mágicas en los mosaicos romanos, Creaciones Vincent Gabrielle,
Madrid, 211-246.
VILLALAÍN, J. D.; POLO, M.; GUÉRIN, P.; GARCÍA, E.
2004: «La fundación de Valentia y sus primeros
pobladores. Primeras evidencias osteoarqueológicas de tuberculosis en Hispania», Zona Arqueológica, 4, 3, 292-305.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
103
EN BUSCA DE LOS PODERES EN LA ALHAMA
DE GRANADA MEDIEVAL
LAURA MARTÍN RAMOS1
1. Introducción
En este artículo exponemos una reflexión sobre algunos hitos defensivos de la Tierra de Alhama. El análisis de algunos de estos ha conseguido
que nos aproximemos de algún modo a algunas
de las manifestaciones de diferentes poderes en el
territorio elegido.
2. Medio geográfico
La llamada Tierra de Alhama es una depresión
rodeada de montañas, situada entre la Sierra Gorda, el río Cacín y las sierras de Alhama, Tejeda y
Almijara. Es precisamente en estas últimas (Tejada
y Almijara) donde nace el río Alhama o Marchán.
En cuanto al poblamiento, parece que aquellos
asentamientos de mayor entidad, o por lo menos
aquellos que nos señalan las fuentes, son los que
se encuadran en los ríos, como los actuales municipios de Alhama y Cacín y alquerías que se
asientan en las faldas de las sierras de Tejeda y
Almijara.
Si bien parece que la gran mayoría de alquerías
de nuestro territorio se situaron en las unidades
apenas descritas (figura 1), no debemos olvidar un
hito montañoso sin el cual es imposible comprender la configuración de este territorio en época
medieval. Nos referimos al llamado Boquete de
Zafarraya. Se trata del paso más rápido hacia Granada desde Málaga, que atraviesa las montañas
que lo separan. De hecho, Alhama se encuentra
comunicado con este pasaje siguiendo los caminos naturales usados como vías pecuarias.
De este modo, consideramos importante su
situación intermediaria en el camino natural que
comunica la que era la capital del reino nazarí de
Granada con el puerto más importante de este
mismo, tanto a nivel geoestratético como a nivel
económico y ganadero. De hecho, muy en conso-
FIGURA 1. Imagen con redes de caminos, Alhama y el
Boquete de Zafarraya señalados.
nancia con el título de este texto, a la hora de buscar tales poderes, el control de estos caminos fue
uno de los primeros lugares de atención que nos
vinieron en mente.
3. Objetivos y metodología
La toma de Alhama por las tropas castellanas
dio inicio a la última fase de conquista del Reino
de Granada. Las contiendas entre ambos poderes
durante gran parte de la Baja Edad Media tuvieron como consecuencia la transformación de algunos de los asentamientos dentro de las tierras
nazaríes en villas de frontera. Sin embargo, Alhama no conformó durante mucho tiempo la primera línea de frontera. Es a consecuencia de ello
que creemos que este lugar no podría ser definido
1. Grupo de Investigación THARG (HUM162). Universidad de Granada - lramos@ugr.es
104
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
como uno de los clásicos espacios que se vieron
directamente afectados por el establecimiento
de esta en el sentido más tradicional. Mientras
que Alcalá la Real o Moclín sí que se convirtieron
en lo que ha venido a catalogarse como villas de
frontera.
De todos modos, nos preguntamos: ¿qué puede
decirnos el registro material sobre cómo influyó
en el territorio denominado la Tierra de Alhama
esa situación fronteriza entre el reino nazarí de
Granada y el de Castilla? Esta no es una pregunta
a la que se pueda responder fácil o rápidamente.
Para empezar a abordar este complejo tema nos
enfrentamos a dos metas.
La primera se basaba en realizar un imprescindible análisis geográfico. Además del uso de cartografía y bibliografía, el trabajo de recolección
etnográfica ha sido útil. De este modo, queremos
dar las gracias por su tiempo a Silverio Gálvez,
que nos dio información sobre vías pecuarias y los
nombres históricos que se les dan desde la comunidad de la comarca de Alhama de Granada.
En segundo lugar, consideramos necesario
prestar atención al lugar central de esta región.
Nos referimos a la Mad¯ı na de Alhama y a algunos iconos estructurales militares: la alcazaba, las
murallas y otros elementos defensivos. Por otro
lado, realizar un análisis de las torres diseminadas por todo este territorio.
4. Las torres de alquería
Estas torres habían sido ya analizadas por
otras personas de algún modo (algunas aparecen
en los libros Poblamiento y castillos en Granada2
y las Últimas tierras de al-Andalus,3 de Antonio
Malpica, y aparecen también en el libro El patrimonio arqueológico medieval del poniente granadino, de Miguel Jiménez y Luca Mattei.4 Sin
embargo, eran temas que se trataban dentro de
discursos de carácter más general, algunos de
ellos de gran envergadura. Consecuentemente,
notamos como una oportunidad el prestar una
especial atención a estas torres. En concreto, a
su situación territorial. Nos interesaba especialmente:
– Considerar si se encontraban en su mayoría
cerca de alquerías o algún tipo de asentamiento
más pequeño.
– Comprobar, en la medida de lo posible, cuáles de ellas podrían clasificarse como una de las
2. MALPICA CUELLO (1996).
3. MALPICA CUELLO (2014).
4. JIMÉNEZ y MATTEI (2014).
llamadas torres de alquería y cuáles eran en cambio atalayas.
Las torres de alquería aparecen en el mundo
andalusí a partir de la época almohade. Se sitúan
a cotas bajas, es decir, en llanos o a lo sumo en
faldas de colinas. Hasta hace relativamente poco
la historiografía las catalogaba como lugares de
cobijo para las comunidades cercanas.
Sin embargo, parece que el real conocimiento
de su esencia se encuentra todavía en un estado de
la cuestión. En las fuentes, cuando se alude a su
ataque, por parte de las tropas castellanas apenas
hay más de diez personas defendiéndola en alguno
de los casos. ¿Cómo podría ser eso si supuestamente estas torres son de acogida a las personas de alquerías cercanas en caso de ataque? De este modo,
es posible que nos encontremos frente a espacios,
fortines, creados no para proteger a las comunidades en sí, sino para que las comunidades protejan
el fruto de su trabajo: sus cosechas, principalmente. El uso de los graneros se encuentra íntimamente relacionado con las políticas fiscales. De este
modo, nos surgen dos preguntas: ¿Se realiza fiscalización en estos lugares?; ¿En qué modo llegaban
hasta aquí las redes de control del Estado?
Las torres serían construidas por las comunidades campesinas. Pero al igual que se identifican las alcazabas con el lugar de implantación del
poder en el seno urbano, estas torres lo podrían
representar en el ámbito rural.
El primer reconocimiento llevado a cabo con
programas de gestión cartográfica fue en la Torre
Solana (figura 2). Efectivamente, apreciamos que
parece que no es una torre aislada, sino que se
encuentra rodeada de algún tipo de estructura,
como una cerca que cerraría un espacio bajo su
control.
5. Madīna de Alhama
Centrándonos en la medina de Alhama y algunos de sus hitos defensivos, hemos encontrado
restos materiales de la barbacana y algunas torres
a lo largo de la cinta muraria.
Los restos del castillo aparecen hoy en día muy
restaurados, sobre todo tras el fatídico terremoto que asoló la zona el 25 de diciembre de 1884.
Sin embargo, parece que a pesar de ello ha quedado fosilizada la que podría haber sido la torre
del homenaje de la alcazaba de Alhama. Este tipo
de torres son algo ajeno al mundo andalusí hasta
EN BUSCA DE LOS PODERES EN LA ALHAMA DE GRANADA MEDIEVAL
105
FIGURA 2. Imagen LIDAR
de la Torre Solana y el
espacio que la circunda.
Ambos enmarcados
dentro del cuadro.
FIGURA 3. Vista oeste de
la alcazaba de Alhama
de Granada y su posible
Torre del Homenaje.
que comienzan a aparecer por primera vez en el
siglo XII. Se trata del nombre que reciben las torres
residenciales de las fortalezas en las que reside el
poder.5
A ello se suma el hecho de que el ya derribado
acueducto que surtía de agua a la población llegaba directamente a esta torre, según los grabados y
las fuentes a las que hemos tenido acceso. Lo cual,
a nuestros ojos, la convierte posiblemente en un
espacio al que se le ha prestado especial atención.
mos en la ciudad la presencia material de un poder tanto político como económico y social. Nos
referimos a las personas residentes en la torre del
homenaje.
No nos queda más que lanzar algunas preguntas que ayuden en el avance del conocimiento de
este espacio. Especialmente al pensar en las torres
rurales, nos asaltan todavía grandes dudas. Como
de que si eran lugares donde la comunidad guardaba su producción o si también se realizaba allí
la recaudación fiscal.
5. Conclusiones
6. Bibliografía
Como decíamos al inicio, el análisis de la materialidad ha conseguido que nos aproximemos
de algún modo a algunas de las manifestaciones
de diferentes poderes en el territorio elegido. Ve-
5. GARCÍA PORRAS (2014, 56).
BERNÁLDEZ, A. 1962: Memorias del reinado de los
Reyes Católicos, GÓMEZ MORENO, M.; MATA Y CARRIAZO, J. de (eds.), Madrid.
106
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
CARRIAZO RUBIO, J. L. 2003: Historia de los hechos
del Marqués de Cádiz de Rodrigo Ponce de León,
Granada.
ECHEVARRÍA ARSUAGA, A.; FÁBREGAS GARCÍA, A. (coord.)
2016: De la alquería a la Aljama, Madrid.
FERNÁNDEZ MOLES, R.; MARTÍN RAMOS, L. 2017: «Dos
hitos del sistema hidráulico en la ciudad de Alhama de Granada: La mina y el acueducto»,
Çibdad, 2, 373-390.
FERRER RODRÍGUEZ, A. 1976: El paisaje agrario de
Alhama de Granada en el siglo XVIII, Granada.
GARCÍA PORRAS, A. 2014: «La frontera del reino nazarí de Granada. Origen y transformaciones de
un asentamiento fronterizo a partir de las excavaciones en el castillo de Moclín», CeHGR,
26, 53-86.
JIMÉNEZ, M.; MATTEI, L. 2014: Patrimonio arqueológico medieval del Poniente granadino, Granada.
MALPICA CUELLO, A. 1996: Poblamiento y castillos en
Granada, Madrid.
– 2002: Los castillos en al¯ıAndalus y la organización del territorio, Badajoz.
– 2014: Las últimas tierras de alīAndalus, Granada.
PULGAR, Hernando del 1943: Crónica de los Reyes
Católicos, MATA Y CARRIAZO, J. de (ed.), Madrid.
RAYA RETAMERO, S. 1992: Historia de Alhama y sus
monumentos, Granada.
– 2003: Alhama. La huella de una ciudad en sus
documentos 1568-1637, Granada.
– 1997: Historia, leyenda y sociedad en la Alhama
decimonónica, Granada.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
107
ESTUDIO DE CASO SOBRE LA ARQUEOLOGÍA
DE LA REPRESIÓN: LOS GRAFITOS HISTÓRICOS
EN CONTEXTOS CARCELARIOS
NICOLÁS PASTOR ALAMEDA1
1. Introducción
El estudio de los grafitos históricos es una disciplina que nace relativamente temprano, con el
análisis de las marcas de canteros a mediados del
siglo XIX. Pero si nos centramos en su estudio, explorando todos sus matices y posibilidades, nos
encontramos ante una disciplina novedosa y carente de estudios en profundidad.
Si nos centramos en los grafitos históricos nos
encontramos con una disciplina que puede llegar
a ofrecer la misma cantidad de información que
cualquier otra fuente primaria. El estudio de los
grafitos, y en concreto de los grafitos carcelarios,
puede llegar a generar una gran cantidad de datos. Estudios como los que estamos llevando a
cabo en el castillo de Santa Bárbara de Alicante
pretenden poner en vereda el grafiti histórico,
tanto como fuente primaria de gran calidad como
bien patrimonial a conservar y proteger. De esta
manera hemos querido centrar el artículo en este
tipo de manifestaciones, haciendo un corto recorrido por sus tipologías y definiciones.
2. El grafiti carcelario
Gracias a las tipologías y a la producción de los
grafitis podemos llegar a entender de qué manera fueron creados, pero dentro de esta dicotomía
nos queda otra pregunta por resolver, y es el porqué de estas manifestaciones. Como señala Igor
Cerdá Farias, «¿Cómo aproximarnos a unas imágenes pensadas y realizadas por hombres que ya
no están para explicarnos su significado?» (Cerdá
Farias 2007, 9).
El grafiti carcelario, debido al espacio donde se
ha creado, tiene una serie de características que lo
diferencian de otros grafitos históricos. No debemos olvidar que se han creado en un espacio de
1. Universidad de Murcia - nicolas.pastora@um.es
opresión y represión como es un entorno carcelario, y que hay que entender a las personas que
estaban detrás de estas manifestaciones, que pretendían comunicarse; gracias a la interpretación y
a su tratamiento como fuente a través del método
arqueológico, puede abrirse una nueva puerta a
través de la materialización de la represión.
El testimonio que nos ofrece puede llegar a ser
muy atractivo, ya que estas manifestaciones están
creadas dentro de un espacio de supervivencia
(Castillo Gómez 2003, 165). Y ya no solo esto, sino
también un lugar de una inusitada pervivencia artística y epigráfica.
Los espacios citados son predilectos para el
afloramiento de estas representaciones, ya que se
convierten en un lienzo en blanco que invita al recluso a expresar el hecho de haber pasado por una
situación de represión (Navarrete y López 2006,
28). De esta forma, no sería exagerado pensar en
estos grafitis como la materialización directa de
un contexto de opresión. Este tipo de enfoque,
aunque novedoso, añade una capa nueva a su
comprensión y al estudio del grafito histórico, ya
que estos grafitos son expresión de la resistencia
y hacen testigos de la misma a las personas que
observan el grafiti.
3. Estudios sobre el grafiti carcelario
Aunque la variedad de estudios específicos sobre la materia es limitada, hemos querido recoger
a modo de estado de la cuestión los trabajos más
paradigmáticos acerca de la materia.
En 2005, Antonio Castillo Gómez presentó un
artículo sobre distintos tipos de escritura carcelaria, refiriéndose a esta como toda manifestación
escrita creada por un recluso. Propone un punto
de vista muy interesante, entendiendo que todas
estas manifestaciones, ya sean incisas o escritas
108
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
en cartas, son creadas dentro de un ambiente de
represión, y por ello son un testimonio de esta reclusión (Castillo Gómez 2003).
Muy interesante es la visión que ofrece Barrera
Maturana sobre las inscripciones que aparecen en
la torre del homenaje de la Alhambra de Granada.
En el artículo destacan una serie de barcos incisos, gracias al estudio comparativo de los cuales
con barcos reales se ha llegado a la conclusión de
que en la torre pudieron estar recluidos militares
ingleses durante el siglo XIX, hecho que se desconocía (Barrera Maturana 2015).
La siguiente obra que queremos destacar es el
libro Tiempo de Graffiti, de José Ángel García Serrano. El trabajo se centra en los grafitis que encontramos en los calabozos del Palacio de Tarazona, que comprenden cronológicamente los siglos
XVIII y XIX. Se trata de un estudio que nos narra las
distintas fases por las que pasa, a nivel metodológico, el estudio de los grafitis. La recopilación de
datos, la catalogación y el estudio a través de la
metodología arqueológica convierten este estudio
en uno de los pioneros dentro de este campo.
A nivel latinoamericano también encontramos
obras de referencia, pero la más destacable es el
estudio de Rodrigo Navarrete y Ana María López
sobre los grafitis carcelarios encontrados en el
Cuartel de San Carlos en Caracas. Este lugar, a
finales del siglo XX, fue constituido como cárcel.
Dentro de la obra se plantean cuestiones como su
interpretación histórica y el estudio de la cultura
material (Navarrete y López 2006).
Por último, queremos destacar el estudio llevado a cabo por José Ballesta y Ángel Rodríguez
Gallardo en el campo de concentración de Camposancos en Pontevedra. El estudio se llevó a término mediante un equipo multidisciplinar que
analizó todas las manifestaciones grabadas por los
presos republicanos y que llegó a varias conclusiones sobre la memoria histórica y sobre la historia
oral del lugar, intercalándose esta última con los
grafitis carcelarios (Ballesta y Rodríguez 2008).
4.1. Carácter autobiográfico y de representación
Se trata de una de las características más repetidas. El prisionero crea grafitis como modo de
mantener su identidad; los nombres y los apellidos suelen ser los grafitis más prolíficos dentro de
estos contextos. El prisionero trata de instaurar
una autobiografía mínima, como un intento de
reivindicarse y dar fe de la situación que está viviendo (Miglio 1984, 110). Esta es una de las razones por las cuales el grafiti epigráfico debe ser
interpretado de manera cautelosa, entendiéndose
como una manifestación dentro de un espacio de
supervivencia.
4.2. Técnicas precarias y bajo nivel de calidad
El recluso cuenta con muy pocos materiales
para la creación de los grafitis. De esta forma,
suelen ser incisos mediante algún tipo de instrumento punzante, carboncillo (en el caso de que
contara con este material) en zonas donde la pared estuviera enyesada o incluso originados por
el humo de las velas que pudieran iluminar la estancia.
4.3. Sencillez epigráfica
Nos encontramos ante unos grafitis que no
suelen tener una alta carga epigráfica. Esto podría ser por varias razones: el espacio de creación,
el tiempo, los materiales, entre otras muchas variables. Una de las fórmulas más utilizadas es la
combinación de un deíctico y un verbo en pasado:
«Aquí estuvo…».
Dejar testimonio de un nombre puede ser contemplado por los propios presos como una prueba
material de haber estado en ese espacio y haber
pasado por las circunstancias que un preso puede
haber experimentado en un ambiente carcelario
(Ballesta y Rodríguez 2008).
4.4. Principales motivos carcelarios
4. El grafiti carcelario: características
Aunque la variedad en la tipología de los grafitis llega a ser muy diversa, encontramos como
en todos los contextos carcelarios hasta ahora
comparados existe un patrón que se repite independientemente de la época que analicemos. Teniendo esto en cuenta, hemos querido formular
unas características comunes con el fin de crear
un «estándar» para facilitar su clasificación. Unido a la experiencia propia del estudio que estamos
realizando, substraemos hasta cuatro características comunes:
En cuanto a los grafitis lúdicos o de carácter
simbólico, observamos como los motivos de las
representaciones se suelen repetir con bastante
asiduidad:
– Motivos de libertad: asociados a palomas, barcos o aviones, como símbolo de huida o escape.
– Motivos religiosos: como pueden ser cruces,
vírgenes o imágenes de santos.
– Motivos de redención: como pequeños epígrafes sobre el arrepentimiento.
– Motivos del paso del tiempo: como pueden
ser calendarios, líneas asociadas a contar los días,
ESTUDIO DE CASO SOBRE LA ARQUEOLOGÍA DE LA REPRESIÓN: LOS GRAFITOS HISTÓRICOS EN CONTEXTOS CARCELARIOS
incluso juegos que intentan hacer la estancia en la
cárcel más amena.
– Motivos sexuales: normalmente asociados a
la feminidad.
Con esta pequeña recopilación de características no pretendemos argumentar que no existan
más tipos de grafitis. Pero hemos querido crear
una pequeña tipología de características basándonos en las investigaciones realizadas y los datos
recopilados. Como hemos reiterado anteriormente, el estudio de los grafitis carcelarios es una disciplina novedosa y aún carente de estudios más
profundos. Con este artículo pretendemos aportar
nuestro grano de arena para poner de relieve el
valor patrimonial de estas manifestaciones.
5. Bibliografía
BALLESTA, J.; RODRÍGUEZ GALLARDO, A. 2008: «Camposancos: una “imprenta” de los presos del
franquismo», Complutum, 19, 197-211.
109
BARRERA MATURANA, J. J. 2016: «Grafitos de presos
de los siglos XVIII-XIX en la Torre del Homenaje
de la Alhambra», De arte: revista de historia del
arte, 15, 179-194.
CASTILLO GÓMEZ, A. 2003: «Escrito en prisión. Las
escrituras carcelarias en los siglos XVI y XVII»,
Península. Revista de Estudios Ibéricos, 0, 165.
CERDÁ FARIAS, I. 2007: Los grafitos de la Iglesia del
monasterio de la Oliva (Navarra), Dykinson
S.L, Madrid, 9.
GARCÍA SERRANO, J. A. 2012: Tiempo de Graffiti. Los
calabozos del Palacio Episcopal de Tarazona (s.
XVIII-XIX), Centro de Estudios Turolenses, Tarazona.
MIGLIO, M. 1984: «Roma dopo Avignone. La rinascita politica dell’antico», en: Roma: memora
dell’antico nell’ arte italiana, Roma, 73-111.
NAVARRETE, S.; LÓPEZ, R. 2006: Rayando tras los
muros. Arqueología de la represión y la resistencia en América Latina 1960-1980, Universidad
de Catamarca, Argentina.
SECCIÓN 05. ARQUEOLOGÍA DE LA MUERTE:
PROBLEMÁTICAS DE ESTUDIO Y NUEVAS TENDENCIAS
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
113
PROBLEMÁTICAS DE ESTUDIO Y NUEVAS TENDENCIAS
EN EL ESTUDIO DEL REGISTRO FUNERARIO
SONIA CARBONELL PASTOR1, AMAIA SOLAEGUI DE LOIZAGA2,
CLARA SERNA ALBEROLA3, ESTER MOYA SORIANO1
Introducción
Los artículos que presentamos en este bloque
se centran en una temática concreta: la muerte.
Con el desarrollo de esta sesión pretendimos realizar una aproximación al conocimiento del mundo
funerario a través de la corriente conocida como
Arqueología de la Muerte. Si bien se trata de una
corriente que nació en el seno de la Arqueología
procesual, la sesión que planteamos dio cabida
a cualquier participación que guardase relación
con el mundo de los muertos.
Nuestro objetivo fue plantear un estado actual
de la cuestión que refiriese nuevas técnicas y tendencias desarrolladas en las dos últimas décadas
para conocer mejor el registro funerario. Somos
conscientes de la dificultad que entrañaba presentar una propuesta de este tipo, primero por los
límites temporales, y segundo por las diferentes
aproximaciones teóricas. Sin embargo, nuestro
propósito no fue otro que el de plantear qué estudios se están llevando a cabo en la actualidad, con
qué métodos y técnicas y cuáles son los resultados
obtenidos, así como el grado de certeza que puedan tener estos últimos.
No son pocas las veces que, al comenzar nuestros trabajos de investigación arqueológicos, nos
encontramos con serios inconvenientes a la hora
de tratar o procesar los datos. Con esto nos referimos a las múltiples problemáticas derivadas
de malas praxis arqueológicas, alteraciones posdeposicionales de los contextos, lecturas parciales
e intencionadas del registro arqueológico y toda
una serie de «adversidades» que dificultan en buena manera el desarrollo de nuestro trabajo. Es
importante nombrar también las diversas consi-
deraciones y complicaciones legales y éticas que
podemos encontrar a la hora de la realización de
nuestros estudios, variables que condicionan en
gran medida la obtención de resultados rápidos y
adecuados.
Por otra parte, ¿hasta qué punto el conocimiento que tenemos de la esfera funeraria pretérita se corresponde con la realidad? No debemos
olvidar nunca que cualquier lectura que hagamos
del registro funerario debe tener en cuenta su intencionalidad: no es lo mismo hablar de contextos
domésticos que de contextos funerarios donde la
persona social del difunto queda sobrerrepresentada o infrarrepresentada en función de los intereses sociales de los vivos. Es por ello que creemos
más que pertinente plantear todos estos problemas que afectan de forma transversal a toda la
investigación arqueológica, pero sobre todo centrarnos específicamente en el campo de la Arqueología de la Muerte.
Como ya hemos comentado, nuestro propósito
fue el de plantear en una sesión qué estudios se
están realizando y cómo se están desarrollando.
Así pues, por ejemplo, creemos que un aspecto
bastante recurrente en la presentación de la sesión lo ocuparon las nuevas tecnologías, entendidas como un medio para obtener datos y nunca
como un fin. En qué medida la aplicación de nuevas tecnologías nos ayuda a extraer información
arqueológica, a documentar y registrar datos.
Buen ejemplo de ello fue la aportación de una de
las comunicantes sobre la topografía dental a partir de la aplicación de los SIG con el objetivo de
realizar una aproximación a los modos de vida de
la Edad del Bronce en el ámbito alicantino. Asimismo, creemos que este también fue un espacio
1. Universitat d’Alacant - scp43@alu.ua.es/ems76@alu.ua.es
2. Universidad de Granada - absolaegui@hotmail.com
3. Universidad Autónoma de Madrid - clara.serna@estudiante.uam.es
114
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
de puesta en común para todos aquellos estudios
tradicionales, tales como la Antropología Física al servicio de la Arqueología o los estudios de
paisaje, que han visto ampliadas y mejoradas sus
áreas de estudio debido a la utilización de nuevos
procedimientos y técnicas. Este fue el caso de las
aportaciones de algunos comunicantes que trataron problemáticas derivadas de reestudios de
materiales procedentes de excavaciones antiguas
y materiales totalmente descontextualizados. Un
buen ejemplo de ello fue la comunicación referida
a una gran cantidad de momias egipcias carentes
de contexto arqueológico primario, que necesariamente tuvieron que ser estudiadas atendiendo
a otros factores tales como las características de
momificación, con el objetivo de poder inferir
cuestiones diferenciadoras entre unas momias y
otras.
Dentro de nuestra sesión se generó un debate importante en torno al tratamiento ético de los
restos humanos. No únicamente versó sobre la
ética en cuanto a exhumaciones sino también sobre todo el proceso y tratamiento posterior de los
restos (estudio, exposición y musealización). No
debemos olvidar que son restos de personas y, por
tanto, deben ser tratados como tales. Uno de los
ejemplos de estos tratamientos nos lo ofrecieron
los ponentes de una de las comunicaciones presentadas. Este grupo trabaja con restos óseos de
épocas diferentes, algunos de ellos muy recientes
y relacionados con la memoria histórica. En estos
casos, la ética y la profesionalidad son esenciales,
ya que la finalidad principal es la investigación y
la educación de los alumnos y no presentar temas
morbosos y sensacionalistas.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
115
INTRODUCCIÓN A LA ARQUITECTURA FUNERARIA
MENORQUINA DEL I MILENIO A. C.
SONIA CARBONELL PASTOR1
Cuando abordamos aspectos relacionados con
la plasmación funeraria de la isla de Menorca en
el I milenio a. C., necesariamente debemos hablar de las necrópolis de hipogeos. Estos espacios
cuentan con una dilatada extensión geográfica a
lo largo y ancho del Mediterráneo occidental, y su
materialización dista de ser homogénea y cronológicamente encorsetada en un período concreto.
Nuestro objetivo principal es dar luz al fenómeno
del hipogeísmo en Menorca, las causas de aparición de los hipogeos y el abandono de las estructuras funerarias previas, su cronología y la significación que tuvieron para las sociedades pretéritas
menorquinas. A lo largo de este artículo haremos
referencia a varios conjuntos funerarios como son
Cala Morell (Ciutadella) o Cales Coves (Alaior),
aunque en trabajos futuros pretendemos extender
los casos de estudio.
Un aspecto fundamental a tener en cuenta a
la hora de tratar aspectos relacionados con las
Gimnesias, Mallorca y Menorca, es la cuestión
de las periodizaciones. A lo largo de este trabajo emplearemos la periodización propuesta por
el grupo ASOME (Grup d’Arqueoecologia Social
Mediterrània), que, para la horquilla cronológica
que nos interesa, propone dos períodos diferenciados: fase talayótica (entre el 850 y el 550 a. C.)
y fase postalayótica (entre el 550 y el 123 a. C.). La
fase talayótica estaría determinada por el trabajo
comunitario y unas condiciones socioeconómicas
tendentes al igualitarismo. Por el contrario, en el
postalayótico se perciben cambios socioeconómicos destacados conducentes a una mayor desigualdad y distanciamiento entre las comunidades
isleñas de Mallorca y Menorca (Lull et al. 2008,
11-25). Esta fase se caracteriza por el abandono
de los poblados talayóticos, la presencia de viviendas con un mayor grado de compartimentación,
la aparición de múltiples rituales funerarios y un
nuevo tipo de concepción funeraria: las necrópolis de hipogeos de planta compleja.
2. Necrópolis de hipogeos
Esta materialidad funeraria a la que nos referimos son las necrópolis de hipogeos, entendidos
como cuevas artificiales ubicadas en paredes de
acantilados o barrancos abiertos al mar –aunque
también podemos encontrar este tipo de contenedores cerca de asentamientos o aislados– (fig.
1). Ha habido múltiples intentos para dilucidar la
cronología y el momento de aparición y uso de estos conjuntos. Sin embargo, la mayor parte de los
espacios funerarios se han visto expuestos a la antrópica –reutilizaciones, expolios– y natural –desgaste de la roca calcárea por erosión. Esta limitación principal, la falta de contextos arqueológicos
primarios, ha supuesto una de las problemáticas
de primer orden para poder determinar el lapso
temporal en el que estuvieron en uso (Carbonell
2018, 174-176).
Tradicionalmente, se han tratado dos tipos de
hipogeos: los hipogeos de planta sencilla (adscritos al período talayótico) y los hipogeos de planta
compleja (postalayótico). Los hipogeos de planta
sencilla son espacios, simples, de pequeñas dimensiones y sin presencia de elementos estructu-
FIGURA 1. Necrópolis de hipogeos de Cala Morell
(Ciutadella, Menorca).
1. Universitat d’Alacant, scp43@alu.ua.es. Contexto cronocultural
116
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
rales. A diferencia de estos, los hipogeos de planta
compleja se caracterizan por presentar grandes
dimensiones, y por una mayor complejización. A
continuación expondremos algunas de sus características (Carbonell 2017).
Una de las diferencias más notables con respecto de los hipogeos de planta sencilla son las
cámaras. Los hipogeos de planta sencilla, o del
tipo I según Veny (1982, 372), se caracterizaban
por presentar cámaras simples, de reducidas dimensiones y con techos planos o ligeramente
abovedados, mientras que los hipogeos de planta
compleja se caracterizan por presentar cámaras
amplias y techos de desarrollo horizontal plano
(Guerrero, Calvo y Gornés 2006, 188). En cuanto a la morfología de las plantas, podemos hablar
de plurimorfismo debido a la enorme variabilidad
que presentan.
Un aspecto destacado de los hipogeos de planta compleja que vemos repetido en varios de ellos
son las decoraciones molduradas. Se trata de bandas escalonadas cortadas en arista viva sobre la
roca que recorren los tres lados del rectángulo
que configura la puerta de entrada de estos espacios. Este tipo de elementos arquitectónicos dotan
a las entradas de cierta monumentalidad, como es
el caso del hipogeo 4 de Cala Morell.
Siguiendo con la caracterización de los elementos estructurales, es necesario apuntar la
existencia de columnas o pilastras en el interior
de la cámara (fig. 2). Según algunos autores, estos
elementos no tendrían una funcionalidad sustentante, de refuerzo de la cubierta, sino que habría
que entenderlos como elementos simbólicos y de
compartimentación del espacio (Gornés, Gual y
López 1992, 16); las columnas o pilares en posición central condicionarían la circulación por el
interior de la cámara, mientras que las pilastras
adosadas tendrían una función relacionada con la
compartimentación del espacio. Este también es
un aspecto novedoso con respecto a los hipogeos
de la fase anterior, carentes en la mayoría de los
casos de columnas y/o pilastras en el interior de
las cámaras. En cuanto a los pilares exentos, cabe
apuntar que encontramos ejemplos en varias necrópolis isleñas. Un ejemplo lo tenemos en el n.º
21 de Cales Coves, el único que presenta esta columna exenta en relación con el resto de tumbas
que forman parte de la necrópolis. Otras materializaciones son los hipogeos 2 y 9 de Cala Morell
(Ciutadella), que presentan un pilar central exento de sección cuadrada que recuerda a la cabecera
de la pilastra del hipogeo 52 de Cales Coves (Plantalamor 1991, 516-517, 532).
Otros elementos característicos que encontramos en el interior de los hipogeos son los cubículos o lóbulos y los cocons (fig. 3). Los cubí-
FIGURA 2. Ejemplos de columnas exentas (arriba) y
pilastras adosadas (abajo) que compartimentan el
espacio interno de los hipogeos.
FIGURA 3. Cubículo y cocó de los hipogeos 13 y 5,
respectivamente, de Cala Morell.
culos son una especie de oquedades abiertas en
las paredes internas de los hipogeos, de planta
elipsoidal o semiovalada, que en algunos casos
se encuentran ligeramente sobreelevados (Veny
1982, 302). Los cocons también son una especie
de oquedades de pequeñas dimensiones, pero excavadas normalmente en el pavimento rocoso de
los hipogeos.
Los hipogeos de planta sencilla se caracterizaban por presentar entradas verticales rectangulares o semicirculares, mientras que los de planta
compleja se caracterizan en su mayoría por presentar aperturas verticales rectangulares situadas
en el centro de la fachada o desplazadas a un lado
(Gornés, Gual y López 1992, 14; Guerrero, Calvo y
Gornés 2006, 188).
Los patios externos anteceden la entrada al espacio funerario propiamente dicho. Son espacios
excavados en la roca a cielo abierto. En lo que
respecta a su funcionalidad, en nuestra opinión,
INTRODUCCIÓN A LA ARQUITECTURA FUNERARIA MENORQUINA DEL I MILENIO A. C.
117
FIGURA 4. «Capades de
moro» de Cala Morell
(Ciutadella).
quedaría ligada a aspectos rituales. Estos espacios quedarían cubiertos por agua –como sucede
en determinadas épocas del año en la actualidad–,
que tendría una relación simbólica al igual que en
otras culturas del Mediterráneo occidental y central donde el agua jugaba un papel de elemento
liminal entre la vida y la muerte.
Otra de las características definitorias de estos espacios es la presencia próxima de «capades
de moro» (fig. 4). Se trata de pequeñas oquedades situadas en la pared externa de los hipogeos
que pueden aparecer aisladas o formando parte
de grupos más extensos, y se encuentran ubicadas a diferentes alturas. La funcionalidad de estas
oquedades no está clara; algunos autores apuntan
que se trataría de espacios destinados a inhumaciones infantiles, por lo que estaríamos ante un
claro ejemplo de diferenciación social en tanto en
cuanto no todos los individuos infantiles serían
enterrados en el hipogeo junto con el resto de los
individuos (Gornés, Gual y Gómez 2006, 171).
Otros autores defienden que se trataría de espacios destinados a depositar ofrendas. Tenemos
constancia de la excavación sistemática y rigurosa
de una capada de moro situada cerca del hipogeo
21 de Cales Coves. Los materiales recuperados de
su interior no apuntan a que este tipo de espacios
estuvieran destinados a enterramientos (Gornés
1994), por lo que creemos plausible la hipótesis
de que servirían como espacios de ofrenda.
Desde bien temprano, la diversidad, heterogeneidad y variabilidad de los hipogeos despertó la
curiosidad científica de investigadores tales como
C. Veny, quien en los años 70-80 estudió en profundidad algunas necrópolis isleñas; su estudio
más conocido es el del conjunto de Cales Coves
(Alaior). Veny propuso una división cronotipológica en función de las características estructurales de la totalidad de hipogeos que componían
la necrópolis. Posteriormente, en la década de
los 90, Gornés reestudió esta necrópolis y realizó una aproximación crítica a partir de los datos
recabados por Veny. Fue así como determinó la
presencia de cuatro grupos de espacios funerarios a partir de análisis estadísticos descriptivos
de conglomerados jerárquicos clúster (Gornés
1996, 95-97). Sin embargo, las últimas investigaciones efectuadas apuntan a una mayor dificultad
para determinar la cronología de los hipogeos. En
función de la cronología relativa proporcionada
por la excavación del hipogeo 21 de Cales Coves
y las cronologías absolutas efectuadas sobre cinco muestras óseas humanas, se ha planteado que
este espacio funerario podría haber estado en uso
desde el siglo IX hasta el V/IV a. C. (Gornés y Gual
2018, 36-40).
3. Reflexiones finales
Para concluir, únicamente nos resta reflexionar sobre el origen de los hipogeos de planta compleja, tradicionalmente adscritos al postalayótico.
El hipogeo 21 de Cales Coves, aun siendo el
único caso estudiado, podría constituir la transición paulatina que enlaza los hipogeos simples de
época talayótica y los hipogeos de planta compleja postalayóticos. Creemos que durante el postalayótico se dio una eclosión y generalización de
las necrópolis de hipogeos de planta compleja. Al
igual que cualquier proceso histórico, debemos
tener en cuenta que los cambios y las rupturas
118
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
con tradiciones pretéritas no son abruptos, sino
procesos progresivos. Por todo esto pretendemos
poner en práctica un tipo de metodología de estudio que nos permita establecer comparativas
entre necrópolis isleñas e intentar rastrear el origen de determinados elementos estructurales que
remiten a ámbitos foráneos (por ejemplo, la decoración moldurada de alguno de los hipogeos).
Creemos que es un proceso mucho más complejo
que, en ningún caso, debe quedar encapsulado en
meras categorías clasificatorias cronotipológicas.
Las sociedades no son compartimentos estancos
pasivos que se dediquen a incorporar influencias
exógenas a su bagaje local; debemos entender que
existe una bidireccionalidad en los contactos entre
sociedades pretéritas y que el grado de permeabilidad de cada una dependerá de las condiciones
sociales existentes y del tipo de interacción.
4. Bibliografía
CARBONELL, S. 2017: El mundo funerario en la Protohistoria menorquina. La necrópolis de Cala
Morell (Ciutadella) como caso de estudio (trabajo final de máster), Universidad de Alicante.
– 2018: «Avance en la investigación del mundo funerario postalayótico menorquín en el marco
del Proyecto Modular: hipogeos y problemáticas de estudio», en: ANGLADA, M. et al. (coords.),
VII Jornades d’Arqueologia de les Illes Balears,
Maó, 30 de setembre i 1 i 2 d’octubre de 2016,
173-178.
LULL, V.; PALOMAR, B.; RIHUETE, C.; RISCH, R. 2008:
Cerámica talayótica, Edicions Bellaterra, Barcelona.
GORNÉS, J. S. 1994: «Análisis funerario de la necrópolis talayótica de Cales Coves, Menorca»
(memoria de licenciatura inédita), Universidad
Complutense de Madrid, Madrid.
– 1996: «Arqueología de la muerte y cambio social. Análisis e interpretación de la necrópolis
de Cales Coves, Menorca», Complutum, 7, 91103.
GORNÉS, S.; GUAL, J. M. 2018: L’hipogeu XXI de la
necròpolis de Calescoves, Edicions UiB, Palma
de Mallorca.
GORNÉS, S.; GUAL, J. M.; GÓMEZ, J. L. 2006: «Avanç
dels contexts arqueològics i de la cronologia
absoluta de l’hipogeu XXI de Calascoves», Mayurqa, 31, 165-181.
GORNÉS, S.; GUAL, J.; LÓPEZ, A. 1992: «Hipogeos talayóticos del Hierro en Menorca», Revista de
Arqueología, 131, 12-20.
GUERRERO, V. M.; CALVO, M.; GORNÉS, S. 2006: Historia de las islas Baleares. Mallorca y Menorca
en la Edad del Hierro (tomo II), Rey Sol, Palma
de Mallorca.
PLANTALAMOR, L. 1991: L’arquitectura prehistòrica i
protohistòrica de Menorca i el seu marc cultural, Maó, Menorca.
VENY, C. 1982: La necrópolis protohistórica de Cales Coves. Menorca, Bibliotheca Praehistorica
Hispana, Madrid.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
119
ANALIZANDO LOS ANUARIOS ARQUEOLÓGICOS. ¿SON
VIABLES PARA UN ANÁLISIS DEL MUNDO FUNERARIO
TARDOANTIGUO Y MEDIEVAL EN ANDALUCÍA ORIENTAL?
AMAIA SOLAEGUI DE LOIZAGA1, LAURA MARTÍN RAMOS2
1. Introducción y objetivos
2. Metodología
El presente artículo pretende exponer el actual
conocimiento del mundo funerario de los siglos
V al XV en Andalucía Oriental a través del Anuario Arqueológico de Andalucía (AAA). El objetivo
principal de este trabajo se basó en dar respuesta a la siguiente pregunta: ¿Es posible realizar un
análisis transversal de este tipo acudiendo a los
anuarios?
Por un lado, desde los hallazgos funerarios se
plantearon los siguientes objetivos: 1. Analizar
los estudios antropológicos para conocer el papel
que tiene esta disciplina dentro de la Arqueología
Urbana. 2. Elaborar un análisis estadístico para
arrojar algún tipo de información interesante sobre los datos recabados.
Por otro lado, desde los AAA se planteó evaluar
el tipo de información que pueden aportarnos.
Esta publicación de la Secretaria General deriva
de la regulación que obliga a publicar todas las actividades arqueológicas que se realizan en dicha
Comunidad Autónoma.
Con los objetivos bien presentes, se desarrolló
una metodología en dos pasos.
En primer lugar, se hallaron en los AAA los
artículos referentes a las necrópolis intervenidas
en nuestra área de interés. Hemos de señalar
que nuestro marco cronológico finaliza en el año
2008. El gobierno andaluz todavía no ha publicado los resultados de la última década de intervenciones arqueológicas. Existe la posibilidad de
acceder a tal información en los archivos provinciales en los que se depositan las memorias
finales de excavación. Sin embargo, tal y como
acabamos de señalar, esos no eran nuestros objetivos.
En segundo lugar, se elaboraron y compilaron
dos bases de datos por cada periodo cronológico.
La primera (fig. 1) contiene una información más
general, donde se recopiló la información sobre
el nombre del yacimiento, la provincia, el año, el
tipo de intervención y la información funeraria
(completa, parcial y nula)3.
FIGURA 1. Tabla general:
ejemplo de análisis de
datos.
1. Universidad de Granada - absolaegui@hotmail.com
2. Grupo de Investigación THARG «Toponimia, Historia y Arqueología del Reino de Granada», Universidad de Granada lramos@ugr.es
3. La denominamos completa cuando la información describe minuciosamente el apartado funerario. Es parcial es
cuando la información comienza a ser difícil de interpretar, y por último nula es cuando la información es agrupada en
diferentes clasificaciones según la tipología de las sepulturas.
120
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Tabla
específica: ejemplo de
análisis de datos.
La segunda muestra una información más
completa, que es clasificada en diversos apartados. El primero consta de información de corte
identificativo, como el nombre del yacimiento, la
cronología y el nombre del complejo estructural.
El segundo es la información referida a los estudios antropológicos (completo, parcial o nulo).4
3. Exposición de los datos y problemáticas
La primera comprobación que pudimos realizar es que la información recopilada era muy
dispar. Todos los artículos trataban el mismo tipo
de temáticas, y sin embargo fue difícil de clasificar en las mismas categorías. Las normas de los
AAA quedan establecidas en el Reglamento de
Actividades Arqueológicas de Andalucía de 2003.
Sin embargo, en lo que compete a los artículos
no existe ningún tipo de norma de publicación,
únicamente algunas de corte más bien editorial.
Únicamente aparecen, desde el Anuario de 1997,
unas pequeñas indicaciones de tipo formal. Tales
como un máximo de 12 figuras por artículo o un
mínimo de 5 a un máximo de 25 páginas.
En total contábamos con 30 necrópolis tardoantiguas y 104 medievales. Como ya ha sido
comentado en la metodología, se realizó una
primera criba, distinguiendo entre información
completa, parcial o nula. El resultado de esa selección fue que, de las 30 necrópolis tardoantiguas
encontradas, 13 de ellas –es decir, un 45 %– se estimaron completas. De las medievales solamente
un 35 % pudieron ser analizadas en su plenitud.
Esta pequeña muestra hace patente un problema:
la falta de descripciones precisas y minuciosas
tanto de los complejos constructivos como del
modelo ritual en las intervenciones arqueológicas
sobre necrópolis.
La distribución de estas necrópolis es bastante heterogénea: puede llamar la atención, en
primer lugar, que hay más publicaciones en el
periodo medieval que en el periodo tardoantiguo. Esto se debe al marco cronológico, que es
mucho más amplio en el segundo periodo que en
el primero. En segundo lugar, podemos observar
FIGURA 3. Resultados
estadísticos y mapa
ilustrativo de la
distribución de los
resultados.
4. Lo denominamos completo cuando se extrae información demográfica (sexo, edad, estatura), patológica y marcadores
de actividad. Parcial cuando nos referimos solo a la información demográfica (sexo y edad), y por último, nula, cuando no
hay ningún tipo de información.
ANALIZANDO LOS ANUARIOS ARQUEOLÓGICOS. ¿SON VIABLES PARA UN ANÁLISIS DEL MUNDO FUNERARIO TARDOANTIGUO Y MEDIEVAL EN ANDALUCÍA ORIENTAL?
que el periodo tardoantiguo es mejor conocido
en Jaén y el periodo medieval en Granada. En
tercer lugar, esta última es la provincia con mayor número de publicaciones sobre necrópolis,
mientras que Jaén casi apenas cuenta con una
decena de ellas.
Los estudios antropológicos realizados en intervenciones arqueológicas de yacimientos tardoantiguos y medievales son prácticamente nulos. En concreto, no contaban con este tipo de
información un 93 % y un 75 % de ellas, respectivamente. De este modo, queda en el tintero un
gran caudal de información de necrópolis (más de
50). A decir verdad, la gran mayoría no porque no
se hubiese presentado el análisis antropológico,
sino precisamente debido a que en la descripción
no aparecían citados datos que consideramos imprescindibles a la hora de describir un espacio funerario.
De hecho, hay estudios antropológicos brillantes que, sin embargo, fueron descartados debido
a que tales descripciones arqueológicas no cumplían los requisitos citados. Ello nos lleva a una
conclusión interesante: parece que en muchas
ocasiones no se realiza un trabajo en equipo entre
arqueología y antropología física.
4. Conclusiones
Si volvemos a la pregunta que esbozamos al
principio («¿Es posible realizar un análisis transversal de este tipo acudiendo a los anuarios?»), la
respuesta es un tanto ambigua. El conocimiento
es fragmentado y no permite llegar a la profundidad. Volvemos a uno de los últimos resultados que
hemos expuesto, y es que gran parte de nuestras
necrópolis no han podido ser analizadas de modo
completo.
Ello, unido a los resultados de nuestros análisis, nos lleva a creer en la necesidad de la elaboración de un breve, aunque preciso, patrón de información donde se detalle la información necesaria
a recopilar.
5. Sitios de interés y bibliografía
http://www.juntadeandalucia.es/organismos/cultura/areas/bienes-culturales/actividades-arqueologicas/anuario-arqueologico.html.
VV. AA. 1985: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1986: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
121
VV. AA. 1987: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1988: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1989: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1990: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1991: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1992: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1993: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1994: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1995: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1996: Anuario Arqueológico de Andalucía,
Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1997: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1998: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 1999: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 2001: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 2002: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 2003: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. II. Actividades Sistemáticas, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 2003: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. III. Actividades de Urgencia, Consejería de
Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 2004: Anuario Arqueológico de Andalucía.
T. I-II, Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 2005: Anuario Arqueológico de Andalucía,
Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
122
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
VV. AA. 2006: Anuario Arqueológico de Andalucía,
Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
VV. AA. 2008: Anuario Arqueológico de Andalucía,
Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, Sevilla.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
123
DEL OBJETO AL CUERPO: NUEVAS PERSPECTIVAS SOBRE
LA ARQUEOLOGÍA FUNERARIA DE ÉPOCA VISIGODA
IRINA RUBIO CANO1, MARÍA BENAVIDES BARCO2
Resumen
En el presente artículo se propone realizar una
aproximación al estudio arqueológico de los contextos funerarios de época altomedieval desde dos
puntos de vista que forman parte del panorama
investigador más actual y que apenas han sido
aplicados a las necrópolis del marco cronológico
seleccionado: la perspectiva de género y la detección de la peste. Para ello, se comenzará por exponer la historia de la investigación de la arqueología funeraria visigoda, cuyo devenir explica la
situación actual de la investigación. A continuación, se defenderá la principal vía en común de
las dos formas de aproximación a la investigación
que se van a tratar, siendo esta la necesidad de
aplicar, en mayor grado del que ha existido hasta el momento, los conocimientos existentes en
materia de antropología física. Finalmente, se expondrá de qué manera puede estudiarse el género
en el ámbito funerario altomedieval de la Península, tomando como referencia casos de estudio
que han tenido lugar en Europa y, a continuación,
el estudio de la presencia de la peste en enterramientos medievales, con una introducción a los
primeros estudios para el periodo visigodo.
Palabras clave: Arqueología funeraria, arqueología visigoda, arqueología de género, peste,
antropología física
1. Introducción
La práctica arqueológica de finales del siglo
marcó las interpretaciones sociales de
los pueblos germánicos durante buena parte de
la historia de su estudio, debido al vínculo entre
la formación de la arqueología como disciplina y
su uso como instrumento legitimador de los estados nación (Tejerizo 2016; Arnold 1990). Se trata
XIX-siglo XX
de un contexto sociopolítico que estimula la creación de identidad, en un momento de formación
de naciones que se sumaba al interés por los estudios etnicistas. La arqueología centra su atención
en los objetos, vistos como instrumentos que sirvan a esas ideas (Quirós y Castellanos 2015, 24).
La arqueología que se desarrolló en España se vio
influenciada por la escuela alemana. Se pretende
hallar las zonas con presencia goda, impulsando la
excavación sistemática de «necrópolis visigodas»
(Olmo y Castro 2011, 49-54; Roldán 2012; Gracia
2008, 130-131; Mederos 2004; Wiwjorra 1996).
A mediados del siglo XX se produce una transformación en la forma de entender la creación de
la identidad, alejada de la pertenencia a pueblos
de los que se desciende de manera directa. En los
años 70-80 aumentan las excavaciones y la bibliografía al respecto, y se cuestiona el carácter puramente visigodo asignado a las necrópolis, considerandolas una construcción social de carácter
heterogéneo (Olmo 1992). Hasta este momento el
registro funerario era descriptivo en la selección
de objetos, pero adquiere ahora mayor importancia el contexto.
Hoy resulta aceptado que las interpretaciones
realizadas durante la primera mitad del siglo XX se
encuentran sesgadas y carecen de cualquier fundamento en el que poder respaldarse. Igualmente,
se rechaza el positivismo ferviente de las décadas
pasadas en pro del constructivismo social. Las
construcciones culturales se entienden como un
proceso en el que los objetos forman parte de la
creación de identidad, no pruebas pasivas de una
cultura (Quirós y Castellanos 2015, 23-25). A pesar de este cambio sigue existiendo una herencia
de las corrientes tradicionales en las interpretaciones sobre los aspectos sociales e identitarios.
Una vía para la revisión de las interpretaciones
es el uso de la antropología física. El estudio de
huesos no ha ocupado el interés de las investiga-
1. Universidad Autónoma de Madrid (UAM) - irina.rubioc@gmail.com
2. Universidad de Alcalá (UAH)
124
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
ciones tradicionales. Los avances permiten conocer indicios que, aunados con el contexto, pueden
aportar información sobre la construcción social
e identitaria (Mendizabal 2011). Dentro de las posibilidades que ofrece la investigación social, se
presentan dos campos que se encuentran en un
desarrollo inicial: la aplicación de la arqueología
de género y la detección de la peste.
La arqueología de género se ha hecho eco de
un problema del estudio funerario: la tendencia a
emplear estereotipos no respaldados por evidencias formales. Destaca determinar el sexo usando
el ajuar. Una consecuencia ha sido que la imagen
de las mujeres de este periodo histórico carece de
dinamismo. Si se quieren realizar estudios identitarios de esta índole hay que tener en cuenta la
complejidad de la construcción social, fruto del
contacto cultural y los intercambios, donde las
mujeres tendrían algún papel que ha pasado desapercibido (Effros 2004, 165-179).
Una de las aportaciones ha sido comprobar la
eficacia de la determinación del sexo a partir del
ajuar y la veracidad de la asociación tradicional
entre hombres-armas y mujeres-joyería. Encontramos el trabajo de Lucy sobre dos necrópolis
anglosajonas, Heslerton y Sewerby (siglos V-VII d.
C). Realiza una clasificación de enterramientos
según el tipo de ajuar, conociendo con ello que la
cantidad de enterramientos que cumplen con la
relación entre objetos y sexo se sitúa en un 10 %,
no pudiendo considerarlo una norma. También
existe una ruptura con la asociación habitual: en
el caso de Sewerby (Inglaterra), en un 15 % de las
tumbas masculinas se han encontrado joyas, y en
Heslerton (Inglaterra), armas en un 12,5 % de las
tumbas femeninas (Lucy 1997).
Otra aproximación ha sido la variación de los
roles de género en distintas etapas vitales, tratado
por Halsall en necrópolis merovingias. Realizó un
análisis en el que hace constar que los materiales
femeninos son principalmente adornos corporales
que parecen hacer alusión a un papel social basado en el cuerpo, pudiendo estar vinculados al
matrimonio o la maternidad. Se basa en que las
representaciones de la identidad de género femeninas comienzan a partir de la pubertad, y que
en los enterramientos de mujeres de más edad se
produce un descenso de estos objetos y un ascenso
de otros materiales. Para estas se apunta a que el
papel a destacar es una manifestación del control
sobre el ámbito doméstico (Halsall 2010, 342-371).
En la Península apenas se ha puesto en práctica este tipo de trabajos. Un buen punto de partida
para comenzar a incluir la investigación en materia de género es valernos de lo realizado a través
de los estudios europeos para contextos similares,
intentando aplicar las metodologías empleadas
a yacimientos que puedan ayudarnos a obtener
información. Tratar de incluir la perspectiva de
género en contextos funerarios visigodos no es fácil. Para interpretar la identidad es necesaria una
muestra poblacional que aporte datos representativos, siendo imprescindible contar con múltiples yacimientos. Se encuentran aquí dificultades,
como la escasez de información antropológica, la
mala conservación de los restos óseos, o que los
resultados obtenidos en intervenciones recientes
se encuentren sin publicar.
Por otro lado, el estudio de los contextos con
peste derivó en una producción bibliográfica, de
ámbito europeo, ligada a la peste negra. Trabajos biológicos realizados durante los años 90 del
siglo XX permitieron relacionar el bacilo Yersinia
pestis con la peste justinianea, plaga acontecida
en los siglos VI-VIII d. C. En Europa la mayor evidencia de peste en época visigoda se encuentra
en el yacimiento de Altenerding, Múnich. De las
1.450 inhumaciones halladas, fechadas por C-14
en 456-571 cal A. D., una se ha relacionado con
el bacilo mediante análisis de ADN, uniéndose al
previamente publicado individuo de Aschheim, a
20 kilómetros de distancia (Feldman et al. 2016).
En España destacan los trabajos de Azkarate y
Hierro en el norte peninsular. Ejemplo de ello es la
cavidad de La Garma. Excavada en 1955, presenta
restos de 5 individuos datados, mediante C-14, en
el siglo VII-VIII d.C. El informe antropológico habla
de edades que no superan los veinte años y ausencia de lesiones traumáticas o patologías graves
(Hierro 2011).
Este tipo de contextos en la historiografía clásica se liga a episodios bélicos y/o sociales con
una cuestionable teorización. Los estudios patológicos nos permiten descartar la muerte violenta y/o la vinculación de los individuos con clases
sociales bajas o esclavitud como explicación a
estos enterramientos, para los que se presuponen
secuelas que en ambos casos quedan registradas
en el tejido óseo. Los datos de edad nos hablan de
un patrón de afección dentro de la enfermedad.
La realidad del contexto arqueológico, aunque sí
habla de igualdad en cuanto a sexos, muestra un
patrón con mayoría de juveniles, debido a que los
supervivientes de oleadas previas, como es común
en enfermedades infecciosas, no recaen en futuros contagios (Castex y Kacki 2016; Hierro 2011;
Robledo y Trancho 2007; Antoine 2008; Caro y
Fernández 2007).
Estas interpretaciones rompen con los estándares tipológicos previos, donde la antropología
física ha permitido la propuesta de alternativas
teóricas que completan la realidad social de la
época. Con ello no se desvalorizan los estudios
previos, ya que los objetos sirven para fechar las
DEL OBJETO AL CUERPO: NUEVAS PERSPECTIVAS SOBRE LA ARQUEOLOGÍA FUNERARIA DE ÉPOCA VISIGODA
inhumaciones de forma relativa, y apoyar la teoría de peste como causa de la muerte en cuanto
a afección en diversas clases sociales con una tipología de enterramiento propia; sin olvidar el
potencial del estudio objetual en la investigación,
ya que la materialidad, su cantidad y modo de
producción pueden arrojar y arrojan información
sobre la articulación socioeconómica postinfección, como ejemplifican los estudios de impacto
en Shelford a través de la producción cerámica
después de la peste negra (Shelford 2016).
2. Conclusiones
En las últimas décadas se ha acentuado el interés por el estudio de la arqueología funeraria
desde una perspectiva plenamente social. Con ello
ha salido a relucir la necesidad de reformular la
metodología empleada, reconociendo la información que puede obtenerse usando la antropología
física.
En cuanto al género, no se ha producido un
desarrollo para el estudio de la sociedad de época visigoda. En el marco europeo se han dado
recientemente nuevas formas de investigación
de contextos equivalentes, aproximándose a las
características de la construcción identitaria. Se
han abordado temas como la transformación de
los roles de género o la falsa veracidad que puede
haber tras la determinación del sexo a partir del
ajuar. El objetivo es tomar en consideración las
aportaciones europeas para efectuar investigaciones en el contexto peninsular.
En el estudio de la peste la investigación ha
crecido ligada a los trabajos europeos de cronología moderna, de acuerdo con el interés en torno
a la peste negra. La interpretación arqueológica
de contextos justinianeos está ligada a las posibilidades que ofrece la antropología física. Hemos
señalado la falta de registro óseo de la enfermedad, lo que muestra el potencial de la disciplina
antropológica, destacando los análisis de ADN. La
identificación de estas inhumaciones no solo depende de análisis de ADN sino del conjunto de las
características de los enterramientos, destacando
aun la relevancia de los objetos; eso sí, tratados de
forma contextualizada.
3. Bibliografía
ANTOINE, D. 2008. «The archaeology of “Plague”»,
Medical History, 27, 101-114.
ARNOLD, B. 1990: «The past as propaganda: totalitarian archaeology in Nazi Germany», Antiquity, 64, 464-478.
125
CARO DOBLÓN, L.; FERNÁNDEZ SUÁREZ, M. E. 2007.
«Marcadores óseos de actividad ocupacional en
el medievo peninsular», en: BARCA DURÁN, J. (ed.),
Enfermedad, muerte y cultura en las sociedades
del pasado: importancia de la contextualización
en los estudios paleopatológicos: Actas del VIII
Congreso Nacional de Paleopatología - I Encuentro Hispano-luso de Paleopatología, 241-270.
CASTEX, D.; KACKI, S. 2016: «Demographic patterns
distinctive of epidemic cemeteries in archaeological samples», Microbiology Spectrum, 4 (3),
1-8.
EFFROS, B. 2004: «Dressing conservatively: Women’s brooches as markers of ethnic identity?»,
en: BRUBAKER, L.; SMITH, J. M. H. (eds.), Gender
in the Early Medieval World, Cambridge University Press, Cambridge, 165-184.
FELDMAN, M.; HARBECK, M.; KELLER, M.; SPYROU,
M. A.; ROTT, A.; TRAUTMANN, B.; SCHOLZ, H.;
PÄFFGEN, B.; PETERS, J.; MCCORMICK, M.; BOS, K.;
HERBIG, A.; KRAUSE, J. 2016: «A high-coverage
Yersinia pestis genome from an 8th century
Justinian plague victim», Molecular Biology
and Evolution, 33 (9), 1-70.
GRACIA, F. 2008: «Las relaciones entre los arqueólogos españoles y la Alemania nazi (1939-1945).
La influencia de Das Ahnenerbe en España: un
estudio preliminar», en: MORA, G.; PAPÍ RODES,
C.; AYARZAGÜENA, M. (eds.), Documentos inéditos
para la historia de la arqueología. Sociedad Española de Historia de la Arqueología, 129-154.
HALSALL, G. 2010: Cemeteries and Society in Merovingian Gaul: Selected Studies in History and
Archaeology 1992-2009, Brill, Países Bajos.
HIERRO GÁRATE, Á. 2011: «La utilización sepulcral
de las cuevas en época visigoda: los casos de
Las Penas, La Garma y el Portillo del Arenal
(Cantabria)», Munibe Antropologia-Arkeologia,
62, 351-402.
LUCY, S. J. 1997: «Housewives, warriors and slaves? Sex and gender in Anglo-Saxon burials»,
en: MOORE, J.; SCOTT, E. (ed.), Invisible people
and processes. Situating gender and childhood
into European archaeology, Leicester University Press, Londres, 150-168.
MEDEROS MARTÍN, A. 2004: «Julio Martínez SantaOlalla y la interpretación aria de la prehistoria», Boletín del Seminario de Estudios de Arte y
Arqueología, 69-70, 13-56.
MENDIZABAL, A. 2011. «Estudio Antropológico y Patológico de Cementerios Altomedievales en el
País Vasco. Los casos del despoblado de Aistra
y el Castillo de Treviño», Munibe AntropologiaArkeologia, 62, 403-421.
OLMO ENCISO, L. 1992: «El reino visigodo de Toledo y los territorios bizantinos. Datos sobre la
heterogeneidad de la Península Ibérica», en:
126
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Coloquio Hispano-Italiano de Arqueología Medieval, Granada, 185-198.
OLMO ENCISO, L.; CASTRO PRIEGO, M. 2011: La época
visigoda a través de la arqueología, Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid, Madrid, 49-77.
QUIRÓS CASTILLO, J. A.; CASTELLANOS, S. 2015: «Identidad y etnicidad en la Península Ibérica en los
s. V-VIII. Una introducción.», en: QUIRÓS CASTILLO, J. A. (ed.), Identidad y etnicidad en Hispania. Propuestas teóricas y cultura material en
los siglos V-VIII, Bilbao, 21-40.
ROBLEDO SANZ, B.; TRANCHO, G. 2007: «Los estudios paleopatológicos realizados en poblaciones medievales españolas», en: BARCIA DURÁN,
F. J.; JIMÉNEZ, J. (eds.), Enfermedad, muerte
y cultura en las sociedades del pasado: Actas
del VIII Congreso Nacional de Paleopatología,
Fundación Academia Europea de Yuste, Cáceres, 233-239.
ROLDÁN GÓMEZ, L. 2012. «Julio Martínez SantaOlalla. Algunos apuntes biográficos», en: ROLDÁN GÓMEZ, L.; BLÁNQUEZ PÉREZ, J. (eds.), Julio
Martínez Santa-Olalla y el descubrimiento arqueológico de Carteia (1953-1961), Madrid.
SHELFORD, C. 2016: «Plague pits potsherds and the
shock of the Black Death», British Archaeology,
48-55.
TEJERIZO, C. 2016: «Arqueología y nacionalismo en
(el) movimiento: Apuntes sobre la arqueología
de época visigoda durante el segundo franquismo», Arqueoweb, 17, 144-162.
WIWJORRA, I. 1996: «German archaeology and its
relation to nationalism and racism», en: DÍAZANDREU, M.; CHAMPION, T. (eds.), Nationalism and
archaeology in Europe, Routledge, Londres.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
127
CONSIDERACIONES SOBRE LA DESTRUCCIÓN RITUAL
DE FALCATAS EN LA SOCIEDAD IBÉRICA
GUILLERMO PALOMERO LÓPEZ1
1. Introducción
2. Narrativas de la élite
Los nuevos enfoques permiten plantear otras
hipótesis con materiales parcialmente estudiados. En las falcatas, pese a ser un objeto icónico
de la sociedad ibérica, apenas se ha analizado su
destrucción ni el proceso que había formado el
registro funerario, con poco interés en los restos
óseos debido a la cremación. La actualización de
los estudios antropológicos de excavaciones antiguas, y el de los materiales y contextos, así como
la aplicación de técnicas arqueométricas, pueden
aportarnos información novedosa.
En el caso de las falcatas, las investigaciones
previas se habían centrado en la definición tipomorfológica y funcional (Quesada 1997, 61-171).
Se trata de espadas cortas más ligeras, gracias
a las acanaladuras –con un posible efecto estético–, y más resistentes, gracias a su composición mineralógica de algunas láminas, cercanas
a los aceros, que sus paralelas mediterráneas.
Además, un gran número de ellas –que podría
suponer hasta el 50 % (García y Gómez 2006,
71)– tienen una rica decoración mediante damasquinados de plata. La empuñadura también
estaba profusamente ornamentada y constituye
la base de su tipología: su forma zoomorfa de
ave o caballo.
La principal función de su tipología ha sido la
de adscribir su origen. Han existido teorías muy
diversas sobre su origen (Quesada 1997, 126-162),
como la procedencia autóctona; un origen continental; una difusión fenicia; y, sobre todo, el origen mediterráneo, tanto en Grecia como en Etruria. La teoría más aceptada se basa en la tesis de
Quesada de un origen balcánico y una difusión a
la península Ibérica a través de Italia. Sin embargo, se trata de una explicación ad hoc: no existe un
modelo intermedio entre machaira y falcata, y se
defiende que esa primera adaptación se perdió y
solo tenemos constancia del modelo final.
Junto con el prestigio que podemos intuir
por su cadena técnico-operativa, otros registros
–como diversas esculturas, pinturas y fuentes escritas– apuntan en la misma dirección. En estas
últimas usan las palabras kopis y machaira para
mencionarlas, lo que podría deberse a su semejanza simbólica y no solo funcional. Además, las
espadas siempre han tenido una consideración especial en la mayoría de culturas pasadas (Whitley
2002; Rustoiu y Berecki 2015), construyendo el
mito del guerrero (Kristiansen 2002), con causas
tanto socioeconómicas (Lull y Estévez 1985, citado en Montón 2007, 254-255) y rituales (Quesada
1997), hasta el punto de que muchos autores las
han definido como armas «de parada», aunque
deberíamos hablar de armas «de ostentación», ya
que su función intrínseca era la de ejercer violencia (Sanahuja 2007) y sus cualidades para ello no
eran menores (Quesada 2009).
Las asociaciones del ajuar también nos indican su atribución a las élites. Desgraciadamente,
la mayoría del material procede de excavaciones
antiguas y se ha perdido mucha información. La
antropológica es insuficiente para realizar cualquier macroanálisis poblacional, y la información
cronológica es muy deficiente: se fechan las sepulturas atendiendo a su cultura material, lo que
imposibilita conocer su relación temporal y una
datación absoluta precisa. Además, es muy posible que existiesen prácticas de atesoramiento, que
están recogidas en contextos cercanos (Whitley
2002). Algunas de las armas podrían haber sido
fabricadas alguna generación atrás, lo que explicaría su ausencia en las primeras etapas del iberismo, donde sí aparece representado en varias
escenas.
La falta de datos sobre el sexo no parece algo
casual. Además de causas biológicas (Trancho
2010) y la discriminación en la sociedad ibérica,
1. Investigador independiente - guillermopalomero@hotmail.com
128
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
por la que acceder al enterramiento normativo
para hombres sería más usual, esa diferencia es
exagerada debido al sesgo investigador. Además
de los problemas atribuibles a la concepción binaria del sexo en nuestra sociedad y su aplicación al
pasado (Nicholson 1994), hay que tener en cuenta
que el género es una construcción histórica: tiene como variables el espacio y el tiempo (Arnold
2012). La manera en que la sociedad ibérica entendía los géneros es distinta a la nuestra, pese a
que las relaciones de género tuviesen puntos en
común (Hernando 2007). Así pues, las atribuciones del binomio ajuar/sexo –armas/hombre, textil/
mujer– no responden a una realidad absoluta (Rafel 2007), así como tampoco su importancia social
(Díaz-Andreu y Tortosa 1999), que ha sido menospreciada en la investigación. El ejemplo más evidente es la Dama de Baza: si Reverte (1986, citado
en Quesada 1997, 637-639) hubiese determinado
su sexo como masculino, ¿hubiese causado el
mismo revuelo y hubiese sido tan criticado? En el
ámbito europeo, podemos encontrar en la Princesa de Vix otro caso paradigmático: una inhumación, por lo que su sexo era más fácil de identificar. Muchos autores defendieron la imposibilidad
de que una mujer tuviese una importancia social,
adscribiéndole un rol masculino (Knüsel 2002), o
que se debía exclusivamente a sus relaciones familiares o matrimoniales; como hicieron de igual
manera en el ámbito ibérico (Quesada 1997, 638).
Estos ejemplos de tumbas femeninas ricas están
constatados tanto en el Mediterráneo como en la
Europa Central en épocas cercanas a procesos de
protourbanismo, en el cual el rol de las mujeres
recobra gran importancia, como queda atestiguado por el trato funerario (Arnold 1995; Bietti et al.
2013; Rísquez y García 2007).
3. La destrucción ritualizada de falcatas
El rito es una actividad social sancionada de
un acontecimiento trágico que necesita una respuesta biológica, en este caso la cremación, y
otra social. Asociadas a lo social, cabría reseñar
las prácticas ligadas a la curación, la preparación
al tránsito, actividades en su honor hasta llegar
al enterramiento de los restos. Estas irían marcadas por su persona social: como la población la
veía a ella y a lo que conformaba su dividualidad
(Wessman 2010, 62-68). Una primera aproximación a la destrucción de espadas se basa en esa
premisa: si el cuerpo ha sido destruido, su cuerpo
social –objetos ligados a su identidad– también ha
de serlo.
El principal y primer estudio sobre la destrucción ritualizada de objetos en el ritual funerario
lo llevó a cabo Grinsell (1961), con una recopilación antropológica e histórico-arqueológica de
ejemplos de todas épocas y sitios. Desde época
mesolítica existen indicios, y se hace patente en
el Egipto Predinástico, y especialmente desde la
Edad del Bronce hasta la Alta Edad Media en contexto europeo. Incluso fuera del contexto funerario, se practicó en templos y depósitos fluviales
con ciertas semejanzas en el potlach, como podrían ser los depósitos fluviales o la consagración
de armas. Otros trabajos han ampliado hipótesis
sobre dicho fenómeno y cuya aplicación se podría
trasladar al ámbito ibérico.
Las causas funcionales –evitar el expolio o reducir el tamaño de objetos a la tumba– no son defendibles y se deberían a causas socioeconómicas o
simbólicas, destacando la conexión intrínseca entre objeto y portador, tanto para liberar el espíritu
como para impedir la suplantación de sus atributos. Socialmente, puede ser el resultado de formas
de expresar el dolor y los procesos de memoria, así
como su sacrificio a deidades. Por último, también
podría disminuir la desigualdad entre las élites,
impulsando el equilibrio de poder; fomentar el
modelo económico o legitimar la desigualdad social; sin por ello olvidar causas más simples como
podría ser el fin de una unidad familiar, honrar
a una persona, etc. Además, hay que indicar que
estas causas estarían interconectadas entre sí y se
podrían dar varias causas simultáneas.
Un aspecto interesante es el trato bibliográfico
de dicha destrucción, con términos que abarcan
desde una aséptica amortización a términos antropológico como mutilación o muerte, muy ligados
a esa idea de «embodied memories» (Wessman
2010). Existe una amplia variedad de prácticas
en Europa que nos hablan de diferencias regionales, como la deformación en lazo, en acordeón
o torsiones múltiples. Junto con ellas, suele ser
usual el sometimiento a muy altas temperaturas,
melladura de la hoja y destrucción de la punta,
perforaciones y sobre todo torsiones, en el caso
ibérico, entre las que destacan los perfiles en U y
en 90 grados. Este modelo presenta bastante similitud en su territorio, con diferencias en el ámbito
centroeuropeo, que presenta deformaciones más
agresivas.
Como conclusiones, la falcata es un arma con
una consideración especial en el simbolismo y la
identidad, no solo atribuida a los hombres, y que
tampoco está necesariamente ligada a los soldados. Su destrucción en los enterramientos se debe
tanto a causas socioeconómicas como ideológicas
de perpetuación de una élite y a la dividualidad.
Se trata de una práctica compartida que parece
tener un origen independiente, aunque pueda estar influido por los contactos culturales.
CONSIDERACIONES SOBRE LA DESTRUCCIÓN RITUAL DE FALCATAS EN LA SOCIEDAD IBÉRICA
4. Bibliografía
ARNOLD, B. 1995: «Honorary males or women of
substance? Gender, status and power in ironage Europe», Journal of European Archaeology,
3, 153-168.
– 2012: «Gender, temporalities, and periodization in Early Age West-Central Europe», Social
Science History, 36, 85-112.
BIETTI SESTIERI, A. M.; SALZANI, L.; GIARDINO, C.;
VERLY, G. 2013: «Ritual treatment of weapons
as a correlate of structural change in the Italian LBA communities: the bronze hoard of
Pila del Brancon (Nogara, Verona)», Rivista di
Scienze Preistoriche, 63, 155-169.
DÍAZ-ANDREU, M.; TORTOSA, T. 1999: «Gender, symbolism and power in Iberian societies», en: FUNARI, P. P. A.; HALL, M.; JONES, S. (eds.), Historical archaeology: back from the edge, Routledge,
Londres-Nueva York, 99-121.
GARCÍA CANO, J. M.; GÓMEZ RÓDENAS, M. 2006:
«Avance al estudio radiológico del armamento
de la necrópolis ibérica del Cabecico del Tesoro (Verdolay, Murcia). I. Las falcatas», Gladius,
26, 61-92.
GRINSELL, L. V. 1961: «The breaking of objects as a
funerary rite», Folklore, 72, 475-491.
HERNANDO GONZALO, A. 2007: «Sexo, Género y Poder. Breve reflexión sobre algunos conceptos
manejados en la Arqueología del Género»,
Complutum, 18, 167-174.
KNÜSEL, C. J. 2002: «More Circe than Cassandra:
the princess of Vix in ritualized social context»,
European Journal of Archaeology, 5 (3), 275308.
KRISTIANSEN, K. 2002: «The tale of the sword:
swords and swordfighters in Bronze Age Europe», Oxford Journal of Archaeology, 21 (4),
319-332.
129
MONTÓN SUBÍAS, S. 2007: «Interpreting archaeological continuities: an approach to transversal
equality in the Argaric Bronze Age of southeast Iberia», World Archaeology, 39 (2), 246262.
NICHOLSON, L. 1994: «Interpreting Gender», Sings,
20 (1), 79-105.
QUESADA SANZ, F. 1997: El armamento ibérico. Estudio tipológico, geográfico, funcional, social y
simbólico de las armas en la Cultura Ibérica (siglos VI-I a.C.), Monographies Instrumentum, 3,
Montagnac.
– 2009: «Símbolos y falcatas», Stilus, 6, 24-29.
RAFEL FONTANALS, N. 2007: «El textil como indicador de género en el registro funerario ibérico»,
Treballs d’Arqueologia, 13, 115-146.
RÍSQUEZ, C.; GARCÍA LUQUE, A. 2007: «¿Actividades de mantenimiento en el registro funerario? El caso de las necrópolis iberas», Treballs
d’Arqueologia, 13, 145-170.
RUSTOIU, A.; BERECKI, S. 2015: «Weapons as symbols and the multiple identities of warriors.
Some examples from Transylvania», BUFM,
79, 127-147.
SANAHUJA YLL, M. E. 2007: «¿Armas o herramientas prehistóricas?: el ejemplo del mundo argárico», Complutum, 18, 195-200.
TRANCHO GALLO, G. J. 2010: «Análisis antropológico de las necrópolis de cremación», Revista
Española de Antropología Física, 31, 205-232.
WESSMAN, A. 2010: Death, destruction and commemoration: tracing ritual activities in Finnish
Late Iron Age cemeteries (AD 550-1150), The
Finnish Antiquarian Society, Helsinki.
WHITLEY, J. 2002: «Objects with attitude: biographical facts and fallacies in the study of Late
Bronze Age and Early Iron Age warrior graves», Cambridge Archaeological Journal, 12 (2),
217-232.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
131
CARACTERÍSTICAS DE LA MOMIFICACIÓN EN LOS
INDIVIDUOS HALLADOS EN LA TUMBA AT-28-,
PERTENECIENTE AL VISIR AMEN-HOTEP HUY EN TEBAS
(LUXOR, ORILLA OCCIDENTAL)
ALBERTO ABELLO MORENO-CID1
Resumen
Este trabajo es fruto de las investigaciones
que desde el año 2009 viene desarrollando en el
enterramiento AT-28- el Instituto de Estudios del
Antiguo Egipto (IEAE) bajo la dirección del Dr.
D. Francisco Martín Valentín y de D.ª Teresa Bedman.
El estudio de las técnicas de momificación, que
fueron variando a lo largo de la historia del Antiguo Egipto, se enmarca como parte de un contexto multidisciplinar más amplio, que abarca los
análisis antropológicos, del ajuar funerario, la tipología de los enterramientos…
Será un elemento más a tener en consideración a la hora de datar individuos que se hallan
en estado de evidente descontextualización, algo
común en esta zona debido a los saqueos que ha
sufrido la necrópolis desde la antigüedad.
Palabras clave: Asasif, momificación, AmenHotep, necrópolis, Egipto
1. Introducción
En la necrópolis del Asasif, situada en las inmediaciones de Deir el-Bahari, se encuentra la
tumba del visir Amen-Hotep Huy. Su cronología
se ha situado entre el 1358 y el 1353 a. C., cuando este alto funcionario de los monarcas AmenHotep III y Amen-Hotep IV (Ajenaton) desempeñó la función de visir del Sur (Martín y Bedman
2011).
Hasta que en el año 2009 el Instituto de Estudios del Antiguo Egipto se hizo cargo del yacimiento, nunca se habían realizado labores de excavación allí.
Consta fundamentalmente de una capilla de
372,758 m2 y un patio exterior de 419,879 m2 (Bedman y Martín 2017), y es el enterramiento de mayor tamaño en la zona de entre los pertenecientes
a este periodo. Destaca la aparición de diversas
tumbas excavadas en la roca, cuyas entradas han
salido a la luz en los laterales norte y sur del patio,
fruto de su reutilización en épocas posteriores.
El objetivo de este texto se centra en describir
las características del proceso de momificación
presentes en los individuos del yacimiento, contrastarlo con lo descrito en estudios anteriores y
precisar su importancia real en la labor del antropólogo en Egipto. También se intentará determinar si, debido a las carencias tecnológicas en
campo, el análisis de la morfología de la momia
junto con el de sus elementos funerarios (ajuar,
vendajes, cerámica…) son eficaces.
2. Materiales y métodos
Se han hallado un gran número de restos en las
campañas de excavación, aunque únicamente dos
enterramientos han permanecido intactos: el sarcófago perteneciente a una cantora de Amón sin
nombre inscrito y el sarcófago del sacerdote Uab
de Amón-Re llamado Anj-ef-(en)-Jonsu (Martín y
Bedman 2016).
2.1. Fuentes utilizadas
Dada la escasez de testimonios directos de las
prácticas de los embalsamadores egipcios, debido sin duda a su carácter sagrado, será necesario
recurrir a otro tipo de fuentes. En primer lugar
disponemos de algunas crónicas extranjeras de la
1. Doctorando en Historia y Arqueología en la Universidad Complutense de Madrid, miembro del Instituto de Estudios
del Antiguo Egipto y del Proyecto Visir Amen-Hotep Huy - ad.abello@ucm.es
132
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
época (Heródoto 2011; Diodoro Sículo 2001) que,
pese a su dudosa rigurosidad, coinciden en gran
medida con lo que, en lo referente a la momificación, muestran los estudios arqueológicos y antropológicos.
En cuanto a la descripción científica de la momificación en individuos reales, se han tomado
las realizadas por Smith y Dawson (1991), Elliot
Smith (2000) y Janot (2009), además de los resultados de la toma de imágenes radiológicas aportados por Hawass y Saleem (2016). Las diferentes
técnicas presentes en este proceso y su evolución
a lo largo de la historia se han contrastado en
Leca (1980), Budge (1987; 1989), Ikram y Dodson
(1998) y Dunand y Lichtenberg (2006). Además, se
han tomado como referencia algunos estudios recientes en Bioarqueología Egipcia (Ikram, Kaiser
y Walker 2015) y los propios estudios realizados
por el Departamento de Antropología Física del
Proyecto Visir Amen-Hotep Huy (Abello y Serrano
2017). Partiendo de todo ello, se procede al examen visual de los individuos, llevando a cabo una
descripción minuciosa de los elementos característicos en su momificación y poniéndolo todo en
conjunto con el contexto en que ha sido hallado.
3. Resultados y discusión
3.1. Procedencia
Los restos, tanto esqueletizados como momificados, se han hallado en su práctica totalidad en
estado fragmentario, una descontextualización
evidente y en muchas ocasiones alterados por la
cremación (figura 1). También han salido a la luz
enormes cantidades de material de momificación.
Destaca la alta concentración de individuos en
el lateral norte del patio, y concretamente en su
zona más occidental, en las entradas de las tumbas
denominadas FMTB2 y FMTB3 (Abello y Serrano
2017), cuya localización permite inferir que gran
cantidad de ellos, si no su totalidad, proceden del
expolio indiscriminado de estos enterramientos, a
falta de futuras investigaciones en los mismos.
El estudio visual es posible por la retirada de
vendajes y coberturas de la momia, que era práctica habitual de los saqueadores para hacerse con
objetos de valor (Smith y Dawson 1991). Debido a
esta fragmentación y pérdida de restos, los siguientes datos se referirán únicamente a individuos en
los que las afirmaciones realizadas sean cotejables.
FIGURA 1. Evidencia del expolio en individuos hallados en 2016. Foto: A. Abello. © IEAE, 2016.
CARACTERÍSTICAS DE LA MOMIFICACIÓN EN LOS INDIVIDUOS HALLADOS EN LA TUMBA AT-28-, PERTENECIENTE AL VISIR AMEN-HOTEP HUY EN TEBAS (LUXOR, ORILLA OCCIDENTAL)
133
FIGURA 2. Posición de momificación e incisión visibles en el individuo 176-M. Foto: A. Abello. © IEAE, 2015.
3.2. Posición
La totalidad de la muestra presenta una posición de momificación en decúbito supino, con los
brazos estirados longitudinalmente a lo largo del
cuerpo y las palmas de las manos abiertas contra
los muslos (figura 2).
3.3. Excerebración
Del mismo modo, la extracción del cerebro por
el orificio nasal izquierdo previa fractura del etmoides se puede observar en todos los individuos
cuyo neurocráneo se ha conservado. Esta práctica
se generalizó a partir de la Dinastía XVIII (15501295 a. C.) y siguió presente hasta los últimos periodos de la historia del Antiguo Egipto.
3.4. Evisceración y relleno
A excepción del individuo 202-M (figura 3),
que presenta el segundo tipo de momificación
descrito por Heródoto (2011), el resto de la muestra presenta la tradicional incisión en el lado izquierdo del abdomen, de forma oblonga y vertical y situada entre la última costilla y la zona
suprailíaca (figura 2). Pese a ser identificada
como aquella que se practicaba con anterioridad
a Tutmosis III (1479-1425 a. C.) y que conviviría
con otras durante las siguientes dinastías (Abello y Serrano 2017), su posición en el abdomen
presenta diferencias, aunque es idéntica a la presentada por algunas momias de época romana en
la zona del Valle de las Reinas descrita por Janot
(2009).
Con excepción del mencionado 202-M, gran
parte de los individuos presentan restos de relleno de lino impregnado en resinas, material em-
FIGURA 3. Ausencia de incisión y de evisceración en
el individuo 202-M. Foto: A. Abello. © IEAE, 2016.
pleado también en el relleno orbital (presente en
el 90 % de los casos), bucal (63 %) y los pequeños
tapones para las fosas nasales. Algunas momias
tardías muestran grandes concreciones de betún
en la boca y la nariz, utilizado como relleno craneal.
El individuo 180-M hallado en 2014 supone un
caso sin paralelo conocido, ya que se documentó
un relleno torácico-abdominal formado por fragmentos de panales de abeja y en el que se descartó, por sus características, la colonización de los
insectos tras el enterramiento (Abello y Serrano
2017). Un fragmento de su pierna derecha presenta un relleno de lino, práctica generalizada en
las Dinastías XXI y XXII (Dunand y Lichtenberg
2006).
3.5. Otros aspectos
Se observa momificación de los genitales, con
circuncisión en la totalidad de los varones.
La calidad de la momificación denota que se
trata de individuos de un elevado estrato social,
como parecía indicar su lugar privilegiado de en-
134
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
5. Bibliografía
FIGURA 4. Restos del dorado de la cara en el
individuo 162-M. Foto: A. Abello. © IEAE, 2015.
terramiento, de importantes connotaciones religiosas para los antiguos egipcios.
Una característica importante presente en los
individuos 162-M (figura 4) y 185-M es la aplicación de pan de oro para dorar cara, manos y pies,
que se da únicamente en el Periodo Romano (30
a. C. - 395 d. C.). Otros factores observados, como
el vendaje de color rojo o con determinadas decoraciones, también son propios de esta época.
4. Conclusiones
En el caso de la tumba AT-28-, ante la inexistencia de un contexto claro debido al expolio repetido durante siglos en un espacio que estuvo en
uso por un periodo aproximado de 1.500 años, lo
fragmentado de la muestra y las dificultades tecnológicas en campo, estos estudios serán útiles
como pieza de un mecanismo multidisciplinar y
permitirán en muchos casos aproximarse a la cronología de estos individuos.
Se puede inferir, atendiendo a estos elementos, que la cronología de los restos del yacimiento está comprendida entre finales del Reino Nuevo en el Tercer Periodo Intermedio (1069-664 a.
C.) y el Periodo Romano (30 a. C. - 395 d. C.),
corroborando diversos datos egiptológicos y arqueológicos.
ABELLO, A.; SERRANO, A. 2017: «Trabajos de Antropología Física en la tumba AT-28- y sus enterramientos secundarios. Luxor, Orilla Occidental», en: BEDMAN, T. (ed.), Proyecto Visir
Amen-Hotep Huy (Tumba AT-28-). Misión arqueológica española en Asasif (Luxor Occidental). Memoria preliminar: campañas 2009-2016,
Diputación de Málaga, Delegación de Cultura,
Málaga, 88-105.
BEDMAN, T.; MARTÍN VALENTÍN, F. J. 2017: «La Tumba AT-28- del Visir Amen-Hotep Huy en Asasif
(Luxor Occidental). Estudio histórico», en:
BEDMAN, T. (ed.), Proyecto Visir Amen-Hotep
Huy (Tumba AT-28-). Misión arqueológica española en Asasif (Luxor Occidental). Memoria preliminar: campañas 2009-2016, Diputación de
Málaga, Delegación de Cultura, Málaga, 24-61.
BUDGE, E. A. W. 1987: The Mummy. A Handbook of
Egyptian Funerary Archaeology, KPI, Londres.
– 1989: The Mummy. A History of the Extraordinary Practices of Ancient Egypt, Wings Books,
Nueva Jersey.
DIODORO SÍCULO 2001: Biblioteca Histórica. Libros
I-III, Gredos, Madrid.
DUNAND, F.; LICHTENBERG, R. 2006: Mummies and
Death in Egypt, Cornell University Press, Nueva York.
HAWASS, Z.; SALEEM, S. N. 2016: Scanning the Pharaohs. CT Imaging of the New Kingdom Royal
Mummies, The American University in Cairo
Press, Nueva York.
HERÓDOTO 2011: Los Egipcios, Gredos, Madrid.
IKRAM, S.; DODSON, A. 1998: The Mummy in Ancient
Egypt. Equipping the Dead for Eternity, Thames
and Hudson, Londres.
IKRAM, S.; KAISER, J.; WALKER, R. 2015: Egyptian
Bioarchaeology. Humans, animals, and the environment, Sidestone Press, Leiden.
JANOT, F. 2009: Momias Reales. La inmortalidad en
el Antiguo Egipto, Libsa, Madrid.
LECA, A. P. 1980: The Cult of the Immortal. Mummies and the Ancient Egyptian Way of Death,
Souvenir Press, Londres.
MARTÍN VALENTÍN, F.; BEDMAN, T. 2011: «Excavations in Tomb 28 at Asasif, Luxor West Bank.
Belonging to Vizier Amenhotep called Huy»,
Kmt, 22, 42-53.
– 2016: «La profecía cumplida. El descubrimiento
de la tumba del sacerdote de Amón», La Aventura de la Historia, 210, 50-54.
SMITH, G. E. 2000: The Royal Mummies, Duckworth, Londres.
SMITH, G. E.; DAWSON, W. R. 1991: Egyptian Mummies, Kegan Paul International, Londres.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
135
PROTOCOLO LafUAM (© 2003): APUNTES PARA EL ESTUDIO
PRELIMINAR DE FOSAS COMUNES
MARINA GONZÁLEZ1, JOSÉ HERNANZ1, CLARA SERNA1
1. Introducción
1.1. Orígenes
La Arqueología Forense es una rama de especialización metodológica de la Arqueología, sin
centrarse en una geografía o periodo concreto.
Surgió como modo de colaboración mediante la
aplicación de su metodología a la investigación
criminal (Fuentes 2012, 363). Nace en Norteamérica, a partir de bases establecidas desde el siglo
XVIII (Timms 1993, 20), aunque no se reconoció
como disciplina hasta los años setenta. Rápidamente se extendió a los países anglosajones, aunque en Europa su aplicación es tardía (Fuentes
2012, 361).
En Latinoamérica y países anglosajones, la arqueología metodológica se incluye en el mismo
campo de la antropología y genera confusión entre Antropología y Arqueología Forense (Timms
1993, 19), lo que supone la indefinición de los
equipos profesionales que intervienen en la exhumación. La reproducción de las experiencias
latinoamericanas, donde coinciden arqueólogos,
antropólogos y otros, no es automáticamente aplicable en España, donde la capacitación profesional es diferente y no se solía asociar la arqueología a este ámbito.
1.1.1. La Arqueología Forense en España
Como disciplina es muy reciente, pues, al existir la Antropología Forense, no se contaba con
la necesidad de arqueólogos en este ámbito. Su
desarrollo se debe, en gran parte, a movimientos
sociales de memoria antifascista, así como al auge
de la sensibilidad por la reconstrucción de una
nueva memoria colectiva sobre la guerra y el franquismo. Ha supuesto un debate público y político,
así como el aumento de trabajos historiográficos
(Gassiot 2008, 127). Tras veinte años, la exhumación de fosas comunes ha adquirido una dimen-
1. Laboratorio de Arqueología Forense UAM (LafUAM)
sión más pública, con la voluntad de romper el
silencio. Se busca la recuperación de la memoria,
restaurando la voz de los protagonistas (Gassiot
2008, 121).
Desde entonces, España ha ido adaptando un
programa de investigación forense dedicado a
la guerra civil y el franquismo (Etxeberria et al.
2004; Gassiot 2008). Este no es reconocido como
tal por la Administración de Justicia, por lo que,
hasta la Ley 52/2007, las exhumaciones se encontraban en un vacío legal y dependían de cada gobierno autonómico. Tras la ley estatal, la cuestión
de las fosas comunes se orienta a la legislación del
patrimonio cultural, alejando el reconocimiento
de carácter forense (Gassiot 2008, 124).
1.2. ¿Por qué el Protocolo LafUAM (© 2003)?
En Latinoamérica la historia oral es clave,
pues trata hechos recientes y cuenta con testigos
directos. De ello han nacido equipos y protocolos, entre los que destaca The Missing, del Comité Internacional de la Cruz Roja. No obstante, al
centrarse en el uso de testimonios directos, restan
importancia a la documentación histórica y arqueológica preliminar. En España, prácticamente
solo quedan testigos secundarios y es necesario
suplir la carencia de testigos directos. Por ello, se
requiere una investigación a partir de documentación arqueológica e histórica complementaria
(excavación, trabajo archivístico y bibliográfico),
que debe ser realizada por profesionales en este
campo: arqueólogos e historiadores.
Así pues, el Protocolo LafUAM busca abordar
el estudio preliminar de fosas comunes, supliendo las carencias en metodología arqueológica de
otros protocolos. En él se explicarán los trabajos
previos a la exhumación, especialmente lo referente a la localización y documentación, donde la
Arqueología Forense opera con eficacia demostrada.
136
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
2. Metodología
2.2. Metodología de intervención
La metodología en la que se basa el Protocolo
LafUAM tiene dos fases (fig. 1):
– Fase 1. Recopilación de información, empleando fuentes variadas y complementarias.
– Fase 2. Intervención, ya sea invasiva o no.
2.2.1. No invasiva
La metodología no invasiva es un campo muy
estudiado y, dependiendo de la obra consultada,
existirán unas variables u otras. No obstante, la
mayoría de métodos están destinados a enterramientos individuales, no a fosas comunes. Debido al elevado número de técnicas válidas, las
más usadas para esos estudios preliminares se
incluyeron en 1995 en la FSAG (Forensic Search
Advisory Group), para poder usarse en un proyecto multidisciplinario a fin de optimizar los
resultados (Hunter y Cox 2005, 27). Estudiar
previamente el terreno es vital porque, al enterrar restos humanos, aparecerán alteraciones
que se podrán constatar mediante unas técnicas
arqueológicas concretas (Hunter y Cox 2005,
31):
– Estudio fotográfico. Se incluyen tanto fotografías aéreas como térmicas (Hunter y Cox 2005,
33-35) (fig. 2).
– Estudio cartográfico. Contraste entre mapas
históricos y actuales, así como estudio de uso de
suelo (Hunter y Cox 2005, 33-35).
– Observación de campo: Búsqueda de indicios que ayuden a la localización de la fosa. Aquí
los arqueólogos son los grandes profesionales con
experiencia.
– Análisis geofísicos. Métodos para confirmar
la localización de la fosa sin necesidad de metodología invasiva. Requieren un equipo técnico, pero
siempre bajo supervisión arqueológica. Algunos
pueden ser: georradar, magnetometría o resistividad (Hunter y Cox 2005, 33).
Esta metodología no sustituye a la invasiva,
aunque las dos son necesarias para el correcto desarrollo de la investigación.
2.1. Metodología de investigación
La primera fase recopila toda la información
previa a la intervención. Las fuentes empleadas
son:
– Bibliográficas. Recopilación de los trabajos
que permitan conocer el contexto que rodea la
fosa. Destacamos la importancia de los estudios
regionales y locales, de gran importancia desde
los ochenta (Chaves 2000, 417-420).
– Testimonios orales. Suelen ser el inicio de estos trabajos mediante la «donación de memoria»,
así como la principal fuente en los protocolos internacionales de búsqueda de desaparecidos (Comité Internacional de la Cruz Roja 2003, 85; Equipo Peruano de Antropología Forense 2004, 17). En
España apenas contamos con testigos primarios.
– Archivísticas. Surgen de la necesidad de completar la carencia de testigos directos. La documentación se extrae tanto de instituciones generales como locales.
Todas ellas deben tratarse críticamente, pues
debemos tener en cuenta que pueden verse alteradas por falta de memoria en el caso de testimonios orales (Núñez 1990, 46) o por las circunstancias en las que se crearon, refiriéndonos a las
fuentes bibliográficas y archivísticas (Sánchez
2014, 95). La recopilación de estas fuentes aportará los datos necesarios para la segunda fase: la
intervención.
FIGURA 1. Esquema
metodológico del
Protocolo LafUAM.
©LafUAM, 2018.
PROTOCOLO LAFUAM (© 2003): APUNTES PARA EL ESTUDIO PRELIMINAR DE FOSAS COMUNES
137
FIGURA 2. Localización de los pozos de barrero, donde fueron arrojados los individuos, mediante el
tratamiento digital fotográfico. © LafUAM, 2009.
FIGURA 3. Planificación y resultados de los análisis de fosfatos. © LafUAM, 2017.
2.2.2. Invasiva
Es el trabajo arqueológico propiamente dicho
y servirá para descartar dudas surgidas en pasos
anteriores. Consiste en:
– Sondeos fisicoquímicos. Estudio en laboratorio de muestras edafológicas extraídas en
campo. Dependiendo de la necesidad, en LafUAM podemos emplear:
• Análisis de fosfatos. Sirve para detectar la
presencia de restos óseos tras fijarnos en la
intensidad de las reacciones, pues aumentan exponencialmente a medida que nos
acercamos a la localización (fig. 3).
• Análisis de pH. Determina el tipo de suelo,
que afecta directamente en la conservación de los restos.
• Sondeo parcial. Sirve para la constatación
y delimitación de la fosa.
• Exhumación. Se valorará cuando las anteriores pruebas sean positivas. Su protocolización ya no forma parte del Protocolo
LafUAM.
3. Conclusiones
Para finalizar, un asunto acuciante en España, relacionado con fosas comunes, es la correcta
documentación previa, pues, tras veinte años de
exhumaciones sistemáticas, ya podemos detectar
dudas y deficiencias:
– Inexistencia de un protocolo que abarque
todo el proceso, pues el asociado a la Ley
52/2007 se centra especialmente en la exhumación.
138
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
– Presencia casi exclusiva de testigos secundarios, lo que supone una pérdida importante
de información.
En definitiva, los trabajos en fosas comunes
suelen ser urgentes y pueden darse fallos en localización e identificación de inhumados que no
siempre se enmiendan. Así, desde LafUAM nos ha
interesado preparar un protocolo que cubra estas
carencias. Es necesario reivindicar este tipo de
estudios, así como la labor de sus profesionales
arqueólogos, pues son ellos los capacitados para
evitar estos errores tan apremiantes de subsanar.
4. Bibliografía
CHAVES PALACIOS, J. 2000: «La historiografía reciente sobre la Guerra Civil de 1936 a 1939 en los
umbrales del nuevo milenio», Anales de Historia Contemporánea, 16, 409-430.
COMITÉ INTERNACIONAL DE LA CRUZ ROJA 2003: The
Missing. Las personas desaparecidas: acción
para resolver el problema de las personas desaparecidas a raíz de un conflicto armado o de violencia interna y para ayudar a sus familiares, ONU.
EQUIPO PERUANO DE ANTROPOLOGÍA FORENSE 2004: Investigación Antropológica Forense y Derechos
Humanos. Introducción al manejo de los estándares internacionales para la verdad, justicia y
reparación, Instituto Peruano.
ETXEBERRIA, F.; HERRASTI, L.; JIMÉNEZ, J.; ORTIZ, J.
2004: «Informe relativo a la exhumación llevada a cabo en Benegiles (Zamora) con el fin de
recuperar los restos humanos pertenecientes
a tres personas ejecutadas en la Guerra Civil»,
Universidd del País Vasco, <www.sc.ehu.es>
[consulta: 20 abril 2018].
FUENTES, A. 2012: «Arqueología Forense y Arqueología de los Derechos Humanos: la memoria
como patrimonio», en: Ensayos en torno al patrimonio cultural y al desarrollo sostenible en
Chile y España, Cuadernos Solidarios, 9, 361379.
GASSIOT, E. 2008: «Arqueología de un silencio. Arqueología forense de la Guerra Civil y del Franquismo», Complutum, 19, 119-130.
HUNTER, J.; COX, M. 2005: Forensic Archaeology:
Advances in Theory and Practice, Psychology
Press, UK.
NÚÑEZ PÉREZ, M. G. 1990: «La historia, las fuentes
orales y la enseñanza: teoría y práctica», Espacio, Tiempo y Forma. Serie V: Historia Contemporánea, 3-2, 43-56.
SÁNCHEZ RECIO, G. 2014: Operación quirúrgica en el
cuerpo social. La represión política en Monóvar
(1936-1943), Universidad de Alicante, San Vicente del Raspeig.
TIMMS, R. F. 1993: Principios de arqueología forense, EUNED, Costa Rica.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
139
TOPOGRAFÍA DENTAL 3D Y DIETA DURANTE
LA EDAD DEL BRONCE
ESTER MOYA SORIANO1
1. Introducción
En este trabajo presentamos los primeros resultados obtenidos con la aplicación del sistema
de información geográfica (GIS) a modelos 3D de
dientes analizando la relación entre topografía
dental y dieta en grupos humanos antiguos. Nuestra hipótesis plantea la existencia de un cambio
diferencial en la topografía del diente en función
de su desgaste y el patrón de subsistencia y modos técnicos de procesamiento de los alimentos.
A partir de esta hipótesis de trabajo pretendemos
realizar una aproximación a los modos de vida de
las poblaciones de la Edad del Bronce a través del
registro dental recuperado del yacimiento arqueo-
FIGURA 1. Mandíbulas pertenecientes a individuos
del Cabezo Redondo. A la izquierda, M1 y M2 con
poco desgaste; a la derecha, PM2, M1, M2 y M3 con
mayor desgaste y exposición de dentina.
lógico del Cabezo Redondo (Villena, Alicante) (fig.
1). La obtención de modelos virtuales 3D permitirá el registro y la preservación de información
del material osteoarqueológico y la obtención de
información relacionada con la topografía dental,
valorando su efectividad y el desarrollo de futuras
aplicaciones en la reconstrucción de la dieta en
grupos humanos antiguos.
2. Topografía dental y dieta
La relación entre la dieta y la forma del diente
ha sido un área de investigación destacada en estudios paleoantropológicos orientados a registrar
las características morfológicas de los dientes asociadas a su función en el proceso de masticación
(Gregory 1922; Maier 1977; Kay 1985). En este
contexto, a finales de la década de los noventa del
siglo pasado se propuso una nueva técnica para el
análisis de la morfología dental que permitía analizar los cambios en la topografía del diente en relación con el desgaste mediante la aplicación de SIG
(sistemas de información geográfica) (Zuccotti et
al. 1998). Esta nueva aproximación metodológica permitía conocer el cambio de la superficie del
diente, basándose en su semejanza con un terreno
complejo de picos y valles. Mediante esta técnica
era posible acceder a información sobre la complejidad del diente y su funcionalidad biomecánica en
dientes desgastados de diferentes especies de primates no humanos y homininos fósiles (Zuccotti
et al. 1998; M’kirera y Ungar 2003; Ungar y Bunn
2008; Klukkert, Teaford y Ungar 2010). Aunque
existen diferentes estudios aplicados, los análisis
centrados en muestras osteoarqueológicas son escasos (Carter 2007). La aplicación de técnicas de
topografía dental en grupos humanos antiguos
tiene un especial interés, ya que conocemos los
grados de exposición de dentina (Scott 1979), pero
1. Instituto Universitario de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico (INAPH), Universidad de Alicante ems2594@hotmail.com
140
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
poco sabemos acerca del cambio de la topografía
del diente en relación con el tipo de dieta y su relación con factores socioculturales.
En nuestro caso, este proyecto de topografía
dental comienza a desarrollarse en la Universidad
de Alicante a partir del 2016 en el marco de una
interacción interdisciplinar entre el Área de Prehistoria y el Departamento de Biotecnología, dirigida por los Drs. Gabriel García Atiénzar y Alejandro Romero Rameta.
3. El Cabezo Redondo
El Cabezo Redondo de Villena (Alicante) es un
yacimiento de la Edad de Bronce con un excepcional registro arqueológico. Según las dataciones
por carbono 14 (C14) sobre muestras de vida corta, la horquilla cronológica de este asentamiento
se extendería entre el 2100 y el 1300 a. C. (Hernández, García y Barciela 2016).
El registro funerario del Cabezo Redondo se
puede agrupar de manera simplificada en dos
grupos: un primer conjunto de enterramientos localizados en ámbito doméstico y, en segundo lugar, aquellos que aprovecharon covachas y grietas
naturales (Hernández, García y Barciela 2016).
Según los estudios preliminares, contamos con
un número mínimo de 60 individuos (De Miguel
2016). Junto con estos estudios osteoarqueológicos, otros de dieta basados en isótopos estables en
colágeno de hueso (Salazar 2016) y microdesgaste dental (Romero 2016) evidencian que la población del Cabezo Redondo se adaptó a una dieta
basada en recursos agrícolas y ganaderos con un
grado de abrasividad menor si se compara con poblaciones posteriores, asociada, probablemente, a
un consumo cárnico elevado y a técnicas de procesamiento del grano refinadas.
4. Metodología
En este trabajo se analizaron y catalogaron todos los dientes de los restos osteoarqueológicos
del Cabezo Redondo que se encuentran depositados en el Museo José M.ª Soler (Villena, Alicante). En primer lugar, fue necesaria una revisión y
catalogación de dientes para conocer el volumen
de material, y se registraron un total de 192 molares (incluyendo dentición decidua y permanente),
que se clasificaron siguiendo la propuesta de Scott (1979). Para este estudio preliminar se seleccionó el primer molar inferior permanente (M1), ya
que es uno de los primeros dientes en erupcionar
de la dentición permanente y, por tanto, su uso
funcional es mayor. Se registraron 35 M1, perte-
FIGURA 2. Modelo dental 3D generado con ArcScene
de un molar del Cabezo Redondo.
necientes a un número mínimo (NMI) de 27 individuos de ambos sexos. Para todos los dientes
seleccionados se obtuvieron réplicas de los originales basándonos en protocolos previos (Galbany
et al. 2006). En primer lugar, se obtuvieron moldes
de silicona hidrofóbica (Coltene®), un material
no agresivo para los restos y utilizado en clínica.
Posteriormente, de estos moldes se obtuvieron
unas réplicas con resina de poliuretano (Feroca
Composites SL), que se escanearon utilizando un
escáner de luz estructurada (DAVID SLS 2).
Los modelos 3D se procesaron para poder aplicar herramientas SIG, convirtiendo los archivos
poligonales en nubes de puntos. El análisis topográfico fue llevado a cabo con QGIS y ArcGIS
de forma complementaria. Para la interpolación
de la nube de puntos se usó la herramienta IDW
(Inverse Distance Weighting) con una resolución
de 0,025 mm generando un modelo digital del
terreno (MDT) (fig. 2). En cuanto al análisis topográfico, basándonos en estudios previos sobre
topografía dental, se aplicaron los parámetros de
pendiente, angularidad y relieve de la superficie
oclusal de cada diente (M’kirera y Ungar 2003).
El rango de desgaste registrado basado en Scott
(1979) osciló entre 5 y 25 como valor para los 35
M1 seleccionados. Los grados de desgaste se consideraron como variable independiente y se contrastaron con los parámetros topográficos de pendiente,
angularidad y relieve mediante una regresión lineal
para registrar el grado de correlación (r Pearson) y
significación a α=0,05 entre el desgaste y las variables dependientes relativas a la topografía dental.
Los análisis se realizaron con SYSTAT 10.2.
TOPOGRAFÍA DENTAL 3D Y DIETA DURANTE LA EDAD DEL BRONCE
141
FIGURA 3. Relación entre el grado de desgaste y los parámetros topográficos del diente. Se muestra la
correlación (r Pearson) y su significación (p<0,05).
5. Resultados de la interacción entre desgaste
y topografía dental
La relación entre desgaste del diente y parámetros topográficos muestra como la pendiente y el
relieve presentan una tendencia significativa negativa (r=−0,5 y –0,7; p<0,001). Por tanto, a mayor
grado de exposición de dentina se produce una reducción en los valores de la pendiente y el relieve
de la topografía oclusal del diente (fig. 3).
No obstante, la angularidad de la configuración topográfica dental, aunque muestra una tendencia negativa, no registra una significación estadística en relación con el aumento del desgaste
del diente.
6. Conclusiones
La aplicación de herramientas GIS a partir de
modelos 3D de dientes de origen osteoarqueológico permite registrar de forma precisa los cambios
topográficos del diente en relación con el desgaste.
Futuros estudios permitirán ampliar la muestra
analizada y la comparación con otras poblaciones
de contextos culturales y geográficos diferentes,
con el objetivo de conocer mejor las pautas alimentarias y los modos de vida de las poblaciones
del pasado durante la Prehistoria reciente desde
una nueva perspectiva.
7. Bibliografía
CARTER, C. M. 2007: «Dental topographic analysis of the molar teeth of Nadena and Caddoan
Amerinds from Arkansas», tesis doctoral de la
Universidad de Arkansas, Little Rock.
GALBANY, J.; ESTEBARANZ, F.; MARTÍNEZ, L. M.; ROMERO, A.; JUAN, J. de; TURBÓN, D.; PÉREZ-PÉREZ, A.
2006: «Comparative analysis of dental enamel
polyvinylsiloxane impression and polyurethane casting methods for SEM research», Microscopy Research and Technique, 69, 246-252.
GREGORY, W. K. 1922: The origin and evolution
of human dentitiont [on line], disponible en
<https://es.slideshare.net/adatnihc/origin-andevolution-of-human-dentition>.
HERNÁNDEZ PÉREZ, M. S.; GARCÍA ATIÉNZAR, G.; BARCIELA GONZÁLEZ, V. 2016: Cabezo Redondo (Villena, Alicante), Universidad de Alicante, Alicante.
KAY, R. F. 1985: «Dental Evidence for the Diet of
Australopithecus», Annual Review of Anthropology, 14, 315-341.
KLUKKERT, Z. S.; TEAFORD, M. F.; UNGAR, P. S. 2010:
«A dental topographic analysis of Chimpanzees», American Journal of Physical Anthropology, 148, 276-284.
MAIER, W. 1977: «Die Evolution der bilophodonten
Molaren der Cercopithecoidea: Eine funktionsmorphologische Untersuchung», Zeitschrift für
Morphologie und Anthropologie, 68, 1, 26-56.
MIGUEL IBÁÑEZ, M. P. de 2016: «Vida y muerte en
el Cabezo Redondo. Una lectura desde la Osteoarqueología», en: HERNÁNDEZ PÉREZ, M. S.;
GARCÍA ATIÉNZAR, G.; BARCIELA GONZÁLEZ, V.
(eds.), Cabezo Redondo (Villena, Alicante), Universidad de Alicante, Alicante, 82-84.
M’KIRERA, F.; UNGAR, P. S. 2003: «Occlusal relief
changes with molar wear in Pan troglodytes
troglodytes and Gorilla gorilla gorilla», American Journal of Primatology, 60, 31-42.
ROMERO RAMETA, A. 2016: «Antropología dental
de los individuos de Cabezo Redondo», en:
HERNÁNDEZ PÉREZ, M. S.; GARCÍA ATIÉNZAR, G.;
BARCIELA GONZÁLEZ, V. (eds.), Cabezo Redondo
(Villena, Alicante), Universidad de Alicante,
Alicante, 85-86.
SALAZAR, D. 2016: «Isotopos estables del carbono y
nitrógeno en Cabezo Redondo», en: HERNÁNDEZ
142
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
PÉREZ, M. S.; GARCÍA ATIÉNZAR, G.; BARCIELA GONZÁLEZ, V. (eds.), Cabezo Redondo (Villena, Alicante), Universidad de Alicante, Alicante, 87-89.
SCOTT, E. C. 1979: «Dental wear scoring technique», American Journal of Physical Anthropology, 51, 213-218.
UNGAR, P. S.; BUNN, J. 2008: «Primate dental topographic analysis and functional morphology»,
en: IRISH, J. D.; NELSON, G. C. (eds.), Technique
and application in dental anthropology, Cambridge University Press, Cambridge, 253-265.
ZUCCOTTI, L. F.; WILLIAMSON, D.; LIMP, W. F.; UNGAR,
P. S. 1998: «Technical note: Modeling primate
occlusal topography using geographic information systems technology», American Journal
of Physical Anthropology, 107, 137-142.
SECCIÓN 06. CONSERVACIÓN Y RESTAURACIÓN
DE MATERIAL ARQUEOLÓGICO
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
145
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN «CONSERVACIÓN
Y RESTAURACIÓN DE MATERIAL ARQUEOLÓGICO»
ELENA MORENO-RIBAS1,2, BLANCA SICILIA 1,2
Los materiales arqueológicos son bienes culturales que nos aportan valiosa información de
nuestro pasado, y por ello es de gran importancia no solo su salvaguarda y conservación, sino
también toda la información que aporten para la
investigación.
Para las XI Jornadas de Jóvenes en Investigación Arqueológica (JIA), propusimos por primera
vez una sesión centrada en la conservación y restauración de material arqueológico. Una sesión
abierta a todos aquellos trabajos realizados sobre
patrimonio arqueológico de cualquier periodo o
material. Todo ello con la intención de poner en
comunicación a especialistas del mundo de la restauración y de la arqueología a través de los trabajos de conservación y restauración que se están
realizando actualmente.
La sesión se dirigió a profesionales e investigadores dedicados a la protección y el estudio del
patrimonio arqueológico: restauradores, conservadores, arqueólogos, biólogos, geólogos, etc. Los
trabajos que se presentaron trataron sobre intervenciones enfocadas en dos líneas. Por un lado,
actuaciones directas sobre el patrimonio arqueológico, realizadas in situ o en el laboratorio: aplicación y resultados de tratamientos como limpiezas, consolidaciones, reconstrucciones, etc. Como
en los casos de la restauración de un cráneo de
oso de las cavernas procedente de la Cova del Toll
(Moià, Barcelona) o la restauración de un tannur
andalusí procedente del acueducto romano de
Los Calicantos (Gestalgar, Valencia).
Por otro lado, también se expusieron actuaciones indirectas: conservación preventiva, do-
cumentación del estado de conservación y otras
intervenciones como la documentación mediante
técnicas 3D, análisis para diagnosis y la caracterización de la composición, las alteraciones o los
materiales constitutivos de los restos arqueológicos. Como ejemplo de ello se expuso una propuesta de intervención de una falcata de la Necrópolis
vetona de La Osera (Ávila) o la presentación de
técnicas de reproducción digital y tradicional a
través de casos prácticos.
Para acabar, se trataron temas sobre socialización (divulgación, exposición, musealización,
etc.) y se valoraron propuestas relacionadas con
la protección del patrimonio arqueológico. En
este caso fue presentado un proyecto de puesta en
valor del conjunto arqueológico de Monte do Cario (Galicia) y otro sobre la musealización como
variable transversal en las intervenciones de conservación-restauración del patrimonio arqueológico. Como cierre, se presentó una encuesta en la
que se valoraba la presencia de la disciplina dentro de los yacimientos arqueológicos en el marco
territorial español.
Todo esto dio pie a un interesante y dinámico debate en el que se trataron temas de todo
tipo, desde diferentes tratamientos y materiales
usados, los motivos de su uso o alternativas, los
desafíos en la conservación en yacimientos fuera
de España, y sobre todo el papel del restaurador,
centrado en los diferentes yacimientos dentro de
la Península.
Palabras clave: restauración, conservación,
arqueología, material arqueológico
1. Àrea de Prehistòria, Universitat Rovira i Virgili (URV), av. de Catalunya, 35, 43002 Tarragona, Spain - emorenoribas@
gmail.com, blancasicilianavarro@gmail.com
2. Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES), Zona Educacional 4, Campus Sescelades URV
(Edifici W3), 43007 Tarragona, Spain
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
147
RESTAURACIÓN DE VÉRTEBRAS DE RINOCERONTE
DEL YACIMIENTO PLIOCENO DEL CAMP DELS NINOTS
(CALDES DE MALAVELLA, GIRONA)
BLANCA SICILIA1,2, LUCÍA LÓPEZ-POLÍN 1,2, BRUNO GÓMEZ DE SOLER1,2,
GERARD CAMPENY VALL-LLOSERA1,2
Resumen
En este artículo se presenta el tratamiento de diez vértebras en conexión anatómica de
un rinoceronte del Camp dels Ninots (Caldes
de Malavella, Girona). Estos fósiles se trataron
anteriormente y se guardaron en un soporte de
escayola. El nuevo tratamiento de restauración
que aquí se describe se dirigía inicialmente a mejorar su limpieza y consolidación. Sin embargo,
finalmente se separaron gran parte de las vértebras. De esta manera, se mejoraron tanto las posibilidades de estudio como la conservación de
los fósiles.
Palabras clave: restauración, conservación,
hueso fósil, Camp dels Ninots
1. Introducción
El yacimiento del Camp dels Ninots (Gómez
de Soler et al. 2012) (Caldes de Malavella, Girona)
(figs. 1A y B) se originó en un volcán de tipo maar
en el que se formó un lago con posterioridad. Las
condiciones del yacimiento han favorecido la preservación de esqueletos de grandes y pequeños
vertebrados en conexión anatómica.
Durante la campaña de excavación de 2006 se
encontró un esqueleto de rinoceronte joven (fig.
1C) (CN06-cala2-4-M46), que se excavó, documentó y consolidó, y se le realizó un molde in situ
(Gómez et al. 2010) (figs. 1D y E).
El tratamiento que aquí se describe corresponde a las diez vértebras lumbares de este individuo. Estas, al igual que el resto del espécimen,
fueron tratadas inicialmente in situ, y también
FIGURA 1. Localización del yacimiento (A y B) y la
excavación (C, D y E).
en el laboratorio, donde, además de una ligera
limpieza, se les realizó un soporte de escayola
en dos mitades con objeto de preservarlas (Jabo,
Kroehler y Grady 2006). Así quedaron hasta 2017,
cuando se volvieron a tratar. La intención inicial
era aumentar el grado de limpieza y consolidación de los fósiles. Sin embargo, tras analizarlos
y evaluar diferentes propuestas de tratamiento,
se decidió separar los fósiles y realizarles un sistema de embalaje diferente. De esta manera se
mejoraría tanto el estudio como la conservación
de los fósiles.
1. IPHES, Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social, Campus Sescelades URV (Edifici W3), 43007
Tarragona, Spain
2. Àrea de Prehistòria, Universitat Rovira i Virgili, Fac. de Lletres, av. Catalunya 35, 43002 Tarragona, Spain blancasina@gmail.com
148
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
2. Estado de conservación previa al nuevo
tratamiento
Las diez vértebras se encontraban unidas, tal
y como aparecieron y se extrajeron del yacimiento. Presentaban restos de sedimento, consolidante (figs. 2F y G), y también restos de silicona del
molde que se le realizó in situ. Además, tenían numerosas fisuras, fracturas y fragmentos desprendidos, especialmente en las espinas de los extremos (figs. 2H e I). Las vértebras de los extremos,
es decir 1-2 y 9-10, eran las más deterioradas y
frágiles, sobre todo las primeras, cuyas espinas estaban muy fragmentadas y separadas del cuerpo
vertebral (fig. 2J).
3. Intervención de restauración y conservación
Con el objetivo de separar las vértebras, se
inició el tratamiento. Sin mover las vértebras del
soporte, se retiraron restos de consolidante y de
sedimento mediante acetona, pincel y bisturí. La
limpieza se alternó con la consolidación de las zonas más delicadas con Paraloid B-72 al 5 % en
acetona por goteo, así como la adhesión de algunos fragmentos con el mismo producto al 20 % en
acetona. Para reforzar las uniones de las espinas
de las vértebras 1 y 2, se colocaron unas pequeñas
tiritas de tejido de fibra de vidrio (fig. 3K) impregnadas con Paraloid B-72 al 5 % en acetona (figs.
3L a N) (López-Polín 2016). Teniendo en cuenta
que el objetivo final era separar las vértebras, en
las zonas de unión de los cuerpos vertebrales se
limpió especialmente y, a la vez, se evitó añadir
FIGURA 2. Estado de conservación inicial (F, G, H, I,
y J).
consolidante que pudiera aumentar la adhesión
entre cuerpos vertebrales.
Tras este tratamiento, se separaron las vértebras con bisturí y con cuidado, ya que en las caras
intervertebrales se desprendían fragmentos con
facilidad, quedándose adheridos al cuerpo vertebral de la vértebra contigua. Cuando esto ocurría,
se recuperaban y recolocaban en la zona de procedencia adhiriéndolos con Paraloid B72.
FIGURA 3. Refuerzo de
las espinas vertebrales
con tiritas de fibra de
vidrio (K, L, M y N).
RESTAURACIÓN DE VÉRTEBRAS DE RINOCERONTE DEL YACIMIENTO PLIOCENO DEL CAMP DELS NINOTS (CALDES DE MALAVELLA, GIRONA)
149
FIGURA 4. Vértebras tras la restauración (O) y sistema de embalaje (P y Q).
De las diez vértebras, se individualizaron cuatro de ellas, concretamente las 5, 6, 7 y 8. El resto
se mantuvieron en parejas, 1-2, 3-4 y 9-10 (fig. 4O),
ya que separarlas hubiera sido demasiado arriesgado. Una vez separadas, se remató el tratamiento de limpieza y consolidación de la cara opuesta
con los procedimientos descritos anteriormente.
Terminada la intervención, se realizó un embalaje a medida en una plancha de espuma de polietileno (Ethafoam), recubriendo los huecos con
tejido de polietileno Tyvek para evitar de esta manera que hubiera rozaduras (figs. 4P y Q).
4. Conclusiones
Para concluir, con este artículo no solo pretendíamos hablar de un tratamiento de restauración
basado en una limpieza y consolidación, sino
de la importancia de tener en cuenta qué se va
a hacer después y cuáles son las necesidades de
la pieza a la hora de plantear una propuesta de
restauración. Para llevar a cabo cualquier trabajo
de restauración es necesario tener claro no solo
el tipo de material y su estado de conservación,
sino con qué finalidad hay que tratar ese objeto
y tener en cuenta las necesidades de este. En este
caso el estudio, la estabilidad y su conservación
determinaron la necesidad de separar las vértebras para su mejor manipulación, como también
la utilización de las tiras de fibra de vidrio, con las
que nos asegurábamos que las espinas estuvieran
bien reforzadas, ya que para su estudio es necesario extraer las piezas del soporte y manipularlas
con tranquilidad.
5. Bibliografía
GÓMEZ DE SOLER, B.; CAMPENY VALL-LLOSERA, G.;
VAN DER MADE, J.; OLMOS, O.; AGUSTÍN, J.; SALA,
R.; BLAIN, H. A.; BURJACHS, F.; CLAUDE, S.; GARCÍA CATALÁN, S.; RIBA, D.; ROSILLO, R. 2012: «A
new key Locality for the Pliocene Vertebrate
record of Europe: the Camp dels Ninots maar
(NE Spain)», Geologica Acta, 10, 1-17. doi:
10.1344/105.000001702.
GÓMEZ MERINO, G.; LÓPEZ-POLÍN, L.; SOLÉ RAVENTÓS,
À.; VILALTA OLLÉ, J. 2010: «Treballs de restauració i d’emmotllament dels materials paleontològics del Camp dels Ninots», en: CAMPENY
VALL-LLOSERA, G.; GÓMEZ DE SOLER, B. (eds.), El
Camp dels Ninots. Rastres de l’evolució, Ajuntament de Caldes de Malavella - IPHES, Caldes
de Malavella, 177-188.
JABO, S. J.; KROEHLER, P. A.; GRADY, F. V. 2006: «A
technique to create form-fitted, padded plaster
jackets for conserving vertebrate fossil specimens», Journal of Paleontological Techniques,
1, 1-6.
LÓPEZ-POLÍN, L. 2016: «Metodología y criterios de
restauración de restos óseos pleistocenos. El
tratamiento de los fósiles humanos de TD6
(Gran Dolina, Sierra de Atapuerca)», tesis doctoral, Departament d’Història i Història de
l’Art, Universitat Rovira i Virgili, Tarragona.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
151
UNA FALCATA DE LA NECRÓPOLIS VETTONA DE LA OSERA
(ÁVILA). CARACTERIZACIÓN, ESTADO DE CONSERVACIÓN
Y PROPUESTA DE INTERVENCIÓN
BÁRBARA MARTÍN1
1. Contextualización arqueológica
La pieza procede de la sepultura 1295 de la necrópolis vettona de La Osera (fig. 1), a las puertas
del Castro de La Mesa de Miranda (Ávila), y esta-
ría dividida en seis zonas, que corresponderían a
divisiones familiares (VV. AA. 2008, 74).
La necrópolis fue excavada entre 1932 y 1944
por Juan Cabré y Encarnación Cabré, y se concluyó que era una necrópolis de incineración (Cabré,
FIGURA 1. Ajuar funerario de la sepultura 1295 de la zona V de la Necrópolis de La Osera, 25-28 de septiembre
de 1933©. Copyright Centro Documental de Arqueología y Patrimonio (CeDAP) de la Universidad Autónoma
de Madrid (UAM). Legado documental familia Cabré, n.º inv. 15353-A.
1. Universidad Autónoma de Madrid - barbara.marting@estudiante.uam.es; barby1oc@hotmail.com
152
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Molinero y Cabré 1932, 32). Se documentaron
2.230 sepulturas y miles de objetos.
2. Estudio científico previo
En el Museo Arqueológico Nacional se realizaron dos análisis por fluorescencia de rayos X. Los
análisis mostraban una composición superficial
de hierro (99,58 % y 99,39 %), cobre (0,59 % y
0,27 %) y antimonio (0,02 % y 0,14 %).
3. Estado de conservación
Para valorar el estado de conservación de un
bien arqueológico hay que saber determinar y distinguir los diferentes agentes que provocan que
los deterioros se desencadenen con mayor rapidez. Estos pueden ser: extrínsecos (factores ambientales y características del suelo), intrínsecos
(características de la aleación o compatibilidad
de los materiales empleados) y antrópicos. Los
distintos factores de deterioro no siempre actúan
de forma aislada, sino que favorecen el desarrollo
de otros factores de alteración. Se comenzará describiendo el estado de conservación de la pieza,
analizándola de dentro a fuera:
– Fragmentación. La hoja de la falcata es el elemento principal y seis fragmentos del alma de la
empuñadura (fig. 2).
– Modificaciones morfológicas. La pieza tiene
una desviación longitudinal de 15°. La falcata exhibe en el filo anterior un mellado por efecto de
un impacto con un objeto contundente (fig. 3).
– Faltas matéricas. Las cachas (madera, hueso o
marfil) están perdidas por su naturaleza orgánica.
Los hilos decorativos pueden estar cubiertos por
la expansión de la corrosión del hierro o haberse
desprendido y perdido. Otra pérdida fue causada
por la muestra para una metalografía hecha por
Salvador Rovira en 1994.
– Estabilidad. La pieza posee un alto porcentaje de núcleo metálico, solo perceptible en la zona
FIGURA 3. Detalle del mellado del filo. Se pueden
observar las ondas perimetrales causadas por el
golpe. Fotografía: Bárbara Martín Gómez (18 de
marzo 2016).
con mayor grosor; en la zona distal de la hoja es
probable que el núcleo esté mineralizado.
– Pátina. La superficie está muy alterada y está
cubierta por una capa de magnetita (Fe3O4), la
cual se forma más fácilmente a altas temperaturas. Es un óxido de hierro estable, denso y de color pardo azulado.
– Productos de corrosión. Sobre esta se halla
una capa heterogénea y granulada de productos
de corrosión activa del hierro. Los más abundantes son óxidos e hidróxidos. Estos productos de
alteración son debidos a la naturaleza inestable
FIGURA 2. Visión
cenital de los distintos
fragmentos que
conforman la falcata.
Fotografía: Bárbara
Martín Gómez (18 de
marzo de 2016).
UNA FALCATA DE LA NECRÓPOLIS VETTONA DE LA OSERA (ÁVILA). CARACTERIZACIÓN, ESTADO DE CONSERVACIÓN Y PROPUESTA DE INTERVENCIÓN
FIGURA 4. Detalle de los óxidos encapsulados o
weeping de la superficie de la falcata. Fotografía:
Bárbara Martín Gómez (18 de marzo de 2016).
de los metales, que tienden a estabilizarse convirtiéndose en minerales otra vez. Tienen una textura
granular y su color varía desde el rojo claro hasta
el marrón oscuro. Se exteriorizan en forma de picaduras, que penetran en el material.
El aumento de volumen de estos favorece la
fragilidad del material (microfisuras superficiales). La cristalización de las sales en las fisuras
deja el núcleo metálico interno expuesto, y los
procesos de corrosión continúan. La observación
bajo el binocular ha atestiguado la presencia de
ampollas o weeping (fig. 4).
– Concreciones terrosas. Los cúmulos terrosos,
de hasta 1 o 2 milímetros de espesor, se encuentran combinados con los productos de corrosión.
– Adelgazamiento del metal. Esto es consecuencia directa del avanzado grado de corrosión que
presenta la pieza.
– Laminado/hojaldrado. Se trata de la separación en forma de pequeñas lascas metálicas mineralizadas de metal. Es consecuencia directa de
la técnica de fabricación empleada en este tipo de
espadas, la unión de dos hojas metálicas mediante forja: la escoria queda atrapada por efecto del
martillado y son proclives de ser focos de corrosión; es visible en la parte dorsal de la hoja de la
falcata, donde se ve una fisura en el centro. Este
fenómeno está favorecido por la hinchazón de los
productos de corrosión en las fisuras que, por la
humedad, empujan y separan las láminas de metal (Barrio et al. 2008, 585).
4. Propuesta de intervención
La restauración de hierros arqueológicos tiene
como objetivo principal recuperar la forma y las
dimensiones originales de la pieza para realizar el
estudio arqueológico. La intervención sobre metales arqueológicos debe tener como fin la extracción de las tierras del contenedor geológico (S) y
153
del conglomerado que se ha formado junto con
los óxidos (TM), dejando la capa más densa y estable (DPL), los cuales son suficientemente densos
para evitar la difusión del oxígeno, y no se deberá
llegar al núcleo metálico (M) (Chitty et al. 2005,
1555-1581).
Abordar una intervención que se ajuste a las
necesidades de la falcata precisa de una colaboración interdisciplinar (restauradores, arqueólogos,
técnicos de laboratorio) para recabar toda la información sobre las alteraciones de la pieza, su
origen y su estado de conservación, para así determinar la mejor forma de proceder. Se justificarán
y documentarán las técnicas, los materiales y los
procesos empleados.
– Estudio radiográfico. Es preciso, para determinar la evolución del núcleo metálico, localizar
posibles fisuras internas o que se perciban zonas
decorativas encapsuladas.
– Realización de análisis. Para caracterizar los
productos de corrosión que se encuentran sobre
la pieza. Estos análisis pueden aportar datos para
varios campos distintos (Barrio et al. 2008, 580).
– Limpieza mecánica. Se combinarán sistemas
mecánicos (manuales y/o asistidas) atendiendo a
las necesidades de la pieza (aguja, bisturí, espátula de ultrasonidos, microchorro). Se comenzará
con técnicas poco invasivas y se irá aumentando
la intensidad a medida que no se vea una evolución favorable del grado de limpieza. Se extraerá
la corrosión deformante y se hará bajo el binocular para asegurar una limpieza homogénea. Se
descarta el uso de vibroincisores o microtorno debido a su menor control y por las vibraciones que
generan.
– Limpieza con láser. El láser convierte los óxidos hidratados a óxidos anhidros, con un efecto
de mutación cromática de la superficie, pasando
de un tono rojo a gris en la superficie (Zannini y
Avilés 2006, 106), y los productos de corrosión activos se estabilizan al transformarles en magnetita.
En las zonas decoradas se utilizarán unos parámetros menos agresivos (Chamón et al. 2010, 6). Esta
técnica debe considerarse como complementaria a
otros métodos, ya que así es como se obtienen los
mejores resultados (VV. AA. 2015, 33).
– Inhibición. Al tener núcleo metálico, se debe
aplicar un inhibidor que proteja la pieza del exterior y así evitar que los procesos de corrosión
continúen. Se busca generar una capa de protección sobre la pieza sin alterar las propiedades del
objeto. Se sumergirá la pieza en una disolución de
ácido tánico al 10 % en etanol durante 24 horas.
– Adhesión de fragmentos. Va encaminado al retorno de unidad a la pieza, restitución de la cohesión mecánica perdida y reconstrucción de su estado original. Se utilizará Paraloid B-72© al 30 %.
154
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
– Reintegración matérica. Se empleará igualmente Paraloid B-72© en una proporción variable
entre el 20-30 %, cargada con microesferas de vidrio en proporción 30:70.
– Protección final. Las capas de protección deben ser estables y no interactuar químicamente
con el metal, garantizando cierta durabilidad y reversibilidad y sin ocultar el aspecto de la superficie.
Debe proteger la falcata y la inhibición de los agentes externos. Se propone una doble protección:
primero se aplicará una capa de Paraloid B-72© al
5 %, disuelta en acetona, y después una capa de
cera microcristalina, Cosmolloid H-80©, disuelta
al 10 % en White Spirit© (Mourey 1987, 14-77).
5. Consideraciones sobre conservación preventiva
Para asegurar la conservación a largo plazo y
la durabilidad de la intervención es fundamental
establecer unos parámetros de la conservación
preventiva. La humedad relativa no deberá superar el 30 % (+5 %/–5 %). La temperatura deberá
mantenerse entre 8 °C y 20 °C (+2 °C/–2 °C). Habrá que tener especial cuidado en controlar los
gases sulfúricos, H2S Y SO2 o de la emanación de
compuestos orgánicos volátiles. La radiación lumínica deberá rondar entre los 150 y 200 luxes/
hora (VV. AA. 2015, 44).
6. Bibliografía
BARRIO, J.; CHAMÓN, J.; ARROYO, M.; PARDO, A. I.;
CATALÁN, E. 2008: «La conservación y restaura-
ción de los metales arqueológicos: Propuestas
metodológicas y arqueometría», Patrimonio
Construido y Restauración S5, Madrid, 577592.
CABRÉ, J.; MOLINERO, A.; CABRÉ, M.ª E. 1932: «La
Necrópoli de La Osera», Sociedad Española de
Antropología, Etnografía y Prehistoria, XI, Madrid, 1-50.
CHAMÓN, J.; BARRIO, J.; CATALÁN, E.; MARTÍNEZ, I.;
PARDO, A. I. 2010: «Resultados de la limpieza
láser en Patrimonio Arqueológico Metálico»,
en: VI Taller Nacional de Procesado de Materiales con Láser, Valencia, 1-6.
CHITTY, W. J.; DILLMANN, P.; L’HOSTIS, V.; LOMBARD,
C. 2005: «Long-term corrosion resistance of
metallic reinforcements in concrete. A study
of corrosion mechanisms based on archaeological artefacts», Corrosion Science, 47, 15551581.
MOUREY, W. 1987: La conservation des antiquités
métalliques. De la fouille au musée, LCRRA,
Draguignan.
VV. AA. 2008: «Vettones. Pastores y guerreros en la
Edad del Hierro», en: Catálogo de la exposición
«Vettones, pastores y guerreros en la Edad del
Hierro», Museo Arqueológico Regional, Alcalá
de Henares.
VV. AA. 2015: Proyecto COREMANS. Criterios de
intervención en materiales metálicos, Instituto
de Patrimonio Cultural Español, Madrid, 2246.
ZANNINI, A.; AVILÉS, F. 2006: «Las aplicaciones láser
en el sector de los bienes culturales», en: Innovación tecnológica en conservación y restauración del Patrimonio, Universidad Autónoma de
Madrid, Madrid, 100-109.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
155
DE LA EXCAVACIÓN AL MUSEO: RESTAURACIÓN
DE UN HORNO O TANNUR ANDALUSÍ PROCEDENTE
DEL ACUEDUCTO ROMANO DE LOS CALICANTOS
(GESTALGAR, VALENCIA)
SARA BORDONADO1, TRINIDAD PASÍES2, VICTOR M. ALGARRA3
1. Introducción
Durante los trabajos arqueológicos de acondicionamiento y excavación del acceso al acueducto
romano de Los Calicantos llevados a cabo entre
septiembre y octubre de 2017 en el municipio de
Gestalgar (La Serranía, Valencia) se produjo el
hallazgo de diversos restos relacionados con un
espacio de hábitat de época islámica. Entre las
piezas arqueológicas recuperadas, de alto valor
histórico, destaca el descubrimiento de un horno
o tannur andalusí de pequeñas dimensiones.
En este artículo desarrollamos un recorrido
por cada uno de los procesos realizados en la
restauración de esta pieza: desde su extracción
hasta la posterior intervención en el laboratorio, siendo el objetivo final la exposición de los
restos. Los principales tratamientos de conservación-restauración se han centrado en la consolidación y refuerzo de la estructura del horno,
diseñando y elaborando durante el proceso un
sistema expositivo adaptado a las particularidades del objeto arqueológico que permita su estabilización y facilite al mismo tiempo su correcta
comprensión.
2. Un acueducto romano inacabado aprovechado como hábitat en época andalusí
La excavación arqueológica llevada a cabo
en el acueducto de Los Calicantos (siglo I d. C. y
principios del siglo II d. C.) tenía como objetivo la
investigación arqueológica, el acondicionamiento
del acceso y su puesta en valor. Encontramos paralelos desde el punto de vista constructivo con el
vecino acueducto de Peña Cortada, entre los términos de Calles y Chelva.
No existe continuidad entre sus diferentes tramos, que nunca llegaron a enlazarse, por lo que
nos hallamos ante una obra que los trabajadores
romanos dejaron inconclusa, lo que abre una interesante línea de investigación en torno a los motivos que impulsaron el inicio de la obra y los que
llevaron a su abandono. En la intervención arqueológica fue hallado un hábitat andalusí (siglos
XII-XIII) que aprovechó uno de los túneles como vivienda. Se ha podido identificar el área de cocina,
presidido por un tannur (Gutiérrez 1990-1991), un
pequeño horno circular construido mediante una
técnica poco habitual a base de churros de arcilla
superpuestos. Encontramos por un lado el cuerpo
del tannur (37 cm de diámetro de base) y por otro
lado varios fragmentos de churros desubicados.
En este tipo de horno se elaboraban tortas de pan
y se cocinaban otros alimentos utilizando ollas y
cazuelas, cuyos fragmentos también se han recuperado en las excavaciones arqueológicas.
Un banco de piedras separaba este primer espacio del área de dormitorio, formado por un lecho vegetal de ramitas, paja y corteza de palmito,
donde de manera excepcional se ha conservado
parte de una esterilla o cesto de fibras vegetales y
una suela de alpargata.
3. Proceso de extracción
La excepcionalidad del hallazgo hizo que se
contactara con los profesionales del Laboratorio
de Restauración del Museu de Prehistòria de València, que acudieron a la zona para garantizar la
1. Museu de Prehistòria de València - sarabordonado@gmail.com
2. Museu de Prehistòria de València - trpasies@hotmail.com
3. Ayuntamiento de Gestalgar - victorgabinetearqueologia@gmail.com
156
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. a. Vista general del horno en el lugar del
hallazgo. b. Reconstrucción de las dos modalidades
de uso de las ṭābūnat de elaboración de pan
pegando tortas al interior de sus paredes o como
soporte donde depositar un recipiente cerámico
(Gutiérrez 1990-1991, 166-168).
FIGURA 2. a. Proceso de extracción: engasado
de protección. b. Colocación de la espuma de
poliuretano para conformar el bloque rígido.
correcta conservación de los restos. Los churros
que formaban parte de la zona superior de la bóveda del pequeño horno, y que ahora aparecían
derrumbados en su interior, fueron recogidos por
estratos y guardados en cajas para su traslado. El
resto de la pieza que aún se conservaba intacta fue
extraída mediante la construcción de un bloque
rígido (Pedeli y Pulga 2002, 88-94), que serviría
de refuerzo para dar mayor garantía de seguridad
durante su transporte. El primer paso en el proceso de extracción fue la limpieza superficial de
los depósitos terrosos con brochas suaves. A continuación se protegió la pieza con una doble capa
de gasa de algodón hidrófilo, utilizando como
adhesivo resina Mowital® B60HH al 15 % disuelta en etanol. Seguidamente se aplicó espuma de
poliuretano rellenando la parte interior del horno, que es la que quedaba a la vista, para aportar
más estabilidad a la pieza durante la extracción.
Finalmente, se separó la pieza y se colocó sobre
un soporte rígido, asegurándola con cinchas, para
proceder a su traslado a las instalaciones del Museu de Prehistòria de València.
4. Diagnóstico de daños
En cuanto al estado de conservación de la pieza, como hemos señalado se encontró el cuerpo
del tannur formado por cinco churros incompletos superpuestos y diversos fragmentos de churros
desubicados en la zona interior de su circunferencia, aunque la falta de material original era considerable. En general se apreciaba poca estabilidad
estructural y un elevado grado de descohesión de la
pasta arcillosa, lo que había producido su disgregación en numerosas áreas. Además, los churros del
cuerpo no se encontraban bien fijados entre ellos
y tanto estos como los restos sueltos presentaban
gran cantidad de grietas y fisuras. También se observaba la presencia de restos terrosos, piedras y
raíces en toda la superficie del objeto.
DE LA EXCAVACIÓN AL MUSEO: RESTAURACIÓN DE UN HORNO O TANNUR ANDALUSÍ PROCEDENTE DEL ACUEDUCTO ROMANO DE LOS CALICANTOS (GESTALGAR, VALENCIA)
157
FIGURA 3. a. Limpieza
mecánica de los
restos terrosos. b.
Consolidación con
impregnación de silicato
de etilo. c. Adhesión
de los fragmentos
dispersos. D. Retoque
cromático del refuerzo
de la masilla sintética
(Balsite®W-K).
5. Proceso de intervención: trabajos en el
laboratorio
Se llevó a cabo una primera fase de limpieza
superficial en la zona libre de engasado con la
ayuda de medios mecánicos poco agresivos (brochas suaves y pera de aire), retirándose además
las piedras y raíces. Debido a la descohesión de
la pasta, fue imprescindible realizar una consolidación integral en varias fases, tanto del cuerpo
como de los restos dispersos, con silicato de etilo
(Estel®1000), por impregnación o inmersión, según los casos (García y Flos 2008, 178-179).
Con el objetivo de aportar estabilidad al cuerpo
del tannur, se procedió a la colocación de dos tipos
de refuerzos estructurales: por un lado se aplicó
por inyección el adhesivo Mowital®B60HH al 15
% en etanol en las grietas y fisuras; por otro lado, se
elaboró una masilla sintética reversible (Acril®33
al 30 %, una parte de piedra pómez, una parte de
árido Sikadur®510, una parte de microesferas de
vidrio, media parte de tierra del yacimiento lavada
y tamizada), la cual se introdujo en las zonas de
grietas con separación entre los fragmentos.
Con la zona exterior del cuerpo estabilizada, se
retiró mecánicamente la espuma de poliuretano
y el engasado con acetona. Se pudieron así efectuar los tratamientos de limpieza, consolidación
y refuerzo en la zona interior del objeto, con los
mismos productos y metodologías que ya hemos
descrito anteriormente.
Para proporcionar un correcto apoyo y nivelación de la zona de contacto, se elaboró una base
de resina epoxídica Balsite®W+K pigmentada,
la cual se aplicó en la base del cuerpo del horno, aislando previamente la pasta cerámica con
un estrato intermedio de Paraloid®B72 disuelto
al 20 % en acetona (Podany et al. 2001). Una vez
polimerizada la resina, se trabajó con bisturí y papeles abrasivos y se retocó cromáticamente con
pinturas acrílicas aplicadas a pincel, buscando favorecer su integración tonal con el original.
6. Propuesta de exposición
Ante la falta de original para poder completar
la pieza y comprobando la imposibilidad de reubicar los fragmentos sueltos existentes en el cuerpo del tannur sin cometer un falso histórico, se
valoraron las diferentes posibilidades de exposición de la pieza, para lo que se consideraron sus
características particulares y se hicieron prevalecer los criterios de mínima intervención, respeto al original y reversibilidad de las actuaciones.
Se apostó por una alternativa poco invasiva, que
consistió en la recreación del objeto tal y como
había sido descubierto, incluso con todo el derrumbe, apoyándonos en la documentación fotográfica. Con este sistema expositivo pretendíamos
contextualizar la pieza arqueológica sin realizar
reconstrucciones hipotéticas sobre la misma ni
comprometer su integridad. Se propuso además
la realización de una recreación virtual del objeto
completo para facilitar la correcta comprensión
del mismo durante su exposición al público.
158
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. a-d. Proceso de
montaje expositivo de la
recreación del hallazgo.
7. Conclusiones
8. Bibliografía
Destacamos la importancia del trabajo interdisciplinar en las actuaciones conservativas, en
las que la labor del arqueólogo y del restaurador
se apoyan y complementan, ya desde el propio
yacimiento arqueológico. Reiteramos también la
importancia de la mínima intervención en favor
de la autenticidad de los objetos, realizando únicamente tareas de consolidación y estabilización
de la pieza, puesto que actualmente existen infinidad de recursos a nuestra disposición que nos
permiten hacer llegar el mensaje que queremos
transmitir gracias a las nuevas tecnologías y sin
necesidad de intervenir de forma directa sobre los
originales.
Como señala el filósofo alemán Martin Heidegger (Gómez y Quirosa 2008, 2), la única manera
de tener éxito en la conservación de un bien es
establecer un diálogo entre este y la sociedad, y
cuando este se establece, el objeto transmite una
serie de valores que garantizan su preservación en
el tiempo. Por ello, queremos reivindicar la importancia de la difusión de las acciones de conservación al público en general, a través de las redes
sociales del propio museo, con el fin de favorecer
la conciencia y el respeto del legado arqueológico.
GARCÍA, S.; FLOS, N. 2008: Conservación y restauración de bienes arqueológicos, Editorial Síntesis,
Madrid.
GÓMEZ, L.; QUIROSA, V. 2008: «Nuevas tecnologías
para difundir el Patrimonio Cultural: las reconstrucciones virtuales en España», e-rph,
Revista electrónica del patrimonio histórico, 4,
<http://www.revistadepatrimonio.es/revistas/
numero4/estudiosgenerales/estudios/articulo.
php>. [Consulta: 15 de mayo de 2014]
GUTIÉRREZ, S. 1990-1991: «Panes, hogazas y fogones portátiles. Dos formas cerámicas destinadas a la cocción del pan en Al-andalus: El
hornillo (tannür) y el plato (tábag)», Lvcentvm,
IX-X, 161-175.
PEDELI, C.; PULGA, S. 2002: Pratiche conservative sullo scavo archeologico. Principi e metodi,
All’Insegna del Giglio, Florencia.
PODANY, J.; GARLAND, K.; FREEMAN, W.; ROGERS, J.
2001: «Paraloid B-72 as a structural adhesive and as a barrier within structural adhesive
bonds: evaluations of strength and reversibility», JAIC, 40, 15-33.
Agradecimientos
Al Archivo y a la directora del Museu de Prehistòria de València, Helena Bonet. A Giulia Cernieri,
que colaboró en las labores de extracción.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
PARA QUÉ Y CÓMO INTERVENIMOS: LA MUSEALIZACIÓN
COMO VARIABLE TRANSVERSAL EN LAS INTERVENCIONES
DE CONSERVACIÓN-RESTAURACIÓN DEL PATRIMONIO
ARQUEOLÓGICO
ÁGUEDA SÁENZ-MARTÍNEZ1
Resumen
El patrimonio arqueológico no es siempre expuesto en los museos con la contextualización necesaria para su comprensión. Desde el ámbito de
la conservación-restauración se debe incluir la musealización de las piezas de manera transversal en
las intervenciones, de tal forma que los tratamientos la favorezcan. Así, se tendrán en cuenta las posibilidades y limitaciones de la situación del museo, el espacio expositivo y las piezas circundantes.
Con motivo de la reapertura del Museo Arqueológico Municipal de Lorca (2015), el Museo
Nacional de Arqueología Subacuática colabora en
la restauración de un fragmento de un mosaico
perteneciente al programa ornamental de la villa
romana de La Quintilla (siglos I-III d. C.).
FIGURA 1. Opus tessellatum en emplazamiento
original. Villa romana de La Quintilla
(Lorca). ©Milagros Buendía Ortuño.
1. Contextualización
La pieza se trata de un opus tessellatum polícromo que, originalmente, pavimentaba un impluvium del segundo nivel de la villa (figura 1).
Este estaba constituido por las estancias de carácter residencial, bastante lujosas y con una importante decoración basada en pavimentos con mosaicos y paredes revestidas con pinturas murales
(Ramallo 1995, 310).
El fragmento de mosaico fue extraído durante la campaña arqueológica de 2004, en el marco de las excavaciones sistemáticas del grupo de
investigación iARQ de la Universidad de Murcia
(Ramallo et al. 2013, 182), y trasladado en 2015 al
Museo Nacional de Arqueología Subacuática para
su intervención.
El estado alterado (figura 2) del emplazamiento original, sumado a las acumulaciones terrosas
FIGURA 2. Opus tessellatum. Villa romana de La
Quintilla (Lorca). ©Archivo Museo Nacional de
Arqueología Subacuática.
1. Universidad Complutense de Madrid - agueda.saenz.mtz@gmail.com
159
160
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
y a la pérdida de teselas originales, así como de
los estratos preparatorios (nucleus, rudus y strato di allettamento), habían contribuido a su falta
de estabilidad y, en definitiva, a su mal estado de
conservación.
2. Criterios de intervención y problemática
Teniendo en cuenta el carácter específico de
esta pieza, al ser un bien inmueble y Bien de Interés Cultural (BIC en adelante), es necesario acudir a la legislación para determinar los criterios
de intervención que le afectan. En primer lugar,
su extracción del emplazamiento original se justifica atendiendo a la Ley 16/1985, de Patrimonio
Histórico Español (LPHE) (BOE 1985, 7), y la Ley
4/2007, de Patrimonio Cultural de la Comunidad
Autónoma de la Región de Murcia (LRM) (BOE
2008, 15), que determinan que un BIC puede separarse de su entorno si resulta imprescindible
por causa de fuerza mayor. En este caso el emplazamiento original contribuía al detrimento de
su estado de conservación. Asimismo, el decálogo
de la restauración puntualiza que en los casos en
los que el emplazamiento original suponga una
amenaza para su conservación, la pieza debe ser
reubicada en un espacio que garantice su salvaguarda (Ministerio de Cultura 2007). Queda patente, pues, la pérdida del sentido constructivo de
la pieza, que se encuentra totalmente descontextualizada al haber sido desvinculada del emplazamiento original para el cual había sido diseñada.
Por ello, el objetivo principal de su musealización
debería ser devolverle, en la medida de lo posible,
su carácter específico, aportando un nuevo sentido constructivo que permita una exposición semejante a la original.
b. Sellado de lagunas con arena silícea Sikadur
501 (granulometría 0,08-0,8 mm) y alcohol polivinílico. Sellado de grietas y fisuras entre teselas
con cal Lafarge (CTS®) y arena lavada tamizada.
c. Aplicación del estrato de intervención sobre
las teselas (reverso) a base de Mowilith® y piedra
pómez en polvo.
d. Adhesión con resina epoxi cargada con sílice coloidal del nuevo soporte de panel de nido
de abeja CTS® PGA 1, 3 mm de grosor, al que se
practican orificios equidistantes para la purga de
la resina.
2. Segunda fase
a. Eliminación de la arena de sellado de lagunas y retirada de las gasas de arranque con vapor
de agua. Limpieza química de los restos del adhesivo.
b. Reintegración de las faltas matéricas con
mortero de cal Lafarge (CTS®) y arena tamizada.
c. Limpieza mecánica de la superficie musiva
con abrasivo plástico.
d. Reintegración final de lagunas con mortero
natural colocado a bajo nivel.
4. Propuestas de exposición y análisis
La idea inicial del museo era exponer la pieza en vertical, anclada a la pared del rellano del
segundo piso (figura 3). Iría entre dos reproducciones de otros mosaicos de la villa. A la derecha,
la recreación de la escena de la navegación de Venus, y a la izquierda, una copia a escala 1:1 del
mosaico de los nueve bustos femeninos.
5. Discusión y conclusiones
3. Intervención de conservación-restauración
La intervención se dividió en dos fases: la primera centrada en los tratamientos necesarios para
la estabilización de la pieza, y la segunda consistente en las operaciones para su exposición.2
1. Primera fase
a. Limpieza mecánica del reverso: retirada del
polvo, acumulaciones terrosas y restos de los estratos preparatorios originales desprendidos.
Analizando la propuesta sobre la base de lo comentado anteriormente, esta no se asemejaría a
la posición original de la pieza, ya que se encontraba en horizontal, decorando el pavimento de
un estanque. Al exponer la pieza de forma vertical
se modificarían parcialmente sus características
originales, lo que podría crear cierta confusión en
los visitantes. Además, el espacio expositivo podría no ser conveniente al tratarse de una zona
de tránsito donde la atención de los visitantes no
sería la misma que en las salas. Por otro lado, esta
ubicación no permite recrear el entorno arquitectónico que pudiera devolverle los valores específi-
2. Los tratamientos detallados forman parte del informe de C-R facilitado por Milagros Buendía Ortuño, restauradora
del Museo Nacional de Arqueología Subacuática (ARQVA).
PARA QUÉ Y CÓMO INTERVENIMOS: LA MUSEALIZACIÓN COMO VARIABLE TRANSVERSAL EN LAS INTERVENCIONES DE CONSERVACIÓN-RESTAURACIÓN DEL PATRIMONIO...
161
FIGURA 3. Rellano de la segunda planta del Museo Arqueológico Municipal de Lorca. ©Archivo Museo
Arqueológico Municipal de Lorca.
cos vinculados a la arquitectura de la que formaba
parte y que perdió tras su extracción.
Otra opción que dotaría al mosaico de estas características podría ser la sala número 8 del museo, dedicada a la romanización, donde se exponen
otras piezas provenientes del mismo yacimiento (figura 4). Aquí podría exponerse horizontalmente en
el centro de la sala, aportándole el espacio necesario para facilitar una comprensión más inmediata y
natural. Además, el discurso expositivo también le
acompañaría. Con todo ello se habría conseguido
una exposición más cercana a la intencionalidad
original de la pieza. Al tratarse del único mosaico
extraído de la villa de La Quintilla, sería importante realizar una buena propuesta expositiva, garantizando así su correcta difusión. No hay que olvidar tampoco la seguridad, sobre todo si tenemos
en cuenta el carácter sísmico del área de Lorca, ya
que con una exposición horizontal podrían evitarse
riesgos tanto físicos como personales.
Dado el importante papel que los museos arqueológicos regionales poseen en la creación de
identidades locales ligadas al pasado, a través de
la didáctica y la difusión del patrimonio arqueológico (Garrido 2010, 44), es importante dedicar
unos amplios esfuerzos para superar y compensar
las dificultades que presentan por falta de unas inversiones que nunca llegan y son imprescindibles
para su funcionamiento. Es por ello esencial continuar fomentando una colaboración más estrecha
entre los distintos agentes que intervenimos en la
exposición y difusión de patrimonio arqueológico,
desde los propios arqueólogos hasta conservadores-restauradores, gestores y educadores. Esto
permitirá aunar esfuerzos y opiniones a la hora de
plantear soluciones que cumplan con las necesida-
FIGURA 4. Sala número 8 del Museo Arqueológico
Municipal de Lorca. ©Archivo Museo Arqueológico
Municipal de Lorca.
des de conservación, exposición y difusión de las
piezas y ayuden a superar las dificultades que muchas veces atraviesan los museos regionales.
No se puede olvidar que los profesionales en
conservación y restauración tenemos también
formación en museología y museografía y podemos aportar otra perspectiva complementaria,
tratando siempre de mejorar las intervenciones
realizadas sobre patrimonio arqueológico. Así, comenzando estas desde el estudio de la pieza hasta
el objetivo último de las mismas, bien sea almacenamiento o exposición, serán más completas
y adecuadas. De esta forma, fruto de la estrecha
colaboración y el buen entendimiento entre los y
las profesionales de estas instituciones, se garantizará el cumplimiento de sus funciones para con
la sociedad de la mejor forma posible.3
3. Cabe recordar la definición de museo como «entidad no lucrativa, al servicio de la sociedad y de su desarrollo, abierta
al público, que adquiere, conserva, investiga, comunica y expone el patrimonio material e inmaterial de la humanidad y su
medio ambiente con fines de educación, estudio y recreo» (ICOM 2007).
162
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Agradecimientos
Contrato predoctoral de personal investigador
en formación financiado por la Universidad Complutense de Madrid y el Banco Santander (Convocatoria 2017. CT17/17-CT18/17).
6. Bibliografía
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO (BOE) 1985: «Ley
16/1958, del Patrimonio Histórico Español»,
Boletín Oficial del Estado, 155.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO (BOE) 2008: «Ley
4/2007, de Patrimonio Cultural de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia», Boletín Oficial del Estado, 176.
CONSEJO INTERNACIONAL DE MUSEOS (ICOM) 2007:
«Estatutos del ICOM», 22.ª Asamblea General
en Viena, Austria.
GARRIDO CASTELLANO, C. 2010: «El museo local
como herramienta de difusión y didáctica del
patrimonio arqueológico», Revista Posgrado y
Sociedad, 10 (2), 42-54.
MINISTERIO DE CULTURA 2007: «Decálogo de la restauración», Criterios de intervención en bienes
muebles, Madrid.
RAMALLO ASENSIO, S. 1995: «La villa romana de La
Quintilla (Lorca, Murcia)», Journal of Roman
Archaeology, 8, 310-311.
RAMALLO ASENSIO, S.; FERNÁNDEZ, A.; FLORES, M.;
ROMERO, A.; MARTÍNEZ, J. 2013: «Reconstrucción Virtual de la Villa Romana de la Quintilla de Lorca a partir de las evidencias físicas
existentes sobre dicha construcción así como
de referencias comparativas científicamente
razonadas», Virtual Archaeology Review, 4 (9),
181-189.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
163
PROYECTO DE PUESTA EN VALOR, CONSERVACIÓN
Y GESTIÓN DEL CONJUNTO ARQUEOLÓGICO DE MONTE
DO CARRIO
LUCÍA ANTA PORTO1, LUCÍA CONCEPCIÓN LAGO1, IRENE FERNÁNDEZ DIÉGUEZ1,
SILVIA ILLANES LOSADA1, ALBA LOSADA GARCÍA1
1. Introducción
Monte do Carrio se encuentra en la comarca
del Deza (Pontevedra). Tiene una altitud máxima
de 915 metros y, gracias a su orografía, una excelente visibilidad sobre el entorno inmediato.
Es un territorio de aproximadamente 15 km2 de
extensión y se distribuye administrativamente en
cinco parroquias asociadas en comunidades de
montes. Esto supone la existencia de cinco normativas de gestión y explotación del suelo diferentes, lo que dificulta la gestión unificada de los
yacimientos.
El proyecto se establece como un plan de intervención y estudio a largo plazo para la gestión,
conservación, documentación e investigación de
los restos arqueológicos localizados en este territorio. Nace de la voluntad social de una de las
comunidades de montes de dar a conocer y poner en valor su patrimonio. Por eso, nuestra intención es acompañar y asesorar estas iniciativas
aportando el conocimiento técnico y científico
necesario.
Se inicia en el año 2016 con una humilde campaña de documentación y catalogación, y en 2017
se avanza en la mejora del conocimiento del patrimonio cultural, se clarifica la protección jurídica y
se ejecutan acciones básicas de protección. El inventario patrimonial registrado hasta el momento
abarca desde el Neolítico hasta la Edad Media, y
se han encontrado superposiciones de unos y otros
períodos: enterramientos funerarios del Neolítico,
arte rupestre del Bronce Final, asentamientos de la
Edad del Hierro I-II, registros romanos, fortificaciones medievales y edificaciones eclesiásticas.
El equipo de trabajo se compone de cinco
alumnas de la Escuela Superior de Conservación
y Restauración de Bienes Culturales de Galicia y
dos profesores, Álvaro Arizaga Castro y Fernando
Carrera Ramírez.
La tendencia por la que se guía el proyecto es
la arqueología social, y su objetivo es mejorar el
vínculo entre la sociedad y el patrimonio, con un
objetivo final, que es la conservación del patrimonio cultural y la creación de un yacimiento vivo y
autogestionable.
FIGURA 1. Izquierda:
Monte do Carrio en
Galicia. Derecha:
Topografía de la zona.
1. Escola Superior de Conservación e Restauración de Bens Culturais de Galicia - lucia.anta.porto@gmail.com
164
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2.
Emplazamiento del
campo de medorras de
Outeiro Grande.
2. Aproximación general al estado de conservación
En general, la mayor parte de los bienes culturales están desprotegidos. El estado actual de
abandono, difícil acceso y exposición a la intemperie favorecen su deterioro y progresiva desaparición. Las grandes deficiencias del catálogo
de bienes culturales de Galicia tampoco mejoran
esta situación, pues la mayoría de los sitios arqueológicos no se encuentran registrados, y en algunos casos su geolocalización es errónea, lo que
provoca una situación de riesgo.
Se trata de un conjunto arqueológico de unas
características y propiedades diversas y singulares, que presenta un patrimonio amplio y variado.
Por regla general, todos los bienes sufren riesgos
derivados de la vegetación, la creación de pistas,
repoblaciones y riesgos antrópicos directos. Las
necrópolis neolíticas presentes en Monte Carrio
son monumentos megalíticos constituidos por un
túmulo de tierra que contienen en su interior una
cámara funeraria utilizada como osario. A pesar
de que muchos presentan perforaciones en el centro del túmulo fruto de expolios, este tipo de yacimientos poseen una gran estabilidad ambiental,
ya que las variaciones climáticas son mínimas y
el deterioro por este factor está ralentizado. Las
actividades agrarias y forestales que se dan sin
ningún tipo de control, el abandono o los factores
antrópicos directos son los principales focos de
riesgo en este tipo de yacimientos.
El arte rupestre es uno de los bienes más vulnerables, ya que los grabados se encuentran expuestos permanentemente a agentes atmosféricos
y biológicos como pueden ser la termoclastia, la
haloclastia, la hidroclastia y la acción biológica
natural producida por líquenes, hongos y musgos
(Carrera, Peña y Costas 2002). El soporte pétreo
se presenta tanto en granito como en esquisto,
este último más sensible al deterioro, por lo que se
encuentra en un estado de deterioro mucho más
avanzado.
El efecto de los incendios se puede apreciar en
la superficie rocosa y se constituye como el agente más dañino para este tipo de bienes, aunque,
afortunadamente, el perímetro no se encuentra
invadido por especies alóctonas de crecimiento
rápido. Sabemos que los efectos producidos por
el choque térmico activan la dilatación en la superficie, produciendo termoclastia en forma de
descamaciones o disgregaciones granulares. Además, generan la desaparición de las colonias liquénicas, que, junto con sus rizoides, arrastran
FIGURA 3. Izquierda: Perímetro de protección.
Derecha: Petroglifo de Coto das Casiñas I.
PROYECTO DE PUESTA EN VALOR, CONSERVACIÓN Y GESTIÓN DEL CONJUNTO ARQUEOLÓGICO DE MONTE DO CARRIO
165
FIGURA 4. Izquierda:
Castelo de
Busto. Derecha:
Derrumbamientos de
muros en superficie.
la capa en la que estaban incrustados y elimina la
pátina natural de la roca, volviéndola más sensible a los agentes naturales (Carrera, Peña y Costas 2002).
Los restos de la torre de vigilancia medieval
(Castelo de Busto, SO del monte) y los recintos
fortificados presentan en general un estado de conservación similar. Observamos en ambos un estado general de abandono, y muchas estructuras se
encuentran desplazadas o derrumbadas a causa de
factores naturales (abandono) o antrópicos (destrucción y expoliación de material). Los agentes
más destacables son la abundante presencia de vegetación y las agresiones debidas a la explotación
forestal o agrícola, además de los daños sufridos
por la exposición continuada a la intemperie.
Otro de los factores que tuvo un gran impacto
en el territorio y en el patrimonio fue la construcción del parque eólico en el año 2002. Los yacimientos arqueológicos más afectados son Outeiro
Grande y algunos túmulos megalíticos que fueron
parcialmente destruidos por la construcción de
pistas forestales.
llevaron a cabo acciones preventivas de desbroce
y mantenimiento de los perímetros arqueológicos.
El departamento de documentación nos permitió disponer de un inventario y registro de los
bienes arqueológicos, así como de su estado de
conservación. Se emplearon fichas de registro específicas para cada tipo de bien y técnicas fotogramétricas para representar con la mayor fiabilidad todos los bienes. Las labores de prospección
fueron apoyadas mediante la teledetección y el
tratamiento de datos LiDAR, lo que nos permitió
descubrir nuevos yacimientos ocultos bajo la vegetación (As Mouras 2018; Cortizon 2017).
Igual de importantes y constantes son las acciones de divulgación que tienen como objetivo
promocionar Monte do Carrio y su variado registro arqueológico: se realizó un taller de calcos y
reproducción de petroglifos mediante molde y se
organizaron visitas nocturnas guiadas empleando
luz rasante artificial para mostrar los grabados
existentes con explicaciones didácticas (As Mouras 2018). Este proyecto fue muy bien recibido y
apoyado por los medios de comunicación comarcales y provinciales, la prensa, las instituciones y
las delegaciones locales.
3. Acciones desarrolladas
Las líneas de acción han sido encaminadas a
labores de conservación preventiva y activa, documentación y prospección, además de la divulgación y difusión de Monte do Carrio.
Se realizaron labores de conservación activas
y preventivas en los petroglifos, dado que la vegetación había colonizado el perímetro y la superficie pétrea alterando cromática y visualmente la
lectura de los grabados (As Mouras 2018). Puesto
que la mayor parte de los líquenes que presentan
no generan grandes tensiones, se llevaron a cabo
activamente procesos de limpieza superficial con
brocha y pincel, siendo innecesaria la limpieza
química. No se retiraron los líquenes de tipo crustáceo, pues podría haber supuesto la pérdida y
disgregación de la superficie original. También se
4. Discusión y conclusiones
La problemática que presenta este proyecto
no es un caso aislado sino similar a la de todo el
patrimonio arqueológico: desatención, desconocimiento y falta de relación con el contexto humano, lo que afecta al proceso administrativo y
financiero necesario para poder llevarlo a cabo.
Por desgracia, este tipo de proyectos generalmente se asocian al voluntariado y al término «sin
ánimo de lucro», desprofesionalizando las acciones arqueológicas y de conservación. Las relaciones con las distintas administraciones públicas,
así como la necesidad de coordinación entre todas las comunidades de montes implicadas y los
enfrentamientos internos que estas sostienen, re-
166
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
trasan y dificultan mucho cualquier intervención
llevada a cabo sobre los yacimientos.
La iniciativa de este proyecto surge en la comunidad de montes de Bermés, que por desgracia, a día de hoy, es la única implicada de forma
activa, y la falta de interés por parte del resto de
comunidades hace muy dificultosa la aplicación
de un plan director de intervención homogéneo
en todos los yacimientos.
Por otra parte, la afluencia y la participación de
vecinos, asociaciones, administraciones y medios
de comunicación han sido muy favorables durante estas campañas, y se ha conseguido despertar
cierto interés y concienciación por la protección y
valoración del monte y su patrimonio.
Monte do Carrio es un proyecto con objetivos
a largo plazo que pretende llevar a cabo un plan
de gestión unificado en todo el monte, que actual-
mente se encuentra en una fase inicial de caracterización y desarrollo y que busca financiación
para poder llevarse a cabo.
5. Bibliografía
AS MOURAS 2018: «Proxecto Monte do Carrio»,
<https://www.facebook.com/MontedoCarrio/>.
[Consulta: 22 julio 2018]
CARRERA, F.; PEÑA, A.; COSTAS, J. 2002: Grabados
rupestres en Galicia. Características generales y
problemática de su gestión y conservación, Diputación Provincial de Pontevedra, Pontevedra.
CORTIZON, N. 2017: «La Escola de Restauración
elabora un inventario arqueológico en O Carrio», Faro de Vigo (25 de julio), Lalín.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
167
ESTUDIO COMPARATIVO ENTRE LA REPRODUCCIÓN DIGITAL
Y TRADICIONAL A PARTIR DE RESTOS ÓSEOS
NÚRIA LLAGOSTERA ESPELT1
Resumen
1. Introducción
Los moldes han sido y siguen siendo un soporte para el estudio, la difusión y la preservación
de restos arqueológicos. Dada su importancia y
el creciente uso de técnicas digitales, se ha hecho evidente la necesidad de realizar un estudio
comparativo entre la reproducción tradicional y
la reproducción 3D para así poder decidir cuál
es nuestra opción más conveniente en cada caso.
Se trata de un estudio cualitativo con un afán exploratorio de las técnicas y las posibilidades del
mercado.
Para la realización del estudio se decidió hacer dos tipos de moldes tradicionales y una reproducción a partir de fotogrametría digital.
Ambos procesos terminaron con una reproducción tangible, el primero a través del moldeo y
el segundo a partir de un proceso de impresión
en 3D. Una vez obtenidas las reproducciones se
hizo una comparación de precios del material,
de tiempo, de definición, de medidas, de peso y
de agresividad ante la pieza. Los resultados obtenidos, en lugar de mostrar evidentes beneficios de un método sobre otro, nos indican que
el acierto dependerá de las características de la
pieza a reproducir, así como de su futura aplicación, ya que no hay una técnica que cumpla
todos los requisitos que deseamos, sino que dependerá de nuestros objetivos a la hora de realizar una reproducción. El propósito del estudio,
que todavía se encuentra en su primera fase de
investigación, es conseguir determinar mejor
los beneficios de cada método, explorando otras
técnicas de digitalización y en el futuro estudiar
más detenidamente la definición a niveles microscópicos.
Palabras clave: moldes, reproducciones, digitalización, 3D, fotogrametría.
El uso de los moldes en el mundo arqueológico
es constante y básico para el estudio, la conservación y la difusión de restos. Es por este motivo
que se planteó cuáles son las técnicas más usadas
y qué beneficios tienen unas sobre otras a la hora
de trabajar. Uno de los sistemas más novedosos
que se puede encontrar a día de hoy en el mercado
para la virtualización de patrimonio son las técnicas de reproducción 3D; por otro lado tenemos las
técnicas tradicionales, el moldeo, que aun siendo
la técnica más antigua ha hecho un cambio radical desde la aparición de plásticos derivados del
petróleo. Ambas técnicas tienen muchos beneficios e inconvenientes, y es por este motivo que se
planteó la necesidad de un estudio que nos diera
herramientas a la hora de decidir qué técnica parecía más adecuada en cada momento.
Así pues, la intención que se plantea en el artículo es la realización de un estudio comparativo
a nivel cualitativo de las técnicas de reproducción
que más se suelen usar. En el ámbito de las nuevas
tecnologías se usaron técnicas fotogramétricas,
dejando de lado los escáneres a causa de su difícil
acceso, y se culminó el proceso con una impresión
en tres dimensiones. Y en el ámbito de las técnicas tradicionales se hizo uso de nuevas siliconas
para el molde y poliuretano para la reproducción.
Una vez realizados estos procesos, se compararon
para identificar cuál de ellos era el más adecuado.
2. Materiales y métodos
Se trata de una investigación exploratoria con
un enfoque cualitativo de evaluación de las técnicas. Para su realización se utilizó un calcáneo humano y un diente de bóvido. Se eligieron estas dos
1. Escola Superior de Conservació i Restauració de Béns Culturals de Catalunya - nuriallagosteraespelt@gmail.com
168
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
piezas por la diferencia en cuanto a la porosidad
–el calcáneo es mucho más poroso. Esta característica nos daba juego a la hora de elegir entre las
siliconas que podemos encontrar en el mercado.
Los procesos de moldeo fueron los siguientes:
• Por la morfología del diente, se decidió reproducirlo con un molde de silicona por colada, permanente y bifacial. Dado que el hueso presentaba grietas, se consolidaron con
Paraloid® B-72 al 10 % en acetona. Una vez
cubiertas todas las grietas, se realizó el molde con la silicona de condensación RTV-620
de CP Química®, catalizada al 3 %. Se trató de hacer una silicona que catalizara lento
para su mayor dispersión y evitar burbujas.
Finalmente se terminó realizando una reproducción con resina de poliuretano Form C
Rhino® (A+B) (David y Desclaux 1992; Val
2009).
• En el caso del calcáneo se decidió realizar
un molde mixto (estampado y con caja) haciendo uso de diferentes siliconas. También
se buscó que fuera permanente y bifacial. En
primer lugar se hizo una caja con escayola
Turquesa®; y una vez hecha la caja se pasó
a la aplicación de la silicona. Se trató de evitar la consolidación de la pieza aun siendo el
material muy poroso. Para ejecutar este proceso se usó la técnica del estampado con tres
capas, haciendo uso de distintas siliconas. La
primera fue una silicona por imprenta (Silicona Equinox® 38 de dos componentes al
50 %), tapando las partes donde había más
riesgo de penetración. La segunda capa se
realizó con la silicona de condensación RTV620 de CP Química®, catalizada al 3 % pero
con un agente tixotrópico para garantizar
espesor, evitando así la penetración en las
partes que faltaban por cubrir. Finalmente
se terminó de rellenar la caja con la misma
silicona sin tixotrópico para dar estabilidad.
El proceso también culminó con resina de
poliuretano Form C Rhino® (A+B) (David y
Desclaux 1992; Val 2009).
Se realizaron dos procesos muy distintos para
poder valorar de una forma más acertada las diferencias de los moldes tradicionales con el proceso fotogramétrico. Finalmente se acometió el
proceso fotogramétrico con el calcáneo, que fue
el siguiente:
• En primer lugar, se elaboró una estrategia de
captura de forma esférica y se tomaron 50 fotos con una cámara Canon® EOS 550D. Las
fotos se realizaron en un plató fotográfico con
pantallas para evitar sombras, y luego fueron
descargadas en el ordenador y procesadas
mediante el programa Agisoft PhotoScan®
Professional. Se realizó una máscara a todas
las fotografías para evitar puntos parásito y
facilitar que se encontraran estereopares; con
ello se creó una nube de puntos dispersa de
226.000 puntos. Luego se realizó una nube de
puntos más densa, y finalmente se obtuvo una
malla triangular. Finalmente, solo nos quedó
mapear el contenido para añadir la textura. El
proceso fotogramétrico termina una vez se ha
realizado la malla. Para equiparar las técnicas se imprimió el archivo fotogramétrico en
formato STL para conseguir una copia tangible. Se utilizó una impresora 3D FlashForge®
USA Dreamer, que imprime con hilos de PLA
(Mallison y Wings 2014).
Una vez obtenidas todas las piezas se compararon medidas físicas y se valoró el tiempo y el precio de cada técnica, la definición y la agresividad
de los procesos respecto a las técnicas.
3. Resultados y discusión
Las medidas físicas de las piezas indicaban que
no había diferencia alguna. Todas las réplicas medían lo mismo que el original. El calcáneo, 72 mm
de largo por 34 mm de ancho. El diente, 52 mm
de largo por 28 mm de ancho. Aunque la bibliografía (Pereira 2010) habla de pequeñas mermas
en los materiales de los moldes tradicionales, en
estas piezas no se ha visto cambio alguno, probablemente porque el tamaño de las piezas con las
que se ha trabajado no es lo suficientemente grande para percibirlo (las medidas fueron tomadas
con un pie de rey digital que nos daba las medidas
en milímetros con dos decimales). El peso sí que
tuvo una gran variación: mientras que el calcáneo
original pesaba 23 g, la réplica impresa pesaba 24
g y la réplica con resina 33 g. Este punto interesa
porque si trabajamos con materiales grandes se
ha visto que el PLA reduce mucho el peso y facilita el transporte. También sucede eso con las
reproducciones tradicionales, ya que la copia se
realizó rellena y podría haberse realizado vacía,
lo que hubiera disminuido mucho el peso de la reproducción. En ambos casos las reproducciones
pueden disminuir mucho el peso de los originales.
Las variables del tiempo y el precio después
de la realización del estudio nos parecieron muy
relativas y no valorables, ya que tienen una variación muy elevada y hay muchos parámetros que
no se pueden tener en cuenta en la magnitud de
este estudio. Las siliconas y las resinas tienen mu-
ESTUDIO COMPARATIVO ENTRE LA REPRODUCCIÓN DIGITAL Y TRADICIONAL A PARTIR DE RESTOS ÓSEOS
cha variabilidad de precio (las siliconas, entre 15
y 70 euros el quilo, y las resinas, entre 15 y 50
euros las más comunes); aun así, son fungibles
y hay que ir renovando a medida que se realizan
réplicas. La fotogrametría tiene un gran coste inicial, pero una vez se ha obtenido la cámara y se
ha pagado la licencia del programa no hay más
inversión en material.
Durante los procesos de moldeo se requiere
un contacto inevitable con la pieza. Este contacto
provoca la aplicación de muchas fuerzas diferentes, como la presión y la tensión durante todo el
proceso, y más cuando se procede al desmoldeo,
que se suman posibles enganches. Para la seguridad de la pieza se suelen añadir consolidantes
o desmoldantes que pueden suponer una pérdida
de definición; no obstante, en el segundo proceso
hemos evitado su uso para garantizar un registro
más fiel a la pieza original. En ese sentido la fotogrametría es completamente inocua, ya que no
requiere de contacto directo.
Finalmente, en cuanto a definición, a simple
vista podemos ver como la impresión sí mantiene
la morfología pero en absoluto se percibe la textura y los detalles del hueso. No obstante, observamos que tiene una buena definición a nivel digital.
Así pues, nos parece una muy buena técnica para
la difusión a través de computadoras y entornos
virtuales. La reproducción tradicional del calcáneo y del diente se observaron a simple vista y
aparentemente las dos eran exactamente iguales
169
a la pieza original, pero cuando se miraron con
la lupa binocular a 50 aumentos se percibieron
pequeñas diferencias entre el calcáneo y su reproducción que eran imperceptibles entre el diente y
su réplica. Probablemente es debido a que la silicona por presión que se utilizó no da una definición tan buena como la silicona por colada.
Teniendo en cuenta los resultados, no se puede
hablar de una técnica por encima de la otra: hoy
en día cada una tiene unos beneficios e inconvenientes que hacen que se complementen, por lo
que podemos hablar de una yuxtaposición de las
técnicas. Las diferentes técnicas se deben utilizar
en nuestro beneficio, buscando el equilibrio entre
la necesidad de la pieza y la nuestra.
4. Bibliografía
DAVID, R.; DESCLAUX, M. 1992: Pour copie conforme.
Les techniques de moulage en paléontologie, en
préhistoire et en archéologie historique, 1.ª ed.,
Serre.
MALLISON, H.; WINGS, O. 2014: «Photogrammetry
in paleontology - a practical guide», Journal of
Paleontological Techniques, 12, 1-31.
PEREIRA UZAL, J. M. 2010: Materiales y técnicas
aplicados al moldeo y vaciado de obras de arte,
Rough Media.
VAL, S. 2009: «Tècniques de reproducció en paleontologia», Unicum, 8, 118-126.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
171
LA RESTAURACIÓN DE FÓSILES EN PINILLA DEL VALLE:
EL TRATAMIENTO EN LABORATORIO TRAS LA INTERVENCIÓN
EN CAMPO
LUCÍA HERNÁNDEZ-VIVANCO1, MARINA VEGARA-RIQUELME1
1 Resumen
2. Material
La restauración y conservación de fósiles en
yacimientos arqueopaleontológicos es fundamental para su identificación, estudio y exposición. En
este trabajo se intervienen dos fósiles procedentes de Pinilla del Valle (Madrid), que se caracterizan por haber sido intervenidos en campo para
extraer en conjunto ambas piezas y garantizar su
preservación. El objetivo principal es la restauración de los fósiles en laboratorio, teniendo en
cuenta su estado de conservación y las medidas
tomadas en campo. Tras la evaluación del estado
de conservación se han elegido los tratamientos
más adecuados; y acabadas las intervenciones, ha
sido posible la obtención de datos que ayudan a
comprender mejor el registro fósil.
Los fósiles intervenidos han sido hallados en
el yacimiento de la cueva Descubierta (Pinilla del
Valle). La hemimandíbula (figura 1) presenta un
estado de conservación bueno; el conjunto del
hueso fue localizado bajo un bloque de concreción, y algunos depósitos terrosos estaban adheridos a la cortical del hueso. El cuerpo mandibular presenta fracturas diagenéticas. En la zona
próxima al hueso incisivo se origina una fractura
reciente durante la excavación, debido a la cual
aparecen varias fisuras. En el cuerpo mandibular
se observan alteraciones de color: manchas negras posiblemente originadas por la presencia de
manganeso y marcas bioquímicas producidas por
raíces. En cuanto al canino (figura 2), su estado de
conservación no es óptimo: está totalmente fragmentado y todas las fracturas son diagenéticas;
de ahí que los planos de unión sean irregulares
y tengan gran cantidad de concreción terrosa. Se
aprecian manchas negras posiblemente originadas por manganeso y marcas causadas por raíces.
Algunos de los fragmentos presentan fisuras.
1. Introducción
La restauración es una herramienta fundamental que posibilita el estudio de materiales
arqueopaleontológicos. En este trabajo se presentan dos fósiles hallados en los yacimientos
de Pinilla del Valle, dirigidos por J. L. Arsuaga,
E. Baquedano y A. Pérez-González. Dichos yacimientos forman un complejo único para el estudio del Homo neanderthalensis en la península
Ibérica (Baquedano et al. 2011-2012). Los dos
fósiles han sido intervenidos en campo; estas intervenciones fueron necesarias para extraer en
conjunto las piezas y garantizar su preservación.
Los objetivos del trabajo son abordar la restauración de los fósiles teniendo en cuenta su estado
de conservación y las medidas tomadas en campo para su correcta extracción y preservación,
posibilitar el estudio taxonómico y tafonómico, y
permitir la exposición de las piezas y favorecer la
divulgación científica.
1. Museo Arqueológico Regional - hdezvivanco@gmail.com
FIGURA 1. Parte de la hemimandíbula extraída en
campo.
172
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Canino en campo previa extracción.
zas metálicas, previa humectación de esta con
acetona. A continuación se retiraron mecánicamente los depósitos de concreción adheridos a
la cortical y a la zona oclusal de las piezas dentales. El hueso incisivo se extrajo en laboratorio
a partir de una microexcavación sobre el bloque
de concreción al que estaba adherido. Tras la
limpieza de los fragmentos se realizó el estudio
tafonómico. Posteriormente, se consolidaron los
planos de fractura con Paraloid B72 al 5 % en
acetona y se unieron los fragmentos con adhesivo nitrocelulósico para posibilitar el estudio
taxonómico.
En cuanto al canino, se realizaron fotografías
y croquis para documentar la posición de los fragmentos y evitar pérdida de información. Debido
a que fue adherido en campo con adhesivo nitrocelulósico, se optó por una limpieza mecánica y
húmeda con acetona para retirar los depósitos terrosos. La limpieza de los fragmentos posibilitó el
estudio tafonómico. Posteriormente, algunos planos de fractura se consolidaron con Paraloid B72
al 5 % en acetona. Con el objetivo de realizar el
estudio taxonómico, se optó por la reconstrucción
de la pieza y los fragmentos se adhirieron con adhesivo nitrocelulósico. Los productos químicos
empleados fueron aplicados con anterioridad en
los yacimientos de Pinilla del Valle y cumplían
con criterios de reversibilidad y estabilidad (Ortega et al. 2016).
3. Metodología
4. Resultados
Tras la toma de fotografías para la documentación de la hemimandíbula comenzó la intervención. Debido a que la pieza se engasó con
Paraloid B72 a una concentración del 15 % en
acetona para su correcta extracción, la intervención se inició con la retirada de la gasa con pin-
Acabadas las labores de restauración, se presenta el estado final de los fósiles (figuras 3 y 4).
Las intervenciones han garantizado la conservación de los fósiles, a la vez que han permitido realizar el estudio taxónomico y tafonómico.
FIGURA 3.
Hemimandíbula
derecha de Dama dama
con M3, M2, M1, P4, P3
y raíz de P2.
LA RESTAURACIÓN DE FÓSILES EN PINILLA DEL VALLE: EL TRATAMIENTO EN LABORATORIO TRAS LA INTERVENCIÓN EN CAMPO
173
3. La restauración de estos fósiles aporta nuevos datos a la investigación.
Agradecimientos
Al Museo Arqueológico Regional de la Comunidad de Madrid, Grupo Mahou y Canal de Isabel
II Gestión; a B. Márquez, C. Laplana, R. Huguet,
A. Moclán, N. García, M. A. Galindo y al equipo de
excavación de Pinilla del Valle.
6. Bibliografía
FIGURA 4. Canino inferior izquierdo de Ursus arctos.
5. Conclusiones
1. La metodología aplicada en campo ha sido
necesaria para la correcta conservación de las piezas y ha facilitado la intervención en laboratorio,
aportando buenos resultados.
2. Se constata la importancia de la documentación generada durante la intervención en laboratorio.
BAQUEDANO, E.; MÁRQUEZ, B.; PÉREZ-GONZÁLEZ, A.;
MOSQUERA, M.; HUGUET, R.; ESPINOSA, J. A.; SÁNCHEZ-ROMERO, L.; PANERA, J.; ARSUAGA, J. L. 20112012: «Neanderthales en el Valle del Lozoya:
Los yacimientos paleolíticos del Calvero de la
Higuera (Pinilla del Valle, Madrid)», Mainake,
33, 83-100.
ORTEGA, M. C.; CANSECO, O. T.; PASTOR, A.; ARSUAGA,
J. L.; PÉREZ-GONZÁLEZ, A.; LAPLANA, C.; MÁRQUEZ,
B.; BAQUEDANO, E. 2016: «In situ conservation
strategies at the Pleistocene sites of Pinilla del
Valle, Madrid (Spain)», Journal of Paleontological Techniques, 15, 84-111.
SECCIÓN 07. SACANDO O BARCO DAS PEDRAS. NUEVAS
APROXIMACIONES ARQUEOLÓGICAS A LA RELACIÓN ENTRE
LA HUMANIDAD Y EL AGUA
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
177
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN «SACANDO O BARCO
DAS PEDRAS. NUEVAS APROXIMACIONES ARQUEOLÓGICAS
A LA RELACIÓN ENTRE LA HUMANIDAD Y EL AGUA»
LAURA MARTÍN RAMOS1, SAMUEL NIÓN ÁLVAREZ2,
HELENA LÓPEZ GÓMEZ3, JULIÁN BUSTELO ABUÍN4
En esta sesión se discutieron una serie de ideas
bajo el paraguas temático del agua. El agua es indispensable en la cotidianidad de las sociedades
humanas, en sus ideologías y su organización social, económica y política. Desde las primeras comunidades organizadas de Homo sapiens, o quizá
incluso antes, las «grandes masas de agua» fueron
elementos clave para aquellas sociedades que vivieron en su entorno. No solo desde la perspectiva
de la captación de recursos o de la subsistencia,
sino también a través de sus expresiones sociales,
simbólicas o identitarias.
Nuestra sesión pretendió abarcar un amplio espectro de investigaciones que interpretasen a las
comunidades a través y en relación con su entorno
«acuático». El objetivo era el de atraer múltiples
disciplinas, metodologías y posicionamientos teóricos que nos permitiesen crear un espacio lo más
poliédrico posible. De esta forma, el agua se ofrecía
como un marco de unión que nos permitía acercarnos a múltiples formas de conocer el pasado.
Con esta intención, y sin que fuese un marco
excluyente, proponíamos algunas líneas de investigación como guía para la evolución de la sesión.
Fruto de esta llamada realizada por la organización de la sesión fueron las comunicaciones que
terminaron conformándola.
La primera de esas líneas propuestas era «Investigaciones sobre la explotación y gestión de
recursos acuáticos». Es decir, sobre las diferentes
adaptaciones que ha hecho la humanidad para
el acceso y el aprovechamiento de este bien tan
preciado, así como aquello que ofrece. Nos referíamos por un lado al aprovechamiento de las
materias primas y los recursos del medio acuático
(tales como la pesca). Por el otro, a aquellas propuestas que se acercasen a las diferentes innovaciones tecnológicas para el control y la gestión del
agua.
Relacionado con el análisis de las diferentes
técnicas de extracción, Samuel Nión realiza una
revisión de algunos de los lugares de explotación
minera de oro en el norte de Galicia con el fin de
exponer una novedosa clasificación de estas en
cuanto al uso del agua.
Por su parte, Laura Martín realiza igualmente
una revisión de los hammam, los baños árabes,
de Alhama de Granada. El fin de su estudio es utilizar una metodología arqueológica para realizar
una «puesta a punto» sobre el estado de la cuestión y el conocimiento de este espacio de aprovechamiento de aguas mineromedicinales.
En su comunicación, Jessica Silvares hace justicia a las vías de tipo secundario romanas. Así,
muestra su análisis sobre el rescate de algunas
fuentes de ese periodo que hasta la fecha habían
sido erróneamente catalogadas como posteriores.
La segunda recibió el título de «Investigaciones
que aborden la influencia de las grandes masas de
agua en las sociedades humanas». Esta propuesta se ofrecía como un amplio abanico, ya que se
incluían temas que podían ir desde los estudios
relacionados con la economía, la ocupación y la
producción hasta aquellos centrados en aspectos
culturales, identitarios o simbólicos. De esta forma, cualquier investigación sobre la importancia
del agua tendría cabida dentro de esta propuesta, ya fuese relativa a la organización socioeconómica, a las distintas formas de ocupación o a
las expresiones simbólicas de las sociedades del
1. Grupo de investigación THARG (HUM162). Universidad de Granada - lramos@ugr.es
2. Síncrisis: Investigación en formas culturais, Universidad de Santiago de Compostela - samuelnionalvarez@gmail.com
3. Grupo de Estudos para a Prehistoria do Noroeste, Universidad de Santiago de Compostela - helena.lopez.gomez@
usc.es
4. Grupo de Estudos para a Prehistoria do Noroeste, Universidad de Santiago de Compostela - julianbustelo17@gmail.
com
178
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
pasado. Así mismo, también creíamos muy fructífera la recepción de propuestas que se acercasen
a estos temas no solamente desde la arqueología,
sino desde otras disciplinas como la iconografía o
las fuentes escritas.
Bajo este tema quedaron englobadas finalmente dos comunicaciones. El grupo integrado por
Celtia Rodríguez, Mario Fernández, Diego Torres
y Benito Vilas expuso un trabajo sobre un caso
muy concreto: el ejemplo de un yacimiento en el
que se viene trabajando desde hace largo. Sin embargo, se trata de un «espacio vivo» del que todavía queda mucho que decir. Un lugar que se vio
altamente influenciado por el medio acuático (el
mar) en su desarrollo intrínseco.
Helena López y Samuel Nión centran su atención en la explotación romana del medio acuático
como propaganda en el cambio de era. En concreto, cómo hizo uso de la iconografía relativa a ello
el emperador Augusto.
La tercera era «Investigaciones que estudien
la interacción y los contactos culturales a través
de diferentes medios acuáticos, acercándose a las
reacciones culturales y sociales tras el contacto
cultural». Tenía el fin de englobar todo tipo de
relaciones: desde los contactos puntuales entre
culturas hasta verdaderos desplazamientos poblacionales y movimientos migratorios.
Es el caso de la comunicación de Patricia Sangil, con el Mediterráneo Oriental como marco
geográfico y el Bronce Final como marco cronológico. Uno de los temas centrales del estudio es
el comercio a través del medio acuático. Gracias a
ello se fomentó un fructífero movimiento no solo
de personas y objetos sino también de ideas.
Para concluir, dos propuestas no tuvieron la
acogida esperada, ya que no hubo comunicaciones derivadas. Estas fueron «Investigaciones en
arqueología subacuática» e «Investigaciones en
arqueología hidráulica».
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
179
MINERÍA ANTIGUA EN EL NOROESTE DE GALICIA: GESTIÓN
HIDRÁULICA Y TIPOS DE EXPLOTACIONES
SAMUEL NIÓN ÁLVAREZ1
1. Introducción
La minería romana en el NW peninsular ha
sido objeto de gran cantidad de estudios, especialmente en la zona del Bierzo (Sánchez-Palencia
1983). Los motivos del mayor acercamiento a esta
región en detrimento de otras resultan lógicos,
dadas sus extraordinarias características y el volumen de los recursos obtenidos. En los últimos
años, sin embargo, se han realizado estudios mineros en otras áreas, como es el caso del Baixo
Miño o el Alto Val do Támega (Currás y López
2012; Fonte et al. 2017).
Siguiendo estos nuevos estudios, debemos
plantearnos una categorización de las técnicas
de explotación desde perspectivas arqueológicas,
lo que permitirá sentar unas bases para poder
integrar la minería romana dentro de una pléyade de elementos que nos permitan comprender
cómo cambian y se estructuran las sociedades
en torno al sistema de explotación romano. Para
tal fin, utilizaremos el NW galaico como caso de
estudio.
2. Tipos de explotaciones
Habitualmente, las minas se suelen clasificar
a través de criterios geológicos, diferenciando
entre explotaciones primarias y secundarias (Matías 2004, 170). Esta división geológica, sin embargo, resulta incómoda y ajena a nuestra forma
de expresarnos. En arqueología no definimos un
yacimiento por sus condiciones geográficas o geológicas, sino por la acción humana que los define como tales. Debemos plantearnos esta misma
problemática para las explotaciones mineras, proponiendo un nuevo tipo de categorización atendiendo a las técnicas de minado utilizadas, intentando comprender los procesos involucrados a lo
largo de la producción. Para empezar, debemos
diferenciar entre dos tipos de yacimientos, subterráneos o a cielo abierto.
La minería subterránea, dada sus características, ofrece grandes dificultades para su identificación y estudio. Estamos ante una actividad
muy compleja, con una intendencia asociada que
implica grandes dificultades técnicas y un gran
control de las circunstancias. La gestión del agua
se convierte en un factor fundamental, pues las
labores de desagüe y acceso son esenciales para
garantizar su estabilidad.
Por su parte, la minería a cielo abierto ofrece
una amplia variación formal. Estas explotaciones
se caracterizan por dejar una huella en el registro
tan evidente como diferenciable en función de las
técnicas utilizadas, siendo habitual su combinación. Para una mejor comprensión, planteamos
una división por tipologías, revisando algunas
propuestas anteriores (Matías 2004), a través del
tamiz de los planteamientos expuestos. Pretendemos dar un paso más allá y utilizar estos criterios
como un método diferente para reconocer la minería antigua, entendiendo estas técnicas de explotación como una herramienta para analizar y
categorizar los yacimientos mineros. Esta podría
ayudar a comprender las estrategias humanas de
acción minera, así como sentar las bases para futuros análisis que permitan interpretar el impacto
de su implantación a nivel social. Podemos diferenciar diferentes tipos:
– Explotaciones en peines. Consisten en la excavación de zanjas poco profundas, a través de
las cuales se hace circular el agua para converger
en un canal de lavado y evacuación. Suelen emplazarse en grandes superficies de terreno pertenecientes a terrazas fluviales (Matías 2004, 174).
El agua tiene como única función el traslado del
mineral.
– Explotación en zanjas-canales. Consiste en la
extracción del mineral a partir de la realización
de una gran zanja que profundiza progresivamen-
1. Grupo Síncrisis, Universidade de Santiago de Compostela - samuelnionalvarez@gmail.com
180
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
te hasta llegar al substrato rocoso o al límite de
disgregación natural (Matías 2004, 175). Desde la
parte superior de la mina se arroja agua, a través de canales de abastecimiento o de regulación,
aunque existen casos en los que no se documenta
este tipo de infraestructuras, siempre que exista
cierto desnivel que permita evacuar los estériles.
En la parte más llana de la zanja se realizan operaciones de lavado.
– Cortas de arroyada. Consisten en el progresivo ensanchamiento y avance lateral de las zanjascanales (Matías 2004, 175). Estamos ante uno de
los tipos más habituales, y suelen emplearse para
explotar al máximo los recursos minerales de un
yacimiento. El agua tiene como principal función
el traslado y evacuación del mineral, sin descargar su posible aplicación para la fragmentación y
disgregación de la roca.
– Excavaciones en terrazas fluviales. Estamos
ante una explotación emplazada en la ribera de
los ríos, utilizada para explotar yacimientos secundarios adyacentes a corrientes de agua. Los
áridos son evacuados por el propio río.
– Cortas de minado. Consiste en el abatimiento progresivo de grandes masas de terrenos aluviales, combinando el uso del agua con la creación de pozos subterráneos (Sánchez-Palencia
1983, 47). El resultado es la creación de grandes
barrancos, con alturas cercanas a los 100 m. El
agua tiene un papel capital para su correcto funcionamiento, y es imprescindible a lo largo de
todo el proceso.
3. Caso de estudio: el NW galaico
Aunque en los últimos años se han dado a
conocer nuevas explotaciones mineras en la Gallaecia (Fonte et al. 2017), estos estudios aún no
se han aplicado en algunas regiones, como es el
FIGURA 1. Zonas de explotación minera.
caso del NW galaico, por lo que puede resultar
interesante aplicar esta metodología a la región.
Atendiendo a los yacimientos catalogados, podemos destacar dos grandes zonas: los granitos
del Monte Neme - granodiorita de Baio y el curso
alto del Barcés, ambas en la provincia de A Coruña. En el primer caso, su potencial aurífero está
bien documentado (Asensio 2015, 47-51); en el segundo es plausible la existencia de filones de cuarzo ordovícico en primario (Crabiffose, Ferrero y
Monge 1989, 235), y en el registro son apreciables
varias explotaciones en secundario.
Monte Neme-Baio:
– Pozo do Limidoiro (Zas). Mina actualmente
anegada por el agua, puede tratarse de una explotación en terraza fluvial, aunque su estado dificulta su interpretación.
– O Caldeiro (Cabana de Bergantiños). Situada
a 100 m de A Cidá de Borneiro, se trata de una
zanja-canal de pequeñas dimensiones, cuyo canal
de desagüe desembocaría directamente en un regato cercano. Existe la posibilidad de que exista
FIGURA 2. Mina de Santa Mariña (Cabana de Bergantiños).
MINERÍA ANTIGUA EN EL NOROESTE DE GALICIA: GESTIÓN HIDRÁULICA Y TIPOS DE EXPLOTACIONES
181
FIGURA 3. Monte Lourido (Carral/Abegondo).
FIGURA 4. Mina de Callobre (Oza-Cesuras).
un depósito u otra zanja-canal en la zona más elevada (Álvarez y Lestón 1996).
– Mina de Santa Mariña (Cabana de Bergantiños). Consiste en una zanja-canal de grandes dimensiones, realizada sobre una ladera de fuerte
pendiente sobre el río Anllóns. Resulta plausible
la existencia de otras dos posibles explotaciones
situadas al E.
Curso alto del Barcés:
– Minas de Titín (Abegondo). Conjunto relativamente bien conservado, compuesto por una
pequeña zanja-canal con un depósito asociado.
A este podemos añadirle algunos elementos más
que actualmente no están catalogados, como es
el caso de una posible calicata situada al N-NE
u otras posibles explotaciones situadas al W. Asimismo, también se documentó otra zanja-canal
en el lugar que actualmente ocupa la autopista del
Atlántico (Naveiro y Cano 1986).
– Covas de Vea (Abegondo). Se definen como
una zanja-canal a cielo abierto, complementada
por los restos de una galería subterránea, donde
aparecieron bastantes restos de cerámica común
romana (Naveiro y Cano 1986).
– Covas da Moura (Carral). Zanja canal en la
que se puede apreciar un sistema de drenaje para
eliminar los residuos, así como una gran acumulación de áridos en la zona N.
– Monte Lourido (Carral/Abegondo). Estamos
ante la mayor explotación minera del N galaico
(unas 12 hectáreas). Aunque en un primer momento se consideró como el resultado de la acción de la ruina montium (Naveiro y Cano 1986),
es más probable que se trate de una corta de
arroyado, atendiendo a su semejanza con la mina
pontevedresa de A Lagoa (Currás y López 2012,
192). En un inicio se realizarían varias zanjascanales, que serían ampliadas con el avance de
la explotación, abriendo nuevas zonas de explotación.
– Minas de Callobre (Oza-Cesuras). Recientemente catalogadas (Nión 2018), apreciamos un
proceso semejante al ocurrido en el caso anterior. Estamos ante una explotación de unas 5 ha,
con unas características muy semejantes a las de
Monte Lourido, una corta inicial sobre un yacimiento secundario que aumenta de tamaño y para
el que se realizan canales de evacuación en múltiples puntos.
182
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
4. Conclusiones
En definitiva, consideramos muy relevantes este tipo de categorizaciones, pues permiten
comprender mejor las estrategias y las acciones
humanas desenvueltas en estos yacimientos. Sin
embargo, debemos comprenderlas no como un fin
sino como un medio, un paso inicial para comprender el alcance y la dimensión social de las
explotaciones mineras en la organización social
galaicorromana. En este sentido, resulta esencial
comprender que la minería es un elemento más
de la ocupación romana y su lógica de explotación, en relación con las obras infraestructurales
realizadas y la forzosa reestructuración que implicaría en la organización social e identitaria de
las comunidades locales (Currás y López 2012).
Conocer el alcance y el volumen de la explotación
minera es un buen punto de partida para acercarse a estas cuestiones.
5. Bibliografía
ÁLVAREZ GARCÍA, M. C.; LESTÓN GÓMEZ, M. 1996: Fichas inventario de xacementos arqueolóxicos.
Concello de Cabana de Bergantiños, Xunta de
Galicia.
ASENSIO PÉREZ, B. 2015: «Las mineralizaciones auríferas de Galicia Occidental en la zona de cizalla
Busto-Limideiro (A Coruña)», tesis doctoral de
la Universidad Politécnica de Madrid, inédita.
CRABIFFOSE, S.; FERRERO, A.; MONGE, C. 1989:
«Aportación al conocimiento del cuarzo en
Galicia», Cuaderno Lab. Xeolóxico de Laxe, 14,
225-236.
CURRÁS REFOJOS, B.; LÓPEZ GONZÁLEZ, L. F. 2012:
«Minería romana y poblamiento en la cuenca del Baixo Miño (Noroeste Peninsular)», en:
BETTENCOURT, A. M. S. (coord.), Povoamento e
exploração dos recursos mineiros na Europa Atlântica Ocidental, CITCEM-APEQ, Braga, 179203.
FONTE, J.; LIMA, A.; MATÍAS RODRÍGUEZ, R.; GONÇALVES, J. A.; LEAL, S. 2017: «Novas evidências de
mineração aurífera e estanhífera de época romana no Alto Vale do Tâmega (Montalegre e
Boticas, Norte de Portugal)», Estudos do Quaternário, 17, 45-55.
MATÍAS RODRÍGUEZ, R. 2004: «Ingeniería minera romana», en: MORENO GALLO, I. (coord.), II Congreso de las Obras Públicas Romanas, Tarragona, 157-189.
NAVEIRO LÓPEZ, J.; CANO PAN, J. A. 1986: Fichas inventario de xacementos arqueolóxicos. Concello
de Abegondo, Xunta de Galicia.
NIÓN ÁLVAREZ, S. 2018: «Prospección e catalogación de xacementos fortificados na provincia
da Coruña. Memoria técnica», Xunta de Galicia, informe inédito.
SÁNCHEZ-PALENCIA, F. J. 1980: «Prospecciones en
las explotaciones auríferas del N.O. de España
(Cuencas de los ríos Erias y Cabrera y Sierra
del Teleno», Noticiario Arqueológico Hispánico,
8, 214-289.
– 1983: «La explotación prerromana del oro del
Noroeste de la Península», Boletín Auriense,
13, 31-68.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
183
EL MEDIO ACUÁTICO EN LA PROPAGANDA DE AUGUSTO
HELENA LÓPEZ GÓMEZ1, SAMUEL NIÓN ÁLVAREZ2
Resumen
La temática propagandística de época de Augusto es sobradamente conocida. La monumental obra de Paul Zanker (1992) es probablemente
uno de los mejores exponentes. Sin embargo, hasta donde conocemos, no hay una propuesta que
haya estudiado el medio acuático como elemento
conductor de algunas interesantes obras de la iconografía y la arqueología de la época. A continuación intentaremos dar una imagen aproximada
del uso de esta temática; para ello nos disponemos a presentar un breve resumen, centrándonos
esencialmente en la propaganda de época triunviral y los momentos inmediatamente posteriores.
1. Introducción
Entendemos por época triunviral el periodo
comprendido entre el 44-32 a. C., caracterizado
como momentos histórico-políticos por la formación de la alianza política entre Marco Antonio,
Lépido y Octavio. Es en esta etapa cuando encontramos grandes obras propagandísticas con
referencias al medio marino; no en vano, las dos
últimas grandes batallas de este periodo fueron batallas navales. Para comprender el uso de motivos
marinos como propaganda hay que tener en cuenta algunos detalles de la historia de este periodo.
Pese al nombre de Triunvirato, durante un breve lapso la triple entente se relacionó con un cuarto individuo. Tras la derrota de Pompeyo en Farsalia y su posterior asesinato en Egipto, muchos
de sus partidarios se refugiaron con su hijo y heredero Sexto. Posteriormente, después de Filipos,
con el fin de Casio y Bruto y su partido, durante
la crisis de las proscripciones en Roma, muchos
políticos se decantaron también por el heredero
Pompeyo, quien representaba «la opción más justa» y la única alternativa al Triunvirato (Apiano
BC, 5.25.).
Gracias a esto, Sexto Pompeyo contaba con
grandes fuerzas, sobre todo navales, con las cuales era capaz de bloquear el Mediterráneo y causar
más de un problema a los triunviros (Apiano BC,
5.67). Por esta razón, Antonio y Octavio fueron
obligados a tratar con él, concediéndole un cargo y una posición institucional con la cual poder
aprovecharse de su dominio del Mediterráneo.
No está muy clara la razón por la cual Octavio
decidió, posteriormente, dirigir sus esfuerzos a
acabar con la posición de Pompeyo. Posiblemente su potencia militar resultaba incómoda, por lo
que el triunviro dirigió sus esfuerzos contra él.
El último siglo de la República había visto una
sucesión de guerras civiles que supusieron un gran
esfuerzo para la población romana en medios y en
hombres. Una vez en el poder, ya durante el Triunvirato, Octavio quiso hacer entender a la sociedad
romana que esta época traumática había acabado
y no se iba a repetir. Él les había llevado la paz
al acabar con los «enemigos de la República», es
decir, los asesinos de su padre. Los sucesos posteriores, ya bajo su mando, se intentaron hacer
pasar por algo distinto a una guerra civil, aunque
los vencidos siguiesen siendo romanos. En el caso
de la lucha contra Sexto Pompeyo, esta se hizo pasar por una guerra contra los piratas (Augusto Res
Gestae, 25). Se utilizó esta excusa porque, además
de bloquear el mar con sus fuerzas navales, aceptaba entre sus filas a libertos y esclavos fugitivos
(Apiano BC, 5.80). Estas argumentaciones facilitarían la creación una imagen pública de Pompeyo y sus seguidores como piratas.
2. Desarrollo
Es aquí donde encontramos el inicio de la campaña propagandística de Octavio y la presencia de
los elementos marinos en su iconografía: hacía
ya mucho tiempo que había pasado a ser costumbre de las casas romanas remitir los orígenes de
1. GEPN-AAT. Universidad de Santiago de Compostela - helena.lopez.gomez@usc.es
2. Síncrisis. Universidad de Santiago de Compostela
184
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
las propias estirpes a los dioses, a imitación de
las casas reales helenísticas, para reivindicar una
posición preeminente sobre sus rivales políticos
(Zanker 1992, 66). La gens Pompeia se relacionaba
con Neptuno. Pompeyo Magno había reclamado
su posición igual a la de este dios por su control
del Mediterráneo durante la guerra contra los piratas. Tras su muerte, sus partidarios consiguieron que se acuñase moneda con su efigie (Zarrow
2003, 126). En algunas de ellas aparecía asimilado
a Neptuno (RRC 471/1.1.ª-d; 477/3.ª-b; 483/1-2).
En todo caso, vemos que aquellos que apoyaban a
Pompeyo reclamaban para él la imagen de la supremacía naval y la asociación con este dios.
Sexto retomó esta idea propia de su padre y quiso hacerse ver como hijo de Neptuno (DC. 48.19.2;
48.31.5; 48.48.5). En los tipos de sus acuñaciones
monetarias de este momento también aparece representado con alusiones al dios y como vencedor con referencias a elementos marinos (imagen
1). Durante estos años, las alusiones a elementos
marítimos o los símbolos del dios del mar hacían
una referencia inequívoca a Sexto Pompeyo. Pero
finalmente sería Octavio el que vencería en Naulooco. Tras esta victoria se demostró que Neptuno
se había pasado a las filas del heredero de César.
Es de sobra conocida la teoría de que Octavio
no era un buen militar, que luchaba sus batallas a
través de sus generales. Puede que fuese parte de
la propaganda de Antonio en su contra (Suetonio
Augusto, 10, 3-4), pero, en todo caso, Octavio tenía que publicitar cualquier victoria militar que
consiguiese para hacer frente a esa fama. Los elementos militares serán utilizados hasta la saciedad en la propaganda de esta primera época. Si a
eso le añadimos que había triunfado sobre el favorito de Neptuno que encabezaba a los «piratas»
que habían enturbiado el Mediterráneo, entendemos que todas las alusiones a Neptuno o a temas
marinos en la propaganda de este momento van a
pasar a hacer referencia a su victoria sobre Sexto
Pompeyo.
Al haber conseguido que el favor del dios de
los mares se tornase hacia él, el propio Octavio
empezó a ser retratado en la actitud de Neptuno
(imagen 2).
FIGURA 1. Zanker 1992,
62.
FIGURA 2. Zanker 1992,
62.
Este ejemplo particular parece que representa
una estatua que se le construyó hacia esta época
y que solo se conserva a través de las alusiones
numismáticas. En su calidad de vencedor de una
batalla naval, Octavio sostiene en la mano la popa
de un barco enemigo como trofeo. La lanza en
su mano izquierda lo identifica de forma heroica
como jefe militar. Apoya el pie derecho sobre una
sphaera, símbolo de un imperio universal (Zanker
1992, 78).
Esta estatua la menciona Apiano entre los honores que se le tributaron por la victoria. Estos
incluían una columna rostrata que también aparecerá en las acuñaciones. Este tipo de honores
determinaron que, a partir de este momento, veamos las alusiones a lo marítimo como referencias
no ya a Pompeyo ni a su familia, sino a Octavio.
Nunca se va a hacer referencia al vencido, pues
era un romano, pero, a través de las alusiones marítimas, aquellos que habían conocido la simbología del propio Sexto Pompeyo lo entendían como
referencia a la victoria militar.
En Accio se demostró plenamente que Octavio
había recuperado el favor de Neptuno, pues esta
decisiva batalla también fue naval, y no hizo sino
incrementar las alusiones militares de la temática
marina en la propaganda. Y, sin embargo, estas
alusiones van a ser efímeras y recibirán un nuevo enfoque tras la reorganización del poder que
siguió a la derrota de Marco Antonio y Cleopatra.
Octavio, ya como Augusto, intentará borrar todas
las huellas de su pasado más belicoso, y ahí Neptuno volverá a ser un dios pacífico.
Podemos ver esta evolución en el arte propagandístico de la época. En un camafeo (imagen
3) Octavio aparece representado como Neptuno,
conduciendo un carro de hipocampos sobre la cabeza de uno de sus enemigos (probablemente Sexto Pompeyo). Esta representación, que tradicionalmente se sitúa entre el 31 y el 27 a. C. (Zanker
1992, 123), pertenece a una primera etapa en el
gobierno de Octavio, donde se representa de forma monárquica. Aparece como el gran vencedor,
favorito de los dioses que se alza sin clemencia
sobre sus enemigos, sin importarle que estos sean
romanos. Es una muestra de esta idea de la exaltación de la victoria militar por encima de todo
que mencionábamos con anterioridad.
FIGURA 3. Zanker 1992, 123.
EL MEDIO ACUÁTICO EN LA PROPAGANDA DE AUGUSTO
FIGURA 4. Zanker 1992,
125.
Las guerras contra compatriotas romanos y
otros episodios que no dejaban a Octavio en buen
lugar se quisieron esconder y dejar atrás a partir
del 27 a. C., cuando se convierte en Augusto. En
este momento, otros ideales (clemencia, piedad o
justicia) tomaron el puesto de su antigua soberbia.
Este cambio se va a reflejar tanto en su legislación
y su forma de comportarse públicamente como en
sus representaciones pictográficas (Zanker 1992,
122-124).
Lo vemos en otro camafeo con motivos marinos (imagen 4). En él se presentan los signos del
homenaje a Augusto victorioso combinado con
alusiones a Naulooco y Accio. Augusto aparece en
el mar en un carro tirado por centauros marinos.
Estos centauros, ejemplo de la victoria y la reconciliación de Octavio sobre este medio, son los que
portan aquellos honores que se le habían brindado por la restitución del Estado. El vencedor ya
no es representado como un dios, sino como un
general romano victorioso vestido con la toga y
con la rama de laurel en la mano; sus méritos y
virtudes son enunciadas mediante representaciones simbólicas. La paz había vuelto a Roma y a
los romanos, y la nueva concepción de sí mismo
requería un nuevo estilo.
3. Conclusión
En todo caso, lo que queremos destacar es que,
pese a la supuesta pacificación del medio marino
tras acabar con los «piratas», las alusiones a lo
acuático que podemos ver en la propaganda de
Octavio tienden a recordar las batallas y su aspecto de general victorioso. Las imágenes marinas representan al mismo tiempo la ocultación de una
guerra civil y la exaltación del vencedor. Una vez
que Octavio se convierte en Augusto, se cierran
las puertas del templo de Jano y se devuelve la paz
185
y la tranquilidad al mundo romano. Ya no es necesario exaltar la victoria de la misma manera, y
el propio Augusto se da cuenta de que no es buena idea hacer referencia a todos aquellos compatriotas romanos sobre los que había pasado para
llegar al poder. El arte, la propaganda y el medio
marino reflejan este cambio de actitud que vemos
en Augusto desde la victoria de Accio.
Una vez más, el análisis de la cultura material
en su forma de propaganda nos muestra el devenir
de una interesante y compleja etapa histórica. Lo
que no esperábamos es que las representaciones
del mundo acuático expresasen de manera tan clara y directa los complejos cambios de este periodo.
4. Bibliografía
AMELA VALVERDE, L. 2015: «Las monedas de Bronce
de CN. Pompeyo hijo y Sexto Pompeyo», Revista Numismática Hécate, 2, 93-118.
APIANO: Historia Romana III. Guerras Civiles, Libros III-V, traducción de Antonio Sancho Royo,
Madrid, Editorial Gredos, 1985.
AUGUSTO: Res Gestae Divi Augusti, traducción de
Juan Manuel Cortés, Madrid, Ediciones Clásicas, 1994.
CRAWFORD, M. H. 1974: Roman Republican Coinage. 2 vols., Cambridge University Press.
DIÓN CASIO: Historia romana, Libros XLVI-XLIX, traducción de Juan Pedro Oliver Segura, Madrid,
Editorial Gredos, 2011.
– Historia romana, Libros L-LX, traducción de Juan
Pedro Oliver Segura, Madrid, Editorial Gredos, 2011.
STONE, S. C. 1983: «Sextus Pompey, Octavian and
Sicily», American Journal of Archaeology, 87
(1), 11-22.
SUETONIO: Vidas de los doce Césares I. El Divino Augusto, traducción de Rosa M.ª Agudo Cubas,
Madrid, Editorial Gredos, 1992.
WALLACE-HADRILL, A. 1986: «Image and authority
in the coinage of Augustus», The Journal of Roman Studies, 76, 66-87.
ZANKER, P. 1992: Augusto y el poder de las imágenes,
Madrid, Alianza Editorial.
ZARROW, E. M. 2003: «Sicily and the coinage of Octavian and Sextus Pompey: Aeneas or the Catanean brothers?», The Numismatic Chronicle,
163, 123-135.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
187
GESTIÓN DE LAS AGUAS MINEROMEDICINALES: EL
ḤAMMĀM DE ALHAMA DE GRANADA
LAURA MARTÍN RAMOS1
1. Introducción
La actual propuesta presenta un análisis de
los baños árabes de Alhama de Granada (provincia de Granada). Antes de empezar, con nuestra
comunicación creemos imprescindible abordar
someramente la descripción del medio geográfico en el que se insertan los baños de Alhama. El
conocimiento de algunos aspectos del relieve ha
jugado un gran papel en esta investigación. La llamada Tierra de Alhama es una depresión rodeada
de montañas, situada entre la Sierra Gorda, el río
Cacín y las sierras de Alhama, Tejeda y Almijara.
Es precisamente en Tejeda y Almijara donde nace
el río Alhama o Marchán. Los ríos, especialmente
este último, tienen un especial protagonismo en la
configuración del entorno que vamos a describir.
Aquí el agua ha labrado distintas formas actuando como agente erosivo: por un lado, encajándose sobre las tierras calizas, la corriente del río
ha efectuado una labor de desgaste que ha dado
lugar al tajo que tanto caracteriza a este paisaje;
por el otro, en aquellas zonas donde las capas calizas eran menos densas, los arroyos han formado pequeños valles o barrancos. Es precisamente
de una de estas rocas calizas de donde brotan las
aguas de estos baños, consideradas medicinales
por varias culturas.
2. Estado de la cuestión
El objetivo principal del estudio que presentamos era el de realizar un análisis, un estado de la
cuestión, de los baños árabes de Alhama de Granada. La civilización islámica, en su avance hacia
occidente, asimila y a la vez difunde muchos aspectos culturales, y entre ellos la arquitectura.
A los llamados baños árabes (ḥammām) se les
compara con las termas romanas. Sin embargo,
a diferencia de estas últimas, los baños árabes
suelen encontrarse cercanos a espacios de culto.
No obstante, sí que se dividen, igualmente, en al
menos tres salas: fría, templada y caliente. En
concreto, los baños de Alhama de Granada se encuentran situados sobre un manantial de aguas
con propiedades mineromedicinales muy ligado a
la identidad del asentamiento desde tiempos remotos. La toponimia nos da muestras de ello, ya
que el actual nombre de este enclave proviene precisamente de su cercanía a estos baños. Un aprovechamiento antrópico de tales recursos con una
larga vida, cuya fecha más temprana, según algunos autores, podría llevarse hasta época romana.
Por nuestra parte, el periodo más antiguo en el
que hemos podido rastrearlo con seguridad es el
altomedieval (Raya 1992, 83). Su uso desde entonces es continuado. De hecho, sobre él se asienta
actualmente un balneario.
La problemática de este lugar es la falta de
estudios que aborden su conocimiento desde un
punto de vista arqueológico. En su gran mayoría,
las publicaciones recientes se basan en los textos
de eruditos granadinos de la primera mitad del
siglo XX. Son análisis muy relacionados con la
Historia del Arte, abordando únicamente el conocimiento del edificio en sí. Es por ello que vimos la
necesidad de aportar un enfoque y una discusión
funcional: la gestión de los recursos acuáticos.
Así, el objetivo concreto del estudio ha sido el
de abordar el conocimiento de este espacio mediante una metodología completa que use algunas
de aquellas armas que tiene la Arqueología actual.
Era obligatorio, por lo tanto, una puesta al día
sobre los baños de Alhama, así que recopilamos
todo aquello que se había publicado sobre ellos.
Si nuestro objetivo era conocer la gestión del
agua en época medieval, nuestra voluntad hubiese
sido usar fuentes escritas de tal periodo. Sin embargo, eso no es posible en gran medida, ya que
las fuentes escritas andalusíes no son muy abundantes.
1. Grupo de Investigación THARG, Universidad de Granada - lramos@ugr.es
188
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Tras realizar nuestro análisis del actual estado
de la cuestión de los baños de Alhama, nos dimos
cuenta de que a la hora de abordarlos únicamente
había sido tenido en cuenta un concepto meramente edificativo. Observamos dos necesidades:
por un lado, la reorganización de todo este conocimiento, y por otro, reconducirlo bajo el ala
de un marco basado en una teoría arqueológica.
Bajo tales preceptos, se debía ampliar la información necesaria para poder comprender los baños.
De momento este punto de vista más holístico
se mantiene en la comprensión del espacio a su
alrededor. Según los preceptos de la Household
Archaeology y los análisis de Sonia Gutiérrez
(Gutiérrez 2012), la categoría morfológica podría
comprenderse únicamente como el primer paso
para analizar una edificación.
FIGURA 1. Detalle LIDAR del terreno de interés, con
la parte medieval de Alhama señalada y al norte la
localización de los baños, también señalados.
3. Documentación de los baños
La documentación sobre este lugar ha dado
como resultado varios hitos que deberían ser destacados. Por un lado, la supervivencia de dos salas: una, la llamada Baño Fuerte, data de época
medieval; la otra, la llamada Baño de la Reina, podría remontarse a época romana, según algunos
autores.
Tras la toma castellana de esta ciudad parece
ser que siguió utilizándose para baños, a pesar
del desapego que tenía la cultura castellana por
este tipo de sitios, que los consideraba de poca
decencia. Ya Hernando del Pulgar habla de este
hecho en concreto: «Estos baños eran causas de
[…] oçio, luxurias malas e feas, e otros engaños e
malos tratos» (Raya 1992, 83).
Este tipo de comentarios eran frecuentes como
rechazo a lo andalusí, al otro conquistado, cuyas
costumbres debían ser deslegitimadas. A pesar de
ello, tenemos noticias de las Actas del Cabildo,
por las cuales sabemos que siguen utilizándose al
menos durante el siglo XVI. Traemos tres ejemplos
de estas actas, las dos primeras de 1570 y la última de 1571:
«El mayordomo de propios da razón sobre la
situación de los baños» (AMA, AA.CC., lib. X, fols.
74; Raya 2003).
«Que se reparen los baños y se de cuenta del
gasto» (AMA, AA.CC., lib. X, fols. 75v-76; Raya
2003).
«El arrendador de los baños, Simón García,
pide licencia para retejar los tejados del mesón
y corredores. Comisario Juan Izquierdo» (AMA,
AA.CC., lib. X, fols. 117-119v; Raya 2003).
Estos no son los únicos baños que continúan
utilizándose tras el cambio cultural. Un claro
ejemplo de ello son los llamados Baños del Almi-
rante de Valencia, que continuaron usándose largo tiempo después de la conquista aragonesa.
Mediante el uso de software de sistemas de información geográfica pudimos observar algunas
anomalías. En concreto unas muy cercanas al emplazamiento de los baños, una pequeña elevación
con el topónimo de la Mesa de los Baños. Sobre
este lugar, Gómez Moreno dio noticias de la aparición de numerosa terra sigillata (Raya 1992).
4. Conclusiones
Tras haber realizado esta puesta al día sobre los baños mineromedicinales de Alhama de
Granada, no nos queda más que apuntar la gran
utilidad que puede suponer el uso de las nuevas
tecnologías. Si nuestro objetivo primario era el
de realizar un estado de la cuestión sobre el conocimiento de este lugar, el secundario era comprobar en qué medida podría aportar nuevos datos el
uso del software citado. Prueba de ello es el último
caso comentado de la Mesa de los Baños. Efectivamente, el uso de herramientas como los MDT
con cobertura LIDAR prueba su valía.
5. Bibliografía
BERNÁLDEZ, A. 1962: Memorias del reinado de los
Reyes Católicos, GÓMEZ MORENO, M.; MATA CARRIAZO, J. de (eds.), Madrid.
CARRIAZO RUBIO, J. L. 2003: Historia de los hechos
del Marqués de Cádiz de Rodrigo Ponce de León,
Granada.
FERNÁNDEZ MOLES, R.; MARTÍN RAMOS, L. 2017: «Dos
hitos del sistema hidráulico en la ciudad de Al-
GESTIÓN DE LAS AGUAS MINEROMEDICINALES: EL HAMM
ĀM DE ALHAMA DE GRANADA
.
hama de Granada: La mina y el acueducto»,
Çibdad, 2, 373-390.
FERRER RODRÍGUEZ, A. 1976: El paisaje agrario de
Alhama de Granada en el siglo XVIII, Granada.
GUTIÉRREZ LLORET, S. 2012: «Gramática de la casa.
Perspectivas de análisis arqueológico de los espacios domésticos medievales en la península
ibérica (siglos VII-XIII)», Arqueología de la Arquitectura, 9, 139-164.
HINOJOSA MONTALVO, J. R. 2000: «La intervención
comunal en torno al agua: fuentes, pozos y
abrevaderos en el reino de Valencia en la baja
Edad Media», La España Medieval, 23, 367-385.
JIMÉNEZ, M.; MATTEI, L. 2014: Patrimonio arqueológico medieval del Poniente granadino, Granada.
KIRCHNER, H.; NAVARRO, C. 1994: «Objetivos, métodos y práctica de la arqueología hidráulica»,
Arqueología y Territorio Medieval, 1, 159-182.
189
MALPICA CUELLO, A. 1996: Poblamiento y castillos en
Granada, Madrid.
– 2002: Los castillos en al-Andalus y la organización del territorio, Badajoz.
– 2014: Las últimas tierras de al-Andalus, Granada.
PULGAR, H. del 1943: Crónica de los Reyes Católicos, MATA Y CARRIAZO, J. (ed.), Madrid.
RAYA RETAMERO, S. 1992: Historia de Alhama y sus
monumentos, Granada.
– 1997: Historia, leyenda y sociedad en la Alhama
decimonónica, Granada.
– 2003: Alhama. La huella de una ciudad en sus
documentos 1568-1637, Granada.
TRILLO SAN JOSÉ, C. 2004: Agua, tierra y hombres
en al-Andalus. La dimensión agrícola del mundo
nazarí, Granada.
– 2009: El agua en al-Andalus, Málaga.
SECCIÓN 08. LA INTERDISCIPLINARIEDAD ARQUEOLÓGICA:
DISCIPLINAS Y TÉCNICAS CIENTÍFICAS AFINES AL ESTUDIO
ARQUEOLÓGICO PARA LA INTERPRETACIÓN HUMANÍSTICA
DEL REGISTRO MATERIAL
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
193
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN «LA INTERDISCIPLINARIEDAD
ARQUEOLÓGICA: DISCIPLINAS Y TÉCNICAS CIENTÍFICAS
AFINES AL ESTUDIO ARQUEOLÓGICO PARA LA
INTERPRETACIÓN HUMANÍSTICA DEL REGISTRO MATERIAL»
JULIA MONTES-LANDA1, ÁGUEDA SÁENZ-MARTÍNEZ2
La importancia de la interdisciplinariedad en
el estudio arqueológico es enfatizada desde los
más sobresalientes proyectos a nivel nacional e
internacional en las últimas décadas. La aplicación y/o combinación del conocimiento procedente de la física, la química, la biología, la geología, la estadística, etc., nos permite desentrañar
patrones y dinámicas de las sociedades pasadas
escondidos en la microestructura de los materiales o los residuos arqueológicos. Estos no serían
de otra manera apreciables a través de meros estudios macroscópicos y bibliográficos del registro material.
No nos referimos solamente a la aplicación
de técnicas científicas en el campo arqueológico,
sino a que estas mismas técnicas pueden aportarnos tanto información como visiones muy diferentes cuando son utilizadas por arqueólogos,
restauradores, geólogos, químicos, etc., con fines
arqueológicos. Cuando estas técnicas y conocimientos científicos se utilizan por y para la Arqueología desde el comienzo de la recopilación
de datos analíticos, sus resultados son perfectamente integrables en las realidades de los pueblos
pasados, aportando información sobre aspectos
que de otra manera sería imposible conocer. El
único requisito imprescindible para ello es que su
objetivo último sea construir una interpretación
humanística que explique los datos analíticos obtenidos y que los relacione con el resto de conocimiento arqueológico existente. Pero para que esto
pueda suceder es indispensable partir de una pregunta arqueológica clara que evite que el análisis
de materiales se convierta en una mera recopilación de datos.
En esta sesión se presentaron investigaciones
de disciplinas o subdisciplinas (arqueometría, es-
tudio de materiales, restauración y conservación,
paleoecología, etc.) que estudian la materialidad
y/o los residuos arqueológicos tanto orgánicos
como inorgánicos basándose en la aplicación de
una o varias técnicas científicas (microscopía óptica, SEM-EDS, XRF, FTIR, etc.). Todos ellos parten de objetivos humanísticos claros que permiten
la interrelación de los datos recogidos durante el
estudio con preguntas arqueológicas sólidas que
pueden vincularse de manera directa con dinámicas sociales, culturales, tecnológicas, económicas,
etc., de las sociedades pasadas.
Siguiendo estas premisas, Noelia SánchezMartínez expuso acerca de «La determinación del
paleoambiente. La tecnología lítica en función de
la palinología», seguida de Santiago Sossa Ríos,
que presentó su póster titulado «Analizando biomarcadores lipídicos en sedimentos paleolíticos:
el caso de El Salt, Alcoy». Aitor Fernández MartínConsuegra nos habló acerca de «Dinámica antrópica y transformación del medio: Paleopalinología
del Holoceno y Antropoceno en la costa cantábrica», seguido por Mireia Gascón Domínguez en
representación también de Omar Ortiz Morales y
Celia Díez-Canseco, que presentó el póster titulado «La experimentación como herramienta para
comprender el registro arqueobotánico». Seguidamente, Carme Saorin hizo su ponencia sobre
el «Estudi de les estructures de combustió protohistòriques mitjançant FTIR», para continuar con
Julia Montes-Landa con su comunicación titulada «¿Por qué así y no asá? Desarrollo y selección
de las técnicas de aleación de bronces estañados
en la península Ibérica en la Prehistoria Tardía».
María Coto Sarmiento presentó su comunicación
sobre «El uso de metodología cuantitativa y de
simulación aplicada a la producción anfórica en
1. School of Archaeology and Ancient History, University of Leicester - inter.jia18@gmail.com
2. Facultad de Bellas Artes, Universidad Complutense de Madrid
194
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
el Imperio romano», y Águeda Sáenz-Martínez
puso fin a esta sesión con su contribución acerca
de las «Posibilidades de la MEB para el control
de la eliminación de sales insolubles en materiales
cerámicos».
Así se contribuyó a la interacción directa entre las ciencias sociales y humanas y los métodos
científicos, que se nutren mutuamente para la
construcción de una interpretación holística del
pasado.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
195
ESTUDI DE LES ESTRUCTURES DE COMBUSTIÓ
PROTOHISTÒRIQUES MITJANÇANT FTIR
CARME SAORIN1
1. Introducció
L’espectroscòpia infraroja de transformada de
Fourier (FTIR) és una de les tècniques que permet obtenir millors resultats a l’hora de tractar
de definir l’ús de les estructures de combustió, en
aquest cas a través de l’estudi de la mineralogia
del sediment per detectar l’alteració tèrmica dels
sediments i identificar la presència o absència de
restes de cendra.
tió EC01 del Tossal de la Vila (fig. 1), i FORN1015
(fig. 2a), LLAR1010 (fig. 2b) i LLAR1012 (fig. 2c)
de Sant Jaume. Principalment, s’han analitzat les
soleres d’aquestes estructures, però també el revestiment de la paret de FORN1015 o el sediment
de les capes de preparació de les llars.
2. Objectius i àrea d’estudi
Aquest treball s’emmarca en el context cronocultural dels darrers moments de la prehistòria i
els inicis de la protohistòria, concretament els períodes del Bronze final i la primera edat del ferro,
a la zona del nord-est de la península Ibèrica. Les
mostres aquí estudiades estan incloses en el nostre projecte de tesi doctoral titulat «Estudi de les
estructures de combustió protohistòriques al nordest de la península Ibèrica»; veurem els resultats
preliminars de l’estudi de diferents llars i forns dels
jaciments de Sant Jaume i el Tossal de la Vila.
El Tossal de la Vila (la Serra d’en Galceran, la
Plana Alta, Castelló de la Plana) és un assentament amb fases del Bronze final i de la transició a
la primera edat del ferro, tot i que també té fases
d’ocupació islàmica (Aguilella et al. 2016). Sant
Jaume (Alcanar, Montsià, Tarragona), en canvi,
és una residència aïllada i fortificada de la primera edat del ferro, situada a les terres del Sénia
(Garcia i Rubert 2005; 2009; Garcia i Rubert et al.
2015; 2016).
3. Materials i mètodes
S’han analitzat un total de 30 mostres de sediment, corresponents a l’estructura de combus-
FIGURA 1. Estructura de combustió EC01 del Tossal
de la Vila (imatge: C. Saorin).
1. GRAP (Grup de Recerca en Arqueologia Protohistòrica), Universitat de Barcelona - carmesaorin@gmail.com
196
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Estructures de combustió FORN1015, LLAR1010 i LLAR1012 de Sant Jaume (imatge: GRAP).
FIGURA 3. Procediment analític del FTIR (imatge: C. Saorin).
El FTIR és una tècnica analítica molecular
molt adequada per a la identificació dels minerals
d’argila que conté el sòl, com ara caolinita, esmectita o il·lita, i relacionada amb la calor de les
seves transformacions. En particular, al voltant i
per sobre dels 500 °C l’estructura de la caolinita és
destruïda, i per sobre dels 700 °C les estructures
d’esmectita, il·lita i mica són destruïdes. Un altre
mineral com la dolomita es converteix en calcita a
partir dels 500 °C (Weiner 2010; Berna et al. 2007;
Regev et al. 2010). La recollida de mostres al camp
s’ha de realitzar, sempre que sigui possible, situant
les mostres preses en planta (fig. 3), fet que ajudarà
a valorar millor eventuals diferencies entre mostres d’una mateixa estructura. Per a la realització
del FTIR es requereixen uns pocs micrograms de
sediment. Es tracta, per tant, d’una tècnica molt
poc destructiva amb el material arqueològic.
Les mostres de Sant Jaume (SJ1015) van ser
analitzades en un espectròmetre iS5 Thermo Fisher Scientific de l’Equip de Recerca Arqueològica
i Arqueomètrica de la Universitat de Barcelona
(ERAAUB) al laboratori d’arqueometria de la Universitat de Barcelona. Per a la introducció de la
mostra cal realitzar prèviament una pastilla molent el sediment a analitzar juntament amb uns
micrograms de KBr (bromur de potassi). Els espectres resultants es van recollir en 32 escanejats a
una resolució de 4cm-1, i per a la seva interpretació
es va utilitzar el software OMNIC (Saorin i Garcia
2016). En el cas de les mostres del Tossal de la Vila
(TVEC01) i Sant Jaume (SJ1010 i SJ1012), l’anàlisi mineralògica va ser duta a terme utilitzant l’espectrofotòmetre IR Tensor 27 Bruker, equipat amb
accessori de reflexió total atenuada (ATR) Specac
Golden Gate (ATR de diamant d’una sola reflexió).
L’accessori d’ATR permet el registre directe de
mostres sense haver d’elaborar la clàssica pastilla
de KBr, facilitant així el registre d’espectres d’IR
de mostres líquides o sòlides independentment de
la seva naturalesa física. L’interval de mesura utilitzat va ser d’entre 600 i 4.000 cm-1. Aquest procediment es va realitzar al Laboratori d’Espectroscòpia Molecular (LEM) del Servei d’Anàlisi Química
(SAQ) de la Universitat Autònoma de Bellaterra.
4. Resultats
Els principals minerals que formen els sediments analitzats són la calcita i l’argila; la dolomita i el quars apareixen en menor concentració.
En tots els casos es componen de calcita d’origen
geogènic. Per tant, no hi trobem la presència de
cendres. S’ha de dir que en cap de les estructures
estudiades es va identificar durant l’excavació una
capa de cendres. L’argila està alterada tèrmicament en més o menys mesura, encara que totes les
mostres estan cremades a temperatures inferiors
als 500 °C.
ESTUDI DE LES ESTRUCTURES DE COMBUSTIÓ PROTOHISTÒRIQUES MITJANÇANT FTIR
197
TAULA 1. Principals resultats de l’estudi de FTIR.
5. Discussió
En el forn EC01 del Tossal de la Vila (mostres TVEC01M1, TVEC01M2, TVEC01M3,
TVEC01M4, TVEC01M5, TVEC01M6) vam poder
determinar la zona on s’havia produït més combustió, situada al davant i al centre de l’estructura. Això ho podem veure en els espectres, i més
concretament en les diferències entre TVEC01M1
i TVEC01M2 respecte de TVEC01M5, en la qual
desapareixen els pics de la banda 3600-3800. També ho podem veure en la banda dels 600-700 i la
desaparició dels pics de la banda 900; això és degut a l’alteració tèrmica dels minerals d’argila.
En el cas de les diferents estructures estudiades de Sant Jaume, obtenim uns resultats molt
semblants. Amb Llar1010 hem pogut determinar
la composició dels sediments utilitzats en la seva
construcció (taula 1). La presència de dolomita ens indica que no va superar els 500 °C. En el
Forn1015 es va poder determinar que el seu funcionament s’havia produït durant un breu període
de temps, ja que les evidències de combustió eren
molt minses (Saorin i Garcia 2016). Pel que fa a
Llar1012, tot i que no es conservava íntegrament
perquè havia estat retallada per construir una altra estructura, també s’hi va poder determinar la
zona de més combustió, situada a la zona central.
6. Conclusions
L’estudi d’aquestes estructures a través dels
infrarojos permet anar més enllà de la pura des-
198
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
cripció morfotipològica. En els casos estudiats,
en primer lloc hem confirmat que ha existit un
procés d’alteració tèrmica en totes les mostres de
solera. La identificació de caolinita i dolomita ens
permet afirmar que aquestes estructures no han
superat els 500 °C. Per tant, podem confirmar la
seva funció culinària, i descartar altres possibles
activitats artesanals com la metal·lúrgia o la cocció ceràmica, ja que aquestes activitats requereixen unes temperatures força més elevades. Tot i
que les condicions de conservació de sediments
d’aquestes estructures són bones, no s’hi han
detectat evidències de cendra. Aquest fet es deu
principalment a la neteja periòdica que es devia
fer de les estructures. Les restes de cendra que poguessin quedar després de la neteja, degut a les
seves reduïdes dimensions, no s’han conservat.
El FTIR ens ha permès, doncs, aprofundir en
el coneixement de l’ús de la funció d’aquestes estructures, aproximar-nos a la temperatura que van
assolir i en alguns casos determinar altres aspectes,
com per exemple en quina part de l’estructura es va
produir més combustió. La confirmació de la funció d’aquestes estructures com a estructures per a
la cocció d’aliments ens permet acostar-nos també
a la funció de l’espai que ocupaven, per finalment
tractar d’aprofundir en la definició de l’eventual diversificació de rols i tasques en un mateix assentament a través, per exemple, de la possible existència d’una dinàmica de cuina especialitzada, segons
la ubicació i la tipologia d’aquests espais.
7. Bibliografia
AGUILELLA ARZO, G.; FALOMIR GRANELL, F.; PÉREZ JORDÀ, G.; LAGUNA MONTES, M. C.; GARCÍA SÁNCHEZ,
D. A. I.; ARQUER GASCH, N. 2016: «Tossal de la
Vila (la Serra d’en Galceran, Castellón). Un
asentamiento en la transición del Bronce Final
al Hierro Antiguo. Primeros resultados de las
campañas 2012-2014», Quaderns de Prehistòria
i Arqueologia de Castelló, 34.
BERNA, F.; BEHAR, A.; SHAHACK-GROSS, R.; BERG, J.;
BOARETTO, E.; GILBOA, A.; SHARON, I.; SHALEV, S.;
SHILSTEIN, S.; YAHALOM-MACK, N.; ZORN, J. R.;
WEINER, S. 2007: «Sediments exposed to high
temperatures: reconstructing pyrotechnological processes in Late Bronze and Iron Age
Strata at Tel Dor (Israel)», Journal of Archaeological Science, 34, vol. 3, 358-373.
GARCIA I RUBERT, D. 2005: «El poblament del primer ferro a les terres del riu Sénia. Els assentaments de la Moleta del Remei, Sant Jaume,
la Ferradura i la Cogula durant els segles VII i
VI ANE», tesi doctoral inèdita, Universitat de
Barcelona.
– 2009: «Els sistemes de fortificació de la porta
d’accés a l’assentament de la primera edat del
ferro de Sant Jaume (Alcanar, Montsià)», Revista d’Arqueologia de Ponent, 19, 205-229.
GARCIA I RUBERT, D.; MORENO, I.; FONT, L.; MATEU, M.;
SAORIN, C. 2015: «L’assentament de la primera
edat del ferro de Sant Jaume (Alcanar, Montsià): principals resultats dels treballs efectuats
al jaciment entre els anys 1997 i 2013», Tribuna
d’Arqueologia 2012-2013, 48-68.
GARCIA I RUBERT, D.; MORENO MARTÍNEZ, I.; FONT VALENTÍN, L.; MATEU SAGUÉS, M.; SAORIN COLLADO,
C.; BOTERO BESADALOMBANA, J. A. 2016: «La residència fortificada aïllada de la primera edat
del ferro de Sant Jaume (Alcanar, Montsià)», a:
I Jornades d’Arqueologia de les Terres de l’Ebre
2016, Tortosa, 167-187.
REGEV, L.; PODUSKA, K. M.; ADDADI, L.; WEINER, S.;
BOARETTO, E. 2010: «Distinguishing between
calcites formed by different mechanisms using
infrared spectrometry: archaeological applications», Journal of Archaeological Science, 37,
3022-3029.
SAORIN, C.; GARCIA I RUBERT, D. 2016: «Estudi d’un
forn culinari de la primera edat del ferro localitzat a l’assentament de Sant Jaume (Alcanar,
Montsià) mitjançant espectroscòpia per FTIR,
micromorfologia i anàlisi tipològica», Quaderns de Prehistòria i Arqueologia de Castelló,
34, 43-78.
WEINER, S. 2010: Microarchaeology. Beyond the Visible Archaeological Record, Cambridge, Cambridge University Press.
SECCIÓN 09. ARQUEOLOGÍA VIRTUAL Y HUMANIDADES
DIGITALES. NUEVAS APLICACIONES Y PERSPECTIVAS
DE FUTURO EN RELACIÓN CON LAS TECNOLOGÍAS
INNOVADORAS Y EL PATRIMONIO ARQUEOLÓGICO
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
201
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN «ARQUEOLOGÍA VIRTUAL
Y HUMANIDADES DIGITALES. NUEVAS APLICACIONES
Y PERSPECTIVAS DE FUTURO EN RELACIÓN CON
LAS TECNOLOGÍAS INNOVADORAS Y EL PATRIMONIO
ARQUEOLÓGICO»
SERGIO ISABEL LUDEÑA1, JAVIER LUENGO2,3, ÁNGELA CRESPO FRAGUAS4, MIGUEL ÁNGEL DÍAZ
MORENO5, MARÍA QUEJIGO GARCÍA6
Resumen
En las últimas décadas se ha producido una expansión cada vez mayor de las nuevas tecnologías
digitales en los distintos campos científicos. Por supuesto, la Arqueología no ha sido una excepción a
estos avances. Los progresos de la propia informática han provocado que nuevos programas, técnicas
y métodos hayan aparecido en nuestros días, lo que
ha permitido abrir novedosas puertas a la hora de
conseguir representaciones más realistas y precisas
de los entornos que nos rodean de manera digital.
Al mismo tiempo, también se han extendido innovadores empleos de la documentación tridimensional, los softwares de edición 3D, la realidad virtual,
la realidad aumentada y la impresión 3D, los cuales
ofrecen múltiples perspectivas a la hora de estudiar
y trabajar con el patrimonio arqueológico.
El desarrollo de las humanidades digitales y
la arqueología virtual en los años más recientes
está proporcionando la posibilidad de mejorar
la obtención e interpretación de la información
arqueológica. Así, se están utilizando técnicas y
aplicaciones de estos ámbitos en el proceso de documentación, en el estudio de los datos y en la
difusión y divulgación final de los resultados de
las investigaciones llevadas a cabo. En este último campo, la tecnología, a través de sus diferen-
tes recursos, permite el acercamiento al público
general mediante un lenguaje más comprensible,
atractivo y, lo que es fundamental, visual, de manera que consiguen que se entienda mejor el discurso y la información planteados. En definitiva,
las tecnologías innovadoras en combinación con
las humanidades representan un recurso clave a
la hora de divulgar y generar apoyos en la didáctica del patrimonio arqueológico. Su conocimiento
se enlaza, además, con la sociedad plenamente
tecnológica en la que vivimos, de manera que sus
herramientas y lenguaje son, aunque no lo parezcan, especialmente conocidos entre el público.
Incluso suponen un recurso de divulgación del
conocimiento entre ciertos grupos sociales, como
las personas con capacidad visual reducida.
Por todo ello, esta sesión pretende dar cabida
a cualquier propuesta que relacione el empleo de
estas tecnologías innovadoras con el patrimonio
arqueológico. Igualmente, también queremos dejar espacio para el debate y la reflexión, de modo
que podamos dialogar en conjunto sobre cuáles
son las futuras aplicaciones y perspectivas para
los próximos años en el campo de la arqueología
virtual y las humanidades digitales.
Palabras clave: arqueología virtual, humanidades digitales, patrimonio arqueológico, herramientas 3D, fotogrametría
1. Facultad de Humanidades de Toledo (Universidad de Castilla-La Mancha), Cota 667: Arqueología y Patrimonio sergio.isabel@uclm.es
2. Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES) (Tarragona), Arqus 3D - franciscojavierluengo@
outlook.com
3. Àrea de Prehistòria, Universitat Rovira i Virgili (URV), avinguda de Catalunya, 35, 43002 Tarragona, Spain
4. Facultad de Humanidades de Toledo (Universidad de Castilla-La Mancha), Cota 667: Arqueología y Patrimonio pintocota667@gmail.com
5. Cota 667: Arqueología y Patrimonio - pintocota667@gmail.com
6. Universidad de Castilla-La Mancha, Cota 667: Arqueología y Patrimonio - mariaquejigogarcia@gmail.com
202
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
1. Introducción
La presente sesión, correspondiente al número
7 de las sesiones tradicionales, recibió un total de
seis comunicaciones, entre las que se encontraba
un póster. Los temas tratados abordaron desde la
musealización utilizando nuevas herramientas
como apoyo, pasando por restituciones tridimensionales, hasta análisis lumínicos sobre modelos
virtuales y aplicaciones de la impresión 3D en la
arqueología.
Con ello se ha podido plantear un estado de la
cuestión en materia de humanidades digitales que
confirma un panorama optimista al comprobar
como son cada vez más las aplicaciones posibles.
2. Desarrollo
A lo largo de la sesión se pudieron atender las
diversas comunicaciones con sus respectivos debates posteriores. En estos últimos fue posible
comprobar qué temas generan más atención por
parte de los oyentes. Se podría destacar el interés
por las aplicaciones en musealización, la búsqueda de una mayor precisión en la documentación
fotogramétrica e incluso en la impresión 3D y la
aceptación general del uso de la documentación
3D como esencial en las excavaciones actuales,
tanto de materiales como de estructuras.
3. Conclusiones
Como conclusiones generales, se podrían plantear tres grandes bloques:
a) Las humanidades digitales son una vertiente
con múltiples aplicaciones en la arqueología. Ya
no solo en el proceso de documentación, sino que
también son una herramienta para poder plantear
o incluso responder nuevas preguntas.
b) La documentación fotogramétrica se ha
normalizado en el trabajo arqueológico. Los retos dentro de esta línea buscan mayor precisión y
menor coste, en tiempo, en dinero o en almacenamiento virtual.
c) Las nuevas aplicaciones de la arqueología
virtual, destacando la impresión 3D, apuntan a
una actualización museográfica en temas de arqueología. Se ha destacado especialmente en esta
sesión su potencial como recurso didáctico y divulgativo.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
203
EL CASTRUM VISIGOT DE PUIG ROM (ROSES). PROBLEMES
I SOLUCIONS PER A LA DOCUMENTACIÓ FOTOGRAMÈTRICA
D’UN JACIMENT
PERE MANEL MARTÍN SERRANO1
1. Introducció: el castrum visigot de Puig
Rom
El jaciment de Puig Rom, també conegut com
a Puig de les Muralles, es troba situat al terme
municipal de Roses, a una cota de 230 m s. n. m.
Les seves muralles, amb un perímetre de 366 m,
encerclen tot el recinte, d’una llargada màxima de
125 m nord-sud, 110 m d’amplada est-oest i una
superfície de 0,9 ha.
Els primers treballs van començar l’any 1917
sota la direcció de Josep Maria Folch i Torres.
L’any 1947 es reprendrien les excavacions sota
les ordres de Pere de Palol. A la dècada dels 80
es van dur a terme nous treballs amb la intenció
d’augmentar la documentació gràfica i el registre
arqueològic de les excavacions dels anys 40.
2. El projecte
Les actuacions dutes a termes al jaciment de
Puig Rom s’emmarquen en el projecte «El nucli
fortificat de Puig Rom i el seu entorn immediat. Estudi sobre el poblament d’època visigoda
a la serra de Rodes. Segles VII-X dC», del grup
de recerca MIRMED-GIAC: Mirades sobre la
Mediterrània a l’Antiguitat. D’Orient a Occident,
de la Protohistòria a l’Antiguitat Tardana, per
la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) i
coordinat des de l’Institut Català d’Arqueologia
Clàssica (ICAC).
Els principals objectius del projecte els podem
dividir primerament en l’estudi del nucli, no només per establir els marcs cronològics d’ocupació
a la fi del període tardoromà, sinó també per estudiar el paisatge i el territori que l’envolta. En
segon lloc, els objectius tècnics, per actuar en
la consolidació dels elements ja excavats en les
antigues campanyes, així com en l’alliberament
d’estructures arqueològiques de les construccions
modernes i el condicionament dels accessos del
jaciment.
Finalment, es pretén la museïtzació de les restes en el context de la rendibilització i la democratització dels coneixements obtinguts a partir
de la recerca arqueològica. Així, se cercava iniciar un procés d’aplicació de les noves tecnologies
per atendre els visitants i enriquir la seva experiència.
3. Metodologia de treball
El treball de documentació tridimensional es
va efectuar de manera paral·lela a les diferents
campanyes d’excavació dutes a terme entre els
anys 2014 i 2017.
La fotogrametria terrestre, o structure from
motion (SFM), ens permet obtenir informació
tridimensional d’alta resolució de cadascun dels
trams a analitzar. S’havien, però, de complir una
sèrie de requeriments a l’hora d’executar la sessió de fotografies, que havien de tenir un mínim
del 60 % de superposició entre si, encara que és
recomanable optar entre el 75 i el 80 %. Perquè
resultés viable el projecte havíem de mantenir una
separació regular tant en horitzontal com en vertical. Per a això es va decidir fer seccions fotogràfiques a diferents alçades (0,50 m, 1,70 m i 3 m) i
mantenir una distància lateral d’aproximadament
2 m. Paral·lelament, es va documentar topogràficament la muralla per obtenir, en primer lloc, les
coordenades UTM exactes de tot el conjunt del jaciment i tenir també els punts de control (GCP)
que ens havien d’ajudar posteriorment a georeferenciar els nostres models tridimensionals.
Les sessions de fotografies, a l’hora de posar-les en pràctica, sovint havien de modificar-se
per adaptar-se a l’orografia del nostre jaciment.
1. Universitat Rovira i Virgili - peremanel.martin@gmail.com
204
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. La presa de dades resulta condicionada
pel desnivell del terreny. La situació de l’estació
total ens marca la nostra línia de moviment per fer
la sessió de fotografies.
Així, els tres nivells que vam establir molts cops
no ens permetien assolir tota la vertical del nostre element patrimonial a documentar. En aquests
casos era necessari comptar amb algun material
addicional, com ara una perxa, per obtenir una
alçada addicional.
L’SFM terrestre presenta l’avantatge de no necessitar grans infraestructures mecàniques per
dur-la a terme, però té la contrapartida que és un
mètode molt més lent que d’altres. Aquesta lentitud ens donarà, amb tota probabilitat, una diferència lumínica bastant acusada entre l’inici i el
final de la fotogrametria.
Finalitzada la primera campanya, era el moment de veure quins problemes havíem tingut,
en quins punts era necessari incidir amb altres
tècniques i també quins resultats havien estat
òptims en aquesta primera presa de contacte.
Els resultats van ser bastant variats, amb alguns
èxits i fracassos.
Els alçats de les muralles que vam obtenir van
permetre, ja en aquest primer moment, treballar
adequadament en el seu estudi. Tot i això, la part
superior d’algunes de les estructures no es van
poder assolir perquè van quedar per sobre de la
nostra alçada i amb un desnivell acusat que dificultava la tasca de documentació (figura 1).
Per documentar el perímetre, l’SFM era una
tècnica vàlida però insuficient per registrar geomètricament les 0,9 ha del jaciment en extensió
(figura 2).
Per a un estudi en profunditat del terreny on
s’assenta el jaciment i de les possibles estructures
interiors es feia necessari utilitzar una metodologia més adient, per tal de poder generar tota la
documentació tridimensional que ens aportés informació arqueològica rellevant.
Durant la campanya de l’any 2016, mentre seguíem documentant de manera terrestre la resta
d’estructures constructives de la muralla, vam
decidir emprar una aeronau per control remot
(RPA), coneguda popularment com a dron, per
realitzar les primeres proves d’obtenció d’informació tridimensional en extensió. Aquestes proves ens van servir per marcar uns límits verticals
sobre els quals treballar i analitzar la superposició
entre les imatges en cas d’optar per un mode manual. L’aparell per a les proves va ser un dron DJI
Phantom 2, equipat amb una càmera GoPro Hero
3 amb una resolució de 5 mpx per a les fotografies. Una resolució molt minsa per generar models
detallats però suficient per obtenir un model sobre el qual aplicar millores i valorar-lo.
FIGURA 2. Imatge
aèria obtinguda amb
el dron. S’hi pot
observar clarament
la mancança
d’estructures de certa
entitat a l’interior del
jaciment.
EL CASTRUM VISIGOT DE PUIG ROM (ROSES). PROBLEMES I SOLUCIONS PER A LA DOCUMENTACIÓ FOTOGRAMÈTRICA D’UN JACIMENT
205
FIGURA 3. Metodologia emprada per obtenir el model 3D del jaciment. D’esquerra a dreta, observem les
captures de pantalla dels softwares utilitzats (esquerra), les fotografies realitzades (centre) i finalment el
model tridimensional aconseguit (dreta).
4. Planificació d’un vol amb RPAS i execució del treball
A la campanya del 2017, i última del projecte,
vam emprendre la documentació tridimensional
amb una nova aeronau, un DJI Phantom 3 Advanced. Aquesta aeronau ens donava una resolució de
12,4 mpx per a cada fotografia, suficient per obtenir uns models detallats tant de les estructures
com del conjunt del nostre jaciment.
Els vols amb l’RPA havien de ser planificats prèviament per tal de tenir un control més exhaustiu
des del gabinet. Per fer el seguiment de l’aeronau,
el nombre de fotografies a realitzar i l’alçada a la
qual havíem d’executar-les, ens servíem de dues
aplicacions com van ser DJI GS PRO, disponible
per a iPad, i Pix4D Capture, també disponible per
a iOS i Android. Totes dues apps ens permetien tenir un control punt per punt i limitar el moviment
de l’aeronau en el sentit desitjat.
Aquest tipus d’aplicacions són les més adients
si volem aconseguir productes com ara ortofotografies o models digitals del terreny d’una manera
ràpida i fiable i mantenint una homogeneïtat durant tot el vol.
En el nostre cas vam emprar aquesta metodologia, però també un vol manual on l’operador va
decidir en tot moment paràmetres com ara l’altitud, la direccionalitat i el nombre de fotografies.
Es va incidir en els sectors excavats recentment
i en aquelles parts que representaven més potencialitat, optimitzant d’aquesta manera la duració
de cadascuna de les bateries (20 minuts). Amb
tots i cadascun d’aquests vols vam generar un
model tridimensional amb el software Agisoft
PhotoScan, al qual vam afegir els punts de con-
trol obtinguts amb l’estació total per tal de poder
georeferenciar posteriorment els productes realitzats (figura 3).
5. Primers resultats obtinguts
Amb el model 3D correctament treballat i amb
la qualitat òptima podíem començar a generar els
diferents productes amb informació arqueològica. Això comportava exportar els alçats de muralla
pendents de les campanyes anteriors, així com els
primers models digitals del terreny i les primeres
ortofotografies, que ens havien de servir per dibuixar la nostra planimetria de manera detallada
i comparar l’evolució de l’excavació en els sectors
desitjats. Gràcies a la digitalització podíem generar una malla sòlida que ens ha d’ajudar, a partir
de la manipulació amb altres softwares com per
exemple Blender, a interpretar alguns dels traçats
susceptibles de representar estructures arqueològiques soterrades. Això és possible gràcies a l’aïllament de la textura, ja que d’aquesta manera el
color i la llum de la fotografia no incideix en la
superfície «real» i ens ajuda a veure totes aquestes
traces.
La fotogrametria aèria ens va permetre assolir una alçada molt superior i obtenir un rang
d’imatges més gran a diferents alçades i inclinacions, amb una disminució considerable del temps
i amb uns resultats excepcionals.
Les diferents alçades permeten documentar
l’interior del jaciment de manera fiable i georeferenciada gràcies en primer lloc al GPS intern del
dron i als punts de control que l’estació total ens
proporciona (figura 4).
206
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. Alguns dels elements resultants del treball de fotogrametria del jaciment. a) El model 3D vist amb
les seves diferents visualitzacions (punts, malla i textura). b) La geometria resultant a alta resolució ens
permet discriminar la textura i analitzar únicament les estructures a partir de la informació geomètrica que
hem obtingut. c) Exemple d’una de les torres aparegudes durant els processos d’excavació i neteja.
EL CASTRUM VISIGOT DE PUIG ROM (ROSES). PROBLEMES I SOLUCIONS PER A LA DOCUMENTACIÓ FOTOGRAMÈTRICA D’UN JACIMENT
6. Bibliografia
FIZ, J. I.; SUBÍAS, E.; CODINA, D.; PUIG, A. M.: «Les
campanyes del bienni 2016-2017 al nucli fortificat del Puig Rom (Roses, Alt Empordà)», a:
XIV Jornades d’Arqueologia de les Comarques de
Girona, Caldes de Malavella. [En premsa]
MARTÍN, P. M.; APARICIO, P.; FERNÁNDEZ, M.; CARMONA, J. D. 2014: «Fotogrametría involuntaria:
207
Rescatando información geométrica en 3D de
fotografías de archivo», Virtual Archaeology Review, 5 (10), 11-20.
PALOL, P. 2004: El castrum de les muralles de Puig
Rom (Roses, Alt Empordà), Museu d’Arqueologia de Catalunya-Girona, Sèrie Monogràfica 22,
Departament de Cultura de la Generalitat - Diputació de Girona, Ajuntament de Roses.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
209
ESTUDIO LUMÍNICO EN LA ARQUITECTURA
DOMÉSTICA FENICIA
JAVIER LUENGO1,2, FRANCISCO JOSÉ GARCÍA FERNÁNDEZ3
Resumen
La arqueología española ha dedicado gran
atención a la arquitectura fenicio-púnica peninsular gracias a los numerosos hallazgos y excavaciones de las últimas décadas. La precisión y
sistemática de estos trabajos ha permitido que la
investigación pueda ahondar en cuestiones cada
vez más complejas.
De forma paralela, la arqueología ha empezado
a implementar los recursos tridimensionales no
ya con fines meramente divulgativos sino como
base para el análisis científico. A esta corriente
queremos sumarle el análisis de las condiciones
lumínicas de las estructuras a través de simulaciones tridimensionales.
Palabras clave: Cerro Naranja, análisis lumínico, arquitectura fenicia, recreación virtual
1. Introducción
La luz ha sido un recurso tenido en cuenta en
la arquitectura desde la prehistoria. Un ejemplo de
ello podría ser la precisión con la que se construyó
el Dolmen de Viera (Antequera, Málaga) para que
las primeras luces del equinoccio de otoño (19, 20
o 21 de marzo, según el año) atravesaran el corredor de entrada e iluminaran la sala final durante
breves instantes. Junto con este ejemplo ambientado en la prehistoria podrían citarse otros muchos para épocas más recientes, como el templo de
Ramsés II en Abu Simbel (Egipto), el Panteón de
Agripa en Roma (Italia) o la Catedral de la Sagrada
Familia en Barcelona (España). Ejemplos todos de
la importancia simbólica, el estudio y el control de
la posición solar en relación con la arquitectura.
Sin embargo, frente a estos casos emblemáticos, son muy pocos los trabajos que abordan
el cálculo de la incidencia solar sobre las arquitecturas domésticas, que, aunque habitualmente responden a una menor calidad edilicia, son
igualmente un reflejo de la forma de vivir de la
sociedad estudiada.
Conocer si los espacios domésticos reciben
mayor o menor cantidad de luz (habitualmente medida en lúmenes [lx]), nos podrá ayudar a
confirmar o refutar ciertas funcionalidades de los
espacios o a considerar la necesidad de una iluminación artificial en determinados lugares y franjas
horarias.
2. Materiales
Para llevar a cabo estas primeras reflexiones
sobre iluminación solar en la arquitectura doméstica fenicio-púnica se utilizará un ejemplo
procedente de la provincia de Cádiz, Cerro Naranja (Jerez de la Frontera). Se trata de un yacimiento excavado entre 1984-1985 con motivo de
la construcción del circuito de velocidad de esta
localidad (González 1985; Carretero 2007). Las
investigaciones pusieron al descubierto un establecimiento rural monofásico (siglos IV-III a. C.),
aunque trabajos más recientes limitan la cronología al siglo III a. C. (Lozano 2011).
A pesar de no haberse podido excavar en su totalidad, la planimetría resultante permite plantear
cuestiones en donde el análisis lumínico puede
aportar algo de luz.
3. Metodología
Para abordar la problemática aquí expuesta se
ha recurrido al Método Estadístico de Recreación
Arqueológica, que se planteó precisamente para
1. Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES) - franciscojavierluengo@outlook.com
2. Àrea de Prehistòria, Universitat Rovira i Virgili (URV)
3. Universidad de Sevilla
210
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Fotografía aérea de Cerro Naranja,
excavación de 1985 (Mata 2009, 110).
la recreación virtual en este mismo yacimiento
(Luengo et al. 2017). De esta manera se parte de
tres pilares fundamentales, a saber:
1. Base arqueológico-etnográfica: correspondiéndose con material obtenido a partir de restos
arqueológicos o de paralelos etnográficos.
– Ejemplo: planimetrías de las propias estructuras estudiadas o fotografías de arquitecturas o
técnicas análogas que puedan aportar información.
2. Aspectos socioculturales: refiriéndose a conocimientos recogidos en textos o representaciones contemporáneas a los periodos estudiados.
– Ejemplo: referencias bíblicas sobre tipologías arquitectónicas, técnicas constructivas, usos
de los espacios, etc.
3. Aspectos arquitectónicos: definiéndose como
aquella información que se puede extraer a partir
del análisis de las estructuras estudiadas.
– Ejemplo: comprobar si un edificio, teniendo
en cuenta el grosor y el material de los muros, pudiera soportar una segunda planta.
Utilizando estos tres pilares, el siguiente paso
sería recrear el espacio de análisis a través de programas de edición tridimensional, como el utilizado en esta ocasión: Blender (figura 2).
Una vez obtenido el modelo tridimensional, el
resultado se importa a los programas de cálculo
lumínico. Como en trabajos anteriores (Luengo y
Luengo en prensa), hemos preferido utilizar para
el cálculo lumínico de luz en exterior el programa
Dialux Evo y para el de los espacios interiores el
programa Relux.
Dentro de cada programa se han delimitado
las zonas de interés, se han ubicado geográficamente y se han orientado con respecto al norte.
Tras ello se han realizado tomas de los modelos
tridimensionales según diferentes horas del día en
dos fechas concretas, 20 de junio y 21 de diciembre, coincidiendo con los solsticios de verano y de
invierno, respectivamente.
4. Resultados
Una de las cuestiones que se plantearon en la
recreación virtual del yacimiento de Cerro Naranja era la posibilidad de que el muro oeste contara
con una planta superior, basándose en el mayor
grosor de los muros concretamente en esa área.
Como vía para apoyar o desmentir en cierta medida dicha posibilidad, se propuso un análisis lumínico del patio central del establecimiento con
el fin de comprobar si la presencia de esa segunda
planta incidía de manera considerable en la luminosidad general.
Como resultado se obtuvo la siguiente imagen, donde se puede observar que la incidencia
es dimensionalmente parcial y de baja intensidad.
FIGURA 2. Recreación
virtual propuesta
de Cerro Naranja
(elaboración propia).
ESTUDIO LUMÍNICO EN LA ARQUITECTURA DOMÉSTICA FENICIA
211
FIGURA 3. Análisis lumínico comparando cielos (despejado-nublado) y fechas (21/12-20/06) a diferentes horas
(elaboración propia).
Otro de los análisis realizados se centró en las
habitaciones del muro norte, de las cuales únicamente se conocía la planta, sin especificación de
ventanas o zonas de acceso. Como primer ensayo, y partiendo siempre de accesos hipotéticos, se
planteó un modelo de planta inferior sin ventanas
y con las puertas adosadas a los extremos, aprovechando como jambas los muros perpendiculares y
evitando el debilitamiento de la estructura arquitectónica, tal y como indica Díes (1995).
Aunque la disposición de los accesos no está
confirmada, el número de posibilidades es reducido y siempre acabarían provocando este juego
entre zonas bien iluminadas y otras, en recodo,
con menor exposición a la luz natural. Si bien es
cierto que no se han tenido en cuenta posibles accesos de luz en la cubierta, podría también plantearse la circunstancia de que esas estancias de
menor luminosidad se correspondan con espacios
de almacén o de uso secundario.
5. Discusión
Sin embargo, y tal y como hemos mencionado líneas arriba, este trabajo no pretende concluir
con un uso definido de la luz para una cultura en
un periodo concreto, sino que quiere llamar la
atención sobre las posibilidades que pueden ofre-
cer las nuevas tecnologías tridimensionales aplicadas al patrimonio arqueológico, no solo como
método de representación sino como herramienta
de análisis.
Por ello, se ha de tener presente igualmente
que las exigencias a la hora de documentar los
hallazgos deben ser mayores, evitando las dificultades encontradas en yacimientos como el mencionado aquí.
6. Conclusión
Hoy en día disponemos de innumerables herramientas nuevas que podemos utilizar para
avanzar en el conocimiento del pasado. Para ello
debemos conocer no solo su funcionamiento sino
también sus necesidades. El estudio lumínico
de arquitecturas antiguas puede ofrecer nuevas
formas de responder a preguntas actuales, pero
debemos adaptar y actualizar nuestros métodos
de excavación. Asimismo, es preciso incorporar
la iluminación como uno de los aspectos fundamentales en la forma de habitar las viviendas, en
estrecha relación con el resto de las variables (tamaño de las estructuras, organización espacial/
funcional, instalaciones, etc.) y, por tanto, con importantes implicaciones culturales que solo en los
últimos años se están poniendo de relieve.
212
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. Comparación lumínica de los espacios interiores del lado norte de Cerro Naranja entre los días 20
de junio y 21 de diciembre, a las 18 h y con el cielo despejado (elaboración propia).
7. Bibliografía
CARRETERO, P. 2007: «Agricultura y Comercio Púnico-Turdetano en el Bajo Guadalquivir. El inicio
de las explotaciones oleícolas peninsulares (siglos IV-II a. C.)», en: VI Congreso Internacional
de Estudios Fenicios y Púnicos, Lisboa.
DÍES CUSÍ, E. 1995: La arquitectura fenicia de la península ibérica y su influencia en las culturas
indígenas, Universitat de València.
GONZÁLEZ RODRÍGUEZ, R. 1985: «Excavaciones de
urgencia en el Cerro Naranja (Jerez de la Frontera, Cádiz), 1985», Anuario Arqueológico de
Andalucía. III. Actividades de Urgencia, 90-96.
LOZANO RUBIO, C. 2011: «Cerro Naranja. Un estudio sobre el poblamiento rural púnico en la
campiña gaditana», trabajo fin de máster (inédito), Universidad de Sevilla.
LUENGO, J.; GARCÍA FERNÁNDEZ, F. J.; FERRER ALBELDA, E. 2017: «La reconstrucción virtual del yacimiento de Cerro Naranja (Jerez de la Frontera).
Problemas metodológicos y posibles soluciones», en: Jóvenes Investigadoras/es de la Prehistoria y Protohistoria de Andalucía, Antequera.
LUENGO, P.; LUENGO, J.: «Fotogrametría y análisis
lumínico. Interacciones en el estudio de la arquitectura barroca», en: III Congreso Internacional de Humanidades Digitales Hispánicas,
Málaga. [En prensa]
MATA ALMONTE, E. 2009: «Precedentes de los aprovechamientos hídricos en la antigüedad gaditana. El mundo turdetano», en: La captación,
los usos y la administración del agua en Baetica: estudios sobre el abastecimiento hídrico en
comunidades cívicas del Conventus Gaditanus,
Cádiz, 115-170.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
213
PROPOSTA DE RESTITUCIÓ 3D DE LA CASA 20 DEL
JACIMENT IBÈRIC EL COGULLÓ (SALLENT, BAGES,
CATALUNYA)
MARIA FRANCO LUNA1
Resum
El següent article és la presentació del resultat
del treball de fi de grau d’Arqueologia, en què la
investigació s’ha centrat en l’estudi arquitectònic i
la restitució 3D de la casa 20 del poblat ibèric del
Cogulló.
Es va pretendre establir connexions entre
l’arqueologia i les restitucions 3D, i la integració d’ambdues disciplines va resultar primordial,
així com la combinació amb l’arqueologia experimental. Les noves tècniques d’anàlisi aplicades a
l’arqueologia permeten facilitar la investigació de
certs aspectes del passat i apropar la nostra disciplina a la resta de la societat.
volupament i l’anàlisi i la definició de paràmetres
per al disseny del model.
És per tots aquests motius que es durà a terme
un treball amb rigor científic i amb veracitat històrica i arqueològica, per tal d’aconseguir uns resultats intel·ligibles i coherents amb els objectius
plantejats prèviament.
Es tractarà, per tant, d’un exercici complex,
interdisciplinari i complementari amb diverses
metodologies. Aquest procediment comportarà
com a resultat una restitució d’una casa ibèrica
i facilitarà un discurs adient per al seu estudi i la
seva difusió.
2. El jaciment: El Cogulló
1. Introducció
La investigació s’ha centrat en l’estudi arquitectònic de la casa 20 del poblat lacetà del Cogulló
(Sallent), amb la finalitat de fer una proposta de
restitució 3D d’aquest hàbitat. Ha consistit en una
recopilació de tota la documentació necessària
per comprendre i analitzar l’urbanisme i l’arquitectura d’aquest poblat ibèric. Es va analitzar tota
la bibliografia històrica i arqueològica relacionada amb el jaciment, així com els materials i les
tècniques constructives del període ibèric en el
nord-est peninsular.
En l’apartat de la descripció del procés de restitució i la restitució, es va combinar el 3D, l’arqueologia experimental i la documentació històrica i
arqueològica referent als materials i a les tècniques constructives del període ibèric.
El procés per fer la restitució 3D es va desenvolupar en una sèrie de fases interrelacionades que
van partir de la recopilació de tota la informació
necessària, la selecció de la plataforma de desen-
El poblat ibèric del Cogulló es troba al mig del
territori dels lacetans, situat a la comarca del Bages, al terme municipal de Sallent. Presenta una
llarga ocupació que abasta la major part del període ibèric (segles V-I aC) i una estructura que reuneix molts dels trets idiosincràtics en els nuclis
de poblament del món ibèric septentrional, com
ara la ubicació en alt, les condicions defensives
naturals i el domini estratègic i visual del territori
circumdant (Asensio i Sànchez 2012, 111).
Aquest jaciment està catalogat com a Bé Cultural d’Interès Nacional (BCIN) des del 1996 i està
inclòs a la Ruta dels Ibers.
En els darrers anys s’hi ha dut a terme una primera i modesta intervenció de museïtzació bàsica
per part del Museu d’Arqueologia de Catalunya,
a través de sis plafons informatius col·locats in
situ al llarg de tot el jaciment, que disposen d’illustracions del poblat. La restitució en 3D és un
pas endavant, un recurs addicional per fer més
entenedora la interpretació, la comprensió i la difusió d’aquest jaciment ibèric a la societat.
1. Universitat Oberta de Catalunya (UOC) - mfrancol@uoc.edu
214
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
(450-300 aC) (Asensio 2003, 10), i acaba al voltant
del 200 aC.
Es parteix de l’estudi en profunditat de la casa
en època ibèrica, dels materials emprats així com
de les tècniques constructives. Es considera necessari aplegar aquesta documentació prèvia a la
restitució per tal d’obtenir uns fonaments fiables
per després poder fer la proposta de restitució 3D,
la qual facilitarà el discurs pedagògic adient de
cara a la seva difusió, i també serà una eina d’estudi i d’anàlisi per als arqueòlegs i arqueòlogues.
3.1. Aplicació del 3D
FIGURA 1. Imatge aèria del jaciment. Font: pròpia.
3. Proposta de restitució 3D de la casa 20:
recull bibliogràfic i arqueològic
El recinte que s’ha escollit per dur a terme la
restitució és la casa número 20, situada a la part
central de la banda nord del poblat. El moment
escollit per plantejar la restitució va ser la Fase
Cogulló 2, segle III aC, perquè és la fase més ben
documentada i amb més restes materials trobades. El recinte 20 presenta una planta rectangular
amb unes dimensions modestes (5,2 m de llarg
i 2,5 m d’ample) i una superfície total d’uns 13
m2. Es tracta d’una casa amb una sola estança i
sense compartimentació, a la qual s’accedeix des
del carrer. La seva cronologia arrenca des del moment fundacional del jaciment, Fase Cogulló 1
Les restitucions 3D són un mitjà essencial per
promoure i donar a conèixer a la societat la nostra
feina. El programa escollit per fer la restitució ha
estat el Cinema 4D. La primera fase ha consistit
a recopilar tota la documentació existent sobre
el tema tractat (documentació bibliogràfica, fotografies, dibuixos, planimetries…), l’aixecament
tridimensional i el modelatge. La segona fase ha
consistit en la texturització. I l’última fase ha consistit a renderitzar, que és la representació final
del treball.
Per dur a terme la restitució 3D, a més d’utilitzar tota la bibliogràfica cercada, s’ha combinat
amb la informació del projecte de reconstrucció
de l’edifici 19 del Cogulló, presentat per l’empresa
MónIberRocs S.L per fer la reconstrucció in situ
a través de l’arqueologia experimental protohistòrica (Morer 2016). Una proposta de reconstrucció
que es durà a terme en els propers anys.
FIGURA 2. Restitució de la part exterior i dels elements constructius. Font: Cinema 4D.
PROPOSTA DE RESTITUCIÓ 3D DE LA CASA 20 DEL JACIMENT IBÈRIC EL COGULLÓ (SALLENT, BAGES, CATALUNYA)
3.1.1. Aplicació del 3D. Hipòtesis de restitució
de la part exterior
Per dur a terme el procés de restitució 3D s’ha
seguit l’ordre de construcció d’una casa del període ibèric, així com les tècniques i els materials
constructius. És per aquest motiu que l’esquema
següent mostra tots els elements restituïts en ordre cronològic de construcció: els fonaments i els
sòcols de pedra, els alçats dels murs, les cobertes,
les obertures i els revestiments exteriors.
3.1.2. Aplicació del 3D. Hipòtesis de restitució
de la part interior
Un cop finalitzada la restitució 3D de la part
exterior de la casa, s’ha fet la proposta d’adequació i condicionament de l’interior.
Les dades obtingudes de l’excavació del jaciment havien proporcionat informació sobre els
paviments i algunes restes de materials mobles.
És per aquest motiu que es va elaborar un estudi de l’inventari de la casa 20 per tal de restituir
virtualment els elements significatius que es van
documentar en el procés d’excavació. Atès que
l’abandó de l’assentament no va ser abrupte ni
destructiu, els habitants es van endur tot el que
tenien, deixant una ínfima part dels materials in
situ. L’ordre de la restitució ha estat la sustentació
interna, els paviments, els revestiments interiors,
la llar de foc i les escales.
3.1.3. Aplicació del 3D. Hipòtesis de restitució
dels elements mobles
A l’interior de la casa s’ha decidit restituir diversos elements per il·lustrar les activitats que hi
podien fer els seus habitants. El motiu d’aquesta
215
restitució és ambientar els elements mobles de la
cultura material ibèrica.
Els elements que s’han representat han estat
diversos: bancs i banquetes. Raconeres i prestatges, un teler de bastidor amb els pondera, una
llançadora de mà, una pinta per pentinar la llana,
un fus amb una fusaiola i un recipient amb la llana. També s’han escollit per representar un molí
rotatori i un recipient amb el cereal abans de moldre’l, així com cabassos amb pa i estores –ambdós
elements realitzats amb fibres vegetals–, sacs de
gra i mantes de llana. Els elements ceràmics restituïts han estat dues àmfores tipus pastanaga, gerretes, plats, bols i grans contenidors amb la seva
tapadora de fusta.
3.2. La il·luminació
El pas següent que s’ha fet ha estat el tractament de la il·luminació exterior i interior de la casa.
S’han presentat dos plantejaments. El primer, referent a la il·luminació natural, és a dir, quina llum
rebria la casa durant el dia, i el segon plantejament,
la il·luminació artificial, quin seria el grau de llum
que donaria una llar de foc o un braser. S’han dut
a terme diverses experimentacions amb l’entrada
de la llum natural, des de la porta i la finestra. S’hi
ha aplicat la mateixa dinàmica d’experimentació,
però generant artificialment les llums, és a dir, eliminant les llums naturals creades amb anterioritat. Per modelar la llar de foc, s’ha tingut present
que aquesta generaria una llum tènue (la llum de
les brases) i s’ha aplicat un tipus de llum amb un
punt fix per poder renderitzar i analitzar quin grau
de llum generaria aquesta estructura. S’ha recreat
FIGURA 3. Restitució
de la part interior i
dels elements mobles.
Font: Cinema 4D.
216
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. Restitució
3D de l’interior
de l’estança, amb
il·luminació natural
a través de la porta i
de la finestra. Font:
Cinema 4D.
una escena on no hi ha llum solar, una escena que
podria haver tingut lloc en qualsevol moment de la
nit, on únicament la presència de brases donaria
llum a l’estança.
Per dur a terme aquest apartat de la investigació vam emprar el cas d’estudi realitzat per la
Cristina Garcia, el qual va ser aplicat al jaciment
ibèric d’Els Estinclells (Verdú) (Garcia 2010).
comprensibles tots aquells elements que integren
l’urbanisme ibèric en tots els seus aspectes. De la
mateixa manera, el 3D ha permès experimentar
amb les hipòtesis arqueològiques en relació amb
l’arquitectura domèstica i ajudar en la funció didàctica i en la divulgació de fer comprensible la
nostra feina, així com retornar els nostres coneixements a la resta de la societat.
4. Conclusions
5. Bibliografia
En el moment de plantejar-se la realització
d’aquesta investigació, es proposaven diversos
objectius. El primer era l’estudi arquitectònic de
la casa 20 del poblat lacetà del Cogulló (Sallent),
amb la finalitat de fer una proposta de restitució 3D d’aquest hàbitat, tant de la part exterior
com interna, i poder establir connexions entre
l’arqueologia i les restitucions 3D. D’altra banda,
també es volia determinar la tipologia dels recintes i fer un estudi dels materials constructius
d’aquest període de la protohistòria mediterrània. Es consideren assolits ambdós objectius. A
través del rigor científic i la veracitat, tant històrica com arqueològica, s’ha dut a terme un treball intel·ligible i coherent, on, amb un exercici
complex i interdisciplinari de diverses metodologies, s’ha pogut elaborar un discurs adient, tant
per a l’estudi de l’assentament com per a la seva
difusió.
El 3D ha estat una manera de poder visualitzar
el que excavem, analitzem i estudiem, a més de fer
ASENSIO, D. 2003: Memòria de l’excavació arqueològica realitzada en el poblat ibèric del Cogulló
(Sallent, Bages). Campanya 2003, Arxiu del Servei d’Arqueologia i Paleontologia de la Generalitat de Catalunya.
ASENSIO, D.; SÀNCHEZ, E. 2012: «Estat de la recerca
en el nucli ibèric del Cogulló (Sallent, Bages).
Campanyes 2002-2010», a: Actes de les II Jornades d’Arqueologia de la Catalunya Central, Vic,
13-15 de desembre de 2012, Publicacions d’Arqueologia i Paleontologia, 110-118.
GARCIA DALMAU, C. N. 2010: De la complexitat a
la simplicitat. Anàlisi de l’arquitectura i l’espai
domèstic a la fortalesa ilergeta dels Estinclells
(Verdú, l’Urgell). Segle III aC, treball de final de
màster, Institut Català d’Arqueologia Clàssica,
Tarragona.
MORER, J. 2016: «Projecte de reconstrucció de la
casa 19 del poblat ibèric del Cogulló (Sallent,
Bages)», informe inèdit, Servei d’Arqueologia
i Paleontologia de la Generalitat de Catalunya.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
217
NUEVAS DIDÁCTICAS DEL PATRIMONIO: UNA APROXIMACIÓN
VIRTUAL AL CIRCO ROMANO DE TARRAGONA
IVÁN FERNÁNDEZ PINO1, KAREN FORTUNY MENDO1
1. Presentación del proyecto
Cada vez son más frecuentes las iniciativas
que emplean las nuevas tecnologías para fines
patrimoniales, especialmente en los procesos de
captación de datos y gestión de la información
virtual sobre base gráfica. Un proyecto de estas
características se ha aplicado en el circo romano
de Tarragona mediante el empleo de diferentes
sistemas de captura masiva de datos (SMCD) para
documentar el monumento y su entorno urbano;
de esta forma se abren nuevas vías de difusión y
sociabilización del conjunto, que culminan en su
integración en un serious game.
El presente trabajo se ha desarrollado en el
marco del proyecto ARREL («Aplicacions de jocs
seriosos en entorns de col·laboració per a la transmissió del patrimoni cultural de Catalunya»),
impulsado entre el Institut Català d’Arqueologia
Clàssica (ICAC) y la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) dentro de la convocatoria Recercaixa
2015. Al mismo tiempo, la realización del proyecto se inscribe en el programa de colaboración entre la Escola Tècnica Superior d’Arquitectura de
la URV (ETSA) y el ICAC, nacido en 2005, para
estudiar el patrimonio histórico del sur de Cataluña mediante sistemas de captura masiva de datos.
También se ha contado con el apoyo del Museu
d’Història del Ayuntamiento de Tarragona, que ha
permitido el acceso a los restos conservados del
recinto circense.
El proyecto de documentación del circo romano de Tarraco ha consistido en el empleo combinado de sistemas de escáner láser convencional
con la utilización del Mobile Mapping, o tecnología móvil de escaneo láser, para la elaboración
de un modelo 3D del entorno del edificio. En este
sentido, debe tenerse en cuenta la gran complejidad del registro a documentar, una gran extensión de aproximadamente 5 ha donde se solapan
restos patrimoniales de distintas fases históricas y
naturalezas muy diversas. Las características del
contexto urbano han impuesto, por lo tanto, unas
demandas técnicas muy exigentes, haciendo necesaria una intensa y sistemática labor de toma
de datos.
La creación de un serious game a partir de la documentación gráfica del circo responde a una demanda creciente de material didáctico de calidad
mediante el ocio. En efecto, las nuevas tendencias
en educación basadas en teorías constructivistas
y de aprendizaje significativo (Díaz 2003), donde
los alumnos son agentes activos en su formación,
reivindican nuevos canales de transmisión dentro y fuera de las aulas. El aprendizaje basado en
juegos es una de estas tendencias, donde se pretende involucrar al alumnado gracias a la naturaleza participativa de estas actividades (Valderrama 2015). En este sentido, proyectos como el del
circo de Tarragona abren la puerta a nuevas vías
para la docencia de disciplinas como la historia o
las ciencias sociales.
Al mismo tiempo, el empleo de técnicas innovadoras en el registro de las estructuras arqueológicas propicia la sociabilización del patrimonio a
distintos niveles. Especialmente interesantes son
las posibilidades de transferencia permanente y
actualizable del conocimiento que suponen plataformas virtuales de acceso libre como Sketchfab.
2. Contexto histórico-arqueológico
El circo de Tarragona es una construcción de
época flavia que formaba parte del gran complejo
de representación en la parte alta de la ciudad y
funcionaba como zona de transición entre la ciudad residencial y el sector monumental superior
(Fernández et al. 2017). Tras el abandono del edificio en el siglo V d. C., el área fue privatizada –con
la construcción de viviendas y talleres– hasta el fin
del período visigodo. De la ocupación de la ciudad
1. Institut Català d’Arqueologia Clàssica - ifernandez@icac.cat
218
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
en época musulmana hay pocos vestigios y no se
detectan transformaciones urbanísticas notables.
Los cambios en este sector urbano se documentan
de nuevo a partir del siglo XII, con la reocupación
cristiana, y suponen la transformación del circo
en zona suburbial ganadera y artesanal. En época
bajomedieval, el aumento demográfico provoca la
urbanización del sector y el límite meridional del
circo se convierte en la muralla sur de la ciudad.
A partir de época moderna el edificio sufre graves
afectaciones que acabarán configurando un sistema viario muy cercano al actual.
Del siglo XVIII se conservan las primeras representaciones gráficas del circo, aunque no es hasta
la década de los años 80 del siglo XX cuando se
elaboran las primeras planimetrías con carácter
científico. Los trabajos de referenciación topográfica de la zona mediante GPS supusieron un
impulso importante para el estudio de los restos
del circo (Macias et al. 2017), que fueron incluidos
en la Planimetria Arqueològica de Tarraco (Macias
et al. 2007). La celebración de un congreso monográfico sobre el circo en 2017 (López 2017) supuso asimismo un impulso para la investigación
sobre el monumento; un interés creciente que se
ve reflejado en su modelización virtual.
3. Metodología de documentación
Para el desarrollo del proyecto se ha construido un modelo tridimensional de alta precisión,
el cual permite, a su vez, generar nueva documentación arqueológica. Con tal objetivo se han
utilizado de forma combinada escaneados «po-
sicionados» o tradicionales para las partes aún
conservadas del monumento, mientras que para
el escaneo general de toda el área se ha empleado
el sistema de Mobile Mapping con una Pegasus
BackPack de Leica Geosystems (fig. 1). Con ello
se documentaron las fachadas de las casas y las
partes externas de los vestigios arqueológicos,
creando un modelo que se complementó con los
escaneos tradicionales realizados con anterioridad (fig. 2). De esta forma se crearon modelos
para el circo y la ciudad actual que se sobreponen para estudiar la interacción entre los distintos elementos, y que constituyen las bases para
el serious game.
En cuanto a los aspectos técnicos, el modelo contaba con resoluciones que oscilan entre
1 punto cada 5 cm y 1 punto cada 5 mm y que
generaron un modelo de 580 millones de puntos. La mochila se orienta con un sistema GNSS
(GPS y Glonass), reforzado por una IMU de una
deriva de 20 mm RMS cada 10 segundos, que
se activa cuando la señal GNSS es insuficiente.
Contiene dos escáneres láser en un plano de 360
grados que pueden registrar 600.000 puntos por
segundo y con un radio de alcance útil de hasta 50 m. Uno de ellos hace la lectura, mientras
que el otro es el soporte cuando el IMU se activa
para crear áreas de superposición que corrigen
las lógicas desviaciones al andar. El mecanismo
comprende además cuatro cámaras fotográficas
de 4MP que cubren un área visual de 360 x 200°,
de manera que se obtiene una imagen esférica de
todo el recorrido.
La creación y la gestión de los modelos virtuales se han trabajado con software especializado,
FIGURA 1. Escaneo del circo y su entorno mediante el Mobile Mapping (Pegasus BackPack).
NUEVAS DIDÁCTICAS DEL PATRIMONIO: UNA APROXIMACIÓN VIRTUAL AL CIRCO ROMANO DE TARRAGONA
219
FIGURA 2. Combinación de distintos sistemas de escaneo. A la izquierda, escaneo mediante Mobile Mapping; a
la derecha, escaneo mediante escaneo tradicional.
como 3DMax y AutoCAD. Para el diseño del juego
es al mismo tiempo fundamental el contenido formativo, a partir de un fondo documental elaborado por un equipo multidisciplinar de arqueólogos,
pedagogos, arquitectos e informáticos. En efecto,
la información ha sido seleccionada para idear
un hilo argumental que permita ir adentrándose
en el conocimiento del circo y su evolución histórica. Las distintas visualizaciones del modelo se
han publicado asimismo en la plataforma Sketchfab (https://skfb.ly/6qquy), creando un espacio
de transferencia del conocimiento de fácil acceso
y actualización (fig. 3).
4. Últimas reflexiones
El proyecto en el circo romano de Tarragona
supone un ejemplo de aplicación de los sistemas
de captura masiva de datos (SMCD) en la documentación de estructuras arqueológicas. En efecto, este caso ilustra la necesaria flexibilidad en el
empleo de tales herramientas, especialmente para
conjuntos de alta complejidad estructural. Así, ha
resultado fundamental la utilización del sistema
idóneo para cada contexto y la combinación de
datos provenientes de las distintas fuentes en la
gestión virtual de los modelos.
FIGURA 3. Modelo 3D del circo romano en su entorno urbano actual.
220
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Además, la creación de un serious game basado
en un riguroso trabajo de documentación arqueológica demuestra la utilidad de estos recursos en
materia de educación y difusión del patrimonio.
Precisamente por su carácter globalizador y a la
vez fácil de gestionar, actualizar y adaptar, los
proyectos de virtualización arqueológica permiten crear contenidos plurales y adaptables a distintos niveles formativos. De esta manera, el proyecto incorpora una reflexión sobre las tendencias
actuales de la museografía y la idoneidad de los
recursos de la arqueología virtual para la socialización del patrimonio.
5. Bibliografía
3FERNÁNDEZ, I.; MACIAS, J. M.; PUCHE, J. M.; SOLÀMORALES, P.; TOLDRÀ, J. M. 2017: «Metodología
de análisis del circo romano de Tarragona y
nuevos resultados», en: ROLDÁN, L.; MACIAS,
J. M.; PIZZO, A.; RODRÍGUEZ, O. (eds.), Modelos
constructivos y urbanísticos de la arquitectu-
ra de Hispania. Definición, evolución y difusión del periodo romano a la Antigüedad tardía
(MArqHis 2013-2015), 117-136.
LÓPEZ VILAR, J. 2017: Actes del 3r Congrés Internacional d’Arqueologia i Món Antic. La glòria del
circ: curses de carros i competicions circenses,
Tarraco Biennal 3, Tarragona.
MACIAS, J. M.; FIZ, I.; PIÑOL, Ll.; MIRÓ, M. T.; GUITART, J. 2007: Planimetria arqueològica de Tàrraco, Documenta, 5, Tarragona.
MACIAS, J. M.; PUCHE, J. M.; SOLÀ-MORALES, P.; TOLDRÀ, J. M.; FERNÁNDEZ, I. 2017: «Mobile Mapping and laser scanner to interrelate the city
and its heritage: The Roman Circus of Tarragona», en: AMOÊDA, R.; LIRA, S.; PINHEIRO, C. (eds.),
Rehab 2017 - Proceedings of the 3rd International Conference on Preservation, Maintenance
and Rehabilitation of Historical Buildings and
Structures, 21-28.
VALDERRAMA, B. 2015: «Los secretos de la gamificación: 10 motivos para jugar», Capital Humano,
295, 72-78.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
221
DOCUMENTACIÓN Y RECREACIÓN VIRTUAL DE LA
ARQUITECTURA DE EL CUERVO DE SEVILLA Y SU ENTORNO
DURANTE EL SIGLO XX. HERRAMIENTA DE ESTUDIO
Y DIFUSIÓN
JAVIER LUENGO1,2
Resumen
La localidad de El Cuervo de Sevilla ha sido
hasta hace poco relegada a un segundo plano en lo
que a estudios histórico-arqueológicos se refiere.
Sin embargo, desde su independencia del municipio de Lebrija en 1992, se han sucedido una serie
de trabajos que ponen de relieve la importancia de
la zona como cruce de caminos desde épocas antiguas. Aun así, y motivado por una falsa sensación
de cercanía, poco se ha ahondado en lo relativo a
época contemporánea en el entorno más inmediato, por lo que existe un importante vacío tanto en
estudio como en difusión para el siglo XX.
A partir de esta investigación se generará de
forma gráfica una visual del urbanismo de El
Cuervo de Sevilla y su entorno alrededor del siglo
XX.
Palabras clave: El Cuervo de Sevilla, arquitectura, Instituto Nacional de Colonización, choza,
recreación virtual
1. Introducción
Este estudio plantea, a través de un caso práctico, cuestionarnos sobre el grado de conocimientos que podemos obtener de un espacio arqueológico a la hora de llevar a cabo una recreación
virtual, aunque sea de un periodo muy reciente. A
menudo las recreaciones arqueológicas se centran
en cronologías tempranas en donde los registros
más directos son las excavaciones arqueológicas.
Puesto que en muchos de estos casos solo se conserva la planta y pocos alzados, la recreación de
estas suele estar a menudo menos contrastada,
basándose en evidencias etnográficas, paralelos
arquitectónicos geográficamente distantes y fuentes escritas. Ello lleva, en muchos casos, a recreaciones imprecisas y en donde la imaginación o recreación artística, más que la arqueológica, hacen
acto de presencia.
Este trabajo plantea observar, para poder comparar posteriormente, las problemáticas que se
dan cuando, en vez de recrear un yacimiento a
partir de una planta, se pretende recrear una pequeña población mucho más reciente, en donde
además de algunas planimetrías existen datos
como fotografías, fuentes orales, videos y escritos
detallados.
2. Metodología
Para llevar a cabo este trabajo se ha partido
de una documentación extensa en donde se han
recopilado fotografías antiguas (de Diego Bejarano, Benjamín Bejarano…), actuales y aéreas, cartografías antiguas y recientes, planimetrías y documentos pertenecientes al Instituto Nacional de
Colonización, hemerotecas (principalmente ABC
de Sevilla) y referencias bibliográficas o incluso
películas documentales históricas (Realidades colonizadoras en la zona de Guadalcacín, 1961; Blanco y Candón 2012; Luengo (en prensa)), así como
testimonios orales que han dado un valor extra a
las recreaciones.
Una vez llevada a cabo la documentación, se
ha procedido a la estructuración del flujo de trabajo separando en dos grandes bloques la estructura general: por un lado, la recreación específica
de ciertos edificios individuales, y por otro lado, la
recreación de una vista general de la población, a
partir del programa Blender.
1. Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES) - franciscojavierluengo@outlook.com
2. Àrea de Prehistòria, Universitat Rovira i Virgili (URV)
222
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Planimetría
elaborada por el
Instituto Nacional
de Colonización
representando el
«estado actual» en
abril de 1945.
3. Resultados y discusión
Los resultados de este trabajo pueden resumirse en dos tipos de recreaciones. Por un lado,
tendríamos las recreaciones individualizadas, que
hacen referencia a edificios singulares, como una
de las chozas tipo (figura 2), la panadería de Santa Margarita, la Casa de Postas o el proyecto de
construcción de la iglesia de San José, en donde
se proyectó una torre campanario y un claustro
abierto anexo que nunca llegaron a construirse
(figura 3).
Por otro lado, se ha llevado a cabo un tipo de
recreación virtual que aglutina todas las edificacio-
nes para poder obtener la recreación del núcleo urbano que existiría en torno a 1945 (figura 4).
4. Conclusiones
Como conclusiones finales podemos considerar que la población de El Cuervo de Sevilla tiene
un inicio como núcleo urbano anterior a 1945,
que no es fundado por el Instituto Nacional de
Colonización, pero que sí es reformado por este
en algunos aspectos.
En un segundo punto podemos destacar que,
a pesar de contar con múltiples fuentes, algunas
FIGURA 2. Recreación
virtual de uno de los
tipos de choza del
valle del Guadalquivir
y que se encontraría
en el área de El
Cuervo de Sevilla en el
siglo xx. Elaboración
propia.
DOCUMENTACIÓN Y RECREACIÓN VIRTUAL DE LA ARQUITECTURA DE EL CUERVO DE SEVILLA Y SU ENTORNO DURANTE EL SIGLO XX. HERRAMIENTA DE ESTUDIO Y DIFUSIÓN
223
FIGURA 3. Recreación
tridimensional
del proyecto de
construcción de la
iglesia de San José de
El Cuervo de Sevilla.
Elaboración propia.
FIGURA 4. Recreación
virtual de El Cuervo
de Sevilla en 1945.
Elaboración propia.
construcciones siguen planteando problemas en
su datación debido a vacíos de información, y
para ello se necesita un mayor estudio y un análisis paramental.
Otro caso reseñable es la comparación entre
las fotografías aéreas de la Serie A del conocido
como vuelo americano, que plantean situaciones
diferentes con respecto a la planimetría denominada «estado actual» elaborada por el INC, por lo
que se puede entender una no total plasmación de
las construcciones existentes en el plano o un desfase temporal entre ambas fuentes. Este aspecto
es factible, teniendo en cuenta que ambas fuentes
se mueven dentro de una horquilla temporal.
En aspectos de vegetación y de bienes muebles
son necesarios amplios estudios para poder plasmar mejor la realidad del momento estudiado.
Como ideal final consideramos que se debe
poner en valor este patrimonio, que, aunque tan
cercano al día a día, sigue sin tener protección en
muchas poblaciones, incluyendo la aquí estudiada.
5. Bibliografía
BLANCO RODRÍGUEZ, J.; CANDÓN SÁNCHEZ, S. 2012: El
Cuervo: Formación y evolución, Serigráfica Andaluza, Cádiz.
LUENGO, J.: «Arquitectura en el entorno de El Cuervo de Sevilla», en: II Jornadas de Arqueología,
Historia y Patrimonio del entorno de El Cuervo
de Sevilla, El Cuervo de Sevilla. [En prensa]
MARQUÉS DE VILLA-ALCÁZAR 1961: Realidades colonizadoras en la zona de Guadalcacín (vídeo).
SECCIÓN 10. «TODO ESTO ANTES ERA CAMPO».
ARQUEOLOGÍA RURAL, COMUNIDADES LOCALES
Y SOCIALIZACIÓN DEL BIEN COMÚN
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
227
ESTUDI ESPACIAL DEL POBLAMENT AL CURS INFERIOR
DEL RIU CORB
MONTSE BAIGES MINGUELLA1, ROSA MERCADO GUIRADO2
1. Introducció
Aquest estudi sobre el poblament al curs inferior del riu Corb i la seva empremta en el territori
se situa geogràficament a les comarques del Pla
d’Urgell, la Noguera i el Segrià, i cronològicament
s’hi inclouen les troballes arqueològiques des de la
prehistòria fins a l’inici de la baixa edat mitjana,
cercant una anàlisi sincrònica i diacrònica.
2. Context geogràfic
El curs final del riu Corb s’emmarca en la Plana
d’Urgell, dins de la Depressió Central Catalana (figura 1). És una àmplia plana que s’estén a l’est del
curs inferior del Segre, i està limitada per les serres
de Bellmunt i Almenara al nord, els Altiplans de la
Segarra a l’est i les terres altes de les Garrigues al
sud, mentre que a ponent limita amb el riu Segre,
tot i que la plana continua oberta enllaçant-se amb
la Depressió de l’Ebre (López 2000).
3. Poblament
El poblament humà d’aquest territori s’ha documentat des d’antic, deixant una regió amb un
gran nombre d’assentaments que resten per excavar i que tan sols són coneguts a partir de les
troballes superficials, tot i que en la majoria dels
casos han estat destruïts per les remocions de terres o es troben en molt mal estat de conservació.
Els jaciments s’agrupen majoritàriament als entorns del riu, i en més quantitat al marge esquerre
(figura 2).
L’inici de l’ocupació d’aquest territori es documenta amb la trobada d’un bifaç, pertanyent a
FIGURA 1. Mapa del
relleu i els recursos
hídrics al curs inferior
del riu Corb.
1. Estudiant del grau d’Història (Universitat de Lleida) - montse.baimin@gmail.com
2. Estudiant del màster d’Arqueologia Clàssica (URV-ICAC-UAB) - rosamarimercado@hotmail.com
228
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Evolució
del poblament al curs
inferior del riu Corb.
l’Axelià mitjà, a Bellvís, sense que es documentin
més indicis d’assentaments humans fins al Neolític final (Ferrer, Marí i Rovira 1992). Durant el
Neolític final - Calcolític, al III mil·lenni cal ANE,
es detecta una freqüentació de la plana, segons
les troballes de la Novella Baixa (Vila-sana) (Pita
1965) i de la Pleta (Vila-sana) (Pita 1965).
De la primera meitat del II mil·lenni es troben
la Peixera i Roques de Violau (Vilanova de la Barca), del Bronze antic i mitjà (Maya 1982), i el Tossal Camats (Vilanova de la Barca), datat al Bronze
mitjà i final (Maya 1981). Durant el Bronze final,
a partir del 1250 cal ANE, l’arribada de la cultura dels Camps d’Urnes té poc impacte a les valls
interiors de rius com el Corb, tan sols l’adopció
gradual dels rituals funeraris d’incineració i noves
formes de ceràmica acanalada. Durant el Bronze
final - I Ferro aquesta zona se circumscriu al Grup
Segre Cinca, i es documenten jaciments com el
Tossal I (Golmés) (González 1980), lo Tossal (el
Poal) i el Tossal Camats (Vilanova de la Barca)
(López 2000).
A l’edat del ferro el poblament s’estructura en
centres urbans, al voltant dels quals s’estableixen
comunitats menors no fortificades, escampades
pel territori; paral·lelament, es desenvolupa la cultura ibèrica sobre l’estructura territorial ja existent. Els jaciments d’aquest període són el Tossal
del Molinet (el Poal) (Junyent i López 2015), el
Tossal II (Golmés) (González 1981), el Tossal I
3. Carta Arqueològica.
4. Carta Arqueològica.
5. Carta Arqueològica.
(Golmés), lo Tossal (el Poal), la Vinya Vella (Térmens), lo Tossal (Térmens),3 el Tossal Camats (Vilanova de la Barca) i el Tossal Roig (Vilanova de
la Barca).4
Amb l’arribada dels romans, alguns d’aquests
jaciments desapareixen (Giral 2015), mentre que
d’altres es conserven i s’adapten a la romanització. Aquest és el cas dels Tossals II i I (Golmés),
lo Tossal (el Poal), lo Tossal (Térmens) i el Tossal
Camats (Vilanova de la Barca). En aquest context
de transformacions, els jaciments romans s’ubiquen propers als hàbitats anteriors, però desapareixen els protohistòrics, evidenciant la idoneïtat
del lloc des del punt de vista agrari o estratègic,
però amb clara intencionalitat de tallar amb les
dinàmiques precedents i més properes a la xarxa
viària (Gil et al. 2001). També hi ha assentaments
de nova creació, com el campament militar de la
Coma (el Palau d’Anglesola) (Giral 2015) i les villae del Vilot (Vila-sana) (Giral inèdit), Cantaperdius (Bellvís) (Marí, Mascort i Santmartí 1982), la
Mitjana (Vilanova de la Barca) (Pita 1958; 1968) i
la Necròpolis de les Coves (Vilanova de la Barca).5
En l’etapa de domini de Roma, els assentaments
es localitzen en llocs elevats si provenen de la romanització de poblats ibèrics, o en zones planes si
són de nova construcció. L’agricultura és extensiva i de secà, degut a la distància notable entre els
hàbitats, la gran extensió de territori a ocupar i
l’escassetat d’aigua.
ESTUDI ESPACIAL DEL POBLAMENT AL CURS INFERIOR DEL RIU CORB
229
FIGURA 3. Relació dels jaciments estudiats.
Les poques restes arqueològiques descobertes d’entre els segles IV i VII són massa minses per
aportar informació sobre el poblament al curs final del riu Corb, degut a la falta d’excavació i documentació d’aquests espais. Quan es compara el
mapa de jaciments romans amb els de cronologia
islàmica s’observa la pervivència de diversos centres agrícoles.
Durant l’època islàmica s’estableixen les bases
del poblament actual, on la ubicació dels assen-
taments (majoritàriament almúnies i unes poques alqueries) en aquesta cronologia respon a
tres realitats: el control del territori i la defensa
per part d’hàbitats situats dalt dels tossals, nuclis
propers als recursos hídrics amb cultius més intensius de productes hortícoles i nuclis propers a
vies de comunicació. Tot i l’entramat de séquies
que proporcionaven aigua a les diverses propietats i als seus cultius, aquestes terres eren més
conegudes per les seves bones pastures, ja que és
230
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. La xarxa
viària actual en
relació amb els
jaciments, per
èpoques.
un terreny bastant pobre i salinitzat. La conquesta per part dels comtes cristians d’aquest territori
no va afectar el tipus de poblament, malgrat que
es van abandonar algunes localitzacions ubicades al pla.
En època contemporània, amb la revolució
agrària i dels transports, molts d’aquests petits assentaments s’han abandonat i la població s’ha concentrat en els nuclis existents més grans (figura 3).
4. La xarxa viària
L’estudi de camins s’ha dut a terme a partir de
la xarxa viària existent a mitjans del segle XX (fotografia aèria del 1957), per evitar els canvis més
recents del paisatge com l’autovia A2 i les remocions de terra, que haurien falsejat la informació
disponible.
L’antropització del territori des de la prehistòria fins a l’actualitat ha deixat empremtes en
l’espai, des de les carrerades i camins de límit de
terme (utilitzats per al trasllat d’animals) fins als
camins més funcionals entre explotacions agrícoles, a més de les grans vies de comunicació que
unien els pobles i els diferents territoris de l’interior entre si i amb altres zones.
L’entramat de camins d’època romana s’ubica
proper a les vies actuals, encara que actualment
són petits camins. En cronologies andalusines, els
jaciments són més a prop de les vies de comunicació que permeten unir la ciutat de Lleida amb la
costa i les pastures muntanyenques del Pirineus,
i s’aprecia com les carrerades conservades tenen
assentaments andalusins al seu voltant. Al llarg
de l’edat mitjana la xarxa viària no va patir grans
modificacions, encara que és possible que la jerarquització del territori es veiés reflectida en la
preponderància d’unes vies respecte de les altres
(figura 4).
A partir del segle XVIII, la comunicació entre els
pobles i les regions es du a terme a través de les
vies més importants preservades en l’actualitat.
En canvi, la xarxa de camins secundaris actuals,
que s’hauria configurat durant les diverses èpoques d’ocupació humana d’aquest territori, permet connectar les diferents finques d’explotació
del territori. Al mateix temps, aquests camins secundaris deixen intuir possibles antigues parcellacions, però manquen intervencions arqueològiques per resoldre aquesta incògnita.
5. Conclusions
L’estudi de la zona del curs final del riu Corb
i de la seva desembocadura revela un territori
d’una intensa ocupació humana al llarg dels segles, que principalment ha seguit unes estratègies
econòmiques de caràcter agrícola i ramader.
A més, destaca molt l’escassa activitat arqueològica que s’ha dut a terme en aquest territori,
evidenciada, entre altres elements, en la pràctica nul·litat de restes paleolítiques i neolítiques,
quan se n’han documentat en zones circumdants
amb característiques ambientals molt semblants, i també en la gran disparitat de propostes
de localització d’assentaments islàmics coneguts
a través de les fonts documentals dels segles XII
i XIII.
ESTUDI ESPACIAL DEL POBLAMENT AL CURS INFERIOR DEL RIU CORB
6. Bibliografia
FERRER, M.; MARÍ, L.; ROVIRA, J. 1992: «El bifaç
amigdaloide de Bellvís (Pla d’Urgell) en el conjunt dels bifaços de Catalunya», Revista Gala,
1, 53-63.
GIL, I.; LORIENTE, A.; MORÁN, M.; PAYÀ, X.; PÉREZ ALMOGUERA, A. 2001: «De la Iltiŕta prerromana a
la Ilerda tardorromana. Nuevos datos tras dos
décadas de investigación continuada en Lérida», AEspA, 74, 161-181.
GIRAL, F. 2015: «Cartagineses y romanos en la
Ilergecia. Testimonios numismáticos», Revista
d’Arqueologia de Ponent, 25, 83-101.
– «Memòria d’intervenció arqueològica: Prospecció arqueològica. Parcel·la 33, polígon 5. Vilasana (El Pla d’Urgell)», Departament de Cultura de la Generalitat de Catalunya, Barcelona
[inèdit].
GONZÁLEZ, J. R. 1980: «Un grave problema arqueológico: la reciente destrucción de yacimientos
(El Tossal-I de Golmés)», Ilerda, 41, 113-126.
– 1981: «El Tossal II de Golmés», Ilerda, 42, 19-26.
JUNYENT, E.; LÓPEZ, J. B. 2015: «Les excavacions
dels anys 1973-1974 i 1980 al Tossal del Molinet (el Poal, Pla d’Urgell): una aldea de la pri-
231
mera edat del ferro i època ibèrica», Mascançà:
V Jornades d’Estudis sobre el Pla d’Urgell. Mollerussa, 14 d’octubre de 2014, 6, 73-98.
LÓPEZ, J. B. 2000: «L’evolució del poblament protohistòric a la plana occidental catalana. Models d’ocupació del territori i urbanisme», tesi
doctoral de la Universitat de Lleida, Lleida,
27-42.
MARÍ, L.; MASCORT, M. T.; SANTMARTÍ, J. 1982: «La
vil·la romana de Cantaperdius (Bellvís - La Noguera)», Ilerda, 43, 95-117.
MAYA, J. L. 1981: «Yacimientos de las Edades del
Bronce y Hierro en la provincia de Lérida y
zonas limítrofes», a: Miscel·lània homenatge al
professor Salvador Roca i Lletjós, Lleida, Institut d’Estudis Ilerdencs, 321-376.
– 1982: «Asentamientos al aire libre de la Edad del
Bronce en la Cataluña Occidental. Bases para
un reconocimiento de un horizonte Bronce
Antiguo-Reciente», Ilerda, 43, 153-186.
PITA, R. 1958: «Datos arqueológicos provinciales»,
Ilerda, 22, 31-76.
– 1965: «Notas arqueológicas de Cataluña y Baleares. Lérida», Ampurias, 27, 285-321.
– 1968: «Notas arqueológicas de Cataluña y Baleares. Lérida», Ampurias 30, 332-347.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
233
ARQUEOLOGIA RURAL NO ALTO ALENTEJO: O CASO DA
ERMIDA DE SÃO MAMEDE (PORTALEGRE)
GABRIEL VENTURINI DE SOUZA1, HELENA SOARES2, SUSANA PACHECO3
Entre os campos ermos do cimo da serra de
São Mamede estabeleceu-se uma ermida, do mesmo nome, de cronologia ainda incerta (presume-se do século XVI), filiada a uma ordem religiosa
ainda indefinida, possivelmente a Carmelita. É
possível especular acerca da sua filiação a partir
de uma decoração ainda bastante visível no interior do edifício que sugere a Ordem do Carmo
FIGURA 1. Estampagem do símbolo da Ordem
do Carmo no cimo da entrada da capela-mor da
ermida de São Mamede.
como o vínculo religioso do mosteiro masculino
que terá aqui funcionado em aproximadamente
uma mesma altura em que esta ordem começa a
desenvolver-se em Portugal (figura 1).
Porém, não é ainda possível determinar qual
dos ramos da mesma ocupou a ermida, se a dos
Carmelitas Calçados ou dos Carmelitas Descalços,
não se dispondo até ao momento de referências bibliográficas suficientes e exactas para a sua identificação. Tratava-se de uma ordem religiosa que
praticava a clausura e um estilo de vida modesto,
com poucos recursos, o que se enquadra e explica a
sua localização nesta área isolada da serra.
A própria construção apresenta algumas semelhanças a nível arquitectónico com outras edificações na região, datadas entre os séculos XV e
XVII. O próprio modelo de pavimento da ermida,
ainda visível, em estilo «espinha de peixe» constitui uma referência arquitectónica desta época.
A sua ocupação original encontra-se ainda desconhecida, é possível observar decorações sob o revestimento actual nas paredes da ermida, postas
a descoberto pelo desgaste natural da estrutura,
bem como algumas alterações arquitectónicas
no seu interior que terão ocorrido algures após o
século XVI (figura 2).
A partir de um projecto plurianual de trabalhos arqueológicos que pretendemos levar a cabo
neste edifício e na sua área envolvente, procurar-se-á responder ao máximo às diversas questões
que numa primeira fase de pesquisa e visita ao
sítio se têm vindo a levantar.
A localização desta ermida mostra-se bastante privilegiada, caracteriza-se primeiramente por
um amplo predomínio visual da paisagem em seu
redor. Beneficia de um relevo acidentado (localizada aproximadamente a 836 metros de altitude),
com um maciço de grande extensão (cerca de 40
quilómetros de comprimento e 10 quilómetros de
1. Instituto de Estudos Medievais (IEM), FCSH-UNL - gabrielmvsouza@hotmail.com
2. Centro de Arqueologia Caetano de Mello Beirão (CACMB) (Ourique, Beja, Portugal) / FCSH-UNL - helenapsoares@
hotmail.com
3. Fundação Robinson (Portalegre, Portugal) / FCSH-UNL - susanalfsdpacheco@hotmail.com
234
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Elementos
arquitectónicos a
descoberto sob os
revestimentos actuais
da ermida de São
Mamede.
largura) (Henriques 1990, 141). Este maciço parece ser aproveitado na construção de algumas
estruturas pétreas em redor da ermida. Serve-se
ainda de abundância de rochas metamórficas,
sobretudo de xistos, que igualmente foram utilizados na construção das referidas estruturas bem
como da própria ermida.
Regista-se uma existência de diversos recursos
naturais da própria serra, nomeadamente uma riqueza paisagística (caracterizada por uma diversidade de espécies) e hídrica (com existência de
cursos de agua) que concedem as condições ne-
cessárias à existência de solos férteis. Estas condições sugerem uma possível actividade de auto-subsistência de cultivo e uma eventual criação
de gado (Henriques 1990, 142-144; Ventura 1995,
93-136).
A execução de uma produção autóctone parece, numa primeira análise, ser igualmente indicada pela existência das várias edificações pétreas, já
indicadas (figura 3). Algumas destas construções
parecem poder ter funcionado como espaços de
pastagem e guarda de gado. Uma outra estrutura
aparenta ter sido um poço ou reservatório de ce-
FIGURA 3. Exemplo de uma estrutura pétrea, com funcionalidade ainda indeterminada, localizada junto à
ermida de São Mamede.
ARQUEOLOGIA RURAL NO ALTO ALENTEJO: O CASO DA ERMIDA DE SÃO MAMEDE (PORTALEGRE)
real em que ainda são visíveis os degraus de acesso ao mesmo, também em pedra, que actualmente se encontra totalmente entulhado por terra. De
facto, tratando-se de uma comunidade que praticava a clausura faria todo o sentido procederem à
produção de meios de subsistência, contudo estas
os propósitos destas construções encontram-se
nesta primeira fase de estudo ainda indecifradas.
A mesma interpretação inconclusiva verifica-se nas duas extensas edificações pétreas circundantes do espaço da ermida que parecem ter
funcionado como cercas conventuais. Fazem-se
também sentir interrogações em outras estruturas que aproveitaram o assentamento rochoso natural da serra em vértices das possíveis cercas, o
que transmite uma certa ideia de funcionalidade
defensiva.
Levantam-se mais questões em torno destas
últimas duas construções, não sendo possível ainda determinar quer o cariz das mesmas como as
razões das suas existências. Qual seria a necessidade de uma comunidade religiosa teria em construir duas cercas conventuais? De edificar possíveis estruturas defensivas quando a localização da
ermida por si já é naturalmente bastante protegida? São algumas perguntas às quais pretendemos
dar uma resposta mais precisa.
No que respeita à organização interna do edifício religioso, este apresenta uma fachada simples e detém três entradas. Ao centro de um longo
corredor existe o acesso à igreja (orientada para
nascente), à esquerda do mesmo (a sul) situa-se a
sacristia, destinada ao frades, uma área destinada aos romeiros e um compartimento que se presume tratar de um confessionário. À direita deste corredor (a norte) acede-se à área conventual
onde se estabeleceram as celas (quatro celas de
pequenas dimensões), um salão/refeitório, uma
cozinha, uma sala com um forno e um outro espaço com funcionalidades ainda indeterminadas
uma vez que se encontra bastante alterado mas
que se sugere tratar-se de um palheiro.
O acesso à capela-mor é feito através de um
arco de volta perfeita em estilo de mármore com
a estampagem do símbolo da Ordem do Carmo
ao centro, circundando de diversas decorações.
É possível igualmente observar um nicho central
com a imagem de São Mamede assim como um
fresco em que se verifica um medalhão com a representação de Nossa Senhora do Carmo a entregar o escapulário a São Simão Stock que aparenta
remeter-se para a segunda metade do século XVII.
A igreja é composta por uma nave e capela-mor, o altar principal é composto por alvenaria
235
FIGURA 4. Amostra do acentuado estado de
degradação da estrutura religiosa.
marmoreada e pintada, cuja ornamentação parece remontar à segunda metade do século XVIII.
Existem mais dois altares colaterais, um deles (à
direita) apresenta-se arquitectonicamente bastante alterado, enquanto o outro (à esquerda) mostra
características típicas do século XVI.
As alterações arquitectónicas realizadas na ermida ao longo dos tempos são bastante evidentes,
o elevado nível de desgaste da construção evidencia não só decorações que foram sobrepostas pelas que se observam actualmente como também
as diversas matérias-primas utilizadas nas várias
fases da sua reformulação, nomeadamente: xisto,
madeira, tijoleira, taipa e revestimento em cal.4
Com a execução deste projecto de investigação
tem-se igualmente como objectivo, dentro dos
possíveis, a formulação de planos de conservação
de fachadas estruturais do edifício que ainda permitam uma intervenção. A construção, que manteve funções de forma esporádica até ao final do
século XX e actualmente em estado devoluto, apresenta-se numa acentuada situação de decadência
causada por factores naturais e por constantes
actos de vandalismo (figura 4). Encontra-se, de
momento, sob a tutela da Igreja Católica, nomeadamente da Diocese de Portalegre e Castelo Branco, sem qualquer classificação ou abrangência de
medidas de protecção patrimonial.
4. http://www.monumentos.gov.pt/Site/APP_PagesUser/SIPA.aspx?id=22536 [Consulta: 01/04/2018].
236
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Fundamentalmente, pretende-se a reunião do
máximo de informações possíveis sobre este enigmático sítio, desde dados bibliográficos, arqueológicos e arquitectónicos. Ter-se-ão como recursos
diversas pesquisas, a realização de sondagens arqueológicas manuais no subsolo e, se possível, sondagens parietais numa perspectiva de arqueologia
da arquitectura. Para tal contar-se-á com o apoio
sempre que necessário de consultores indicados.
Procura-se entender a diacronia ocupacional deste
edifício antes que todos os dados sejam irreversivelmente perdidos pela sua rápida degradação e desta forma conceder um contributo para um melhor
entendimento da paisagem rural do Alto Alentejo.
Bibliografia
BACHAREL, L. 1992: «Clima e vegetação da Serra
de São Mamede nos séculos XVI e XVII», Revista
Cultural do Concelho de Marvão, 2, 198-207.
BALESTEROS, C.; OLIVEIRA, J. de 1996: «Inventário
dos vestígios arqueológicos do parque natural
da Serra de S. Mamede», Revista Cultural do
Concelho de Marvão, 6, 43-62.
GAMA, M.; MANTAS, H. 2002: «Mosteiro de São
Mamede / Ermida de São Mamede Portugal,
Portalegre, Portalegre, União das freguesias de
Reguengo e São Julião», SIPA, <http://www.
monumentos.gov.pt> [Consulta: 01/04/2018].
GOULART, A.; MENDES, A. C. 1991: «A lápide árabe
de S. Mamede», Revista Cultural do Concelho
de Marvão, 1, 59-66.
HENRIQUES, P. C. 1990: Parques e Reservas Naturais
de Portugal, Verbo, Lisboa.
TEIXEIRA, J. 2015: A reforma Teresiana em Portugal,
Edições Carmelo, Marco de Canaveses.
VENTURA, R. 1995: «As memórias paroquiais de
1758 do atual concelho de Portalegre», Revista
Cultural de Portalegre, 10, 93-136.
– 1996: «Algumas lendas de S. Mamede», Revista
Cultural do Concelho de Marvão, 6, 23-42.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
237
ARQUEOLOGÍA DEL PAISAJE EN EL VALLE DEL ARAGÓN
SUBORDÁN (PIRINEO ARAGONÉS). PRIMEROS RESULTADOS
Y PERSPECTIVAS DE UN PROYECTO DE LARGA DURACIÓN
JORGE CANOSA-BETÉS1, ENRIQUE MORAL DE EUSEBIO2, DAVID VACAS MADRID3,
MIKEL HERRÁN SUBIÑAS4, MAYTE MARTÍNEZ MEDINA5, ERNESTO AZADA5
1. Introducción
Desde 2014 estamos llevando a cabo, de forma intermitente, un proyecto de Arqueología del
Paisaje en la cuenca alta del río Aragón Subordán, en los municipios oscenses de Ansó y Valle de
Hecho. Situado en el Pirineo central y delimitado
por cumbres por encima de los 2.000 metros, este
territorio ha estado siempre relativamente aislado
por su orografía, de modo que observamos diferentes formas de materialidad asociadas al pastoreo de muy diferentes cronologías (fig. 1).
Tanto en zonas altas como bajas son numerosas
las cabañas y los corrales en mejor o peor estado
de conservación (fig. 2), y, de épocas más recientes,
observamos también rastro de actividad militar en
forma de búnkeres y cuarteles hoy día arruinados,
pero lo más destacado arqueológicamente han sido
tradicionalmente las diferentes formas de monumentalidad prehistórica presentes a lo largo del
valle. Así, dólmenes simples y de corredor, cistas y
círculos de piedras (también llamados crómlech o
harrespilak) dan fe del aprovechamiento y la monumentalización de estos espacios durante prácticamente toda la prehistoria tardía (fig. 3).
A lo largo del siglo XX, importantes nombres
de la arqueología aragonesa llevaron a cabo intervenciones en diferentes monumentos del valle,
pero hace más de tres décadas que no se desarrolla un programa de investigación en él y ha permanecido ajeno a todos los avances metodológicos y conceptuales traídos por la Arqueología del
Paisaje en los 90 y, durante la última década y media, la Arqueología de Alta Montaña en el Pirineo.
En el presente trabajo presentamos, de forma
muy breve, el proyecto de Arqueología del Paisaje
que estamos llevando a cabo, el trabajo realizado
hasta ahora y nuestros objetivos a medio y largo
plazo.
2. Objetivos
FIGURA 1. Área de estudio y elementos patrimoniales
presentes en ella.
En la línea de lo que se está realizando en otros
puntos de la cordillera, nuestro objetivo principal
es estudiar la presencia humana en el valle como
un proceso de larga duración continuado desde,
1. Instituto de Ciencias del Patrimonio (Incipit). Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) - jorge.canosa.
betes@gmail.com
2. Universitat Pompeu Fabra
3. Spectrum Heritage
4. University College London Qatar
5. Universidad de Jaén
238
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Estructuras
pastoriles ubicadas en
diferentes puntos del
valle.
Finalmente, como ya hemos comentado con
anterioridad, desde el Neolítico Medio-Final
hasta la era cristiana se observa un proceso de
monumentalización del valle mediante el levantamiento de diferentes tipos de monumentos
funerarios, paralelo además a una creciente antropización de los espacios altimontanos observada en toda la cordillera. Desde un punto de
vista más académico, pretendemos investigar y
generar narrativas que expliquen la génesis, la
organización y el significado de estos paisajes
monumentales para los grupos pastoriles que los
crearon y mantuvieron.
FIGURA 3. Monumentos megalíticos, relacionados
con procesos de territorialización y la ganadería, se
distribuyen estratégicamente por diferentes puntos
del valle.
3. Trabajos realizados y perspectivas de
futuro
al menos, el Mesolítico hasta nuestros días. De
este modo, contemplando todas las formas de materialidad presentes, así como la evolución de las
alteraciones humanas sobre el medio, intentaremos construir un relato histórico lo más completo
posible.
Como parte del momento histórico actual, el
abandono de las formas de vida tradicionales está
trayendo consigo un progresivo desuso de los espacios ganaderos y una creciente reforestación
que, junto con la erosión, son factores que están
afectando a la conservación del patrimonio material del valle (fig. 4). Partiendo de esto, el objetivo
fundamental a corto plazo será documentar de la
mejor manera posible todos los elementos patrimoniales del área de estudio.
Los trabajos realizados hasta la fecha (mayo de
2018) se han basado principalmente en prospectar, tanto en campo como mediante teledetección,
de cara a la identificación y documentación de
elementos patrimoniales. Como parte de este proceso, estamos llevando a cabo una catalogación
de todos los elementos que incluye la creación de
una base de datos y un sistema de información
geográfica (SIG) específicos y el modelado mediante fotogrametría de las entidades especialmente reseñables o que se encuentren más amenazadas. Considerando que las relaciones de los
monumentos megalíticos no se limitan solo al
paisaje terrestre sino también al celeste, y viendo el potencial que la Arqueoastronomía brinda a
este tipo de investigaciones, también estamos lle-
ARQUEOLOGÍA DEL PAISAJE EN EL VALLE DEL ARAGÓN SUBORDÁN (PIRINEO ARAGONÉS). PRIMEROS RESULTADOS Y PERSPECTIVAS DE UN PROYECTO DE LARGA DURACIÓN
239
FIGURA 4. La erosión
es uno de los
factores de riesgo
para los elementos
patrimoniales del
valle. De las 13
losas presentes en el
dolmen de corredor
de Las Fitas en
1935, únicamente se
conservan 5. El resto
han caído ladera
abajo.
vando a cabo mediciones arqueoastronómicas de
las cámaras dolménicas.
Las labores de prospección y documentación
no han finalizado y quedan todavía varios sectores del área de estudio por cubrir, pero, a medio y
largo plazo, contemplamos la realización de diferentes tipos de trabajos, como análisis paleoambientales que nos permitan modelar la evolución
de la cobertura vegetal, análisis espaciales me-
diante SIG, prospecciones geofísicas alrededor
de los principales monumentos, trabajo etnográfico y, por supuesto, excavaciones y sondeos que
nos sirvan para caracterizar mejor los diferentes
elementos patrimoniales del área de estudio. La
consecución de los objetivos propuestos estará
condicionada, por supuesto, a la disponibilidad
o no de medios económicos y materiales para
hacerlo.
SECCIÓN 11. ARQUEOLOGÍA, PASADO Y OCIO
CONTEMPORÁNEO: ¿CÓMO NOS RECREAMOS?
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
243
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN «ARQUEOLOGÍA, PASADO
Y OCIO CONTEMPORÁNEO: ¿CÓMO NOS RECREAMOS?»
LAIA GALLEGO VILA1, JOSU SANTAMARINA OTAOLA2, JUDITH ROMERO MARTÍNEZ3
Estas breves líneas sobre la mesa redonda «Arqueología, pasado y ocio contemporáneo: ¿cómo
nos recreamos?» deben servir, en primer lugar,
para agradecer sus aportaciones a todas y todos
aquellos que participaron en este espacio de debate de las XI Jornadas de Jóvenes en Investigación
Arqueológica. Este agradecimiento, por supuesto,
se extiende también al Comité Organizador del
evento. Una vez expuesto esto, a continuación
planteamos unas cuestiones que creemos que fueron claves en la organización, en el desarrollo y en
el posterior debate de esta mesa redonda.
Para empezar, queremos poner encima de la
mesa las complejas relaciones entre Arqueología,
socialización del conocimiento y gestión del llamado «ocio cultural». Y es que, como punto de
partida, creemos en la Arqueología como una
práctica científica necesariamente social y pública. Compartir nuestros conocimientos con la
sociedad y generar dinámicas multivocales que
hagan de este un saber colectivo no es algo accesorio, sino necesario. En este sentido, hay una
cantidad importante de profesionales en Arqueología que reflexionan y actúan en ámbitos como
la Arqueología Pública, la Arqueología en Comunidad, la Didáctica, etc. También hay que decir
que día a día se producen debates interesantes y
necesarios sobre la relación entre Arqueología y
práctica turística. Dentro del orden capitalista en
el que vivimos, la práctica turística genera grandes impactos –positivos y negativos– en la gestión
arqueológica.4 Hay quienes señalan a menudo
que debemos hablar de una «maquinaria patrimonial» que produce y consume nuestro bien común arqueológico.5 En este aspecto, mostramos
nuestra sintonía con esta cuestión, pero anuncia-
mos también que esta mesa redonda no se centró
exclusivamente en ello.
Y es que, además de la socialización del conocimiento, otro de nuestros puntos de partida
conceptuales era el del «ocio» en la sociedad contemporánea. El ocio no se limita a ser el «tiempo
libre» del que disponemos entre diferentes quehaceres. Vivimos en sociedades que construyen
grandes discursos en torno al ocio –por ejemplo,
se habla de «ocio consumista» y de «ocio responsable»–, en las que se diseñan diferentes tipos de
oferta cultural con las que alimentar y vivir ese
ocio. En este sentido, si bien se considera que el
currículum escolar es la principal vía de contacto
original de la sociedad con la práctica arqueológica y el conocimiento histórico, el ocio es otro de
los grandes medios de contacto. Los yacimientos
arqueológicos, por ejemplo, se visitan en fines de
semana y periodos estivales –alimentando así la
precarización de horarios del sector, por cierto.
Esto hace que la experiencia vital que tengamos
con la Arqueología se desarrolle en muchos casos
en estrecha relación con el ocio.6
En adición a lo anterior, hay que resaltar que
no solo el consumo de Arqueología tiene lugar en
ámbitos de ocio, sino que su producción también
se da de esta forma. Son muchas las personas que,
sin ser necesariamente profesionales, empeñan su
tiempo libre en la producción de prácticas y saberes relacionados con la socialización de la Arqueología. Aquí podemos pensar, por ejemplo, en
la vecina o el vecino que hace las veces de guía
de la iglesia medieval de su pueblo, abriendo para
ello el templo con las llaves que guarda en su casa.
Podemos pensar también en toda esa gente entusiasta, a veces ocasionando conflictos con la lega-
1. Universitat de Barcelona (UB) - laiagvila@hotmail.com
2. Universidad del País Vasco (UPV-EHU) - santamarina.josu@gmail.com
3. Investigadora independiente - judithrm92@gmail.com
4. Laurent Olivier, «Notre passé n’est pas à vendre», Complutum, vol. 24, 1, 2013, 29-39.
5. Henri-Pierre Jeudy, «Maquinaria patrimonial», Revista de Urbanismo e Arquitetura, 6 (1), 2003, 74-79.
6. Edurne Remírez, «Los tópicos creados a través de las relaciones entre la arqueología y la sociedad», Estrat Crític, 3
(5), 30-37.
244
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
lidad y/o con la ética, que recorre valles, montes y
llanuras queriendo conocer mejor el patrimonio
arqueológico. O que, como en el caso de parte de
quienes participaron en esta mesa redonda, llevan
a cabo labores de recreación histórica.
Esta mesa redonda no se planteó como un monográfico sobre la recreación histórica, pero sí
que se buscó su participación activa en el debate.
Y es que este ha sido un ámbito poco tratado por
parte de la práctica académica. La falta de profesionalización de esta expresión cultural ha jugado
en su contra, así como cierta falta de reflexividad.
A pesar de ello, las recreaciones históricas –en clave de Living History– son cada vez más una parte
importante de la oferta cultural en diferentes contextos arqueológicos.
Creemos muy necesaria una mayor reflexión
sobre la práctica de la recreación histórica. Esta
actividad, al igual que la construcción de los discursos arqueológicos en la Academia, supone la
creación de una serie de saberes y visiones sobre
el pasado. Como ya se ha señalado en algún que
otro trabajo, el recreacionismo histórico debe entenderse también como una expresión cultural
contemporánea, una plataforma de construcción
del pasado y de reproducción del presente.7 Y es
que son las dinámicas temporales, espaciales y
sociales del presente aquellas que parecen condicionar el desarrollo de las recreaciones históricas.
Esto es algo destacable también en las aportaciones que siguen a este texto. En primer lugar,
Ibercalafell (grup de recreació d’època ibèrica)
nos presenta un escenario en el que la recreación
de escenas y eventos del pasado se muestra como
una herramienta más de socialización del patrimonio arqueológico de la ciudadela ibérica de
Calafell (Tarragona). Aunque en segundo lugar,
en el apartado que sigue, «Pólvora y uniformes:
algunas reflexiones sobre el recreacionismo de la
Guerra Civil española», si bien no se profundiza
demasiado en ello, se presenta la necesidad de revisar críticamente cuáles son las bases sociales de
la recreación histórica: quién, cómo y por qué lo
hace.
Si defendemos la necesidad de conceptualizar
la recreación histórica como manifestación cultural inevitablemente contemporánea, no podemos
dejar de lado la posibilidad de que sean otros formatos actuales de ocio aquellos que nos acerquen
a la Arqueología. Se ha abordado esta cuestión
cuando, por ejemplo, se ha analizado la relación
entre Arqueología y cine o Arqueología e indus-
tria del videojuego. El fenómeno de los mercados
medievales, las olimpiadas prehistóricas y otros
eventos también forman parte de esta gran oferta
pública del pasado. Pero, además, contamos con
propuestas que nacen desde la Academia pero que
toman códigos y formas de esta industria del ocio.
Aquí es donde apelamos a la propuesta del Espai
Orígens, en la comarca de la Noguera (Lleida),
sobre la futura realización de una escape room
abierta al público. El objetivo, la socialización
efectiva de una «experiencia arqueológica», toma
un formato que está teniendo un gran éxito en los
últimos años. Y si bien en estas actas se presenta
como una propuesta todavía en ciernes, la vivencia de quienes se acerquen y se dejen atrapar por
ella será la que mejor juzgue su valor.
Llegando a este punto, podemos preguntarnos:
¿Cuál es el hilo que une las recreaciones históricas
ibéricas y de la Guerra Civil y la propuesta de una
escape room arqueológica? La respuesta es doble.
Por un lado, la voluntad de socialización es esencial en estas aportaciones: se trata de actividades
y prácticas colectivas, en las que se aprovechan
códigos vivenciales como plataforma para la difusión del saber arqueológico. Y por otro lado,
como hemos apuntado, son dispositivos experienciales en los que son esos códigos vivenciales los
que condicionan el «contacto con el pasado». La
importancia de la experiencia vital como medio
de aproximación a la Arqueología parece entroncarse, una vez más, en los lenguajes de la oferta
cultural actual: el ocio no se basa en un esquema
simple de producción-consumo de bienes, sino
que se conceptualiza como una acumulación necesariamente placentera de experiencias vitales.
Ya no viajamos, nos alimentamos y nos alojamos
sin más, sino que exigimos que la del viaje sea una
experiencia totalizadora, de autoconocimiento y
de conocimiento de algún otro. En nuestro caso,
el pasado y su construcción actual parecen ser ese
otro. La plataforma de nuestro intento de aprehendizaje es el ocio, mientras que es nuestro cuerpo el medio de expresión de ese pasado vivido, de
ese pasado recreado.
Para ir acabando, hay que decir que el debate
que tuvo lugar en la mesa redonda fue realmente interesante. Se abordaron muchas cuestiones
en las que aquí tampoco se puede profundizar
demasiado. En cualquier caso, sí que queremos
lanzar la idea de que es necesario plantear un
gran debate sobre las construcciones contemporáneas del pasado, teniendo además en cuenta
7. Pablo Alonso y David González, «Construyendo el pasado, reproduciendo el presente: identidad y arqueología en
las recreaciones históricas de indígenas contra romanos en el Noroeste de España», Revista de Dialectología y Tradiciones
Populares, 2013, vol. lxviii, 2, 305-330.
INTRODUCCIÓN A LA SESIÓN «ARQUEOLOGÍA, PASADO Y OCIO CONTEMPORÁNEO: ¿CÓMO NOS RECREAMOS?»
245
FIGURA 1. Vista de la pizarra con las principales ideas que surgieron en el debate de la mesa redonda en las IX
JIA en Tarragona (2018).
las ideas sobre el ocio que acabamos de exponer.
Junto con los riesgos de la mercantilización/privatización de los bienes comunes de la Arqueología, se añade el ya conocido de la banalización;
esto es, el del vaciamiento del sentido político de
la práctica arqueológica.8 El discurso creado sobre el pasado puede convertirse en un mero cliché, en una anécdota, que no hace sino reproducir los planteamientos y prejuicios del presente, y
que ya no sirve para transmitir conceptos, ideas
ni valores.
Un espacio aparentemente relajado como el
del ocio, en el que los estados críticos de alerta se
calman, es el caldo de cultivo ideal para la simplificación del pasado por parte del público, pero
también por parte del agente productor de verdad
histórica. Esto es algo alarmante, y solo basta con
que nos planteemos qué moldes de género estamos trasladando a las escenas del pasado desde el
presente: un pasado épico de guerreros, soldados
y líderes, con algunas mujeres, menores y personas de tercera de edad a modo de atrezo. Sin lugar para figuras disidentes frente a los arquetipos.
Además, amparándonos siempre en el «rigor» de
la reconstrucción, que alude al detalle material y/o
fáctico más que a la contextualización, la reflexión
transtemporal y el significado histórico. Abrazando así el postulado positivista de que «todo aquello que no se ha encontrado específicamente, no
se reconstruye». No se reconstruye. Se silencia.
Se invisibiliza. De esta forma, a menudo nos que-
jamos de estas visiones elitistas, machistas y etnicistas/xenófobas del pasado que se reproducen
invariablemente en novelas, películas y libros de
texto. Sin embargo, sin una adecuada deconstrucción de nuestros sesgos, seguiremos mostrando
estas visiones en nuestras construcciones sobre el
pasado. Este proceso de autocrítica requiere una
aceptación de los retos de nuestra disciplina y de
los objetivos de la difusión, además de la aceptación de todas las voces implicadas. En ese sentido,
parece que nos queda mucho por hacer.
Bibliografía
ALONSO, P.; GONZÁLEZ, D. 2013: «Construyendo el
pasado, reproduciendo el presente: identidad
y arqueología en las recreaciones históricas de
indígenas contra romanos en el Noroeste de
España», Revista de Dialectología y Tradiciones
Populares, vol. LXVIII, 2, 305-330.
JEUDY, H. P. 2003: «Maquinaria patrimonial», Revista de Urbanismo e Arquitetura, 6 (1), 74-79.
MILLÁN, R. 2015: «La desactivación de la protesta.
Arqueología, conflicto y malestar», Arkeogazte,
5, 35-49.
OLIVIER, L. 2013: «Notre passé n’est pas à vendre»,
Complutum, 24 (1), 29-39.
REMÍREZ, E. 2010: «Los tópicos creados a través de
las relaciones entre la arqueología y la sociedad», Estrat Crític, 3 (5), 30-37.
8. Rafael Millán, «La desactivación de la protesta. Arqueología, conflicto y malestar», Arkeogazte, 5, 2015, 35-49.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
247
IBERCALAFELL: GRUP DE RECREACIÓ D’ÈPOCA IBÈRICA
MARIA FRANCO LUNA1
Un equip de reconstrucció històrica és una associació de persones en què l’objectiu bàsic consisteix en la recreació històrica d’un període determinat. Aquesta finalitat s’assoleix mitjançant
el desenvolupament d’un seguit de recreacions,
simulacions o visualitzacions d’elements mobles,
panòplies militars, vestimentes i qualsevol altre
element propi d’aquell moment històric que es
vol reproduir. La seva finalitat és, en definitiva, la
divulgació de la història i, en conseqüència, l’estudi d’un passat més o menys remot. És en aquest
context que cal entendre i situar el naixement del
grup de recreació ibèrica Ibercalafell.
Ibercalafell, sota el nom d’Equip de Reconstrucció Històrica de la Ciutadella Ibèrica de Calafell, és una associació sense ànim de lucre que
es va formar al llarg de l’any 2000 amb part dels
arqueòlegs participants en el projecte d’excavació,
reconstrucció arquitectònica experimental i difusió dut a terme al jaciment ibèric d’Alorda Park de
Calafell des de l’any 1983.
La seu de l’equip està situada a Calafell, cosa
que permet gaudir i fer recreacions a l’extraor-
dinari jaciment de la Ciutadella Ibèrica de Calafell. Conjuntament amb l’Ajuntament de Calafell,
s’organitza el festival de recreació de Terra Ibèrica, que es duu a terme el mes de juliol de cada
any.
L’objectiu principal de l’equip és donar a conèixer tots els aspectes característics de la cultura ibèrica. Per difondre’ls s’organitzen activitats
i recreacions en molts jaciments ibèrics, tant a
Catalunya com en altres territoris. De la mateixa
manera, s’ha participat també en museus i festivals de reconstrucció històrica de Catalunya, Espanya, Portugal i Itàlia. Es vetlla pel coneixement,
la difusió i la protecció del patrimoni arqueològic
d’època ibèrica.
Ibercalafell crea les reconstruccions històriques a partir de diverses fonts per obtenir el rigor
històric necessari. Les fonts que s’utilitzen són
arqueològiques (objectes trobats en jaciments, ceràmica, armes, joies…) i fonts gregues i romanes
(Estrabó, Titus Livi, Apià…). La recreació històrica es duu a terme a partir de la representació d’escenes concretes i la divulgació en general, amb la
FIGURA 1. Imatge de
la Ciutadella Ibèrica
de Calafell. Font:
Ibercalafell.
1. Membre d’Ibercalafell, Equip de Reconstrucció Històrica de la Ciutadella Ibèrica de Calafell - mfrancol@uoc.edu
248
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
possibilitat d’interactuar amb el públic i que pugui manipular tot el nostre material.
El funcionament de tot l’equip es distribueix
en diverses àrees o grups d’investigació, els quals
es dediquen a cercar la informació existent i a
oferir hipòtesis a contrastar amb la pròpia experimentació i la reconstrucció experimental. Es
treballa en diverses àrees d’investigació: fonts escrites, agricultura i viticultura, armament i guerra
a l’antiguitat, ceràmica, dames, joieria i ornamentació, metal·lúrgia, música, numismàtica, teixit,
cistelleria i tints. Totes aquestes àrees d’investigació col·laboren entre si per a la realització de les
diverses activitats de l’associació, que no podria
funcionar sense altres grups de treball intern com
són els d’indumentària, comunicació audiovisual,
guions, material de promoció… En tots, la participació es troba oberta a tots els membres de
l’equip, en funció de la seva disponibilitat i el seu
interès en cada àrea.
Aquest treball amb les fonts permet recrear
fidedignament diversos personatges de l’època
ibèrica. Els més destacats són la Dama
d’Elx, el guerrer del Cerrillo Blanco de Porcuna o la parella del relleu de l’Albufereta. A més
d’aquests personatges més importants, també se’n
recreen de més quotidians, com ara dones riques i pobres, camperols, guerrers o sacerdots,
entre d’altres.
Ibercalafell desenvolupa diferents activitats de
recreació històrica, les quals li permeten un contacte directe amb el públic, amb la finalitat de fer
FIGURA 2. Recreació de la Dama d’Elx. Font: Ibercalafell.
arribar la cultura ibèrica, d’una manera amena i
entenedora, a gent de totes les edats i amb qualsevol formació acadèmica. A més a més, com que
es tracta d’un grup d’arqueòlegs, historiadors,
humanistes, etc., coneixedors del món ibèric, els
nostres membres resten a la disposició del públic
per intentar resoldre qualsevol dubte respecte a la
cultura ibèrica o el món antic.
Aquestes activitats es concreten en diverses recreacions acompanyades de les explicacions d’un
dels nostres arqueòlegs, que apropen diferents aspectes de la cultura ibèrica, i que poden ser acompanyades o no de la realització d’una petita mostra d’activitats de la vida quotidiana. Gràcies als
personatges recreats es fan les representacions.
Les recreacions són escenes de la vida dels
ibers, i actualment Ibercalafell en fa diverses. La
primera és l’intercanvi comercial entre els ibers i
els púnics. Amb aquesta recreació es pretén apropar al públic la naturalesa d’aquestes relacions,
així com tots els passos rituals que es consideraven necessaris per propiciar els tractes i garantir
la seva legalitat. Així mateix, es presenten els productes que s’intercanviaven directament entre les
poblacions iberes i els mercaders púnics al segle
IV aC.
La segona recreació és la del ritual funerari de
cremació d’un cabdill ibèric, el qual implicava la
família, les divinitats, la comunitat i el mateix difunt. En aquesta representació, Ibercalafell acosta
al públic els rituals que es duien a terme per acomiadar un cabdill guerrer i aconseguir que el seu
IBERCALAFELL: GRUP DE RECREACIÓ D’ÈPOCA IBÈRICA
249
FIGURA 3. Recreació
del ritual de cremació
d’un cabdill ibèric.
Font: Ibercalafell.
viatge a l’altre món fos propici. Es pot observar la
cremació del difunt, així com el seu enterrament,
acompanyat d’un sumptuós banquet funerari i els
rituals considerats necessaris per acomiadar el difunt i assegurar-li una bona vida a l’altre món.
La tercera recreació que duu a terme Ibercalafell és la de les desigualtats socials a partir de
les diferents cases. En el món ibèric es van arribar a desenvolupar diferents classes socials. Amb
aquesta representació, Ibercalafell procura apropar al públic les grans diferències que existien a la
vida quotidiana entre les classes socials, mostrant
un dia en la vida de dues famílies: la del noble Ultilatie i la del camperol Ortinbe.
També s’ofereixen escenes de la vida quotidiana que es poden representar en diferents moments i durant les quals el públic pot ser acompanyat amb visites guiades, fetes pels mateixos
membres del grup, on poden gaudir i fins i tot
participar d’algunes d’aquestes activitats: la mol-
ta de cereals, la construcció de tovots, l’entrenament dels guerrers o el cosit d’objectes de cuir,
entre d’altres.
La interacció amb el públic fa possible emfatitzar els trets característics d’aquesta cultura i fer-la
arribar a les persones no especialitzades, així com
aprendre tant a través de les visites com de la interacció amb els diversos personatges recreats, fent
activitats de la vida quotidiana, utilitzant les armes dels guerrers… Des de l’equip es pretén donar
a conèixer tots els aspectes propis de la cultura
ibèrica, així com generar noves investigacions en
diversos temes, com per exemple posar més èmfasi en el paper de la dona ibèrica.
Una oportunitat meravellosa de poder veure
en directe les nostres recreacions és al festival de
Terra Ibèrica que es duu a terme a la Ciutadella
Ibèrica de Calafell el darrer cap de setmana del
mes de juliol. Durant tot el festival s’ofereixen exposicions, visites guiades, tallers i poblat en viu.
FIGURA 4. Recreació de les desigualtats socials a partir de les diferents cases. Font: Ibercalafell.
250
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
La reconstrucció històrica és una forma de fer
divulgació i que aquesta arribi a un ampli ventall
de gent. Ibercalafell fa divulgació històrica utilitzant fonts amb rigor científic. A través d’articles
científics i didàctics, congressos d’arqueologia,
entrevistes, exposicions i les xarxes socials es divulga tot el coneixement assolit sobre el món ibèric des de fa gairebé vint anys.
Per acabar i a manera de conclusió, cal posar
de manifest que el grup de recreació històrica
Ibercalafell és una eina d’investigació científica
i de divulgació didàctica, i també un element
atractiu per al públic en general i amb un gran
potencial turístic. És l’únic equip de reconstrucció d’època ibèrica a Catalunya, per la qual cosa
és rellevant la tasca que l’equip duu a terme respecte a la difusió i divulgació d’aquest període
del nostre passat i que tan sovint és oblidat. Tots
aquests motius doten Ibercalafell d’un caràcter
diferenciador.
Moltes són les inquietuds en diversos temes
d’investigació de totes les persones que formen
part d’Ibercalafell, i gràcies a totes aquestes inquietuds es continua, després de gairebé vint anys,
investigant, difonent i divulgant una cultura meravellosa.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
251
PÓLVORA Y UNIFORMES: ALGUNAS REFLEXIONES SOBRE
EL RECREACIONISMO DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA
JOSU SANTAMARINA OTAOLA1, XABIER HERRERO ACOSTA2
A continuación presentamos algunas reflexiones sobre el recreacionismo de la Guerra Civil
española, una actividad en auge en los últimos
años y que cada vez más parece estar en el foco
de diferentes actos de divulgación histórica,
puesta en valor arqueológica y hasta en producciones audiovisuales. A pesar de ello, el debate
abierto sobre este ámbito es escaso. Además, los
nexos entre actividad recreadora y agenda académica son débiles y en algunos casos inexistentes. Por esta razón, la propia consulta de fuentes
«científicamente avaladas» es algo muy difícil en
este campo, en la medida en que se ha generado
muy poca bibliografía al respecto, al menos en
el Estado español. En muchos casos, la información que se presenta a continuación ha sido recogida a través de la experiencia vital de quienes
escriben el texto. Las siguientes líneas apuntan
a diferentes dimensiones de la cuestión que tal
vez puedan resultar útiles para un futuro análisis
más detallado.
1. Temporalidad
Una primera dimensión es la de la temporalidad de este fenómeno. Por un lado, nos centramos
en la dimensión temporal de lo recreado, en este
caso la Guerra Civil española (1936-1939). El interés que despierta este proceso histórico parece deberse a múltiples factores, que en este breve espacio no podemos analizar pero que debemos tomar
en cuenta. Para empezar, la Guerra Civil, como
macroevento, fue un punto de inflexión decisivo
en la historia contemporánea del Estado español.
Significó un trágico cambio de régimen político.
Pero, además, fue mucho más que eso: un macroevento humano en el que la performatividad
de la violencia física, directa, jugó un papel determinante en las vidas de las personas implicadas.
La guerra fue también recordada y exaltada
durante la dictadura de Franco como gran acto
fundacional, «purificador» y «necesario», para la
construcción de la Nueva España. El otro gran
proceso político posterior –en un sentido convencional y canónico–, la Transición española, también se desarrolló bajo los parámetros concretos
del recuerdo de este hecho. Fue así hasta el punto
de que el propio desarrollo de reforma política se
llevó a cabo siempre invocando la espectralidad de
la Guerra Civil: la eventual vuelta de la hostilidad
abierta, el miedo a la involución y al «exceso», etc.
De esta forma, no resulta extraño que la Guerra Civil sea un proceso ampliamente recordado
y muy presente en la vida colectiva actual. La espectralidad traumática de su recuerdo, en ocasiones, parece haberse atemperado, al menos en el
caso del recreacionismo histórico. Es posible que
la cada vez mayor difusión del recreacionismo de
la Segunda Guerra Mundial en diversos países
de Europa también haya jugado su papel en esta
aparente «normalización» del hecho de recrear la
guerra.3
En cualquier caso, no fue hasta el cambio de
siglo cuando se constituyeron los primeros grupos de recreación de la Guerra Civil. Según la
principal fuente al respecto, un artículo de 2008
del recreador Eloy Carbó, el primer grupo oficialmente constituido fue la Asociación de Recreación Histórica Línea XYZ en Valencia, en el año
2000.4 Durante unos años funcionó la Coordinadora ¡Ay, Carmela!, en la que convergían el grupo
Línea XYZ, Frente de Madrid, Ejército del Ebro y
el Batallón Palacios. Sin embargo, aquella coordinadora dejó de funcionar. Y si en un principio
había muy pocos grupos, cierta tendencia a la
1. Universidad del País Vasco (UPV-EHU) - santamarina.josu@gmail.com
2. Investigador independiente - xabier.herrero90@gmail.com
3. Xabier Herrero y Xurxo Ayán, «De las trincheras al museo: sobre el reciente proceso de patrimonialización de la Guerra Civil española en Euskadi», en I. Arrieta (ed.), Lugares de memoria traumática, 2016, 117-118.
4. Eloy Carbó, «¿Para qué recrear la guerra?», Ebre, 38 (3), 2008, 201.
252
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
2. Espacialidad
FIGURA 1. Tabla: Grupos de recreación histórica de
la Guerra Civil española (2018).
atomización ha hecho que actualmente hayamos
contado unas dieciocho agrupaciones.
En cuanto a las motivaciones del recreacionismo de la Guerra Civil, estas parecen ser más o
menos constantes en el tiempo y apuntan en tres
direcciones: por divulgación histórica, por el desarrollo de actividades lúdicas de ocio y tiempo libre y, por último, por militancia política, es decir,
por cierto compromiso con la llamada «memoria
histórica». Sea cual sea la motivación de quienes
recrean, lo cierto es que la visibilidad de esta manifestación contemporánea es cada vez mayor.5
En muchas localidades se organizan anualmente diferentes eventos de recreación de la Guerra Civil, en la mayor parte de los casos, en clave
de reconstrucciones de batallas y otros episodios
violentos. Hay algunos eventos de este tipo que
congregan a un número considerable de grupos
e individuos entusiastas. La principal «quedada»
del recreacionismo de la Guerra Civil parece seguir teniendo lugar en Fayón (Zaragoza), con el
objeto de recrear diferentes eventos de la batalla
del Ebro. El día grande suele ser el paso del río
por parte del bando republicano, el 25 de julio,
y hay que decir que en algunas ediciones se ha
contado incluso con aviación real y originaria de
la época.
En el ámbito de la recreación histórica de la
Guerra Civil se ofertan diferentes tipos de actividad. Además de la recreación de batallas concretas, también se utilizan emplazamientos arqueológicos para así escenificar «trincheras vivientes»
o para ofrecer simplemente un display a los y las
visitantes. En estos últimos casos, suele ser habitual que un miembro del grupo ofrezca un discurso histórico con el que contextualizar los hechos
y exponer la materialidad que porta –vestuario,
armamento, simbología política, entorno construido, etc.
Los grupos de recreación también ofrecen otro
tipo de actividades, y una de las más llamativas
recientemente es la de la figuración en homenajes
más o menos oficiales. En la Comunidad Autónoma Vasca y en Catalunya cada vez es más habitual
que un grupo de recreadores escenifique un cuerpo de guardia en una conmemoración. El caso
más reciente del que nos hacemos eco aquí es el
de la inauguración del Monumento a los gudaris
de Gernika (Bizkaia), el 28 de abril de 2018, en
el que un grupo de recreadores formó solemnemente junto a varios representantes del Gobierno
Vasco. Ha habido actos en los que las autoridades
políticas han «pasado revista» a estas fuerzas en
escena. Los significados posibles de estos actos
solemnes con representantes reales y fuerzas armadas de ficción todavía no han sido suficientemente analizados.
3. Materialidad
Una parte esencial del recreacionismo de la
Guerra Civil –y de cualquier otra época– es la cultura material. Este es el dispositivo principal que
consigue establecer el puente entre pasado y presente que se pretende con la recreación. La búsqueda de vestuario, armamento y otros objetos
de la época es una parte esencial de la actividad
recreadora.
La principal fuente de información a este respecto es la fotografía. El visionado de fotografías
de las fuerzas de combate suele ser el ejercicio que
sirve de apoyo para la búsqueda del atrezo. Además, estos grupos suelen utilizar profusamente la
fotografía como medio de expresión en las recreaciones. Es habitual ver cómo se intenta recrear
instantáneas concretas, siguiendo además las actitudes corporales de quienes salen en las imáge-
5. Jordi CORTADELLA, «Los grupos de recreación histórica (historical re-enactment)», en J. VIDAL y B. ANTELA (eds.), La
guerra en la Antigüedad desde el presente, Libros Pórtico, Zaragoza, 2011, 91-139.
PÓLVORA Y UNIFORMES: ALGUNAS REFLEXIONES SOBRE EL RECREACIONISMO DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA
nes antiguas. También es común el uso de filtros
sepia o en blanco y negro para así dar una mayor
sensación de veracidad a la imagen.
En cualquier caso, si pensamos en la cultura
material del recreacionismo de la Guerra Civil,
hay una pregunta que se nos puede venir a la mente: ¿cómo se produce? ¿Cuál es el origen de los
uniformes, del armamento, de las insignias, etc.?
Aquí es donde entran los circuitos del coleccionismo. La Guerra Civil, como hemos dicho, fue un
macroevento histórico de una envergadura enorme y considerablemente reciente en el tiempo. Así
es como en muchos hogares se conservan fotografías, textos y objetos de la época. Algunos de estos son puestos en venta en Internet o se integran
en las redes de coleccionismo mediante ferias y
encuentros de objetos de antiguos, de militaria
y otros. Quien eche un vistazo por portales web,
como todocoleccion.com o similares, enseguida se
encontrará con la compraventa masiva de objetos
y documentos de las décadas de 1930 y 1940.
Sin embargo, no todos los objetos en venta
en Internet proceden de colecciones particulares
que a su vez engrosan las nuevas colecciones de
recreacionistas de diverso tipo. En ocasiones, la
práctica del detectorismo, esto es, de la detección
y excavación furtiva de objetos arqueológicos, se
encuentra en cierto modo relacionada con nuestro
ámbito.6 Si bien la mayor parte de los objetos en
el subsuelo suelen encontrarse en un estado precario de conservación, hay quienes prefieren este
punto de «verdad» en sus reconstrucciones. El
hecho de que en muchos lugares el paisaje construido de la Guerra Civil no sea considerado patrimonio arqueológico redunda en la continuidad
de estas prácticas, sin que la Administración tome
medidas al respecto. Hay que subrayar también
que no se trata de que detectorismo y recreacionismo deban estar necesariamente unidos. Solo
es cuestión de valorar la relación entre diferentes
formas de coleccionismo, esto es, de conocimiento y acumulación privada de objetos con un determinado valor histórico.
4. Sociabilidad
Por último, en cuanto a las formas de sociabilidad en el ámbito del recreacionismo histórico de
la Guerra Civil, la necesidad de un análisis más
profundo que el que aquí se expone es notable. En
apenas unas pocas líneas simplemente queremos
llamar la atención sobre dos aspectos.
253
En primer lugar, los principales lazos afectivos
que suelen unir a los miembros de un grupo de
recreación suelen ser de amistad. La idea de camaradería y compañerismo suele ser invocada a
menudo para así conseguir una experiencia más
cercana a la fraternidad de trinchera. Al fin y al
cabo, los grupos de recreación son proyectos colectivos de expresión cultural contemporánea y la
forja de una identidad común es necesaria.
En segundo lugar, la media de edad en el recreacionismo, por lo que hemos observado en diferentes eventos, suele ser de entre 35 y 50 años.
La inmensa mayoría de participantes son hombres. Por lo general, no suele haber restricciones
específicas al acceso de mujeres, pero sí se aprecia
la práctica habitual de destinar a éstas otras labores. En este sentido, estamos hablando de que,
salvo el papel de unas pocas milicianas, las mujeres suelen ser relegadas a ejercer de enfermeras
en los campamentos y hospitales de campaña. La
propia sociabilidad «fraternal» que hemos mencionado parece estar relacionada también con
esta escasa presencia de mujeres: la homosociabilidad tiende a ser la norma, actuando de algo
similar a un «currículum oculto» en las recreaciones. De cualquier modo, en muchos casos estas
decisiones se hacen basándose en la justificación
del «rigor histórico» –«no había mujeres luchando en la batalla del Ebro»–; sin embargo, hay que
hacer notar que, siguiendo el dato de la media de
edad de 35-50 años, parece que el rigor puede ser
sacrificado en algunos casos, al menos cuando
lo es a manos de los hombres de la recreación.
«Tampoco había (tantos) cuarentones luchando
en la batalla del Ebro».
5. Ideas finales
El hecho de que la guerra haya sido uno de los
más decisivos puntos de inflexión en nuestra historia reciente hace que necesariamente muchas
formas de expresión cultural la tomen como eje.
De la misma forma que las expresiones artísticas
sobre la Guerra Civil son incontables –pintura,
cine, poesía, fotografía, teatro, cómic, etc.–, la representación de hechos históricos ha encontrado
también en la Guerra del 36 uno de sus filones.
Además, diversos paisajes del Estado español
cuentan con hitos singulares del conflicto –trincheras, nidos de ametralladora, refugios antiaéreos, etc.– que, si bien en muchos casos no son
considerados patrimonio arqueológico, reciben la
6. Jaime ALMANSA, «Encontrar tesoros y hacer amigos. Detectores y Arqueología en los medios», CPAG, 25, 2015, 167-185.
254
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
y reproducción del presente».7 Por ello, podemos
aventurarnos en apuntar que son las formas contemporáneas de sociabilidad y de comprensión de
la «oferta cultural» aquellas que condicionan realmente el desarrollo del recreacionismo histórico.
De esta forma, las ventanas al pasado que pretenden ser las recreaciones de la Guerra Civil parecen
ser también espejos del presente en los que deberíamos mirarnos más a menudo.
6. Bibliografía
FIGURA 2. Recreación de la batalla de los Intxortas
en 2015, en Elgeta (Gipuzkoa).
atención de los grupos de recreación como buenos atrezos para sus escenificaciones.
La búsqueda de rigor, un mantra en el discurso
de muchos recreadores, se consigue también a través de un coleccionismo experto. La compraventa de objetos históricos de la Guerra Civil está a la
orden del día, y las concentraciones, eventos casi
festivos que se desarrollan periódicamente, son
buenos escaparates para su lucimiento. Y es que,
junto con la fraternidad de trincheras que hemos
mencionado, también hay lugar para los prestigios
personales y el establecimiento de jerarquías internas. Además, hay que señalar las profundas desigualdades de género que se aprecian en las recreaciones históricas. Aunque estas son justificadas en
favor del «rigor», parece que se comprenden mejor bajo el esquema de «construcción del pasado
ALMANSA, J. 2015: «Encontrar tesoros y hacer amigos. Detectores y Arqueología en los medios»,
CPAG, 25, 167-185.
ALONSO, P.; GONZÁLEZ, D. 2013: «Construyendo el
pasado, reproduciendo el presente: identidad
y arqueología en las recreaciones históricas de
indígenas contra romanos en el Noroeste de
España», Revista de Dialectología y Tradiciones
Populares, LXVIII (2), 305-330.
CARBÓ, E. 2008: «¿Para qué recrear la guerra?»,
Ebre, 38 (3), 199-208.
CORTADELLA, J. 2011: «Los grupos de recreación histórica (historical re-enactment)», en: VIDAL, J.;
ANTELA, B. (eds.), La guerra en la Antigüedad desde el presente, Libros Pórtico, Zaragoza, 91-139.
HERRERO, X.; AYÁN, X. 2016: «De las trincheras al
museo: sobre el reciente proceso de patrimonialización de la Guerra Civil española en Euskadi», en: ARRIETA, I. (ed.), Lugares de memoria
traumática, UPV-EHU, Bilbao, 99-122.
7. Pablo ALONSO y David GONZÁLEZ, «Construyendo el pasado, reproduciendo el presente: identidad y arqueología en
las recreaciones históricas de indígenas contra romanos en el Noroeste de España», Revista de Dialectología y Tradiciones
Populares, LXVIII (2), 2013, 305-330.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
255
ENTRE EL RIGOR I L’ENTRETENIMENT: DIVULGANT
L’ARQUEOLOGIA AMB UN ESCAPE ROOM
LAURA PINTO FONT1, JEZABEL PIZARRO BARBERÁ2
Resum
Per a tots aquells i aquelles que ens dediquem
a la divulgació en arqueologia, l’objectiu és dur a
terme una difusió rigorosa i de qualitat, però que
alhora arribi a un conjunt de població tan ampli
com sigui possible. Aquesta tasca, però, sovint no
resulta fàcil: si bé és relativament senzill atraure un públic consumidor de l’etiquetat com a
«oci cultural», resulta més complicat fer-ho amb
aquells sectors de la població que en primera instància no semblen interessats en el que oferim. En
aquest context, cal buscar noves vies per connectar amb un públic al qual sovint ens costa arribar.
Partint d’aquesta base, des d’Espai Orígens hem
ideat un escape room per completar la nostra oferta d’activitats.
Paraules clau: difusió arqueologia, públic general, oci cultural, joc d’escapament, escape room
1. Espai Orígens: divulgant el patrimoni a
la comarca de la Noguera
Espai Orígens és un centre dedicat a la dinamització cultural del territori de la zona del
Mont-roig (Camarasa, Lleida). El centre es dedica
a la difusió i divulgació del patrimoni històric i
natural des d’un vessant educatiu, lúdic i turístic,
dirigida a tot tipus de públic. D’aquesta manera,
es fan diferents tipus d’activitats –visites guiades,
exposicions, tallers, rutes i jocs– amb una àmplia
oferta que, en l’actualitat, compta amb més d’una
vintena de propostes adreçades tant a escoles com
a particulars, i que pretén donar resposta a les necessitats i els interessos dels diferents perfils de
públic.3
Malgrat aquesta gran varietat d’activitats, la
realitat que constatem a Espai Orígens és que
aquesta oferta no és suficient. Si intentem caracteritzar el públic usuari de les nostres activitats,
ràpidament podem detectar tres tipologies que
esdevenen majoritàries: centres escolars, públic
familiar (adults acompanyats dels fills) i el que
podríem anomenar un públic «interessat» (persones provinents de poblacions properes o bé aficionades a la prehistòria i l’arqueologia que ja estan interessades en les activitats que oferim). Així
doncs, el que detectem és que hi ha un gran sector
de la població que constitueix el que hem anomenat «públic absent»: grups d’amics, gent jove i, en
definitiva, totes aquelles persones que a priori no
tenen interès en el que oferim.
Detectada aquesta realitat, el que cal és preguntar-se el perquè d’aquest «públic absent». Des
del nostre punt de vista, un dels motius és que les
nostres activitats estan etiquetades com a experiències culturals; i és que, malauradament, hem
d’acceptar que el concepte «cultural», referit al
turisme i l’oci, sovint crea rebuig entre amplis
sectors de la població, que ho relacionen amb
quelcom avorrit, poc entretingut, que no els interessarà o que no té res a veure amb les seves
inquietuds.
2. Atraure el públic absent: el projecte «Escape Orígens»
La qüestió que se’ns planteja, doncs, és com
canviar aquesta situació. En aquest sentit, és important que des de l’àmbit de la divulgació en arqueologia ens actualitzem i estiguem al dia de les
noves formes d’oci per poder oferir a la societat
productes i activitats que responguin als seus interessos. I és d’aquesta premissa d’on sorgí la idea
de desenvolupar una activitat tipus joc d’escapament a Espai Orígens.
1. Centre d’Estudis del Patrimoni Arqueològic de la Prehistòria (CEPAP-UAB) - laurapintof@e-campus.uab.es
2. Associació Recerca i Difusió del Patrimoni - jezabel.pizarro.b@gmail.com
3. Es pot consultar l’oferta d’activitats a www.espaiorigens.es.
256
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Més coneguda pel seu nom en anglès, escape
room, aquesta activitat consisteix en un joc en el
qual un grup de persones són tancades voluntàriament en una habitació de la qual han d’aconseguir
escapar en un temps determinat mitjançant una
sèrie de pistes i enigmes.
Un cop analitzades les seves potencialitats,
vam adonar-nos que els punts forts del projecte
eren diversos: és una activitat que està de moda i
a més resulta molt atractiva per la seva alta dosi
de diversió i entreteniment, hi ha poca oferta a la
província de Lleida i, a més, consideràvem que era
una proposta innovadora en el camp de la divulgació en arqueologia. I és que, si bé a priori aquest
tipus d’activitat no té cap més pretensió que l’entreteniment, nosaltres volíem anar més enllà i utilitzar-la amb una clara finalitat divulgadora: des
del nostre punt de vista, qualsevol context pot ser
vàlid per a la divulgació de l’arqueologia sempre
que aquesta tasca es faci amb rigor.
3. Entreteniment i rigor: un binomi possible?
Aquesta és la pregunta que se’ns plantejava en
iniciar el nostre projecte: podríem mantenir el rigor en una proposta tan lúdica i amb una tan alta
dosi de diversió i entreteniment? Nosaltres pensàvem que sí, i que la clau per aconseguir-ho seria
treballar a fons i cuidar els detalls en els tres pilars
del joc: l’escenari, la història i les pistes i enigmes.
Pel que fa a l’escenari, per a nosaltres era evident: un laboratori d’arqueologia. Així aconseguíem submergir els participants en un context arqueològic i, a més, donar a conèixer la cara oculta
del treball arqueològic, allò que passa després del
jaciment.
Dins aquest escenari, les pistes i els enigmes
que van donant forma a la seqüència de joc no podien ser altres que les diferents tasques multidisciplinàries que els arqueòlegs i les arqueòlogues
realitzem en el nostre dia a dia: rentar materials,
identificar restes paleoantropològiques o localitzar matèries primeres en un mapa geològic en són
alguns exemples. En definitiva, es tracta de permetre als participants tocar i manipular les eines
i el material arqueològic.
Finalment, la història, el tercer element i el que
probablement va ser el més complicat de teixir:
com crear emoció i intriga en un escape room d’arqueologia sense recórrer a malediccions de faraons, piràmides que s’ensorren o cerques de tresors
a l’estil d’Indiana Jones? L’arqueologia d’urgència
ens va donar la solució: amb ella aconseguíem
aquesta necessitat de treballar a contrarellotge i
afrontar la missió de protegir un jaciment abans
que fos destruït. Ja teníem, doncs, una missió a
complir en un temps límit. La resta de la història?
Com en tot bon joc d’escapament, ho deixarem
com una incògnita.
4. Conclusió
Des del nostre punt de vista, podem dir que el
projecte Escape Orígens compleix amb tots els objectius que ens havíem plantejat: ampliar la nostra
oferta per arribar a un públic que fins ara no aconseguíem atraure; continuar amb la nostra tasca divulgadora fent entrar en contacte els participants
amb una arqueologia real, allunyada de preconceptes i tòpics erronis; i fer una activitat innovadora,
experimentant amb nous formats de divulgació
però sense perdre el rigor ni la qualitat cientificoeducativa que caracteritza la nostra oferta.
En conclusió, creiem que la combinació entre oci (entès en el seu vessant més lúdic, com
a entreteniment i diversió) i divulgació pot ser
molt enriquidora, i que és una molt bona manera
d’atraure un públic que sol ser reticent a allò que
tingui a veure amb una proposta cultural. Pensem
que el projecte presentat en aquestes línies aconsegueix aquesta combinació, que creiem que pot
donar molt bons fruits. Esperem que els resultats
així ho confirmin.
5. Bibliografia
CLARE, A. 2015: Escape the Game: How to Make
Puzzle and Escape Rooms, Toronto, Wero Creative Press.
GONZÁLEZ MARCÉN, P.; MASRIERA, C.; NEVADO, A.;
VEGA, S.; PIZARRO, J.; PINTO, L. (en premsa):
«Espai Orígens: difusión y divulgación del patrimonio en el ámbito del turismo cultural y
familiar», Butlletí de la Reial Societat Arqueològica Tarraconense.
SECCIÓN 12. COMUNIDADE E PATRIMONIO: UNHA NOVA
MANIFESTACIÓN DAS SOCIEDADES EN CAMBIO
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
259
UNA NUEVA POLÍTICA EUROPEA SOBRE EL PATRIMONIO:
DESARROLLO SOSTENIBLE Y LA GOBERNANZA
PARTICIPATIVA
ROBERT GOMES SANTANA1, ÁLVARO FRANCO MONTESDEOCA1
1. Introducción y objetivos
Este trabajo se enmarca en una corriente llamada estudios críticos del patrimonio. En él asumiremos que existe un discurso patrimonial autorizado, que proviene tanto de la comunidad
científica como de cualquier institución relacionada con la gestión o concepción del patrimonio.
Partiendo de esta base plantearemos una hipótesis clara: la política patrimonial está cambiando
en el ámbito europeo.
2. Estado de la cuestión
Cada día los diversos profesionales que trabajamos con el patrimonio nos encontramos con una
realidad que condiciona nuestro trabajo; esto es, lo
que algunos autores han llamado el «discurso patrimonial autorizado». Referido a ello desde la arqueología, la historia, el turismo o la arquitectura,
entre otras profesiones, nos vemos influenciados o
ceñidos a este discurso. Este puede proceder desde las instituciones, pero también desde la propia
comunidad científica. Por tanto, se hace necesaria
una reflexión profunda sobre esta cuestión, ya que
vertebra todo nuestro trabajo como profesionales
del patrimonio.
Pero, ¿qué es el discurso patrimonial autorizado? Smith (2011) plantea una serie de cuestiones
sobre su definición, pero la principal idea lo esboza como el discurso que se desarrolló en Europa
occidental en el siglo XIX, tras el debate entre los
arqueólogos y los arquitectos sobre la protección
de la cultura material.
Es interesante nombrar los estudios críticos
del patrimonio. En ellos se apunta a un cambio
dentro del discurso patrimonial. A colación de
esto, Sánchez-Carretero (2012) aborda el tema,
donde señala una ruptura en las cuestiones patri-
moniales. La primera de estas cree que se da en
la traducción de conceptos entre áreas de conocimiento. En ella se bifurca la cuestión en el patrimonio como una construcción social, mientras
que para otros solo prima la objetualización del
patrimonio.
3. Selección de textos y conceptos claves
Los textos que se ha decidido trabajar son un
total de seis (véase bibliografía). De estos, tenemos que tres son leyes y los otros tres son, por una
parte, dos conclusiones del Consejo de la Unión
Europa y, el otro, una resolución del Parlamento
Europeo. Estos textos poseen una naturaleza diferenciada: las leyes deben cumplirse de manera
imperativa, mientras que las recomendaciones no
conllevan ninguna obligación.
En lo referido a la selección de conceptos, se
ha realizado una lectura profunda de los diversos documentos. Tras esto se han seleccionado
una serie de conceptos, que entendemos que son
importantes, en lo que hemos llamado «discurso
patrimonial autorizado». Estos son: desarrollo,
desarrollo sostenible, sostenible, gobernanza, gobernanza participativa, participación, valor, valor
económico, turismo y turismo sostenible. Por último, se ha realizado un análisis pormenorizado
de los mismos.
4. Metodología
La principal herramienta a la hora de elaborar
este trabajo ha sido el análisis del discurso. La razón de esta elección es que en esta investigación
buscamos ver los conceptos claves del discurso
patrimonial autorizado, y para ello necesitamos
una herramienta que nos permita localizarlos.
1. Universidad de Santiago de Compostela / Universidad de Las Palmas de Gran Canaria - gomes.santana.rob@gmail.com
260
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
El análisis del discurso es un campo de trabajo compuesto por diversas disciplinas. Este surgió
principalmente de mano de la lingüística, pero más
adelante empezaron a aparecer iniciativas de otros
campos como la historia. Por otro lado, «hoy en
día, el análisis del discurso se encuentra en plena
fase de expansión. No existe un paradigma dominante. Se trata de un campo de estudio que sigue
cobrando forma con rapidez y que se aplica a todo
tipo de contextos» (Manzano 2005, 2).
En palabras de Íñiguez-Rueda (2003), para realizar un análisis de discurso (de tradición anglosajona) es necesario seguir los siguientes pasos: el
primero de ellos es definir el proceso que quiere
analizarse, el segundo es la selección de material
relevante para el análisis, y el tercero, un análisis
propiamente dicho. En este caso esto se ha traducido en un recuento de palabras que nos permite
Adobe Acrobat Reader DC, y al mismo tiempo esto
nos ha permitido realizar tablas (tabla 1, tabla 2),
que a su vez nos han permitido comparar los diversos textos trabajados.
5. Valoración final
Pasando a una valoración final, podemos afirmar la existencia de un nuevo discurso patrimonial autorizado. De hecho, comparando los textos
trabajados, aun teniendo en cuenta la diferencia
de la naturaleza de estos, podemos observar una
gran diferencia en el discurso y el lenguaje utilizados en lo referido al patrimonio.
Uno de los objetivos de este trabajo era plantear
los conceptos claves dentro del nuevo discurso patrimonial autorizado. Sobre la base de los datos
obtenidos, podemos señalar que sus ejes centrales
son el «desarrollo sostenible» y la «gobernanza
participativa». Este primero lo hallamos en solo
una de las leyes estudiadas, y de hecho la más reciente, mientras que encontramos referencias al
mismo en todos los documentos de la UE. El segundo concepto solo aparece en cuatro de los documentos estudiados. Alrededor de ellos orbitan
otros, como puede ser el «turismo sostenible», el
cual aparece en todos los documentos de la UE.
TABLA 1. Recuento de palabras en los documentos de la UE estudiados sobre el patrimonio cultural.
TABLA 2. Recuento de palabras en las leyes españolas estudiadas sobre el patrimonio cultural.
UNA NUEVA POLÍTICA EUROPEA SOBRE EL PATRIMONIO: DESARROLLO SOSTENIBLE Y LA GOBERNANZA PARTICIPATIVA
Relacionadas con toda esta cuestión tenemos
las crecientes alusiones a la gobernanza participativa. Esta no la encontramos ni una sola vez en
las leyes analizadas en este estudio. Por el contrario, en las recomendaciones de la UE seleccionadas para este trabajo tenemos no solo referencias,
sino un documento entero orientado a esta cuestión. Habría que especificar las dimensiones a las
que hace referencia «participativa». En el texto
dedicado a la gobernanza participativa se plantea
una gobernanza entre empresas y sociedad, pero
se hace difícil pensar que a medio y largo plazo los
intereses patrimoniales coincidan.
Siguiendo con otros conceptos que orbitan alrededor de estos principales, tenemos por ejemplo el de «valor económico». De este tenemos que
solo abunda en la Ley de Patrimonio Histórico Español del 85, y en los otros no aparece de manera
tan explícita, aunque es una idea que ronda todos
los documentos y llega a aparecer en otras formas como pueden ser «financiación», «turismo»
o «desarrollo». Por otro lado, en los textos más
recientes es clara una nueva idea: la importancia
económica de un bien patrimonial no es la intrínseca al propio bien, sino el beneficio que puede
generar a través del turismo cultural.
Pasando al turismo cultural, encontramos que,
en los textos más antiguos aquí trabajados, no
parece ser un aspecto importante dentro del discurso patrimonial autorizado. En cambio, en el
discurso europeo sí es una parte importante, que
además entronca con el desarrollo sostenible. Por
otra parte, tenemos continuas alusiones a los posibles beneficios del turismo cultural, como pueden ser los económicos o la visibilidad de los monumentos. También se plantean los peligros que
esto puede conllevar, como la homogenización
del patrimonio, la sobreexplotación del terreno,
etc. Es necesario reflexionar sobre si queremos
realmente este modelo de turismo, al menos en
las condiciones actuales, y luego también habría
que plantearse si es realmente viable. Por otra
parte, no hay que olvidar un factor importante
como es el de que, realmente, hay poblaciones
locales que han encontrado aquí un sustento. No
solo esto: incluso atañe a profesionales procedentes de disciplinas como «la historia, historia del
arte, humanidades, geografía, arqueología o, incluso, de aquellas carreras más relacionadas con
la comunicación, como periodismo, publicidad y
relaciones públicas» (Morére et al. 2013, 90). Estas últimas tiene sentido recalcarlas en el marco
económico actual de la Unión Europea.
261
Por último, cabría volver a recordar la importancia de trabajos de esta naturaleza. Es necesario
que desde las ramas del conocimiento que trabajamos con el patrimonio nos detengamos un momento a reflexionar de manera crítica sobre nuestro trabajo y sobre cómo mejorar nuestra labor
con el mismo.
6. Bibliografía
ÍÑIGUEZ-RUEDA, L. 2003: «El análisis del discurso
en las ciencias sociales: variedades, tradiciones
y práctica», en: ÍÑIGUEZ-RUEDA, L. (ed.), Manual
de análisis de discurso para las ciencias sociales,
UOC, Barcelona, 83-124.
LEY 5/2016, de 4 de mayo, del patrimonio cultural
de Galicia.
LEY 8/1995, de 30 de octubre, del patrimonio cultural de Galicia.
LEY 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio Histórico Español.
MANZANO, V. 2005: «Introducción al análisis del
discurso»,
<http://personal.us.es/vmanzano/
docencia/metodos/discurso.pdf> [Consulta: 18
mayo 2017].
MORÉRE, N.; PERELLO, O.; DELL’ORTO, V.; MARTÍN, C.
2013: Turismo cultural. Patrimonio, museos y
empleabilidad, 1, Fundación EOI, Madrid.
SÁNCHEZ-CARRETERO, C. 2012: «Hacia una antropología del conflicto aplicada al patrimonio.
Geopolíticas patrimoniales», en: SANTAMARINA,
B. (ed.), De culturas, naturalezas e inmaterialidades. Una mirada etnográfica, Germania, Valencia, 195-210.
SMITH, L. 2011: «El “espejo patrimonial”. ¿Ilusión
narcisista o reflexiones múltiples?», Antípoda,
12, 39-63.
UNIÓN EUROPEA 2014: «Conclusiones (UE) 2014/C
183/08 del Consejo, de 21 de mayo de 2014,
sobre el patrimonio cultural como recurso estratégico para una Europa sostenible», Diario
Oficial de la Unión Europea, C 183/36, 14 de junio de 2014.
– «Conclusiones (UE) 2014/C 463/01 del Consejo
sobre la gobernanza participativa del patrimonio cultural», Diario Oficial de la Unión Europea, C 463/1, 23 de diciembre de 2014.
– «Resolución (UE) 2014/2149 del Parlamento Europeo, de 8 de septiembre de 2015, hacia un
enfoque integrado del patrimonio cultural europeo», Parlamente Europeo A8-0207/2015, 8
de septiembre de 2015.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
263
A FÁBRICA ENCERROU, E AGORA? O CASO DA ANTIGA
FÁBRICA ROBINSON E A PATRIMONIALIZAÇÃO DE UMA
UNIDADE CORTICEIRA EM PORTUGAL
SUSANA PACHECO1
A Fábrica Robinson, dedicada à transformação
de cortiça surgiu nesta cidade do Alto Alentejo,
Portalegre, em 1848, pelas mãos de um industrial
inglês, de seu nome George William Robinson, que
já se dedicava a esta indústria na sua cidade, Halifax (Inglaterra). Trouxe consigo o know-how da Revolução Industrial e rapidamente transformou esta
fábrica numa marca de referência a nível mundial,
no que diz respeito ao sector corticeiro (Ventura
2007, 11-13).
Esta chegou mesmo a ser a principal empregadora desta cidade, com cerca de 1.000 trabalhadores em permanência na unidade fabril e mais
umas centenas no terreno, ligados ao processo de
compra e tiragem da cortiça dos sobreiros. É muito difícil, ou praticamente impossível, encontrar
alguém em Portalegre que não tenha algum tipo
de relação com esta fábrica, sendo a sua história
frequentemente confundida com a própria história
da cidade.
Assim, quando a fábrica encerrou portas definitivamente, no ano de 2009, surge a necessidade de
dar uma nova vida a este espaço de sete hectares,
mesmo no centro da cidade, até porque seria impensável deixar morrer a memória de todos aqueles que aqui trabalharam. É neste contexto que
urge a preservação deste valiosíssimo património
industrial.
Primeiro que tudo, importa perceber que quando falamos em património industrial, há logo à
partida uma série de aspectos que temos que ter
em consideração, nomeadamente que o património industrial compreende os vestígios da cultura
industrial que possuem valor histórico, tecnológico, social, arquitectónico ou científico; tem um
valor social, como parte do registo da vida dos
homens e mulheres comuns e, como tal, apresenta um importante sentimento identitário; deve ser
considerado como parte integrante do património
cultural em geral, devendo a sua protecção ter em
consideração a sua natureza específica, ou seja, devem-se privilegiar os conjuntos (edifícios, maquinaria, arquivos…) (TICCIH 2003, 3-4).
A conservação do património industrial depende da preservação da sua integridade funcional,
devendo as intervenções realizadas manter, tanto
quanto possível, a sua integridade. A sua adaptação a uma nova utilização, como forma de assegurar a sua conservação também é aceitável, desde
FIGURA 1. Sala das autoclaves da Fábrica Robinson.
Exemplo de espólio móvel e arquitectónico.
1. Fundação Robinson (Portalegre, Portugal) / FCSH-UNL - susanalfsdpacheco@hotmail.com
264
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
que se respeite sítio e a pre-ocupação que este teve.
Adaptar e dar uma nova vida a sítios industriais
evita o desperdício de energia e contribui para o
desenvolvimento económico sustentado, podendo
este património representar um papel importante
na regeneração económica de regiões deprimidas
ou em declínio (TICCIH 2003, 10-12).
A Fábrica Robinson é composta por um valiosíssimo espólio arqueológico industrial, não só imóvel
(tendo edifícios dos séculos XIX e XX, mas também
uma adaptação de um edifício do século XIII, que
funcionou como convento franciscano até 1834,
quando se deu a extinção das ordens religiosas em
Portugal), mas também móvel, uma vez que grande
parte da maquinaria da antiga fábrica permaneceu
no espaço após o encerramento (Figura 1).
Mas nem só bens materiais constituem o Património Cultural. Em mais de um século e meio
de existência, esta fábrica empregou gerações de
portalegrenses e teve um papel inegável no desenvolvimento social desta região. A sua memória funde-se com a da cidade de Portalegre. Foi
aqui, na Robinson, que surgiram os primeiros
corpos de bombeiros de Portalegre, as primeiras
associações mutualistas, o primeiro sindicato dos
operários corticeiros, a primeira Igreja Evangélica desta cidade, entre tantas outras instituições.
O património imaterial da Robinson assume, assim, uma dimensão ímpar de cumplicidade com
a cidade, para além das potencialidades associadas ao conhecimento e investigação tecnológica
relacionados com a cortiça e a sua transformação
industrial (Figura 2).
É neste contexto, com a tomada de consciência, por parte da Sociedade Corticeira Robinson
e do Município de Portalegre do incalculável valor patrimonial deste conjunto e do momento de
dificuldade que a corticeira vinha a atravessar há
já alguns anos (tal como se verificava em todo o
território nacional), que surge, em 2005, a Fundação Robinson, com o intuito de salvaguardar este
património.
No entanto, sempre se levantaram e continuam
a levantar uma série de questões sobre o que fazer
em relação ao património industrial entretanto
desactivado da sua função original enquanto unidade de produção, o que leva a que por vezes este
fique sujeito a uma série de fenómenos prejudiciais, destacando-se o vandalismo.
E é aqui, no combate contra o vandalismo (que
tanto se faz sentir no património), que entram os
investigadores/arqueólogos, devendo estes levar a
cabo uma série de etapas. Temos, também, de ter
a noção de que isto nem sempre é fácil, que tem
de ser uma luta contínua e que nem sempre tem
os frutos que ambicionamos, nem nos prazos que
gostaríamos.
Estas etapas passam pela divulgação do património existente, pois não podemos esperar que
ninguém nasça ensinado e que conheça tudo aquilo que existe, mesmo na sua própria localidade, se
ninguém lhes mostrar; sensibilização e consciencialização da importância desse património, para
que a população o comece a encarar com outros
olhos, deixando de o considerar «uma coisa velha», «sucata», «sem utilidade», entre tantas outras coisas que frequentemente ouvimos.
Também passa pelos investigadores a educação das populações, começando pelas gerações
mais novas (daí a necessidade de nos focarmos na
FIGURA 2. Fotografia
dos antigos
trabalhadores e
patrões da Fábrica
Robinson (autor
desconhecido,
Arquivo Documental
da Fábrica Robinson).
A FÁBRICA ENCERROU, E AGORA? O CASO DA ANTIGA FÁBRICA ROBINSON E A PATRIMONIALIZAÇÃO DE UMA UNIDADE CORTICEIRA EM PORTUGAL
265
FIGURA 3. Visita guiada
pela antiga Fábrica
Robinson. Exemplo
do diálogo com a
comunidade.
realização de actividades no âmbito da educação
patrimonial), pois estas é que são o futuro e temos
de as começar a motivar para estas questões logo
desde cedo, de forma a quebrarmos este «ciclo vicioso». Urge também a necessidade de dialogar
e envolver a comunidade, para que esta entenda
que este património não é apenas nosso (dos investigadores e das entidades responsáveis), mas
sim de todos nós, neste caso específico de toda a
população portalegrense (Figura 3).
É ainda urgente que os investigadores comecem
a inovar, é necessário arranjar novos discursos/formas de chegar à comunidade, não podemos continuar a utilizar os mesmos meios que já vêm sendo
utilizados há várias gerações, temos de nos adaptar
à mudança dos tempos e das mentalidades. E tão
ou mais importante ainda, temos de começar a definir novos critérios para a preservação do património que não apenas a estética.
Hoje em dia, o património não pode continuar
a ser encarado como algo intocável e apenas contemplativo, deve sim ser visto como algo que tem
de ser democratizado e actualizado ao panorama
e necessidades socioculturais e económicas do
presente.
Re-funcionalizar, ou atribuir um novo uso a
estes espaços, em particular através da sua reutilização educacional ou cultural parece ser uma
solução. Contudo, em Portugal assiste-se a um
cenário devastador no que diz respeito à cultura,
em especial aos museus, pelo que a musealização
de um espaço como este jamais seria suficiente.
Assim, surge a ideia de transformar este enorme
espaço obsoleto num gigantesco complexo cultural e turístico, um espaço de fruição para os
vários tipos de público (composto de uma parte
museológica, auditórios, uma Escola de Hotelaria e Turismo, espaços para as associações da cidade…).
No entanto, mesmo sem a possibilidade, pelo
menos imediata, da concretização deste ambicioso projecto, há uma série de outras iniciativas
que se podem e que a Fundação Robinson tem
vindo a desenvolver, no sentido de tornar este
espaço num local de aprendizagem e diálogo intercultural, e que devem ser levadas a cabo pelos
investigadores.
Neste sentido, a Fundação Robinson, ao longo do seu período de existência tem vindo a desenvolver uma série de actividades que acredita
que vão contribuir para essa educação da população, nomeadamente a realização de ciclos artísticos dentro do espaço da Fábrica, num projecto
transfronteiriço intitulado «Conviver na Arte»
(Figura 4); workshops de educação patrimonial e
acções de formação/congressos abertos a toda a
população e não apenas à Academia; divulgação
da actividades e do património/história nas redes
sociais, que são uma ferramenta extremamente
útil que actualmente nós temos ao nosso alcance e que devemos utilizar o máximo possível e da
melhor forma possível, pois vivemos numa sociedade em que as pessoas andam sempre a correr
de um lado para o outro e se, por um lado, poucas
pessoas perdem uma hora do seu dia para ir a um
museu, ou a ler um livro, toda a gente perde, nem
266
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. Cartaz da
iniciativa «Conviver
na Arte».
que sejam cinco ou dez minutos, a consultar as
redes sociais, pelo que se acredita que estas são
uma ferramenta extremamente útil na educação
das populações.
Assim, defende-se que, cada vez mais, os arqueológos/investigadores têm de «perder mais
tempo» a motivar as comunidades e não apenas a
elaborar artigos científicos (ainda que estes também sejam importantes). Só desta forma conseguimos que a comunidade entenda e se interesse
por este património.
Bibliografia
CERDÀ, M. 2008: Arqueología Industrial. Teoría y
Práctica, Universitat de València, Valência.
FOLGADO, D. 2004: «Património Industrial. Que
memória?», in: JORGE, Vítor Oliveira (coord.),
Conservar para quê?, Faculdade de Letras da
Universidade do Porto, Porto, 355-366.
ICOMOS-TICCIH 2011: Principles for the Conservation
of Industrial Heritage Sites, Structures, Areas
and Landscapes, ICOMOS, Dublin.
TICCIH 2003: Carta de Nizhny Tagil Sobre o Património Industrial, TICCIH, Nizhny Tagil.
VENTURA, A. 2007: «Para uma Cronologia da Fábrica
Robinson 1848-1966», in: GOUVEIA, A. C. (coord.),
Para a História da Fundação, Publicações da
Fundação Robinson, 0 (23), Portalegre, 8.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
267
PALLABARRO: IMPORTANCIA Y PERVIVENCIAS DE UNA
TÉCNICA PREHISTÓRICA EN EL SIGLO XXI
MARTÍN CUENCA1,2
1. Introducción
La utilización de barro para la construcción
de estructuras es uno de los claros ejemplos de la
pervivencia desde la prehistoria de técnicas sostenibles, haciéndose evidente su presencia en distintos puntos del globo y en diferentes periodos
cronológicos.
El objetivo de este artículo es mostrar la técnica de pallabarro, como ejemplo de la utilización
del barro como materia prima, desde diferentes
enfoques, para confluir en su funcionalidad pretérita y actual, junto con la importancia dentro del
patrimonio. Paralelo a esto, se describirán algunos de los proyectos desarrollados respecto a esta
temática y una experiencia desarrollada a nivel
experimental.
A pesar de su universalidad, la presente exposición estará centrada en el área interior de Galicia,
donde todavía se pueden observar tanto evidencias
a nivel arqueológico de este tipo de construcciones
como otras aún en pie, cuyas dataciones más antiguas pueden alcanzar el siglo XV.
2. Arquitecturas sostenibles
En la Antigüedad, las primeras casas y ciudades fueron construidas con tierra cruda. Hoy en
día, para construir nuestros hogares se utilizan
materiales de elevada energía incorporada, de difícil reciclaje y que en ocasiones incluso incorporan elementos tóxicos.
Actualmente, el de la construcción es uno de
los principales sectores que generan más residuos
y consumen más materiales y energía. Como es
sabido, estos recursos son limitados, y la reducción de esta demanda se puede alcanzar con la
reutilización, el reciclado o la regeneración de los
materiales empleados. Esto hace pensar que hay
FIGURA 1. Uso del barro
a nivel mundial.
1. Facultad de Geografía e Historia, Universidad Santiago de Compostela - cuenca.m@icloud.com
2. CARGA - Grupo de trabajo, investigación y difusión en Arqueología y Patrimonio - carga.arqueologia@gmail.com
268
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
motivos más que justificados para volver a reivindicar la sencillez y las propiedades de la tierra.
Un tercio de la población mundial (figura 1)
vive en construcciones realizadas con tierra, y en
los países en vías de desarrollo el porcentaje supera la mitad de las construcciones.
3. Técnica de pallabarro: utilización del
barro como materia prima
3.1. Materia prima
En cuanto a la materia prima, la tierra es el
material de construcción natural más importante
y abundante,3 y el principal recurso constructivo
en muchas partes del mundo. Está compuesta
básicamente por diversas proporciones de grava,
arena, limo, arcilla, agua y aire.4
Para su uso en la construcción, debe tener
unas propiedades determinadas que garanticen
su aprovechamiento máximo, así como unos requerimientos básicos, ya que no todas las tierras
pueden ser aprovechadas como tales; por ello, deben excluirse aquellas que presenten en su composición materiales orgánicos, hongos, raíces y
bacterias, entre otros.5 Además del uso de la tierra
y del agua como cohesionador, se utilizan otros
materiales como paja, cal y abono animal que
funcionan como estabilizantes, dando a la masa
final mayor consistencia.
3.2. Técnica
Las técnicas de construcción de estructuras en
tierra se extendieron en zonas donde la piedra era
de mala calidad o escasa, lo que, sumado a la mayor disponibilidad y el menor coste, hicieron de
esta el material adecuado para la construcción de
tabiques interiores y exteriores.
La técnica en pallabarro (figura 2) consiste en
la utilización de un entramado vertical de madera,
utilizando maderas autóctonas semirrígidas (avellano o mimbre), denominado fitoiras o cangos,
formado por tablas de entre 10 y 20 cm de ancho
por 3-4 cm de grosor. Las fitoiras se unen entre
sí con taborelas más delgadas y estrechas,
que reciben el nombre de bitoques y que se
FIGURA 2. Técnica de pallabarro.
ensamblan de manera horizontal y oblicuamente.
Los espacios entre fitoiras se llenan de un trenzado de paja amasado con barro, cuyo nombre es
lampreas. Estos se entrelazan entre los bitoques o
mediante mangados de paja. Las dos caras de la
pared se rellenan con cal o sábrego y se blanquean
con sal. Este tabique es utilizado principalmente
en el interior de las viviendas.6
4. Área de estudio
La pervivencia de las construcciones tradicionales basadas en el barro, en Galicia y en zonas climatológicamente similares, reflejan tres situaciones
análogas: por un lado, (i) se manifiesta la escasez o
la mala calidad de otros materiales de uso más común en zonas aledañas (tales como la piedra); por
otro, (ii) su grado de sostenibilidad, y, finalmente,
(iii) su efectividad a nivel higroscópico (relativo a
la humedad), de habitabilidad y de inercia térmica.
4.1. Casos
En la zona existen antecedentes de la utilización de esta técnica desde la Edad del Hierro, tal
como lo atestigua su aparición en distintos yacimientos castrexos. En época más reciente, existen
estudios realizados en la Galicia interior. Tal es el
caso de Monforte de Lemos,7 donde se comprobó
que, en la actualidad, el patrimonio de tierra existente en Galicia se encuentra en avanzado estado
de deterioro, a lo que se suma un vacío de conoci-
3. Minke, Manual de construcción en tierra, Nordan-Comunidad, Uruguay, 2001, 5.
4. Álvarez-Testa, «Estudio de las construcciones de tapia en la zona norte de Monforte de Lemos», Tracería - Revista de
Rehabilitación Arquitectónica, 2, 2016, 41-48.
5. Gati, Arquitectura y construcción en tierra: estudio comparativo de las técnicas contemporáneas en tierra, 2012, 10.
6. Fernández, «Earthen constructive in Ourense, Galicia (Spain)», en: Vernacular and Earthen Architecture: Conservation
and Sustainability, Valencia, 2012, 101-106.
7. Rivas, Análisis del comportamiento higrotérmico de un muro de tapia mediante monitorización y simulación energética,
A Coruña, 2015, 41.
PALLABARRO: IMPORTANCIA Y PERVIVENCIAS DE UNA TÉCNICA PREHISTÓRICA EN EL SIGLO XXI
269
mientos asociado a la falta de documentación y/o
catalogación de dicho patrimonio.
La precipitación anual media es de 1.325 mm. La
variación en la temperatura anual es de 11,6 °C.
5. Experimentación: construcción de la
estructura en pallabarro
6. Fases constructivas
5.1. Metodología aplicada
La metodología aquí desarrollada evaluó la
técnica, que permitió comprobar la viabilidad de
los materiales utilizados en el tratamiento de protección de la cobertura externa (cal y/o materiales
orgánicos), mediante la construcción de una pequeña estructura en pallabarro, en un ambiente
húmedo como es el de Galicia meridional.
5.2. Localización y cronología
La estructura se construyó e instaló en la ciudad de Santiago de Compostela, norte de la península Ibérica (42° 52’ N, 8° 33’ O). Se dispuso
a la intemperie, sin ninguna protección directa o
indirecta, para que no existieran agentes externos
que interfirieran en la incidencia climatológica. Se
instaló a mediados de mayo de 2017 y se llevaron a
cabo seguimientos mensuales durante once meses.
5.3. Climatología
El clima local es cálido y templado (figura 3).
Las precipitaciones se registran en invierno, con
poca lluvia en verano. La media anual es de 15
grados, con 8 grados de promedio en invierno y un
verano con temperaturas entre los 20 y los 27 °C.
Se construyó una estructura siguiendo la técnica de pallabarro tradicional, sin ningún tipo de
herramientas y con los materiales antes descritos.
Como resultado, las medidas de la estructura fueron 1,45 m de altura y 0,45 m en la base de cada
una de las tres caras (conformando una especie de
pirámide), y un grosor de 0,05 m.
6.1. Preparación del barro
Se remojó la paja durante una hora para eliminar el exceso de almidón y la tierra seleccionada,
rica en arcillas, con bajo porcentaje de desgrasantes. Se mezclaron ambas materias primas hasta
lograr un compuesto altamente pegajoso. Posteriormente el barro se dejó al sol en reposo para
evaporar el exceso de agua.
6.2. Construcción de la estructura-bastidor
La parte vertical de la estructura fue construida con ramas de avellano, caracterizadas
por ser más rígidas y gruesas. Estas se colocaron
en posición vertical, separadas entre sí 10 cm, y
luego se procedió a rellenar los espacios vacíos
entre las ramas de avellano con las de mimbre,
entrelazándolas entre sí para darle más rigidez
y garantizando la estabilidad del esqueleto de la
estructura.
FIGURA 3. Ubicación
de la estructura y
climatología.
270
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. Fases
constructivas.
6.3. Relleno de la estructura
Una vez evaporada el agua de la mezcla de barro y paja y construido el esqueleto de la estructura, se aplicó la mezcla sobre toda la superficie
constructiva sin que quedara ningún espacio vacío. Una vez que toda la estructura estaba cubierta por el barro, se alisó la superficie para evitar el
colapso de la construcción por exceso de peso y se
reforzaron aquellas zonas más débiles o donde la
mezcla no se había adherido bien.
6.4. Revestimiento de la estructura
Se cubrieron con diferentes mezclas dos de
las tres caras (figura 4). En la primera cara se
aplicó una mezcla de agua y cal. En la segunda
cara, una mezcla de barro y excrementos animales. A la tercera cara no se le aplicó ningún revestimiento, de forma que sirviera como referencia
de control.
forma de la estructura como en las condiciones aislantes antes descritas. No se registraron cambios en
la morfología, como tampoco deformaciones notables. La cara revestida de cal mantuvo su dureza
y una menor presencia de humedad, aunque una
mayor cantidad de grietas respecto a las otras. Las
superficies restantes presentaron más humedad al
tacto, pero menores signos de agrietamiento.
Al no estar cubierta la estructura, los constantes cambios entre humedad y sequedad propiciaron el agrietamiento. Teniendo en cuenta lo anterior, es importante destacar la importancia del
empleo de materiales impermeables para tratar
la superficie externa de las estructuras de pallabarro, ya que la materia prima principal por sí
sola no es suficientemente fuerte para garantizar la perdurabilidad a medio/largo plazo de las
construcciones. Ello obliga a un continuo proceso de reparación y consolidación, lo que supone una inversión adicional de tiempo y recursos
para las poblaciones.
6.5. Fase de seguimiento
8. Bibliografía
Se procedió a la observación de la estructura
de manera mensual, verificando medidas, posibles deformidades, agrietamientos y variaciones
morfológicas internas y externas. Cada observación estuvo acompañada de los datos de la media
mensual meteorológica.
ÁLVAREZ-TESTA, L. 2016: «Estudio de las construcciones de tapia en la zona norte de Monforte
de Lemos», Tracería - Revista de Rehabilitación
Arquitectónica, 2, 41-48.
CLIMATE-DATA.ORG 2017: «Climatología de Santiago
de Compostela», <https://es.climate-data.org/
location/5734/>.
FERNÁNDEZ, A. 2017: «Earthen constructive in Ourense, Galicia (Spain)», en: Vernacular and Earthen Architecture: Conservation and Sustainability, Valencia, 101-106.
GATI, F. 2012: «Arquitectura y construcción en tierra: estudio comparativo de las técnicas contemporáneas en tierra», <https://core.ac.uk/
7. Conclusiones
Se observó que la integridad de la estructura se
mantiene como el primer día, salvo pequeños defectos aparecidos en forma de grietas, las cuales
pueden provocar cambios tanto en la duración y la
PALLABARRO: IMPORTANCIA Y PERVIVENCIAS DE UNA TÉCNICA PREHISTÓRICA EN EL SIGLO XXI
download/pdf/41807254.pdf> [consulta: 21 de
febrero 2018].
INSTITUTO NACIONAL DE METEOROLOGÍA 2017: «Precipitación media anual en Galicia», <http://www.
gifex.com/detail/2010-08-29-11961/Precipitacin-media-anual-en-Galicia.html>.
271
MINKE, G. 2001: Manual de construcción en tierra,
Nordan-Comunidad, Uruguay.
RIVAS, L. 2015: Análisis del comportamiento higrotérmico de un muro de tapia mediante monitorización y simulación energética, A Coruña,
41.
SECCIÓN 13. VARIA
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
275
EVIDENCIAR LA PRODUCCIÓN LÁCTEA ANIMAL A TRAVÉS
DE LA MICROESTRUCTURA ÓSEA: UNA APROXIMACIÓN
A LAS PRÁCTICAS GANADERAS PREHISTÓRICAS
JOAQUIM RIPOLL MIRALDA1
1. Introducción
El propósito de este trabajo2 es profundizar sobre las estrategias económicas que las primeras
sociedades agricultoras y ganaderas desarrollaron
a raíz de la domesticación de animales salvajes,
puesto que los nuevos productos explotados de los
animales domésticos permitían nuevas formas de
producción y obtención de recursos.
Seguimos la última tendencia sobre la domesticación, que considera que la intención principal
de las primeras sociedades agrícolas y ganaderas
al domesticar a los animales era la obtención de
productos que el animal pudiera producir en vida,
y no únicamente su carne (Helmer, Gourichon y
Vila 2007; Vigne y Helmer 2007; Saña 2013; Debono et al. 2016). Es aquí donde jugarían un papel muy importante los productos derivados de
la leche. En este sentido, se evalúa la producción
láctea como posible causa de la domesticación
animal a inicios del Neolítico.
Pretendemos evaluar las repercusiones que
tuvieron las nuevas estrategias económicas en la
apropiación particularizada del recurso animal
y, con esto, en la posible instauración de nuevas
relaciones que condujeron a la posibilidad de acumulación material y a la desigualdad social, vía
los productos derivados.
El carácter de estos productos permite una fácil
conservación y transporte, y por eso se han planteado algunas teorías (Sherratt 1983) según las cuales
estos productos habrían circulado extensamente y
esto podría haber generado un hipotético aumento
del excedente y una consecuente apropiación del
ganado por algunos individuos. Sin embargo, esta
asunción constituye un salto interpretativo que se
debe contrastar con nuevas evidencias.
Teniendo en cuenta estas consideraciones, los
objetivos del trabajo son los siguientes:
– A nivel metodológico, pretendemos integrar
nuevos procedimientos analíticos a la investigación arqueozoológica que permitan constatar la
producción láctea a partir del estudio directo de
los restos de fauna.
– A nivel histórico, primero queremos evaluar
el papel del Bos taurus a inicios del Neolítico en la
producción y el abastecimiento de leche. También
contrastar si la producción láctea pudo ser una de
las causas de la domesticación animal. Y, por último, integrar todos estos datos con el objetivo final
de aproximarse a una de las vías por las cuales
las comunidades agrícolas se apropiaron de los
recursos animales, explotándolos de manera particularizada y, quizá, contribuyendo al desarrollo
de desigualdades sociales.
2. Contexto arqueológico: asentamiento,
cronología y características
Para realizar el presente estudio hemos escogido el yacimiento de La Draga (Banyoles, Girona), por su importancia como testimonio de las
primeras prácticas ganaderas del nordeste peninsular (Saña 1998; 2011; Antolín et al. 2014; Gillis
et al. 2016), por su gran nivel de conservación del
material en general y óseo y por las características
que presenta el registro faunístico.
La Draga es un yacimiento arqueológico situado a la orilla del estanque de Banyoles (Pla
de l’Estany). Contiene los restos materiales de un
asentamiento con cronología del 5300 al 5100 cal.
ANE. Al localizarse en un medio lacustre, conserva un número de restos cuantitativa y cualitati-
1. Laboratori d’Arqueozoologia, Universitat Autònoma de Barcelona - quimripoll@gmail.com
2. Este artículo se ha escrito en el marco del proyecto de investigación «Producción animal y cerámica en el Neolítico
peninsular. Estudio biogeoquímico integrado del consumo y las prácticas culinarias» (Proyecto I+D HAR2014-60081-R).
276
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
vamente muy superior a la mayoría de los yacimientos arqueológicos con esta cronología (Saña
1998).
3. Materiales
Para el análisis microestructural hemos seleccionado los metápodos como elemento óseo a
examinar. Esto es debido a todos los aspectos que
presentan, que facilitan el estudio: permiten una
mayor precisión de la edad por sus características
fisiológicas, son partes afectadas por el dimorfismo sexual y hay una mayor representatividad y
menor frecuencia de fracturación debido al poco
producto cárnico que presentan.
De toda la muestra obtenida en el inicio, finalmente se seleccionó una muestra de 17 diáfisis
distales de metacarpianos procedentes de individuos distintos.
4. Método
Primero se realizó el análisis biométrico de
las muestras seleccionadas con el objetivo de diferenciar entre ejemplares salvajes / ejemplares
domésticos y machos/hembras/castrados. Los criterios seguidos en la toma de medidas han sido
los publicados por Driesch (1976) y complementados con criterios más específicos publicados por
Telldahl et al. (2011; 2012), Telldahl (2015) y Lin,
Miracle y Barker (2016).
La caracterización biométrica de los restos se
ha realizado a partir de los criterios definidos por
Driesch (1976). Las medidas tomadas en el proceso de estudio de los metápodos se ven reflejadas
en la figura 1. Las medidas e y D1 (fig. 1, t. 2),
definidas por Lin (2016), se utilizan para calcular
el coeficiente e/D1.
Los datos se han analizado cuantitativamente
con el software PAST para observar la variabilidad
de los individuos y distinguir entre sexos y estatus
del animal (salvaje o doméstico).
Sobre la base de los resultados obtenidos, se
ha procedido a seleccionar 6 muestras para el
estudio de la estructura de las osteonas. De esta
manera, se han seleccionado 6 individuos para
la extracción de láminas delgadas.
Para llevar a cabo este estudio se ha procedido
a obtener una lámina delgada de cada una de las
muestras siguiendo el procedimiento descrito por
Chamberlain y Forbes (2005).
Una vez obtenidas las láminas delgadas de
30 µ, estas se han observado al microscopio Olympus BX53 a luz polarizada y a 4x aumentos. El
estudio se ha basado en el recuento sistemático
de osteonas en el extremo izquierdo de la cortical
del metacarpo, correspondiente a la parte anterolateral del hueso.
Se ha procedido al análisis estadístico para ver
qué muestras presentan más cantidad de osteonas
secundarias y qué medidas tienen. Se han utilizado con este propósito los diagramas de caja, XY
con barras de error, utilizando el software PAST
(Hammer, Harper y Ryan 2001).
FIGURA 1. Criterios
biométricos
aplicados para la
caracterización de los
individuos a través
de los metápodos.
Extraído de Telldahl
et al. (2012), Lin,
Miracle y Barker
(2016) i Driesch
(1976).
EVIDENCIAR LA PRODUCCIÓN LÁCTEA ANIMAL A TRAVÉS DE LA MICROESTRUCTURA ÓSEA: UNA APROXIMACIÓN A LAS PRÁCTICAS GANADERAS PREHISTÓRICAS
277
El análisis de osteonas ha dado, en primer lugar, una primera separación entre todas las muestras y la muestra 29. La muestra 34 no permitía
distinguir las osteonas secundarias y ha sido eliminada del análisis.
Eliminando la muestra número 29 del análisis,
debido a su enorme tamaño diferencial, los resultados permiten diferenciar dos grupos: el conformado por los individuos salvajes y el correspondiente a las hembras domésticas.
Por lo que respecta al número de osteonas registradas en cada muestra, la muestra 1 es la que
presenta el número más elevado, seguida de la
muestra 51 y posteriormente la muestra 48, mientras que las muestras 40 y 29 presentan un número menor.
6. Análisis integrado de los resultados
FIGURA 2. Número de muestra, sigla y edad de
los metápodos seleccionados. La edad ha sido
calculada a partir de la observación de los
patrones de desarrollo del hueso y comparada
con la colección de referencia del Laboratori
d’Arqueozoologia de la UAB.
5. Resultados
La siguiente tabla muestra los resultados para la
edad de los individuos y los resultados biométricos:
Los individuos 40 y 48 fueron asignados, biométricamente, a un estatus salvaje debido a su
gran tamaño.
Las muestras que han podido ser procesadas
con el análisis biométrico presentan una coherencia positiva con el dimorfismo sexual que les
correspondería por el análisis biométrico. De este
modo, las muestras 40 y 48, al corresponder a
ejemplares salvajes, presentan un tamaño de osteonas más grande que 1 y 51, hembras. Por lo
que respecta al número de osteonas, las muestras
1 y 51 disponen de una concentración más elevada, hecho que permite relacionarlas con la explotación láctea o situaciones de estrés. Las muestras
48, 40 y 29 presentan muy poca concentración de
osteonas en la cortical en relación con las otras.
A pesar de que 29 correspondería a una hembra
biométricamente, esta relación no se ve afectada,
puesto que no todas las hembras eran explotadas
por la leche, y además presenta una patología en
la tróclea que indicia el uso de este individuo por
su fuerza de tracción.
7. Discusión
FIGURA 3. Gráfico box-plot que muestra los
resultados de la biometría de los individuos
analizados. Los resultados han sido comparados
con referencias biométricas de bovinos actuales.
Los análisis biométricos evidencian una elevada variabilidad de la población estudiada, con
presencia de animales salvajes y domésticos y de
machos y hembras domésticos.
Se ha destacado que los animales representados en las muestras 1 y 51 presentan evidencias
de haber sido estimulados por la extracción de leche, puesto que presentan una densidad elevada
de osteonas secundarias de tamaño reducido. Por
el contrario, las muestras 40, 48 y 29 presentan
osteonas secundarias de medida más grande y en
menor número.
La muestra 29 es un caso excepcional, puesto
que no encaja en las categorías establecidas por el
278
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 4. Gráfico XY
de barras de errores
que muestra la
correlación entre las
muestras analizadas
y el tamaño y la
cantidad de osteonas
que presentan. La
muestra 29 ha sido
eliminada del gráfico
debido a su enorme
distancia con el resto
del grupo.
análisis biométrico y el de osteonas. Planteamos
que se pueda tratar de un macho castrado, puesto
que presenta una patología en la tróclea asociada
a la fuerza de tracción. Por los resultados de las
osteonas, podría existir una relación entre el esfuerzo generado en vida y la medida desmesurada
de osteonas.
8. Conclusiones
En primer lugar, nos proponíamos como objetivo metodológico integrar nuevos procedimientos analíticos a la investigación arqueozoológica
que permitieran constatar la producción láctea a
partir del estudio directo de los restos de fauna.
Este objetivo ha sido cumplido satisfactoriamente, puesto que el método descrito por Chamberlain y Forbes (2005) ha dado resultados positivos
en esta aplicación.
En relación con los objetivos históricos planteados, los resultados, a pesar de presentar las
limitaciones correspondientes al formato de este
trabajo, se valoran también positivamente. Hemos podido constatar como, en el caso de La
Draga, la especie Bos taurus podría haber sido
explotada con mucha probabilidad por esta producción.
Sobre el segundo objetivo, nuestro trabajo ha
podido incidir en el ámbito concreto de La Draga, donde las prácticas ganaderas ya estaban consolidadas. En el nordeste peninsular hay otros
asentamientos prehistóricos donde se dieron las
primeras formas de domesticación animal antes y,
por lo tanto, se tendría que contrastar la información entre estos asentamientos. Hay que remarcar
que hemos trabajado solo con bovinos, y que los
inicios de la domesticación contemplan otras especies animales. Aun así, los resultados son positivos, puesto que este trabajo permite una vía de
estudio aplicable a muchos otros contextos históricos que podrán contrastar esta hipótesis.
En relación con el tercer objetivo, nuestra contribución trata de evidenciar empíricamente estas
prácticas en el nordeste peninsular a finales del VI
milenio ANE con la intención de establecer una
base material por este estudio histórico. En La
Draga hay muchas probabilidades de una explotación láctea practicada en al menos una especie
animal domesticada, Bos taurus. La extracción de
leche puede estar vinculada a la producción de
mecanismos que pueden conllevar el surgimiento de desigualdad social, como son los productos
derivados. Sin embargo, no podemos afirmar que
esta tecnología hubiera conllevado inevitablemente este proceso social. Nuestro aporte avanza,
entonces, en la producción de una base material
para poder llegar a estudiar este fenómeno, habiendo determinado que en el asentamiento de La
Draga se explotó a los bóvidos domésticos para
producir leche.
9. Bibliografía
ANTOLÍN, F.; BUXÓ, R.; JACOMET, S.; NAVARRETE, V.;
SAÑA, M. 2014: «An integrated perspective on
farming in the early Neolithic lakeshore site of
La Draga (Banyoles, Spain)», Environmental
Archaeology, 19 (3), 241-255.
BALASSE, M. 2000: «Un abattage “postlactation” sur
des bovins domestiques néolithiques. Étude
isotopique des restes osseux du site de Bercy
(Paris, France)», en: Gestion démographique des
animaux à travers le temps, Colloque international de Turin, 16-18 septembre 1998, Anthropozoologica, 31, 39-48.
– 2003: «Keeping the young alive to stimulate the
production of milk? Differences between cattle
and small stock», Anthropozoologica, 7, 3-10.
EVIDENCIAR LA PRODUCCIÓN LÁCTEA ANIMAL A TRAVÉS DE LA MICROESTRUCTURA ÓSEA: UNA APROXIMACIÓN A LAS PRÁCTICAS GANADERAS PREHISTÓRICAS
CHAMBERLAIN, A.; FORBES, S. T. 2005: «A preliminary study of microscopic evidence for lactation in cattle», en: MULVILLE, J.; OUTRAM, A. K.
(eds.), The zooarchaeology of fats, oils, milk and
dairying, 44-49.
DEBONO, C.; GILLIS, R. E.; ROFFET-SALQUE, M.; CASTELLS, L.; GUILAINE, J.; MANEN, C.; MUNTONI, I. M.;
SAÑA, M.; UREM-KOTSOU, D.; WHELTON, H. L.;
CRAIG, O. E.; VIGNE, J.-D.; EVERSHED, R. P. 2016:
«Regional asynchronicity in dairy production
and processing in early farming communities
of the northern Mediterranean», Proceedings
of the National Academy of Sciences, 113 (48),
13594-13599.
DRIESCH, A. von den 1976: A guide to measurement
of animal bones from archaeological sites, Peabody Museum Press, Cambridge (Massachusetts).
Gillis, R.; Carrère, I.; Saña, M.; Radi, G.; Vigne, J.‐D.
2016: «Neonatal Mortality, Young Calf Slaughter
and Milk Production during the Early Neolithic
of North Western Mediterranean», International
Journal of Osteoarchaeology, 26 (2), 303-313.
Hammer, Ř.; Harper, D. A. T.; Ryan, P. D. 2001:
«PAST: Paleontological Statistics Software
Package for Education and Data Analysis», Palaeontol. Electron, 4, 9 p.
HELMER, D.; GOURICHON, L.; VILA, E. 2007: «The development of the exploitation of products from
Capra and Ovis (meat, milk and fleece) from
the PPNB to the Early Bronze in the northern
Near East (8700 to 2000 BC cal.)», Anthropozoologica, 42 (2), 41-69.
LIN, M.; MIRACLE, P.; BARKER, G. 2016: «Towards
the identification of the exploitation of cattle
labour from distal metapodials», Journal of Archaeological Science, 66, 44-56.
SAÑA, M. 1998: «Arqueozoologia i faunes neolítiques a Catalunya. Problemàtica plantejada en-
279
torn a la dinàmica del procés de domesticació
animal», Cypsela, XII, 99-111.
– 2011: «La gestió dels recursos animals», a: El
poblat lacustre del neolític antic de La Draga.
Excavacions 2000- 2005, 177-212.
– 2013: «Domestication of Animals in the Iberian
Peninsula», en: COLLEDGE, S. et al. (eds.), The
Origins and Spread of Domestic Animals in
Southwest Asia and Europe, Left Coast Press,
Walnut Creek (California), 195-221.
SAÑA, M.; ANTOLÍN, F.; BERGADÀ, M. M.; CASTELLS,
L.; CRAIG, O. E.; EDO, M.; SPITERU, C. 2011:
«Prácticas agropecuarias durante el Neolítico
antiguo y medio en la cueva de Can Sadurní
(Begues, Barcelona)» en: GONÇALVES, V.; DINIZ,
M.; SOUSA, A. C. (eds.), Actas do 5º Congresso
do Neolítico Peninsular, UNIARQ, Lisboa, 5767.
SHERRATT, A. 1983: «The secondary exploitation of
animals in the Old World», World Archaeology,
15 (1), 90-104.
TELLDAHL, Y. 2015: «Ageing Cattle: The Use of Radiographic Examinations on Cattle Metapodials from Eketorp Ringfort on the Island of
Öland in Sweden», PLoS ONE, 10 (9), e0137109.
TELLDAHL, Y.; SVENSSON, E.; GOTHERSTROM, A.; STORA, J. 2011: «Typing late prehistoric cows and
bulls–osteology and genetics of cattle at the
Eketorp ringfort on the Öland island in Sweden», PloS ONE, 6 (6), e20748.
– 2012: «Osteometric and molecular sexing of
cattle metapodia», Journal of Archaeological
Science, 39 (1), 121-127.
VIGNE, J. D.; HELMER, D. 2007: «Was milk a “secondary product” in the Old World Neolithisation
process? Its role in the domestication of cattle,
sheep and goats». Anthropozoologica, 42 (2),
9-40.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
281
A SERRA E A ERMIDA DE SÃO MAMEDE (PORTALEGRE):
O APROVEITAMENTO DA PAISAGEM POR UMA COMUNIDADE
RELIGIOSA
HELENA SOARES1, GABRIEL VENTURINI DE SOUZA2, SUSANA PACHECO3
O sítio em estudo, a ermida de São Mamede, localiza-se na serra do mesmo nome, no distrito de
Portalegre, Alto Alentejo (Portugal). Esta caracteriza-se por ser uma zona com um relevo acidentado,
atingindo os 1.025 metros de altitude, o que a torna
na serra mais alta a sul do Tejo, no que diz respeito
ao território português. Apresenta-se com 40 quilómetros de comprimento e aproximadamente 10 quilómetros de largura, sendo que o essencial do seu
relevo se localiza em território português, ainda que
esta serra se prolongue pela região da Extremadura
Espanhola (Henriques 1990, 141).
A região alentejana tem um clima marcadamente mediterrânico, sendo que a serra de São Mamede
surge aqui como uma espécie de ilha climática com
fortes influências atlânticas, em especial nas vertentes viradas a norte. A sua altitude e orientação permitem-lhe actuar como uma barreira de condensação da humidade, originando a ocorrência de níveis
relativamente elevados de precipitação e humidade
do ar, assistindo-se também a uma forte amplitude
térmica, em que os Invernos são extremamente gélidos e os Verões são bastante quentes e secos (Henriques 1990, 144).
Devido às condições apresentadas anteriormente, no maciço de São Mamede é possível
constatar a existência de uma diversidade paisagística considerável, conhecendo-se cerca de 800
espécies vegetais neste território, predominando
os sobreiros, o carvalho-negral e as azinheiras.
Além destas condições, contribui também para
esta riqueza paisagística o facto de a rede hidrográfica desta serra integrar os cursos de água das
bacias hidrográficas do Tejo e do Guadiana, o que
a torna num caso bastante raro ou mesmo único
no território português (Henriques 1990, 143).
Do ponto de vista geológico, assistimos a uma
abundância das rochas metamórficas, em particu-
lar dos xistos, o que se deve ao facto de esta serra
ter tido origem num movimento compressivo lateral das camadas geológicas, o que explica também
o aparecimento de alinhamentos quartzíticos, encontrando-se também, com alguma frequência, os
calcários e os granitos (Henriques 1990, 142).
Analisada a serra de São Mamede, onde se localiza o sítio em estudo, conseguimos facilmente
entender que se trataria de um sítio privilegiado
para a edificação de um edifício religioso como a
ermida que pretendemos estudar com o nosso projecto (figura 1). Trata-se de um edifício religioso de
carácter privado, pertencendo actualmente à Igreja
Católica –Diocese de Portalegre e Castelo Branco–,
que em tempos terá estado associado à Ordem do
Carmo, como se depreende facilmente através da
análise dos vários frescos que se encontram no tecto da sua capela-mor, onde além do próprio símbolo da ordem se encontra iconografia específica
desta.
Apesar de ainda não termos dado início aos
trabalhos arqueológicos propriamente ditos, com
excepção de isoladas campanhas de prospecção
em toda a propriedade, parece-nos à primeira vista
tratar-se de uma ermida do século XVI, ainda que
praticamente não exista bibliografia ou fontes históricas sobre o local, com excepção de algumas
lendas e das memórias paroquiais de 1758.
Esta encontra-se num planalto isolado a cerca
de 837 metros de altitude, tratando-se, por este
motivo, de um local com uma vista extremamente
privilegiada sobre todo o território em seu redor
(figura 2).
Ao olharmos para o local conseguimos facilmente entender que a comunidade que erigiu este
local e que o habitou se serviu de todos os recursos
naturais que tinham à sua disposição, como seria
lógico e prático. Estes tinham, assim, à sua disposi-
1. Centro de Arqueologia Caetano de Mello Beirão (CACMB) (Ourique, Beja, Portugal) / FCSH-UNL - helenapsoares@
hotmail.com
2. Instituto de Estudos Medievais (IEM), FCSH-UNL - gabrielmvsouza@hotmail.com
3. Fundação Robinson (Portalegre, Portugal)/FCSH-UNL - susanalfsdpacheco@hotmail.com
282
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Ermida de
São Mamede.
FIGURA 2. Vista que se tem a partir do terreno da
ermida de São Mamede.
ção grandes quantidades de água, uma vez que esta
se trata de uma zona de nascentes, tal como é mencionado nas memórias paroquiais de 1758, em que
se refere a existência de um ribeiro e de uma fonte/
nascente no território próximo da ermida (Ventura
1995, 93-136).
Além da água, utilizaram também as rochas
metamórficas na construção, não só da ermida
propriamente dita, mas também de todas as estruturas que surgem em seu redor. E é aqui que começam a surgir as questões e problemáticas em torno
deste sítio.
Em redor desta ermida encontramos uma série de estruturas pétreas, cujas funções ainda não
conseguimos determinar sem a realização de sondagens em alguns pontos estratégicos, que iremos
levar a cabo ao longo do nosso projecto de investigação, que estamos agora a iniciar.
Primeiro que tudo, nas proximidades do edifício
religioso surgem-nos duas estruturas pétreas que à
primeira vista parecem estar associadas à criação
de gado, mas em que uma delas apresenta um compartimento cuja função não conseguimos determinar e que não nos parece ser muito prática para
a tarefa que acreditamos ser desempenhada aqui,
principalmente pelo facto de este não apresentar
qualquer porta de acesso ao resto da estrutura (figura 3). A segunda estrutura que encontramos nas
proximidades da ermida apresenta uns degraus e
é interpretada pelo proprietário como sendo um
poço; no entanto teremos de abrir uma sondagem
no seu interior para averiguar se esta está selada
ou não e, caso isso não se verifique, esta hipótese
fica desde logo excluída, podendo assim estar ligada à segunda hipótese, que será o armazenamento
de algum produto, nomeadamente cereal. Durante
as campanhas de prospecção realizadas, encontrámos cerâmica de construção (telha), à superfície,
nesta segunda estrutura, no entanto a sua função
continua por determinar.
Até aqui parece-nos tudo muito bem, estas estruturas parecem de facto estar associadas ao quotidiano da comunidade que acreditamos ter habitado neste local, mas é neste ponto e à medida que
nos vamos afastando do edifício religioso propriamente dito que as coisas se começam a complicar
e que as estruturas parecem deixar de se correlacionar com uma ordem religiosa pacífica, que vivia
em castidade, no século XVI.
A SERRA E A ERMIDA DE SÃO MAMEDE (PORTALEGRE): O APROVEITAMENTO DA PAISAGEM POR UMA COMUNIDADE RELIGIOSA
FIGURA 3. Estrutura não identificada junto à ermida,
possivelmente associada à criação de gado.
Por que razão uma comunidade como esta necessitaria de não uma, mas sim duas cinturas muralhadas (possíveis cercas conventuais) como encontramos no local? Qual seria a necessidade do
aproveitamento dos penedos existentes no território para a construção do que, à primeira vista, nos
parecem ser torreões/estruturas de controlo do território? Por que seria necessária uma propriedade
tão vasta para uma comunidade religiosa (que pela
análise do espaço conventual do eremitério nos parece não ser composta por mais de meia dúzia de
indivíduos), estaria esta apenas associada à criação
de gado (se sim, continua-nos a parecer uma área
demasiado alargada para o efeito, especialmente se
tivermos em consideração a dimensão que deveria
ter a comunidade)? (Figura 4) Porquê construir
muros numa zona que à partida já está delimitada
pelas próprias condições naturais do terreno?
Alguns autores (maioritariamente curiosos e
não investigadores) defendem uma pré-ocupação
FIGURA 4. Área da propriedade da ermida de São
Mamede (imagem cedida pela Câmara Municipal
de Portalegre e editada pelos autores).
283
islâmica do sítio, que poderá ser corroborada pelo
aparecimento, na década de 1980, de um fragmento de uma lápide árabe uns metros acima, no ponto
mais alto da serra. No entanto, este foi encontrado
completamente isolado e poderão ser apresentadas
inúmeras razões para a sua descoberta neste local,
que não passam necessariamente pela existência
de uma ocupação islâmica no território.
Também no edifício religioso propriamente
dito, que se encontra num elevado estado de deterioração (o que de certa forma acaba por facilitar os trabalhos arqueológicos, mas que é condenável se nos debruçarmos sobre a questão da
preservação do património), é possível constatar
o aproveitamento de todos os recursos existentes,
nomeadamente os xistos, a cal (como mencionado
anteriormente, o maciço da serra de São Mamede
é uma zona extremamente calcária), a tijoleira, a
taipa e a madeira.
Concluindo, é a estas e outras questões que tentaremos responder ao longo do nosso projecto de
investigação, numa esperança de contribuir para o
desenvolvimento cultural/turístico e científico desta região do país, corroborando ou desmentindo as
várias tradições e lendas associadas ao local apresentadas ao longo de vários anos por variadíssimos
curiosos, tais como a existência de uma pré-ocupação islâmica.
Bibliografia
BACHAREL, L. 1992: «Clima e vegetação da Serra de
São Mamede nos séculos XVI e XVII», Ibn Maruan, revista cultural do Concelho de Marvão,
2, Câmara Municipal de Marvão, Marvão, 198207.
HENRIQUES, P. C. 1990: Parques e Reservas Naturais
de Portugal, Verbo, Lisboa.
MENDES, A. C.; GOULART, A. 1991: «A lápide árabe
de S. Mamede», Ibn Maruan, revista cultural do
Concelho de Marvão, 1, Câmara Municipal de
Marvão, Marvão, 59-66.
OLIVEIRA, J.; BALESTEROS, C. 1996: «Inventário dos
vestígios arqueológicos do parque natural da
Serra de S. Mamede», Ibn Maruan, revista cultural do Concelho de Marvão, 6, Câmara Municipal de Marvão, Marvão, 43-62.
VENTURA, R. 1995: «As memórias paroquiais de
1758 do atual concelho de Portalegre», A cidade, revista cultural de Portalegre, 10 (Nova
Série), Atelier de Artes Plásticas de Portalegre,
Portalegre, 93-136.
– 1996: «Algumas lendas de S. Mamede», Ibn Maruan, revista cultural do Concelho de Marvão,
6, Câmara Municipal de Marvão, Marvão, 2342.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
285
ARQUEOLOGIA EN ÀREES DE CONFLICTE: ÚLTIMS TREBALLS
REALITZATS AL SÀHARA OCCIDENTAL
HELENA VENTURA ALMEDA1
Resum
Els territoris alliberats del Sàhara Occidental
comprenen una gran quantitat de jaciments arqueològics en superfície, com ara tallers d’indústria lítica, antics poblats neolítics o conjunts d’art
rupestre que, a causa de la situació política del
país, resten pendents de ser estudiats. Les dificultats d’accés a la regió limiten la recerca de les universitats estrangeres, i la manca de recursos del
govern sahrauí impedeix que assumeixi aquestes
funcions. És per això que la Universitat de Girona
(UdG) col·labora des de fa més de vint anys en la
recerca arqueològica i en la construcció de museus en cada un dels camps de refugiats sahrauís
situats a Tindouf (Algèria).
1. Introducció
Deixant de banda unes primeres notícies aïllades (Douls 1888; Asensio 1930), la prehistòria
de la regió es va començar a estudiar durant el
període de consolidació i ocupació efectiva de
la colònia espanyola (Martínez 1941; Morales
1942; Almagro 1944; 1946; Mateu 1945-1946;
1947-1948; Jordà 1955). Durant aquest primer
període la bibliografia estava orientada a la documentació de l’art rupestre mitjançant treballs
merament descriptius. Malauradament, la recerca es va interrompre amb l’abandó de la colònia,
l’ocupació marroquina i la guerra d’alliberament
sahrauí.
El 1995, després de l’alto el foc pactat el 1991,
la UdG va signar un conveni de cooperació amb
el Ministeri de Cultura de la República Àrab Sahrauí Democràtica (RASD) per tal de documentar
i inventariar el patrimoni històric i cultural dels
territoris alliberats (fig. 1). Les dures condicions
climàtiques del desert i la inestabilitat política
després de l’ocupació marroquina foren els motius pels quals la UdG centrà els esforços a estudiar l’art rupestre del país.
2. Problemàtiques del treball de camp
El treball que el grup de recerca del Sàhara Occidental de la UdG du a terme des de fa més de
vint anys es veu condicionat per la situació geopolítica del país. Es tracta d’una regió amb un alto el
foc entre el govern marroquí i el sahrauí amb dificultats d’accés, ja que per desplaçar-se pel territori
cal anar escortat per soldats del Front Polisario.
Una altra problemàtica és que els jaciments arqueològics se situen en zones de contraban entre
la frontera del Sàhara Occidental amb Mauritània, Algèria i el Marroc. Per tant, és habitual que
es produeixin situacions de confrontació entre els
soldats del Front Polisario que patrullen la regió
i contrabandistes que provenen d’un costat i l’altre de la frontera. A més, cal tenir present que el
2011 es va produir el segrest de dos cooperants
espanyols i una d’italiana al camp de refugiats
sahrauí de Tindouf. En total, van estar nou mesos
en captivitat, en mans del grup terrorista MUJAO,
i aquest fet va aturar la recerca de la UdG.
L’altre obstacle amb el qual ens enfrontem durant el treball de camp és que es tracta d’un territori minat. Bona part de les terres limítrofes al
mur construït pel Marroc, i que divideix el país
en dos, estan farcides de mines antipersones; es
calcula que podria haver-n’hi entre 10 i 40 milions. Per tant, sempre cal anar acompanyats per
conductors experts que coneguin el terreny i fer
les prospeccions en zones segures.
A més, al tractar-se d’una àrea desèrtica cal
anar molt ben aprovisionats, tant pel que fa a la
intendència, aigua i menjar, com en relació amb
la gasolina i els recanvis per al cotxe, ja que són
1. Laboratori d’Arqueologia i Prehistòria, Institut de Recerca Històrica, Universitat de Girona, pl. Ferrater Mora, 1,
17004 Girona - helena.ventura@udg.edu
286
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 1. Carta
arqueològica amb els
jaciments arqueològics
del Sàhara Occidental.
molt freqüents les avaries i les punxades de pneumàtics degut a les altes temperatures i a les irregularitats del terreny. La major part de jaciments
se situen a més de 3 hores de distància de qualsevol caserna militar o petit assentament, així que
és de vital importància estar abastit amb tots els
recursos necessaris en cas d’emergència.
La darrera dificultat a la qual cal enfrontar-se
són els problemes burocràtics per estudiar els materials, ja que hi ha reticències per transportar les
restes arqueològiques entre les fronteres algeriana
i sahrauí. En el supòsit de voler extreure un objecte del Sàhara Occidental i fer-lo arribar als laboratoris de la UdG per estudiar-lo en profunditat, calen mesos de negociacions i permisos. És per això
que sovint s’ha optat per estudiar l’art rupestre,
ja que només requereix l’ús de càmeres i l’anàlisi
fotogràfica de les pintures o els gravats rupestres.
3. Documentació de l’art rupestre (19952012)
Des de l’inici del conveni amb el Ministeri de
Cultura de la RASD (1995) fins al moment del
segrest dels tres cooperants (2012), la tasca prioritària desenvolupada per la UdG al Sàhara Occidental es va centrar a documentar l’art rupestre.
La major part d’aquests gravats i pintures prehistòriques es conserven en abrics ben il·luminats,
més o menys amagats, i en lloses de pedra horitzontals.
Gràcies a les prospeccions realitzades per tot
el territori, s’ha pogut elaborar una carta arqueo-
lògica on se situen les diverses estaciones rupestres dels territoris alliberats. La pintura rupestre
és abundant als abrics de la regió del Zemmur, on
s’han pogut determinar diversos estils amb una
cronologia que podria correspondre a un neolític final o edat del bronze antic (Soler 2007). A la
meitat septentrional del país hi ha una abundància extraordinària de gravats, molts dels quals elaborats en un estil que actualment es coneix com
a Tazina, i molts d’altres elaborats mitjançant el
repicat i de difícil atribució estilística (Soler et al.
1999).
El sud del país, per bé que no disposa ni de litologies ni d’ambients tan favorables per a l’art rupestre, presenta abundants jaciments ubicats en
turons aïllats o monuments megalítics (Pellicer et
al. 1973-1974; Sáenz de Buruaga et al. 2012). L’estil Tazina hi és absent, i els gravats realitzats amb
la tècnica del repicat representen altres motius diferents dels documentats al nord del país, fet que
indueix a posar-los en relació amb les tradicions
culturals que s’estenen per la veïna Mauritània.
4. Reprenent les prospeccions i les excavacions arqueològiques (2015-2018)
El 2015, i després d’un període de tres anys
sense intervencions a causa de la inestabilitat política, el grup de recerca va decidir reprendre les
prospeccions a la zona nord dels territoris alliberats visitant els jaciments amb pintures rupestres
de la zona del Zemmur (Fig. 2). L’objectiu era
comprovar l’estat de conservació de les pintures
ARQUEOLOGIA EN ÀREES DE CONFLICTE: ÚLTIMS TREBALLS REALITZATS AL SÀHARA OCCIDENTAL
287
rança de trobar les restes de l’enterrament i poder aconseguir una datació radiomètrica que ens
permetés establir una cronologia sòlida de l’ocupació humana al territori. Afortunadament, l’excavació va donar bons resultats i es va recuperar
part de l’esquelet del difunt i de l’aixovar, format
per quatre denes de collar fetes amb ou d’estruç.
Restem pendents dels resultats de les datacions
radiomètriques, i en breu podrem aportar la primera cronologia absoluta d’aquest tipus d’inhumació.
FIGURA 2. Panell amb pintura rupestre del jaciment
de Bou Dheir (Zemmur) documentat per la
Universitat de Girona i on s’hi poden identificar
girafes, gaseles, estruços i humans.
FIGURA 3. Excavació de la tomba en antenes
realitzada durant la campanya del 2018, situada
al jaciment amb gravats rupestres de Sluguilla
Lawash.
ja conegudes i ampliar la carta arqueològica documentant noves estacions amb art rupestre.
Durant les dues campanyes següents (20162017) els esforços es van centrar en el jaciment de
Sluguilla Lawash, un dels conjunts amb gravats
rupestres més importants de l’oest saharià. L’objectiu era delimitar la seva extensió i poder fer un
estudi en conjunt per tal de caracteritzar la tipologia de gravats del Sàhara Occidental. Es tracta
d’un jaciment que ocupa una extensió de més de
40 quilòmetres de llarg i amb més de 1.200 lloses
gravades amb abundància de figues del denominat estil Tazina. A més de l’art rupestre també s’hi
van identificar un gran nombre de tallers d’indústria lítica epipaleolítica en superfície i una tomba monumental preislàmica classificada com a
«tomba en antenes», formada per un túmul i dues
files de lloses clavades a terra.
Finalment, per a enguany vam decidir fer
una excavació sistemàtica de la tomba en antenes (fig. 3), tipologia comuna al Marroc, Algèria,
Mauritània i el Sàhara Occidental, amb l’espe-
5. Museu Nacional del Poble Sahrauí i
museus locals a cada camp de refugiats
sahrauís
La primera iniciativa museològica portada a
terme per la UdG als camps de refugiats fou el
1995 amb la creació del Museu Nacional del Poble Sahrauí al campament de Bojador (fig. 4). El
museu va ser creat per satisfer els objectius de la
RASD d’establir una sèrie d’infraestructures per
promoure aspectes culturals compartits per tota
la població i per posar en valor elements d’identitat grupal (Alcalde 2017).
Des de fa quatre anys, i a petició del Ministeri
de Cultura de la RASD, hem reprès les tasques de
documentació i exposició dels materials recollits
durant més de vint anys per la UdG. L’objectiu és
construir museus a cada un dels camps de refugiats per tal que tots els sahrauís tinguin accés a les
restes arqueològiques recuperades en territoris
alliberats i als objectes patrimonials representatius de la seva cultura. Durant el 2017 es va inaugurar el museu del camp de refugiats d’Auserd, i
enguany, el museu del camp de refugiats de Dakhla. Es preveu que durant els propers quatre anys
es puguin construir els museus als camps de refugiats de Smara i d’Al-Aaiun.
FIGURA 4. Edifici del Museu Nacional del Poble
Sahrauí situat al camp de refugiats de Bojador
(Tindouf).
288
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
6. Conclusions
La població que des de fa més de quaranta
anys es troba desplaçada en camps de refugiats no
té recursos per promoure i defensar el seu patrimoni. Per això, la Universitat de Girona continua
col·laborant i cooperant en la recerca arqueològica i en la creació de museus amb l’objectiu de
promoure la seva història, cultura i identitat. Tot i
les dificultats que comporta treballar en territoris
de frontera, i no reconeguts internacionalment, és
de vital importància continuar amb la recerca per
tal de seguir avançant en el coneixement del passat del territori i les comunitats que l’habitaren.
7. Bibliografia
ALCALDE, G. 2017: «A Museum in a Refugee Camp.
The National Museum of the Saharawi People
in Algeria, Its Use and Function, Curator», The
Museum Journal, 60 (2), 191-203.
ALMAGRO, M. 1944: «El arte prehistórico del Sáhara Español», Ampurias, VI, 273-284.
– 1946: Prehistoria del Norte de África y del Sáhara Español, Instituto de Estudios Africanos,
CSIC, Barcelona.
ASENSIO, J. 1930: «Note présentée au congrès au
nom de la délégation du gouvernement espagnol», Hespéris, 11, 17-33.
DOULS, C. 1888: Voyages dans le Sahara occidental
et le sud marocain, Hachette Livre - BNF.
JORDÀ, F. 1955: «Los problemas de la investigación prehistórica en el Sáhara español»,
Archivo del Instituto de Estudios Africanos, VII
(33), 82-97.
MARTÍNEZ, J. 1941: «Los primeros grabados rupestres del Sahara Español. Atlantis», a: Actas y
memorias de la Sociedad Española de Antropología, Etnografía y Prehistoria, XVI (I-II), 163167, 2 fig.
MATEU, J. 1945-1946: «Nuevas aportaciones al
conocimiento del arte rupestre del Sahara español», Ampurias, VII-VIII, Barcelona, 49-67.
– 1947-1948: «Grabados rupestres de los alrededores de Smara (Sáhara Español)», Ampurias,
IX-X, Barcelona, 301-317.
MORALES, A. 1942: «Sobre algunos grabados rupestres del Sáhara Occidental», Mauritania, Tànger, 11.
PELLICER, M.; ACOSTA, P.; HERNÁNDEZ, M.; MARTÍN,
D. 1973-1974: «Aportaciones al estudio del
arte rupestre del Sáhara Español (Zona meridional)», Tabona, Cuadernos de Arqueología,
2, Universidad de la Laguna, Departamento de
Arqueología, La Laguna, 1-92.
SÁENZ DE BURUAGA, A.; DILLA, G.; ESCRIBANO, S.;
Núñez, J.; TELLERIA, E. 2012: «Primeras aportaciones a la cronología cultural de la región
del Tiris (Sahara Occidental) desde el análisis
de restos cerámicos», Munibe Antropologia-Arkeologia, 63, Sant Sebastià, 145-164.
SOLER, J. 2007: Les pintures rupestres del Zemmur
(Sàhara Occidental), Documenta Universitaria,
Girona.
SOLER, N.; SERRA, C.; ESCOLÀ, J.; UNGÉ, J. 1999:
Sàhara Occidental. Passat i present d’un poble Sáhara Occidental. Pasado y presente de un pueblo, Universitat de Girona - Fundació Privada
Girona - Universitat i Futur, Girona.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
289
L’ART D’ESTIL CRETENC AL PRÒXIM ORIENT
FRANCESC XAVIER GARCIA RAMIS1
1. Introducció
Cap a finals de l’edat del bronze a la Mediterrània oriental hi funcionaven multitud de vies de
comunicació, no tan sols des del punt de vista material i comercial sinó també des del de les tècniques i les idees. Tant els grans estats com els petits
regnes d’aquesta regió eren partícips, d’una manera o altra, d’aquestes xarxes de contactes, i el món
minoic no va ser, com és natural, aliè a aquesta
realitat «internacionalitzada».
Cronològicament parlant, la irrupció dels minoics a les rutes comercials es produeix amb certa timidesa cap al final del període minoic mitjà
(ca. 1750-1650 aC), amb l’aparició de materials
en zones com Egipte. La presència de manufactura cretenca es va fent cada cop més freqüent a
Xipre, Síria-Palestina i Egipte a partir del segle
XVII aC.
Però no serà fins als segles XVI i XIV aC quan
apareixeran, distribuïts per tot el Pròxim Orient,
una sèrie d’elements decoratius pintats al fresc
que recorden, tant en estil com en tècnica, els
frescos minoics. Aquests elements han fet plantejar als estudiosos fins a quin punt arriba la presència de minoics al Pròxim Orient.
2. Els frescos d’estil cretenc al Pròxim Orient: els jaciments
2.1. Tell el-Daba
Tell el-Daba s’ubica a la zona oriental del
delta del Nil. Fou la capital del regne hikse al
segon període intermediari i, més endavant, palau en època de Tutmosis III (Bietak i Marinatos
1995, 49; Niemeier i Niemeier 1998, 79-80). Inicialment, Bietak pensà que les pintures podien
vincular-se al període hikse, tot i que actualment
l’associació dels frescos amb el palau tutmòsida
sembla indubtable (Bietak 2000; Morgan 2010a,
265; Barnes 2013, 2).
Tant la iconografia com les tècniques foren
interpretades des del primer moment com a minoiques i comparables amb altres decoracions
similars trobades a palaus cretencs com ara el
de Cnossos (Bietak 2013, 191). Entre els motius
més destacats del programa decoratiu hi ha imatges d’homes sotmetent bous o saltant sobre ells,
formes espiraliformes i vegetals, escenes de caça
amb gossos, felins i grius o figures de «sacerdots».
D’entre els animals que s’hi representen tenen forta filiació minoica els lleons i els mateixos grius
(Morgan 2010b; Marinatos 2010).
2.2. Qatna (Tell Mishrife)
El jaciment de Qatna es localitza a Síria i conté
un palau de finals de l’edat del bronze, on es trobaren els frescos. Cronològicament, el palau tingué
una llarga ocupació des d’inicis del segle XVII fins
a la seva destrucció violenta el 1340 aC (Pfälzner
2008, 97). La datació exacta dels frescos ha causat
certa polèmica, ja que alguns autors sostenen que
les pintures devien haver-se produït poc temps
abans de la destrucció (Von Rüden 2011, 60-62),
mentre que d’altres les situen cap als seus inicis
(Pfälzner 2008, 98; 2009, 201).
Les pintures contenen escenes indubtablement minoiques, des dels escenaris i les paletes
cromàtiques fins a les figures que s’hi representen, d’entre les quals destaquen un dofí i motius
geomètrics com ara espirals i formes vegetals
(Kempinski 2002). Així i tot, ni els motius ni les
tècniques són egeus del tot, sinó que hi apareixen
elements d’aparença indígena, aspecte que es discutirà amb posterioritat.
2.3. Tell Kabri
El jaciment se situa a Israel i, com als dos exemples anteriors, els frescos foren localitzats entorn
d’un palau del segle XVI aC. Llastimosament, però,
la conservació d’aquests elements és molt deficient a causa de la reutilització de les decoracions,
1. GRAMPO, Universitat Autònoma de Barcelona - xisco_ramis@hotmail.com
290
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
esmicolades, al paviment d’un palau posterior. Per
aquest motiu, són poques les evidències iconogràfiques que hi resten, entre les quals destaca part
d’un possible griu que podria estar sobre un paisatge riberenc (Kempinski 2002, 267).
3. La problemàtica dels frescos i l’«estil
internacional»
En general, es pot resumir el fenomen de les
pintures minoiques com un fet efímer comprès a
finals de l’edat del bronze i repartit per un territori molt ampli i amb característiques formals i
estilístiques semblants. La clara filiació cretenca
de motius i tècniques planteja les incògnites de
per què es realitzaren i qui foren els artesans que
s’encarregaren d’executar-les.
El fet que els frescos de tradició egea comparteixin espais comuns en certes habitacions de palaus
reials ha portat diversos autors a definir-los dintre
del que es coneix com a «estil internacional». Els
defensors d’aquest model el defineixen per l’auge
de les xarxes de contactes que, en aquest període,
hauria fet possible l’existència d’una iconografia
comuna sobre objectes sumptuaris, fruit majorment de regals diplomàtics, vinculada a la reialesa
(Fischer y Wicke 2011, 17, 159-160). Aquest fet reforçaria el lligam entre frescos i monarquia, com
també succeeix al món egeu.
Per altra banda, les evidents influències egees en els exemples de frescos exposats permeten
proposar la qüestió de si els artesans que els realitzaren eren locals que havien après la tècnica o
si eren egeus que s’haguessin desplaçat, fet gens
infreqüent al Pròxim Orient (Niemeier i Niemeier
1998, 88-96). A partir d’aquest plantejament, els
estudiosos dirigiren els estudis cap a dos paràmetres, la tècnica i la iconografia.
Les tècniques usades per a la manufactura de
les capes d’imprimació a Tell el-Daba i a Tell Kabri
tenen estils tècnics molt semblants als exemples
cretencs (Brysbaert 2011). Per contra, el morter a
Qatna era menys elaborat degut al menor nombre de capes de calç emprades, per la qual cosa
no podrien considerar-se del tot egees (Brysbaert 2011, 260). Així i tot, tampoc és estrany que
al Pròxim Orient les tècniques variïn com en els
casos de Tell el-Daba, Tell Kabri o la mateixa Qatna, on conviuen vertaders frescos amb pintura al
secco. Alguns autors han atribuït aquest fet a motius pràctics, com ara les condicions climàtiques
seques del Pròxim Orient en comparació amb les
de l’Egeu, o fins i tot al fet que la mescla s’hagués
assecat abans de poder ser decorada, cosa que podria indicar falta d’experiència per part dels artesans (Pfälzner 2008, 99).
Un altre element important és el suport sobre
el qual se situa la mescla de morter de calç, punt
en el qual tenim discrepàncies fonamentals. Per
una banda, tenim el cas de Tell el-Daba, on els
frescos se situaven directament sobre murs normals de tovot sense cap reforçament, un suport
massa feble per a la pesant mescla de calç (Bietak
2013, 190). Per contra, al palau de Tell Kabri s’hi
trobaren reforçaments en forma d’ortòstats als
murs on hi havia els frescos, tècnica gens usual
al Pròxim Orient però molt freqüent a Creta (Cline i Yasur-Landau 2013, 37; Cline, Yasur-Landau i
Goshen 2011, 245). Per tot això, es pot concloure
que, en aspectes tècnics, hi ha tant similituds com
divergències respecte al món minoic.
El segon punt en discussió és el dels motius
iconogràfics. Tot que, com ja he afirmat, les iconografies dels tres exemples tenen inequívocs parallels amb el món minoic, també presenten diferències o localismes molt notables. Tal vegada el cas
de Tell el-Daba és el més clarament minoïtzant, ja
que els motius locals egipcis hi són pràcticament
absents; hi destaquen les escenes, el dinamisme
de les figures, la paleta cromàtica i les línies sinuoses, que recorden molt el món egeu.
El cas de Qatna, per contra, és més complex
d’analitzar en referència als motius iconogràfics.
S’ha argumentat que tant els motius (Von Rüden
2011) com les exigències tècniques (Brysbaert
2011, 263-264) apunten a autors egeus. Així i tot,
al repertori faunístic de Qatna també hi ha animals desconeguts als frescos minoics, com la tortuga o el cranc, cosa que podria assenyalar influències locals.
Aquesta combinació de similituds i discrepàncies ha conduït els autors a elaborar tesis individualitzades per a cada jaciment. Per al cas de
Qatna, Pfälzner considera que les inclusions de
motius locals fa improbable la presència d’artesans egeus, tot i que no en descarta la presència
en altres localitats (Pfälzner 2008, 105). Bietak,
per la seva banda, considera que l’error a les parets de Tell el-Daba no és suficient per dubtar que
els artistes fossin egeus, i ho atribueix més aviat a
la seva inexperiència treballant sobre superfícies
blanes, o al fet que les pintures es feren per a un
esdeveniment específic (Bietak 2013, 190).
4. Conclusions
Els frescos sobre morter de calç humit apareixen cap al 1700 aC al Pròxim Orient i són, en alguns casos, d’indubtable filiació minoica. Dissortadament, són molt pocs els exemples que poden
contribuir a l’estudi de la transmissió d’aquesta
tècnica. A més, les particularitats provoquen que
L’ART D’ESTIL CRETENC AL PRÒXIM ORIENT
l’anàlisi històrica de cada jaciment resulti ser
vàlid tan sols en l’àmbit local, i és difícil trobar
una pauta comuna per a tot l’art de tradició egea
al Pròxim Orient. D’altra banda, tampoc ens ha
d’estranyar que sigui en aquest context d’auge de
les relacions diplomàtiques entre les reialeses del
llevant mediterrani en què s’estén la tècnica del
fresc. De totes maneres, bona part dels estudis
sobre aquesta matèria són molt recents i encara
resta molta tasca de recerca per fer.
5. Bibliografia
BARNES, J. T. 2013: «Gift Exchange and Seaborne Contact in Eighteenth Dynasty Egypt: The
Case of Keftiu Artists at Tell el-Dab‘a (Avaris)»,
Journal of Ancient Egyptian Interconnections, 5
(1), 1-13.
BIETAK, M. 2000: «Rich beyond the Dreams of
Avaris: Tell el-Dab’a and the Aegean World - A
Guide for the Perplexed. A Response to Eric H.
Cline», ABSA, 95, 185-205.
BIETAK, M. 2013: «The Impact of Minoan Art on
Egypt and the Levant: A Glimpse of Palatial Art
from the Naval Base of Peru-nefer at Avaris», a:
ARUZ, J.; GRAFF, S.; RAKIC, Y. (eds.), Cultures in
Contact. From Mesopotamia to the Mediterranean in the Second Millennium B.C., Nova York,
188-199.
BIETAK, M.; MARINATOS, N. 1995: «The Minoan Wall
Paintings from Avaris», ÄgLev, 5, 49-62.
BRYSBAERT, A. 2011: «The Painted Plaster from
Qatna: A Technological Study», a: VON RÜDEN,
C. (ed.), Die Wandmalereien aus Tall Mišrife /
Qatna im Kontext überregionaler Kommunikation. Studies by Ann Brysbaert and Ilka Weisser,
Qatna Studien, 2, Wiesbaden, 249-269.
CLINE, E. H.; YASUR-LANDAU, A. 2013: «Aegeans in
Israel: Minoan Frescoes at Tel Kabri», BAR,
39 (4), 37-44.
291
CLINE, E. H.; YASUR-LANDAU, A.; GOSHEN, N. 2011:
«New Fragments of Aegean-Style Painted Plaster from Tel Kabri, Israel. Field Report», AJA,
115, 245-261.
FISCHER, E.; WICKE, D. 2011: «Review. Marian H.
Feldman, Diplomacy by Design. Luxury Arts
and an “International Style” in the Ancient
Near East, 1400-1200 BCE, Chicago 2006»,
WO, 41 (2), 240-249.
KEMPINSKI, A. 2002: «Tel Kabri. The 1986-1993
Excavations», a: SCHEFTELOWITZ, N.; OREN, R.
(eds.), Monograph Series of the Institute of Archaeology of Tel Aviv University, 20, Tel Aviv.
MARINATOS, N. 2010: «Lions from Tell el-Daba»,
ÄgLev, 20, 325-355.
MORGAN, L. 2010a: «A pride of Leopards: a unique
aspects of the hunt frieze from Tell el-Dab’a»,
ÄgLev, 20, 263-301.
– 2010b: «An Aegean Griffin in Egypt: the Hunt
Frieze at Tell el Dab’a», ÄgLev, 20, 303-323.
NIEMEIER, B.; NIEMEIER, D. 1998: «Minoan Frescoes
in the Eastern Mediterranean», a: CLINE, E. H.;
HARRIS-CLINE, D. (eds.), The Aegean and the Orient in the Second Millennium. Aegaeum, 18, Lieja/Austin, 69-97.
PFÄLZNER, P. 2008: «Between the Aegean and
Syria: The Wall paintings from the Royal
Palace of Qatna», a: BONATZ, D.; CZICHON, R.;
KREPPNER, J. (eds.), Fundstellen: Gesammelte Schriften zur Archäologie und Geschichte
Altvorderasiens ad honorem Hartmut Kühne,
Wiesbaden, 95-118.
– 2009: «The Qatna Wall Paintings and the Formation of Aegeo-Syrian Art», a: ARUZ, J.; GRAFF, S.;
RAKIC, Y., Cultures in Contact. From Mesopotamia to the Mediterranean in the Second Millennium B.C., Nova York, 201-213.
VON RÜDEN, C. 2011: Die Wandmalereien aus Tall
Mišrife / Qatna im Kontext überregionaler Kommunikation. Studies by Ann Brysbaert and Ilka
Weisser. Qatna Studien 2, Wiesbaden.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
293
LAS CARTAS DE MONTANO. NUEVAS APORTACIONES DESDE
LA ARQUEOLOGÍA
LAURA GALÁN PALOMARES1, ROSA M. MERCADO GUIRADO2, KAREN FORTUNY MENDO3
Las Cartas de Montano y el II Concilio de
Toledo son unas fuentes históricas de carácter
paleográfico que permiten conocer la organización eclesiástica de la meseta norte y la reorganización territorial ocurrida durante la Tardoantigüedad en el territorio visigodo (Díaz 2013).
Asimismo, representan un valioso documento
que ejemplifica las relaciones existentes entre la
Iglesia, la aristocracia y el recién creado estado
godo, imperante tras el desmantelamiento del Imperio romano. Ambos documentos son escritos
por Montano, obispo metropolitano de Toledo,
entre los años 523 y 531, y en ellos se denuncia
la ocupación de cargos eclesiásticos con poder territorial sin el consentimiento de las autoridades
oficiales, es decir, de los correspondientes obispos
o del rey (Martín 1998).
Las Cartas de Montano son dos documentos
escritos por el obispo de Toledo en el año 531, dirigidas al clero de Palencia y a Toribio, miembro
de esa comunidad. Montano escribe esas cartas al
ser el controlador de la jurisdicción metropolitana de Toledo y tras ver reforzado su poder gracias
a la participación de varios obispos en el II Con-
FIGURA 1. Principales acuerdos del Concilio de
Toledo.
cilio de Toledo (Andrés et al. 2010), entre los que
destacan los de Egara (Terrassa) y Urgell. En la
primera carta, dirigida a toda la comunidad palentina, se la acusa de consagrar el crisma por sus
medios y sin la presencia de obispos; y también
de invitar a otros obispos de distintas regiones a
consagrar basílicas. Por último, destaca el seguimiento del clero de esta zona de las doctrinas priscilianistas, más favorables a los ideales de austeridad y pobreza. La segunda carta dirigida a Toribio
repite la denuncia efectuada en la primera carta,
amenazando con informar al rey si no cesaban los
abusos (Isla 2000). La mención del rey le hace reflexionar sobre su papel como garante de la fe y de
las tradiciones canónicas que prohibían el abandono de las sedes y la invasión de otras diócesis
sin previa invitación del obispo. De esta forma,
se garantizaba que esta aristocracia clerical poseyese unos dominios concretos y no pugnara por
conseguir otros.
En este primer documento se ve la concesión
de los municipios de Segovia, Coca y Brittalbo,
que en un primer momento no constituirían un
obispado y cuya diócesis se habría creado de forma irregular. A nivel historiográfico, esto ha suscitado una discusión en torno a la localización de
este último municipio mencionado.
Por un lado, se sostiene que Brittalbo podría
traducirse por el actual municipio de Buitrago
(Madrid), localizado al otro lado de la sierra de
Guadarrama. Una interpretación basada en argumentos filológicos. Pero, por otro lado, algunos
investigadores piensan que podría haberse tratado de Bernardos (Segovia), más próximo a los
otros municipios y ya referido con ese topónimo
en otras ocasiones.
En este trabajo se pretende poner de relieve
como la arqueología puede aportar nuevos argumentos a la discusión. En efecto, el hallazgo
1. Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC) - laugp94@gmail.com
2. Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC)
3. Institut Català d’Arqueologia Clàssica (ICAC) - karen.fortuny.mendo@gmail.com
294
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Mapa de los
posibles municipios
mencionados en las
Cartas de Montano.
de restos de época tardoantigua en el municipio
de Bernardos, que habría constituido un núcleo
fortificado en altura, apunta a la segunda localización (Gonzalo 2006). Por contra, las prospecciones realizadas en la actual Buitrago no han ofrecido ningún dato arqueológico relevante de esas
cronologías.
A la presencia de restos, se puede añadir una
perspectiva complementaria desde la arqueología
espacial. Así, la hipótesis de Bernardos como el
Brittalbo del documento presenta más coherencia
territorial, puesto que este queda a medio camino
entre los municipios de Coca y Segovia, constituyendo una unidad territorial y paisajística sólida.
Además, la localización de Buitrago tras la sierra de Guadarrama hubiese roto parcialmente la
unidad de la diócesis y dificultado el control por
parte de un único obispo.
También por la coherencia territorial, en la
cual el municipio de Bernardos queda a medio
camino del municipio de Coca y de Segovia, constituyendo una unidad territorial y paisajística sólida. Por último, la localización de Buitrago tras la
sierra de Guadarrama habría roto parcialmente la
unidad de la diócesis y habría dificultado el control por parte de un único obispo. En conclusión,
el ejemplo de las Cartas de Montano refleja una
realidad propia de la Tardoantigüedad, como son
las pugnas entre jerarquías eclesiásticas para establecer las condiciones del control territorial. De
esta manera se articulan las diócesis, unidades administrativas básicas del estamento religioso, que
manifiestan unos criterios de cohesión territorial
y administrativa. La arqueología puede, en este
sentido, aportar valiosos recursos para identificar
y comprender mejor cómo funciona esta red que
combina centros urbanos con núcleos rurales
más dispersos en un sistema de control efectivo
del territorio.
Bibliografía
ANDRÉS, M.ª A.; CORDOÑER, C.; IRANZO, S.; MARTÍN,
J. C.; PANIAGUA, D. 2010: «Montano de Toledo»,
en: La Hispania visigótica y mozárabe: dos
épocas en su literatura, Obras de Referencia,
28. Universidad de Salamanca, Salamanca,
82-84.
DÍAZ MARTÍNEZ, P. C. 2013: «Concilios y obispos de
la península Ibérica (siglos VI-VIII)», en: Chiese
locali e chiese regionali nell’alto Medioevo, Fondazione Centro Italiano di Studi sull’Alto Medioevo, Spoleto, 1095-1154.
GONZALO GONZÁLEZ, J. M. 2006: El Cerro del Castillo,
Bernardos (Segovia). Un yacimiento arqueológico singular en la provincia de Segovia durante
la Antigüedad Tardía. Obra Social y Cultural de
Caja Segovia, Segovia.
ISLA FREZ, A. 2000: «Desde el reino visigodo y la ortodoxia toledana: la correspondencia de Montano», Studia Historica, Historia medieval, 18,
41-52.
MARTÍN, C. 1998: «Las cartas de Montano y la autonomía episcopal de la Hispania septentrional
en el siglo VI», Hispania Antiqua, 22, 403-426.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
295
A CAPELA DE SÃO PEDRO DE ALEGRETE (PORTALEGRE,
PORTUGAL): UM CASO DE (FALTA DE) PRESERVAÇÃO
DO PATRIMÓNIO RELIGIOSO
GABRIEL VENTURINI DE SOUZA1, HELENA SOARES2, SUSANA PACHECO3
A vila de Alegrete, que hoje em dia é apenas uma
freguesia, mas foi, em tempos, sede de concelho,
possui vestígios de ocupação humana desde o paleolítico. Está localizada no concelho de Portalegre, em Portugal. Apesar de as fontes escritas mencionarem o local apenas a partir do reinado de D.
Dinis, existem evidências de que a vila estaria ocupada pelo menos desde a tardo antiguidade, com
uma presença islâmica entre os séculos VIII e XII.4-5
A capela de São Pedro, ponto central do presente texto, tem uma construção que remonta provavelmente ao século XV, segundo as indicações conhecidas, sendo a capela mais antiga da povoação
de Alegrete (figura 1). Está localizada num dos arrabaldes da vila, na encosta do Monte de Santana.
Em termos formais, a capela possui uma planta
longitudinal, composta de nártex de planta retangular, nave única, uma capela-mor mais profunda e sacristia. A fachada principal está orientada
a oeste, com um arco de volta perfeita em pedra
aparelhada, assente sobre pilastras. A fachada lateral direita, orientada a sul, possui quatro partes:
a primeira com um arco semelhante ao da fachada principal; a segunda, num plano avançado em
relação ao anterior, tem um contraforte no centro
ao qual se segue um portal com um arco de volta perfeita em pedra aparelhado sobreposto pela
cruz de Malta; a terceira, num plano ainda mais
avançado que os dois primeiros, encontra-se muito arruinado, restando apenas o arranque da pa-
FIGURA 1. Estado atual
da fachada da igreja,
com o arco de entrada
derrubado. Fonte: dos
autores do presente
texto.
1. Instituto de Estudos Medievais (IEM), FCSH-UNL - gabrielmvsouza@hotmail.com
2. Centro de Arqueologia Caetano de Mello Beirão (CACMB) (Ourique, Beja, Portugal) / FCSH-UNL - helenapsoares@
hotmail.com
3. Fundação Robinson (Portalegre, Portugal) / FCSH-UNL - susanalfsdpacheco@hotmail.com
4. J. M. PARENTE, Alegrete Histórico, Urbano e Rural, 2003, Lisboa, Edições Colibri.
5. L. KEIL, Inventário Artístico de Portugal - Distrito de Portalegre, 1, 1943, Lisboa.
296
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Entrada para a nave central da igreja.
Fonte: dos autores do presente texto.
rede que originariamente era interior; a última, a
seguir a um contraforte é lisa e situa-se ao mesmo
nível do segundo pano. Fachada lateral esquerda dá para uma elevação, uma vez que o terreno tem um acentuado desnível. A fachada leste,
de pano único, lisa, tem remate muito arruinado.
Em termos construtivos, o edifício é de alvenaria
rebocada, com pedra emparelhada nos arcos e
um pavimento pétreo. A capela sofreu alterações
no seu interior no século XVIII, especialmente em
termos decorativos e ornamentais, na zona da capela-mor.6
Todo o edifício está referenciado para ser protegido desde 1994. No entanto, apesar de estar
referenciado para proteção, o seu estado de conservação é cada vez mais deficiente, com um estado de ruína e vandalismo crescente. São visíveis
as marcas de destruição e roubo do património
da capela, tanto no interior quanto no exterior do
edifício.7
O telhado do edifício encontra-se derrubado,
não se sabendo ao certo quando ocorreu essa queda. A fachada principal, que ainda estava in situ
nos anos 90 do século passado, está hoje em dia
em ruínas. Todo o espaço interior está coberto de
detritos e vegetação, não sendo possível visualizar
o pavimento original da capela. (figura 2) A capela-mor está muito danificada e em risco de ruir no
decorrer dos próximos invernos.
Nas alterações feitas no século XVIII, o espaço
da capela-mor foi coberto de azulejos. Estes, no
entanto, foram roubados ao longo dos últimos
anos, restando apenas alguns poucos fragmentos
espalhados no interior da igreja. Foi possível, aos
autores deste texto, registar os extensos sinais
deixados ao longo do processo de roubo dos azulejos.
Curiosamente, foi possível identificar as pinturas murais medievais sobreviventes, que existiam
por baixo dos azulejos modernos. (figura 3) Foi
reconhecido, destas pinturas, pelo menos uma figura masculina com um manto vermelho, alguns
textos e motivos geométricos. Vê-se, no teto da
capela-mor, as chaves de São Pedro, pintadas a
amarelo (figura 4), e losangos pintados em faixas
longitudinais. Para além disso, ainda se reconhecem outras das cores principais utilizadas (como
o branco, vermelho e cinza dos losangos). Estas
pinturas se encontram, atualmente, à mercê dos
elementos e em rápida degradação.
FIGURA 3. Marcas do
roubo dos azulejos
e figura masculina
pintadas, provavelmente
da decoração original
da capela. Fonte: dos
autores do presente
texto.
6. Informação disponível em: http://www.monumentos.gov.pt/Site/APP_PagesUser/SIPA.aspx?id=1639.
7. Informações adquiridas através de trabalho de campo realizado pelos autores deste texto.
A CAPELA DE SÃO PEDRO DE ALEGRETE (PORTALEGRE, PORTUGAL): UM CASO DE (FALTA DE) PRESERVAÇÃO DO PATRIMÓNIO RELIGIOSO
297
Em conclusão, era nosso objetivo, por um
lado, alertar para a iminente perda de património e informação neste sítio que está, supostamente, sob proteção estatal. Por outro lado, ao
realizar algum registo e publicação sobre o sítio,
pretendíamos salvaguardar algumas das informações recolhidas e garantir o acesso a elas por
parte de outros investigadores, atuais e das gerações vindouras.
Bibliografia
Direção Geral do Património Cultural 2011: «Sistema de Informação para o Património Arquitectónio», <http://www.monumentos.gov.
pt/Site/APP_PagesUser/SIPA.aspx?id=1639>
[consulta: 23 Julho de 2018].
KEIL, L. 1943: Inventário Artístico de Portugal Distrito de Portalegre, 1, Lisboa.
PARENTE, J. M. 2003: Alegrete Histórico, Urbano e
Rural, Edições Colibri, Lisboa.
FIGURA 4. Pintura no teto da capela-mor. Fonte: dos
autores do presente texto.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
299
ACTUALIZANDO ANTIGUAS INTERVENCIONES. DIVERGENCIAS
METODOLÓGICAS Y OTRAS PROBLEMÁTICAS
LEYRE ARRONIZ PAMPLONA1, LAURA M. SIRVENT CAÑADA2, HÉCTOR J. FONSECA DE LA TORRE3,
LORENA MEANA MEDIO1, DANIEL PÉREZ LEGIDO1, XAVIER BAYER RODRÍGUEZ4
1. Introducción
A lo largo de los siglos XIX y XX se llevaron a
cabo numerosas intervenciones arqueológicas en
distintos yacimientos de la península Ibérica. En
muchos casos, estas excavaciones fueron parciales y, al concluir, las catas quedaron abiertas sin
ningún tipo de plan de conservación. Por este motivo, y a pesar de que durante los primeros años
pudieron despertar el interés de los vecinos, fueron cayendo en un paulatino estado de abandono
y, como consecuencia, en la actualidad muchos
de ellos se encuentran en muy mal estado de conservación. En algunos casos se llevaron a cabo
tímidos intentos de consolidación, que sirvieron
únicamente como soluciones temporales.
Actualmente, muchos investigadores se encuentran ante la necesidad de volver a intervenir en estos
yacimientos, debido en gran parte a la evolución de
la metodología arqueológica en los últimos años.
La información que hoy en día se puede obtener
resulta muy diferente a la de hace unas décadas.
Además, muchos de los yacimientos solo han sido
excavados parcialmente, lo que invita a realizar
nuevas revisiones, no únicamente de los restos del
propio yacimiento sino también de la información
obtenida en los estudios previos.
Sin embargo, hacerse cargo de una intervención arqueológica excavada con anterioridad suele conllevar ciertos inconvenientes que dificultan
la tarea del investigador. En algunos casos, las
memorias o artículos referentes al yacimiento
FIGURA 1. Detalle
del yacimiento
arqueológico de El
Castillar durante los
años 80.
1. Investigadora independiente - laura.sirvent.canada@gmail.com
2. Universidad de Alicante
3. Universidad de Valladolid
4. Universidad Complutense de Madrid
300
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
no se corresponden con los restos in situ, o la información aportada es insuficiente. Asimismo, el
paso del tiempo, el abandono de los restos al aire
libre y la consecuente mala conservación de estos
dificulta no solo la labor de los investigadores que
reevalúan los restos, sino también su adecuación
para la exposición pública.
Por ello, poniendo como ejemplo el poblado
de la Edad del Hierro de El Castillar (Mendavia,
Navarra), proponemos una revisión de esta problemática, así como algunas soluciones a ella,
teniendo también en cuenta las conclusiones obtenidas en el debate que se produjo en la sesión
organizada para las JIA de Tarragona de 2018.
2. Proyecto de recuperación de El Castillar
(Mendavia)
El poblado de El Castillar (Mendavia, Navarra)
cuenta con una secuencia estratigráfica desde el final de la Edad del Bronce hasta la Primera Edad
del Hierro. Fue excavado en los años 70 y 80 del
siglo pasado (Castiella 1979), convirtiéndose en el
primer yacimiento de estas características en ser
estudiado en profundidad en la zona (Castiella
1985). Debido al interés que suscitaron los hallazgos habitacionales, en 1986 se realizó una campaña
de consolidación de las estructuras de piedra con el
fin de facilitar la accesibilidad de los visitantes.
A pesar de este intento, la falta de un seguimiento adecuado condujo al abandono del yacimiento, con la consiguiente peligrosidad para posibles visitantes debido a que la vegetación cubrió
por completo el cerro y los profundos sondeos
quedaron sin señalizar. Los habitantes de Mendavia, que tan presente habían tenido la importancia del yacimiento en décadas pasadas, también
se fueron olvidando de él.
Por ello, en 2017 se realizó, por iniciativa del
Ayuntamiento de Mendavia, una campaña de pues-
FIGURA 2. Detalle del yacimiento arqueológico de El
Castillar durante la excavación en 2017.
ta en valor y restauración de una parte del yacimiento, con el objetivo no solo de recuperar el poblado,
sino de poner el foco principal en la educación de
la población de la zona y en la divulgación cultural,
evitando así que vuelva a caer en el olvido.
3. Discusión
En este contexto, y partiendo de nuestra experiencia en un proyecto que está empezando a
desarrollarse, como es el de El Castillar, surge la
necesidad de plantear un debate sobre esta problemática en un foro de discusión abierto con
compañeros de profesión. Un debate que ayude
a desarrollar pautas de actuación que faciliten el
trabajo de los arqueólogos, tanto hoy como en el
futuro. Para ello planteamos varias líneas de debate, basadas en las problemáticas que hemos encontrado durante el desarrollo del proyecto:
– Experiencia de compañeros en proyectos similares.
– Necesidad de unificar la legislación autonómica y crear un modelo de memoria estándar.
– Fomento de la participación y la concienciación de la población.
– Superar metodologías caducas y facilitar el
trabajo a los arqueólogos del futuro.
– Intrusismo profesional en Arqueología y Restauración.
– Relación con las instituciones: burocratización, falta de fondos, etc.
Por ello, se comenzó hablando de las experiencias personales de diferentes asistentes que
habían participado en proyectos similares, lo que
puso en evidencia que la problemática planteada
anteriormente afectaba a bastantes investigadores. Además, se recalcó la necesidad de revisar
proyectos e intervenciones antiguas, con el fin de
plantear nuevas actuaciones sobre ellas, ya que
tenemos acceso a nuevas herramientas y nuevos
conocimientos que pueden aportar nueva información sobre el registro arqueológico.
Respecto a esto, también se destacó la importancia, y en ocasiones la dificultad, de realizar una
relectura de yacimientos excavados con metodologías obsoletas como el sistema Wheeler, que tiene como resultado la excavación del yacimiento
en catas más o menos aleatorias, que producen
una difícil interpretación tanto de la documentación como de los materiales, ya que en muchas
ocasiones fueron tomados con un control estratigráfico más moderado del actual.
A raíz de esto, surgió la necesidad de dirigir
el debate hacia aquellas personas que, sin tener
nociones de metodología arqueológica, acostumbran a recoger materiales durante sus visitas por
ACTUALIZANDO ANTIGUAS INTERVENCIONES. DIVERGENCIAS METODOLÓGICAS Y OTRAS PROBLEMÁTICAS
301
con sus habitantes. En el caso de España nos encontramos con una gran disparidad entre regiones, donde unas cuentan con un gran número de
museos municipales y centros de interpretación,
mientras que en otras sucede lo contrario y todos
sus materiales se encuentran centralizados.
4. Conclusiones
FIGURA 3. Detalle de una de las visitas guiadas
organizadas durante la excavación de 2017 en el
yacimiento arqueológico de El Castillar.
diversos entornos arqueológicos. Es importante
destacar que muchas veces son personas bienintencionadas que llevan realizando esa misma
actividad desde que eran jóvenes, por lo que no
llegan a entender el problema que supone la descontextualización de materiales. Como ejemplo
de una solución, una de las asistentes expuso el
caso del sistema británico de control de detectoristas, que permite recoger datos de los hallazgos
de estos aficionados en una base de datos online
accesible a los investigadores que los necesiten.
Esta propuesta generó un gran debate, ya que,
a pesar de sus evidentes beneficios, no termina
con la raíz del problema. Por ello se destacó la
necesidad de educar a la población y crear una
conciencia sobre el patrimonio común. Sin embargo, esta información generada para poner en
valor los yacimientos puede llegar a manos de expoliadores y que estos la utilicen para sus propios
fines.
Finalmente, el debate derivó en la necesidad
de conservar el material arqueológico en la misma región en la que se encuentra el yacimiento,
ya que de esta manera se puede crear una mayor
conciencia social, conectando la historia local
De todo ello se pueden extraer las siguientes
conclusiones:
– Necesidad de crear conciencia social a la hora
de reabrir antiguas excavaciones. Estas pueden
convertirse en pioneras para que otros municipios
se interesen en realizar intervenciones similares,
promoviendo que sean los propios habitantes los
que cuiden su patrimonio.
– Creación de nuevas herramientas que permitan a las personas integrarse en la comunidad arqueológica y que al mismo tiempo ayuden a controlar actividades relacionadas con la extracción
ilegal de materiales en campo.
– La imperante necesidad de proceder a una unificación legislativa sobre unos estándares mínimos
que permita proceder de igual forma a todo equipo
investigador, independientemente de la comunidad
en la que se realice la intervención arqueológica.
Finalmente, cabe destacar que merece la pena
llevar a cabo nuevas intervenciones en yacimientos previamente excavados, aunque es necesario
buscar una forma de resolver los distintos problemas expuestos en este breve artículo para que la
investigación no se vea obstaculizada.
5. Bibliografía
CASTIELLA RODRÍGUEZ, A. 1979: «Memoria de los trabajos realizados en el poblado protohistórico de
El Castillar (Mendavia)», Trabajos de Arqueología Navarra, 1.
– 1985: «El Castillar de Mendavia. Poblado protohistórico», Trabajos de Arqueología Navarra, 4.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
303
CENTRE I PERIFÈRIA AL REGNE SELÈUCIDA: SELÈUCIA
DEL TIGRIS
NIL BOSCH NAVARRO1
Resumen
La conquesta i domini de l’ampli i heterogeni Imperi Aquemènida pels poders macedonis
va comportar la creació de ciutats com a unitats
fonamentals per controlar i gestionar el territori.
Selèucia del Tigris, a Mesopotàmia, va ser la fundació més destacada de Seleuc I, dirigent del principal estat hel·lenístic, que va tenir la capacitat de
desplegar una política expansiva tant al Mediterrani com a Àsia, i la seva obra va perdurar malgrat
les contínues pressions internes i externes.
1. Una regió capdavantera
Mesopotàmia havia estat una regió clau des del
3000 aC i un espai on van desenvolupar-se grans
imperis. Sota el període Aquemènida (539-331
aC) era una zona desenvolupada en l’àmbit econòmic (Invernizzi 1992), malgrat que políticament
va perdre la centralitat en el marc del sistema de
capitals aquemènides.
Durant el regnat d’Alexandre la ciutat va ser la
principal residència del monarca, així com un dels
espais destacats on va manifestar-se la necessitat
d’establir una aliança amb les classes dirigents locals babilòniques per tal de dominar el territori.
En morir Alexandre, Seleuc va prendre el control de la regió de Babilònia, un fet clau per dos
motius: la capacitat econòmica i el valor simbòlic
que va tenir sota Alexandre. D’aquesta manera, el
control d’aquesta posició va ser un factor determinant per resistir contra el principal dinasta del
moment, Antígon el Borni, el 309-308 aC.
La fundació de Selèucia del Tigris entre els anys
305-300 aC va realitzar-se per consolidar la presència selèucida a Babilònia. Així mateix, va tenir un
valor simbòlic que dotava la monarquia selèucida
de legitimitat, per ser un acte reservat a reis tant en
la tradició oriental com en la macedònia, amb el
tòpic de la imitatio Alexandri. D’aquesta manera,
Seleuc va crear la seva ciutat al lloc on Alexandre
havia residit, acte que cercava inserir la dinastia en
el llegat macedoni.
2. Capital selèucida
Malgrat que tradicionalment s’ha considerat
Antioquia de l’Orontes com la capital del Regne
Selèucida, Selèucia del Tigris va ocupar un rol
central tant a escala política com a escala econòmica, cultural i política, en el marc d’una monarquia que alternava el lloc de residència constantment (Briant 1998). Va ser considerada una de les
tres grans ciutats del món antic, amb 600.000 habitants (Str. 16, 2, 5).
L’urbs va ser una mostra de la política que seguia la monarquia hel·lenística per dominar el
territori. Els objectius fonamentals eren el control
polític a través de l’establiment de vincles amb
les elits locals i la captació de tributs, mitjançant
la monetarització de l’economia, per costejar el
manteniment de l’exèrcit.
Així, Selèucia del Tigris era un centre receptor i
redistribuïdor del comerç procedent de les regions
orientals, en direcció als mercats del Mediterrani
(Aperghis 2004). D’aquesta manera, la Tetràpolis de
Síria era la seva sortida al mar, cosa que indica la
doble dimensió del Regne Selèucida, que participava en la política i l’economia oriental i occidental.
3. Evidències arqueològiques
Malgrat que encara queda per excavar el 90 %
de les 500 hectàrees de superfície (Invernizzi 1992,
245), ha estat possible evidenciar les característiques urbanes. En aquest sentit, s’infereix que era
una ciutat hel·lenística, amb els principals edificis,
com el gymnasium o l’heroon, o bé estructures que
1. Universitat Autònoma de Barcelona - nilboschnavarro@hotmail.com
304
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
prenien de referència elements orientals, com ara
parts del teatre o l’edifici dels arxius, el més gran
del món hel·lenístic, amb 25.000 peces (Messina
2011, 162).
En l’àmbit administratiu, era una de les principals localitats quant al nombre de moneda encunyada, amb 230 peces d’or i plata durant el regnat
de Seleuc (Aperghis 2004, 21). Pot ser un indicatiu
tant de la tributació comercial per eîsagôgia com
pel reclutament de tropes.
Finalment, la consolidació de la ciutat va comportar un aprofundiment del desenvolupament
agrícola a escala regional, concretament a la regió de Diyala. L’absència d’assentaments urbans i
els 26 de rurals (komai) del període aquemènida
van augmentar a 34 i 179, respectivament, amb
una superfície irrigada de 537.000 a 800.000 hectàrees, i una producció estimada de 665.880 tones
anuals d’ordi (Van der Spek 2008, 41), sobre la
qual la monarquia recaptava la dekate.
4. Sobirania: ciutat i territori
Selèucia del Tigris va tenir un rol preeminent
en l’establiment del poder sobre el territori. En un
context de conquesta interna contínua i frontera
mòbil, la ciutat era el mecanisme pel qual s’assegurava el control del territori. Per aquest motiu,
va ser l’espai on va inserir-se la població local en
l’estil de vida grecomacedoni i en l’entrenament de
la falange mixta dels pantodapoi (Billows 1995).
Aquest procediment es realitzava amb la cessió de
lots de terres o kleros, treballades pels habitants
locals, els laoi.
D’aquesta manera, l’èxit o el fracàs dels poders
hel·lenístics depenia de les ciutats. Així, la caiguda
de Selèucia del Tigris en mans dels parts el 129 aC
implicà que el Regne Selèucida quedés reduït a una
potència regional a Síria i Cilícia, fins a la seva desaparició el 64 aC. Malgrat el canvi de sobirania, la
ciutat va perviure: parts i sassànides van mantenir
la seva importància, i aquests van inserir-se en la
tradició amb la fundació de Vologèsia, Veh-Ardashir i Ctesifont.
5. Bibliografia
ANTELA, B. 2016: «Poleis, choras and spaces, from
Civic to Royal. Spaces in the Cities over Macedonian rule from Alexander the Great to Seleucus I», Pyrenae, 47 (2), Girona, 1-12.
APERGHIS, M. 2004: The Seleukid Royal Economy,
Cambridge University Press, Cambridge.
BILLOWS, R. A. 1995: Kings and colonists. Aspects
of Macedonian Imperialism, Columbia Studies
in the Classical Tradition, Leiden.
BRIANT, P. 1988: «Le nomadisme du Grand Roi»,
Iranica Antiqua, 23, Gant, 253-273.
CAPDETREY, L. 2007: Le pouvoir séleucide. Territoire, administration, finances d’un royaume hellénistique (312-129 avant J.-C.), Presses Universitaires, Rennes.
INVERNIZZI, A. 1992: «Seleucia on the Tigris: centre
and periphery in Seleucid Asia», Studies in Hellenistic Civilization, 4, Aarhus, 230-250.
MESSINA, V. 2011: «Seleucia on the Tigris. The
babylonian polis of Antiochus I», Mesopotamia, 44, Torí, 157-167.
SPEK, R. J. van der 2008: «Feeding Hellenistic Seleucia on the Tigris and Babylon», a: ALSTON,
R.; NIJF, O. M. van (eds.), Feeding the Ancient
Greek city, Peeters Publishers, Leuven, 33-46.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
305
ARQUEOMETRÍA EN LA ARQUEOLOGÍA AMERICANA:
TEORÍA Y PRÁCTICA
JORGE MARTÍNEZ SALES1
La arqueometría es la disciplina que analiza
los restos arqueológicos a través de análisis fisicoquímicos. Desde el origen del término, con el
surgimiento de la revista Archaeometry, publicada
por la Universidad de Oxford en 1958, la disciplina quedó muy vinculada a este tipo de análisis,
aunque ha incorporado otros métodos (Fernandes y Dias 2012, 108-110; López, De la Fuente y
Fiore 2012: 75; Montero, García y López 2007,
24; López, De la Fuente y Fiore 2012, 75). Los arqueómetras podemos obtener información que
responda a diversas preguntas: ¿Cómo, dónde y
cuándo fue realizado? ¿Quién lo hizo? ¿Qué materiales se utilizaron? ¿Qué técnicas se usaron? ¿De
dónde procedían las materias primas? Estas son
solo algunas de las posibles preguntas. Podemos
llegar a conclusiones tecnológicas, sociales, políticas, económicas y culturales.
La arqueometría se caracteriza por ser multidisciplinaria, ya que es necesaria la colaboración
de múltiples enfoques para poder llevar a cabo
una adecuada interpretación de los resultados. En
los estudios arqueométricos convergen tanto arqueólogos como geólogos, conservadores, físicos,
biólogos e ingenieros. Aunque esta colaboración
no está exenta de problemas, principalmente de
entendimiento y comunicación (Fernandes y Dias
2012, 107-108; Montero, García y López 2007, 33;
López, De la Fuente y Fiore 2012, 76).
La arqueometría, como disciplina, se ha desarrollado principalmente en los países anglosajones, entre los que destacan Inglaterra y EE. UU.
Algunas de las contribuciones estadounidenses
más importantes son (Fernandes y Dias 2012,
109-115):
– La New Archaeology.
– Los estudios de Anna O. Shepard.
– El Congreso Internacional de Arqueometría
llevado a cabo en 1996 en Urbana (Illinois), que
dio cabida a nuevos materiales como el ADN, los
residuos orgánicos o arqueobotánicos, entre otros.
– La creación de los laboratorios del Fine Arts
Museum de Boston, el MASCA o el Brookhaven
National Laboratory de Nueva York.
En los países latinoamericanos la arqueometría tuvo una consolidación tardía, hacia 1980,
pero es posible encontrar una incipiente arqueometría ya en 1892 con Ezequiel Ordóñez. En arqueometría actualmente sobresale México, con
laboratorios potentes como son el Laboratorio
Nacional de Ciencias para la Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural (LANCIC) o el
Laboratorio de Arqueometría de Occidente (Fernandes y Dias 2012, 111-116).
Los campos de actuación de la arqueometría
son (Fernandes y Dias 2012, 110; Montero, García
y López 2007, 25):
– Datación.
– Análisis fisicoquímicos de materiales.
– Estudios paleoambientales.
– Prospección geofísica y teledetección espacial.
– Métodos matemáticos y estadísticos.
Los ejemplos que se van a presentar son de
análisis fisicoquímicos aplicados a los pigmentos
arqueológicos. Las principales técnicas utilizadas
son la microscopía óptica (LM), la microscopía
electrónica de barrido - microanálisis de rayos
X (SEM-EDX), la difracción de rayos X (XRD),
la espectroscopía infrarroja por transformada de
Fourier (FTIR), la cromatografía de gases - espectrometría de masas (GC-MS), la espectroscopía Raman (RMS) y la fluorescencia de rayos X
(XRF).
El estudio de cultura material mesoamericana
implica seleccionar protocolos de análisis fisicoquímicos adecuados en cada caso. En otras palabras: no es lo mismo enfrentar, por ejemplo, el
estudio de pigmentos en una cultura como la teotihuacana o azteca, originaria del Altiplano mexicano, que el estudio de estas mismas materias colorantes entre los mayas, asentados en contextos
1. Facultad de Geografía e Historia, Universidad de Valencia - jorgemartsal@hotmail.es
306
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
selváticos que proveyeron a los artistas de colores
de origen orgánico que requerirán protocolos de
análisis especiales.
Un ejemplo de cómo los protocolos de análisis fisicoquímicos deben adaptarse a los casos de
estudio considerados en la investigación lo encontramos en el Proyecto La Blanca (2004-2018).
Este proyecto, dirigido desde la Universidad de
Valencia por la Dra. Cristina Vidal Lorenzo, ha
trabajado tanto en el yacimiento de La Blanca
como en Chilonche. Se realizaron análisis tanto
no invasivos como microinvasivos, por ser estos
últimos los que permiten identificar la materia
orgánica utilizada en estas obras, en su mayor
parte aglutinantes y tintes naturales (Doménech
y Vázquez de Ágredos 2005, 128-130; Vázquez de
Ágredos, Vidal y Muñoz 2014, 45). Algunas de las
conclusiones a las que se ha llegado con más de
una década de trabajo arqueométrico enfocado al
estudio de estas muestras de color son:
1. Se puede hablar de la existencia de una tradición técnica en la pintura mural de las Tierras
Bajas Mayas, pero con presencia de variaciones
locales que dan identidad técnico-material a estas
manifestaciones artísticas (Vázquez de Ágredos,
Vidal y Muñoz 2014, 57).
2. Los pintores de La Blanca usaron pigmentos locales e importados. Entre los locales está
la hematita (Fe2O3) y otras tierras rojas como la
goethita (FeOOH). Entre los minerales importados destaca el cinabrio (HgS), posiblemente desde
el Altiplano guatemalteco (Vázquez de Ágredos,
Vidal y Muñoz 2014, 49-52).
En cambio, en Chilonche utilizaron pigmentos
mayoritariamente de procedencia local con hematita, goethita, limonita (FeO(OH)·nH2O) e ilmenita Fe2+TiO3, junto con el blanco de cal (CaCO3)
y el negro de carbón. A las que les unió el azul y
verde maya (Vázquez de Ágredos, Vidal y Muñoz
2014, 54-55).
3. Pintores altamente cualificados. Sin duda,
en La Blanca se ha constatado la presencia de un
artista altamente preparado, con el uso de soluciones técnicas avanzadas y precisas. Esto es debido a la presencia de pigmentos cuya preparación y uso exige de habilidades y conocimientos
técnicos, tales como la malaquita (Cu2CO3(OH)2),
el cinabrio y el blanco plomo ((PbCO3)2·Pb(OH)2).
Tampoco se puede dejar de mencionar el uso de
los colores azul y verde mayas, que representan
la transformación de tintes naturales en pigmentos laca de adecuado uso artístico (Doménech,
Doménech-Carbó y Vázquez de Ágredos 2009,
1016-1032; Doménech et al. 2014, 361-362), o el
uso de aglutinantes de origen vegetal que hoy permiten hablar de técnicas a seco en la pintura mural maya (Doménech y Vázquez de Ágredos, 2005,
134; Vázquez de Ágredos, Vidal y Muñoz 2014,
52).
Por otro lado, en Chilonche el alto conocimiento técnico quedó reflejado en el uso de los colores, pero también en el uso de la técnica al fresco
(Vázquez de Ágredos, Vidal y Muñoz 2014, 54-57).
En otro contexto mesoamericano, Teotihuacán, los protocolos de análisis fisicoquímicos se
han optimizado para el estudio de la pintura mural y han incluido técnicas de emisión de rayos X
inducida por partículas (PIXE) y retrodispersión
elástica de partículas (RBS), con el objetivo de determinar la composición de los materiales in situ.
Este estudio ha permitido crear una propuesta
viable para el análisis fisicoquímico no destructivo, tanto a nivel cualitativo como cuantitativo, de
la pintura mural (Martínez et al. 2002, 239-263).
Conclusiones
La arqueometría sigue vinculada a los análisis
fisicoquímicos pero ha introducido nuevos métodos y objetos de estudio. Para la consolidación de
esta disciplina en América, el papel de los Estados
Unidos ha sido fundamental, pero hay otros países con buenas iniciativas, como México.
La arqueometría, tal como demuestran los casos expuestos, es una ciencia multidisciplinaria
que permite llegar a conclusiones tecnológicas,
sociales, políticas, económicas y culturales de los
contextos arqueológicos.
Finalmente, hoy día es imprescindible la extracción de micromuestras para estudiar la pintura mural a nivel fisicoquímico, especialmente
por la limitación de las técnicas no invasivas en
lo relativo a la identificación de compuestos orgánicos de uso artístico. Sin embargo, se están
haciendo progresos importantes para desarrollar un método que nos permita obtener un alto
conocimiento técnico sin tener que recurrir a la
extracción. Ejemplo de esto son los análisis por
caracterización mediante haces de partículas en
Teotihuacán.
Bibliografía
DOMÉNECH, A.; DOMÉNECH-CARBÓ, M. T.; VÁZQUEZ DE
ÁGREDOS, M. L. 2009: «Correlation between spectral, sem/edx and electrochemical properties of
maya blue: a chemometric study», Archaeometry, 51 (6), 1015-1034.
DOMÉNECH, M. T.; OSETE, L.; DOMÉNECH, A.; VÁZQUEZ
DE ÁGREDOS, M. L.; VIDAL, C. 2014: «Identification of indigoid compounds present in archeological Maya Blue by pyrolysis-silylation-gas
ARQUEOMETRÍA EN LA ARQUEOLOGÍA AMERICANA: TEORÍA Y PRÁCTICA
chromatography-mass spectrometry», Journal
of Analytical and Applied Pyrolysis, 105, 355-362.
DOMÉNECH, M. T.; VÁZQUEZ DE ÁGREDOS, M. L. 2005:
«La caracterización química del color», en:
MUÑOZ, C.; VIDAL, C. (eds.), La Blanca: arqueología y desarrollo, Editorial de la UPV, Valencia,
127-137.
DOMÉNECH, M. T.; VÁZQUEZ DE ÁGREDOS, M. L.; VIDAL, C. 2007: «Los pintores de La Blanca y su
entorno. Hacia un proyecto regional», en: MUÑOZ, C.; VIDAL, C. (eds.), La Blanca y su entorno:
cuadernos de arquitectura y arqueología maya,
Editorial de la UPV, Valencia, 105-120.
FERNANDES VIEIRA, G.; DIAS COELHO, L. J. 2012: «Arqueometría: Mirada histórica de una ciencia
en desarrollo», Revista CPC, 13, 107-133.
LÓPEZ, M. A.; FUENTE, G. A. de la; FIORE, D. 2012:
«Arqueometría del arte: estudios fisicoquími-
307
cos de pigmentos arqueológicos», Boletín del
Museo Chileno de Arte Precolombino, 17 (2),
75-81.
MARTÍNEZ, C.; RUVALCABA, J. L.; ONTALBA, M. A.; MANZANILLA, L. 2002: «Caracterización mediante haces de partículas: estudios interdisciplinarios
de pintura mural teotihuacana», en: KRIEGER,
P. (ed.), Arte y Ciencia. XXIV Coloquio Internacional de Historia del Arte, México, Universidad
Autónoma de México, 239-263.
MONTERO, I.; GARCÍA, M.; LÓPEZ, E. 2007: «Arqueometría: cambios y tendencias actuales», Trabajos de Prehistoria, 64 (1), 23-40.
VÁZQUEZ DE ÁGREDOS, M. L.; VIDAL, C.; MUÑOZ, C.
2014: «Archeometrical Studies of Classic Mayan Mural Painting at Peten: La Blanca and
Chilonche», Materials Research Society, 1618,
45-62.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
309
TECNOLOGÍA LÍTICA EN EL SOLUTRENSE. CARACTERÍSTICAS
PROPIAS DE LA ZONA MEDITERRÁNEA PENINSULAR
NOELIA SÁNCHEZ MARTÍNEZ1
1. Introducción
El Solutrense es un periodo del Paleolítico
superior que comprende unas cronologías que
oscilan entre los años 25000-21000 cal BP, aproximadamente (Banks et al. 2009). Dentro de este
tenemos una serie de subperiodos que están caracterizados por una variación evolutiva en la tecnología lítica que hace del Solutrense un periodo
de sumo interés. Su industria lítica adopta nuevos
patrones y técnicas que no habían sido usados
hasta la fecha o cuyo uso era muy puntual.
El área de estudio de este trabajo abarca la
costa mediterránea peninsular, desde la Comunidad Valenciana hasta la zona oeste de Andalucía,
y presenta unas características líticas propias en
cuanto a la tipometría y los procesos tecnológicos.
Las puntas de proyectil son los útiles más destacables y que más diferencias aportan en cuanto a
los rasgos característicos de la tecnología lítica. El
objetivo que aquí nos proponemos es establecer
estas diferencias de una forma clara para que sirvan de referencia a estudios posteriores, y reunir
hipótesis planteadas que han pretendido responder a estas diferencias.
Las puntas de proyectil han sido comúnmente
objeto de estudios de arqueología experimental,
tipología y tecnología, entre los que podemos destacar los realizados por Odell y Cowan (1986), Geneste y Plisson (1990), Aubry y su equipo (2008),
Faus (2012) o Laborda (2016), que han permitido
clarificar sus procesos tecnológicos. Actualmente,
el grupo de investigación del Dr. Muñoz Ibáñez
está inmerso en los estudios tecnológicos y tipométricos de estos útiles, y sus trabajos sirven de
clara referencia para nuestro estudio.
2. Las puntas de proyectil del Solutrense
mediterráneo
FIGURA 1. Hoja de laurel perteneciente a un
yacimiento del área mediterránea peninsular. Pieza
reutilizada posteriormente como raspador y en la
que se pueden observar las reducidas dimensiones
tipométricas (imagen propia).
1. Universidad de Murcia - noelia.sanchez8@um.es
Las puntas que aparecen en el Solutrense mediterráneo y cuyo proceso tecnológico presenta
diferencias con el de las de otras áreas geográficas
son:
– Hoja de laurel (figura 1). En la zona mediterránea están realizadas, en su mayoría, en sílex y
sobre soportes laminares. La primera fase de la
talla se realiza mediante percusión directa para
llevar a cabo el adelgazamiento de la pieza, en primer lugar con un percutor duro y después con un
percutor blando. Finalmente se realiza un retoque
por presión, plano y cubriente, con un compresor blando (Gibaja et al. 2012), con la intención
de perfeccionar la pieza. Las hojas de sauce son
más estilizadas que las de laurel y su talla puede
ser unifacial.
– Punta de aletas y pedúnculo (figura 2). Se
realizan sobre lascas grandes o láminas de sílex.
Cadena operativa similar a la de las hojas de lau-
310
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
FIGURA 2. Punta de aletas y pedúnculo perteneciente
a un yacimiento del área mediterránea peninsular
(imagen propia).
FIGURA 3. Punta de muesca de retoque abrupto
perteneciente a un yacimiento del área
mediterránea peninsular (imagen propia)
rel, llevando a cabo en primer lugar una reducción
bifacial, con percusión directa con percutor duro
o blando, del soporte para obtener una preforma
de la punta, perfeccionada con un retoque por
presión. Con la presión se destacan el pedúnculo
y las aletas y se le da un acabado final a la forma
de la pieza, buscando siempre una gran simetría
(Tiffagom 2001). En la zona proximal tiene una
aleta en cada extremo, diferenciadas de la punta o
incluidas en ella, y un pedúnculo central destinado al enmangue de la punta, que está individualizado dentro de la pieza (Márquez y Muñoz 2001).
– Punta de muesca mediterránea o de retoque
abrupto (figura 3). Se tallan sobre láminas estrechas y planas de sílex. La cadena operativa de
este tipo de puntas se inicia mediante un retoque
abrupto, realizado por percusión directa, que da
forma a la punta; se caracteriza por la creación
de una muesca en la zona proximal de la pieza, al
igual que el retoque del borde opuesto a la muesca. En algunas ocasiones presenta un retoque
simple en el borde donde se sitúa la muesca. Estas piezas son unifaciales en su mayoría (Gibaja
et al. 2012).
de todo el periodo, a diferencia de lo que ocurre
con las de la zona norte peninsular, que sufren
modificaciones para adaptarlas a otros tipos de
enmangues (Gibaja et al. 2012). Asimismo, en el
área mediterránea aparece una tipología nueva de
proyectil, la punta de aletas y pedúnculo, que no
aparece en los yacimientos solutrenses de la cornisa cantábrica ni en los de Francia.
En cuanto a las diferencias tecnológicas, hemos de mencionar las dos más importantes: el
retoque y la tipometría. El retoque utilizado en
la zona cantábrica y francesa durante todo el periodo solutrense es plano, cubriente y bifacial,
presente en las hojas de laurel y en las puntas de
muesca. En cambio, en la zona mediterránea se
recupera el retoque abrupto y directo a partir del
Solutrense superior, lo cual queda patente en las
puntas de muesca mediterráneas, que, aunque
presentan una forma similar a sus homólogas
cántabras o francesas, tienen un proceso tecnológico diferente, pues las cantábricas y francesas siguen aplicando el retoque plano, cubriente
y bifacial que se venía usando para las hojas de
laurel.
En cuanto a la tipometría de estas piezas, también se aprecian diferencias. Son varios los estudios realizados en torno a esta característica; destaca el último de ellos, realizado por el grupo de
investigación de F. J. Muñoz Ibáñez (2018), que
tras hacer un estudio tipométrico de las puntas
de los yacimientos mediterráneos de la Cueva de
Parpalló y la Cueva de Ambrosio, y poner los datos en relación con los de varios yacimientos del
norte peninsular, obtiene una diferencia de aproximadamente 1 centímetro en la media de la lon-
3. Diferencias tecnológicas entre el Solutrense mediterráneo y el cantábricofrancés
En primer lugar, debemos destacar una serie
de diferencias tipológicas que afectan a dos tipos
de puntas de proyectil. Las hojas de laurel del Solutrense mediterráneo no presentan ninguna modificación de la zona proximal del útil a lo largo
TECNOLOGÍA LÍTICA EN EL SOLUTRENSE. CARACTERÍSTICAS PROPIAS DE LA ZONA MEDITERRÁNEA PENINSULAR
gitud total de los proyectiles, de 0,5 centímetros
en la anchura total y de 1 gramo en la media del
peso de las piezas, siendo las mediterráneas más
pequeñas en todos los aspectos.
4. Conclusiones
Tras concretar cuáles son los factores más destacables en cuanto a la diferenciación tecnológica
de estas piezas líticas en ambas zonas geográficas, se pueden establecer una serie de hipótesis
que respondan a las razones de estas diferencias.
Las contempladas en los estudios realizados hasta ahora, mencionados anteriormente, son: un posible condicionamiento ambiental de los grupos
solutrenses según la zona en la que habitasen; la
disponibilidad de materias primas que tuviesen;
la diversa funcionalidad que pudieran tener estas
puntas de proyectil en los diferentes grupos poblacionales, o incluso la regionalización de estilos
(Banks et al. 2009).
Es necesaria la realización de estudios globales que reúnan todos los datos sobre estos tipos
líticos del periodo y los pongan en relación con
las posibles causas que los hayan podido generar:
cambios climáticos, variaciones en flora y fauna, fuentes de captación de recursos, etc. De este
modo se podrán establecer una serie de conclusiones más sólidas que arrojen luz al periodo y a
la tecnología lítica que utilizaban sus habitantes.
5. Bibliografía
AUBRY, T.; BRADLEY, B.; ALMEIDA, M.; WALTER, B.;
NEVES, M. J.; PELEGRIN, J.; LENOIR, M.; TIFFAGOM,
M. 2008: «Solutrean laurel leaf production at
Maîtreaux: an experimental approach guided
by techno-economic analysis», World Archaeology, 40 (1), 48-66.
BANKS, W. E.; ZILHAO, J.; D’ERRICO, F.; KAGEYAMA,
M.; SIMA, A.; RONCHITELLI, A. 2009: «Investigating links between ecology and bifacial tool types in Western Europe during the Last Glacial
Maximum», Journal of Archaeological Science,
36, 2853-2867.
FAUS TEROL, E. 2012: «La tecnología solutrense:
aproximación experimental a la fabricación de
311
la punta de aletas y pedúnculo y de la punta
escotada de retoque abrupto o de muesca mediterránea. Criterios para el reconocimiento de
las técnicas de talla de las puntas de aletas y
pedúnculo», Espacio, Tiempo y Forma, 5, 469476.
GENESTE, J. M.; PLISSON, H. 1990: «Technologie
fonctionnelle des pointes à cran solutréennes:
l’apport des nouvelles données de la grotte de
Combe Saunière (Dordogne)», ERAUL, 42,
293-320.
GIBAJA BAO, J. F.; MUÑOZ IBÁÑEZ, F. J.; GUTIÉRREZ, C.;
Márquez, B.; MARTÍN-LERMA, I. 2012: «Las puntas solutrenses: de la tipología a los estudios
funcionales», Espacio, Tiempo y Forma, 5, 491506.
LABORDA MARTÍNEZ, M. A. 2016: «Experimentación
con proyectiles de retoque plano y resultados
de su análisis funcional», Zephyrus, 77, 31-57.
Márquez MORA, B.; MUÑOZ IBÁÑEZ, F. J. 2001: «Arquería prehistórica: aproximación experimental sobre sistemas de enmangue y propulsión
de las puntas de aletas y pedúnculo del Solutrense extracantábrico», Espacio, Tiempo y Forma, 18, 147-154.
MUÑOZ IBÁÑEZ, F. J.; MARTÍN-LERMA, I.; SáNchez-MARTÍNEZ, N.; Márquez MORA, B.; GUTIÉRREZ, C.; MARÍN DE ESPINOSA, J. A. 2018: «Solutrean points:
flat retouch vs. abrupt retouch. Cultural and
technological innovations during the Last Glacial Maximum. The use-wear contribution»,
en: Connecting people & technologies. Papers
from AWRANA Conference, 29 de mayo-1 de junio de 2018, Niza.
ODELL, G. H.; COWAN, F. 1986: «Experiments with
spears and arrows on animal targets», Journal
of Field Archaeology, 13 (2), 195-212.
SONNEVILLE-BORDES, D.; PERROT, J. 1954: «Lexique
typologique du Paléolithique Supérieur. Outillage lithique: I Grattoirs; II Outils solutréens»,
Bulletin de la Société Préhistorique Française,
51, 327-335.
TIFFAGOM, M. 2001: «Las puntas de flecha de aletas
y pedúnculo. Identificación de las cadenas operativas de fabricación», en: VILLAVERDE, V. (ed.),
De neandertales a cromañones. El inicio del
poblamiento en las tierras valencianas, Universidad de Valencia, Servicio de Publicaciones,
Valencia, 249-254.
XXXXXXXXXXXXXXXXXXX
313
¿TRABAJAS EN UNA ARQUEOLOGÍA DIGNA? MODELOS
Y PERSPECTIVAS A DEBATE
AMAIA BEGOÑA SOLAEGUI DE LOIZAGA1, LAURA MARTÍN RAMOS2,
ÁGUEDA SÁENZ-MARTÍNEZ3, RONMEL A. SEMINARIO GÁLVEZ4
1. Preocupaciones e ideas fruto del debate
Este debate surge de la necesidad de abordar
una problemática que afecta al ámbito de la arqueología, de igual manera que a otros muchos
ámbitos, en los cuales se ha instalado una precariedad absoluta, tanto en lo formativo como en
lo laboral. Las JIA y su espíritu de discusión se
presentan como el marco ideal para exponer este
tipo de cuestiones entre todas las que amamos y
formamos esta profesión. El objetivo principal al
plantear este debate fue la toma de conciencia, por
parte de todo el colectivo, de la situación laboral
que vivimos y de la necesidad de luchar por mejorar estas condiciones a través de la organización de
todas las personas que se sientan parte de él.
Se expusieron una serie de problemáticas que
afectan a nuestra profesión, así como algunas posibles soluciones. Tras analizar el debate, se aúnan de la siguiente manera: voluntariado y precarización laboral, investigación y socialización del
patrimonio.
1.1. Voluntariado y precarización laboral
¿Obtenemos una formación de calidad en la
Universidad? ¿Requerimos de un CV más competitivo? ¿Cuándo dejamos de ser voluntarios y nos
convertimos en arqueólogos? O, ¿por qué abrir
más yacimientos a costa de los estudiantes? Son
algunas de las preguntas que se formularon.
La formación universitaria está destinada únicamente a crear relevo generacional dentro del
ámbito académico, por lo cual, al salir al mundo
laboral, carecemos de los conocimientos necesarios para realizar cualquier tipo de intervención
arqueológica, fruto de una parca formación práctica que recibimos durante la universidad, y aun así
nos exigen realizar estas actividades. Y una vez titulados la situación no mejora, ya que la experiencia nunca es suficiente, lo que nos obliga a ampliar
nuestro CV mediante cursos, prácticas o similares
sin remuneración, e incluso pagando. Por ello nos
vemos obligados a buscar yacimientos en nuestro
tiempo libre, un lujo del cual no disponen muchas
personas. Y, sobre todo, no olvidemos que las plazas de voluntariado, ocupadas por estudiantes o
personas ya tituladas, sustituyen puestos de trabajo
en el funcionamiento de proyectos arqueológicos.
Con este panorama, proponemos dejar de participar como voluntariado o trabajadores que no
cobran una vez finalizada nuestra formación académica. Y un verano sin voluntariado, en el cual
no se colabore en proyectos o cursos, para demostrar el descrédito de este tipo de prácticas y lograr
eliminar su figura.
1.2. La investigación
«Los arqueólogos no somos liberadores de suelo, creamos conocimiento a través de los restos»
(Martin Ramos, JIA 2018).
La nefasta situación laboral, sumada a los
problemas legislativos, ha llevado a las empresas
y a las personas autónomas a no poder realizar
estudios completos de los materiales hallados en
una intervención arqueológica y del yacimiento,
debido a la falta de presupuesto y de tiempo. Y
cuando logran investigar, no pueden hacerlo de la
misma manera que desde las universidades por
las distintas presiones que soportan. Por lo tanto,
la investigación arqueológica en general se ve perjudicada y deja en muchas ocasiones cantidades
ingentes de material sin investigar en los almacenes de los museos.
1. Universidad de Granada - arqueologiaenlucha@gmail.com
2. Grupo de investigación THARG (HUM 162), Universidad de Granada
3. Facultad de Bellas Artes, Universidad Complutense de Madrid
4. Investigador autónomo
314
ACTAS XI JORNADAS DE JÓVENES EN INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICA
La posible salida a este conflicto podría ser la
de una mayor promoción de la investigación. Por
un lado, desde la universidad y otros centros de
investigación, se podría dar salida a los materiales depositados en los museos mediante su uso en
diversas investigaciones, como trabajos fin de grado, de máster o de doctorado. Para ello también
sería conveniente que la Administración facilitase
el estudio de estos materiales, ya que en la actualidad se dan numerosas dificultades para conseguir
los permisos necesarios. Por otro lado, las empresas y los autónomos deberían recibir un mayor
apoyo, por parte de las autonomías o del Estado,
para poder desarrollar la investigación de los materiales extraídos en el marco de sus proyectos.
1.3. Socialización del patrimonio
La falta de divulgación de los problemas ya comentados se ha convertido, irónicamente, en un
problema más, el cual ha impedido que la ciudadanía empatice con nuestro colectivo y tenga una
buena opinión sobre la arqueología como profesión. Esto es debido en parte a que a las promotoras no les interesa la investigación, y por ello
tenemos conflictos para divulgar en los yacimientos, pues la divulgación se ve condicionada por las
normas de seguridad establecidas por la tipificación de las excavaciones como obras de construcción. Esto dificulta el acercamiento de la sociedad
a este ámbito, al tener que contratar seguros y
cumplir una serie de medidas que garanticen su
seguridad.
Para acabar con este problema, proponemos
dar a conocer nuestra situación utilizando los
medios de comunicación, salir a la calle, buscar
apoyo de asociaciones culturales y empezar a presupuestar la divulgación con medidas de seguridad. La Administración pública podría promover
modelos donde los yacimientos desgravasen impuestos, como ya ocurre en países como Suecia o
Noruega. También sería interesante trabajar en la
educación patrimonial, promoviendo el aumento
de la didáctica en los colegios y por parte del Estado. Y comenzando a hacer una arqueología con
el público y no para él, porque hay que empezar a
concienciar desde la participación.
Sin embargo, las soluciones expuestas no son
por el momento posibles. Creemos firmemente
que el inicio del cambio no tendrá lugar hasta
que no exista una conciencia de colectivo. Una
consecuencia inevitable de esta premisa es que la
arqueología no existe como profesión, como tampoco existe convenio en todas las comunidades
autónomas. No contamos con sección de arqueología en todos los colegios, y las que existen no
tienen el suficiente peso administrativo para cam-
biar la situación; y no existe un movimiento sindical. Con este escenario, no podemos denunciar
la situación precaria en la que vivimos. Sabemos
que, si no hacemos nuestro trabajo, nadie más lo
hará. La arqueología ya no es una afición aristocrática ni burguesa: se ha convertido en una profesión necesaria para la sociedad y tenemos que
ser conscientes de ello.
2. Arqueología en Lucha
A raíz de todo lo comentado durante el debate surgió la idea de crear una plataforma que facilitase una unión real de todas las personas que
formamos parte de este colectivo, generando así
redes de apoyo. De esta forma tendremos la suficiente fuerza para propiciar cambios en pos de
una arqueología mejor, de una profesión a la altura de los profesionales que la conforman y que
se desarrollará en paralelo a la sociedad y no al
margen de esta.
Con estos y otros propósitos nace Arqueología en Lucha, una plataforma pública para dar a
conocer la situación laboral y formativa de la arqueología en España. Un espacio donde compartir
experiencias y problemas individuales para hacerlos colectivos y poder así lucharlos con un apoyo
mayor. Con el fin de unirnos y trabajar para poder
acabar con ellos, haciendo de la arqueología una
profesión digna. Consideramos indispensable la
unión como forma de conquistar derechos que nos
pertenecen; es importante, por ello, la participación activa en toda clase de iniciativas que compartan estos objetivos, así como fomentarlas. Como
punto de partida, se ha creado un grupo público
en Facebook al cual os animamos a uniros y a participar. Junto con un correo (arqueologiaenlucha@
gmail.com) al que podéis escribirnos para realizar
denuncias anónimas que trataremos de gestionar y
con las que poder respaldarnos entre todos.
FIGURA 1. Logo del grupo y contacto.
AMB EL SUPORT DE: